Opinión archivos - Página 277 de 1780 - Runrun

Opinión

Elecciones regionales: reparto de botín a la “nomenklatura” de la tiranía
El objetivo central de la tiranía es instalar un estado vertical neocorporativo denominado Estado comunal; los espacios democráticos regionales son contrarios a sus planes dictatoriales

 

@froilanbarriosf

La elección de alcaldes y gobernadores se originó en 1989, con la reforma de la Constitución de la república de Venezuela de 1961. A partir de la interpretación del artículo 137 de la anterior carta magna se desarrolló el proceso de descentralización y transferencias de competencias a los municipios, y conjuntamente la elección de gobernadores y alcaldes desde 1989-1990. Esta experiencia significó una bocanada de aire fresco al cuestionado Estado puntofijista, al cual la población exigía cambios significativos para oxigenar la democracia.

Centralismo inconstitucional

La riqueza de esta experiencia descentralizadora generada en la última década del siglo XX, al renovar y promover un nuevo liderazgo político nacional, regional y local, le determinó un espacio importante en la actual CRBV, vigente desde 1999. Sin embargo, la gestión ejecutiva nacional, desde su inicio y a lo largo del siglo XXI, ha estado signada por un centralismo exacerbado, contrario a lo estipulado en el texto constitucional. 

El descomunal ataque contra la descentralización convirtió a alcaldías y gobernaciones en una suerte de comensales pedigüeños de segunda mesa, a las cuales no se les otorga el 20 % del situado constitucional asignado a cada ente territorial; este presupuesto sería distribuido luego a los municipios de cada estado. Esto implica presupuestos exiguos para atender las condiciones de vida de la población devenidas en condiciones de miseria absoluta. El atropello a las regiones ha sido promovido mediante la aprobación de leyes inconstitucionales que rebajaron arbitrariamente el situado regional y municipal.

El desprecio del chavomadurismo a alcaldías y gobernaciones ha sido una conducta permanente. Se inició desde 2006, creando organismos paralelos como los consejos comunales. Desconoció luego las juntas parroquiales; posteriormente designó funcionarios arbitrariamente denominados “protectores”, cuando resultaban electos alcaldes o gobernadores de la oposición. Y preparando actualmente su intervención definitiva con las leyes de Comunas y Parlamento Comunal.

El objetivo central de la tiranía es instalar un estado vertical neocorporativo denominado Estado Comunal, en cuya estructura los espacios democráticos regionales son contrarios a sus planes dictatoriales. 

¿Que pretende hoy el régimen dictatorial con estas elecciones regionales?

Justificar mecanismos de distribución del presupuesto nacional a su clientela electoral, ofreciendo 335 alcaldías y 24 gobernaciones mediante una falsa consulta electoral donde los candidatos de la dictadura son los facultados a conquistarlas. Con ello persigue como premio los situados municipales y regionales, que constituyen para cada gobernador y alcalde la factibilidad de enriquecerse “legalmente”, ante una población que sufre la ruina de los servicios públicos: agua, electricidad, gas, telefonía, internet, transporte, salud, educación, alimentación y la inseguridad personal, entre innumerables calamidades 

A fin de concretar su malévola intención, envilece el proceso electoral, lo desprestigia descaradamente ante el electorado, generando un clima de baja participación al continuar con la represión política y violación de DD. HH. Exigiendo al mismo tiempo el fin de las sanciones.

La tiranía juega en varios tableros sin escrúpulo alguno, orientados a bloquear toda salida electoral transparente y mantenerse eternamente en el poder.

El contexto de represión lo expanden igualmente a lo interno del PSUV. Imponen el pensamiento único, incluso la genuflexión de voceros connotados quienes no vacilan en acatar la línea de la Dirección Nacional de ese partido calificándola como “la voz del pueblo”. Lo que trasluce su visión del país, es decir aplican su dictadura hasta en su propio partido.

La salida de la crisis venezolana debe darse en un contexto de elecciones generales, con un sistema electoral transparente, con la libertad absoluta de los presos políticos, la libertad de prensa y la legalización de todos los partidos políticos. Esas exigencias ante una dictadura contravienen sus soterradas intenciones, que hoy están fiscalizadas por la Corte Penal Internacional ante la gravedad en las violaciones de derechos humanos.

*Movimiento Laborista.

Las opiniones emitidas por los articulistas son de su entera responsabilidad. Y no comprometen la línea editorial de RunRun.es

Entrevista | Mayte Navarro, Madame Glamour : “La elegancia es ser tú mismo”

Mayte Navarro, conocida como Madame Glamour. Retrato de Mónica Trejo.

«Aprendí en casa a ser anticomunista. Mi abuela todas las noches nos hacía rezar para que nunca el comunismo se apoderara de Venezuela», nos cuenta Mayte Navarro, conocida como Madame Glamour

 

@cjaimesb

Le tiene terror a la hipocresía y a los halagos. Es distinguida, sobria y muy inteligente. Periodista por amor a la historia y a la cultura. Tiene un espacio en mi programa del Circuito Éxitos todos los sábados desde hace trece años, donde su «recreíto», como ella lo llama, es la sección más esperada, pues por espacio de diez minutos tiene la virtud de sacarnos de nuestra realidad y llevarnos a otros espacios, mejores o peores, pero distintos. Madame Glamour se ha ganado por mérito propio un espacio en el corazón de sus radioescuchas.

Educada con sobriedad, agradece que le hayan inculcado desde muy niña la honestidad, la disciplina y el trabajo como valores principales. Nada era gratis, porque todo había que ganárselo. Su casa fue una casa de mujeres, donde el único hombre era su papá. Eso la enseñó a no sentir que los hombres eran «superiores». También fueron superexigentes con los estudios, pues consideraban que era la única vía para tener éxito en la vida.

Mayte Navarro es culta y muy grata. Lectora empedernida y viajera impenitente, una puede conversar con ella por horas sin cansarse. Su musa fue Oriana Falacci, aunque luego se dedicó al periodismo de sociales y de la realeza, donde encuentra que sucede lo mismo que en cualquier casa de familia. Y, a veces, mucho más.

Sobre Venezuela, no cree que seamos «la tapa del frasco», pero siente que junto a quienes destruyen, denigran y abusan, también están quienes crean, los que hacen su trabajo con entusiasmo, pensando en quienes pueden beneficiar, sin esperar más que el bienestar colectivo. Y eso es una esperanza.

– Tuviste la oportunidad de viajar desde joven. ¿Cómo comparas los lugares que conocías con la Venezuela de aquella época?

– Los viajes siempre los consideré como una oportunidad para crecer. Más que comparar los lugares con mi país, me dedicaba a descubrir los sitios emblemáticos. Conocer su gente.

Creo que los primeros viajes son como un entrenamiento, porque te dan una idea general de los lugares. Cuando regresas a esa misma ciudad o pueblo, entonces comienzas el verdadero conocimiento, porque ya sabes cómo ubicarte. Recuerdo mi primer recorrido por el Museo del Prado. Al llegar a la sala dedicada al Greco, creo que fui presa del síndrome de Stendhal. No podía creer que estaba en frente de una de las obras del pintor que admiraba a través de las imágenes de un libro, las obras de la que hablaba la profesora.

En una gran ciudad como Nueva York, sentía que Caracas era algo pueblerina, pues su oferta cultural no guardaba las mismas dimensiones.

– ¿Qué fue lo más importante que aprendiste en tu casa?

– Creo que la disciplina y la honestidad. Desde pequeña me decían que nada es gratis en la vida, que tenías que trabajar para lograr las cosas. Mis padres eran exigentes. Una boleta con 17 no era motivo de orgullo.

En la secundaria fue igual. Me repetían una y mil veces: tu responsabilidad es estudiar y pasar al otro curso. Tú sabes qué debes hacer para lograrlo. Solo tú puedes hacerlo. La honestidad siempre fue una bandera en mi casa. No había posibilidad de hacer trampas para lograr algo.

Recuerdo que estando en primer grado llegué con un sacapuntas diferente al mío. Mi mamá me preguntó que de dónde lo había sacado y le respondí que era un cambio que había hecho con una de mis compañeras. Esa noche no pude usar el sacapuntas y la mañana siguiente estaba devolviéndolo a su dueña originaria. Eso me enseñó a no desear los objetos de los demás. Si los quiero, debo trabajar para ello.

Quizás mi discreción sea otra conducta aprendida en casa, donde detestaban lo avasallante. Y si la honestidad era una bandera, la hipocresía no tenía cabida. 

Mi casa era un lugar de mujeres. El único hombre fue mi papá. Ese hecho me marcó porque nunca he sentido la superioridad de ningún hombre por el solo hecho de serlo.

La otra cosa que aprendí en mi casa fue ser anticomunista. Mi abuela, que era una católica practicante, todas las noches nos hacía rezar para que nunca el comunismo se apoderara de Venezuela. También nos contaba los terrores que sucedían en las naciones que se encontraban tras el “telón de acero”.

– ¿La Comunicación Social fue una vocación determinante o pensaste estudiar otra cosa?

– A medida que una va creciendo va cambiando. En tercer grado decía que iba a ser bióloga marina. Ya en cuarto grado comencé a escribir en la revista del colegio. Yo estudié en el Politécnico y allí se impartía una verdadera educación integral. Recuerdo que más de una vez se publicaron mis composiciones.

A esto habría que sumar la presencia de los periódicos. Yo podría decir que aprendí a leer en El Universal, que no faltaba en casa, así como La Religión. Los domingos se sumaba El Nacional. Abundaban las revistas. Quizás allí nació mi deseo de ser periodista, mi admiración por la moda y el placer de ver la vida de los demás a través de las reseñas sociales. Leer a Oriana Fallaci fue algo decisivo para estudiar periodismo. En sus escritos hay mucha pasión.

– ¿Cuándo y por qué escogiste dedicarte al periodismo de sociales, noticias de la realeza y la farándula?

– No puedo decir que la farándula esté dentro de mi trabajo periodístico. Sociales quizás surgió porque siento que es contar relatos de la vida de alguien. Por otra parte, lo cultural está tan relacionado con la vida social, que creo que es otra manera de narrar la cultura.

La realeza siempre me ha encantado porque no es más que el espejo de una sociedad. Lo que pasa en un palacio también sucede en una casa sencilla. Todos los seres humanos podemos ser víctimas de la envidia, de la intriga y también del heroísmo. La historia está llena de ejemplos.

– Sin duda eres una mujer sofisticada. ¿Cuál es tu concepto de la elegancia?

– Creo que la elegancia es ser tú mismo. No imitar a nadie. No ser esclavo de la moda. Ser elegante es saber estar. Es saber convivir con los demás y no dejarte llevar por los gustos de la mayoría.

Madame Glamour ha sido un verdadero hit en la radio de los fines de semana. La gente te espera con ansias, te alaba y te agradece el «recreíto», como tú lo llamas. ¿Cómo recibes los halagos?

– A los halagos le tengo terror. La fama me parece que es pasajera. Podría decirte que disfruto del afecto que me transmite la gente. Agradezco las bellas palabras y me siento comprometida con cada salida al “ruedo”. Eso me obliga a indagar más en cada entrega.

– ¿Qué significa Venezuela para Mayte Navarro de Veloz?

Para mí Venezuela, es mucho más que paisajes hermosos o una naturaleza exuberante. Venezuela son sus hombres y mujeres. Venezuela son recuerdos y vivencias. No creo que seamos la tapa del frasco, como muchos dicen, porque de serlo no estaríamos pasando tanta necesidad. Pero junto a quienes destruyen, denigran y abusan, también están quienes crean, los que hacen su trabajo con entusiasmo, pensando en quienes  pueden beneficiar, sin esperar más que el bienestar colectivo. Venezuela es una parte del mundo y por lo tanto un reflejo de lo bueno y de lo malo que sucede en el planeta azul. 

#CrónicasDeMilitares | El ejército puede ser muy peligroso, afirma el general Soublette
«El soldado, a quien se dan todos los medios de ofender, debe sentir un freno más pesado para no hacerse nocivo a la comunidad que le arma en su defensa”, advierte Carlos Soublette en 1827

 

@eliaspino

Como secretario de Guerra y Marina de Colombia, el general Carlos Soublette presenta ante el Congreso la Memoria de su despacho, el 16 de febrero de 1827. Es una noticia pormenorizada de los asuntos de su incumbencia, después de que se ha fortalecido la república debido a los éxitos en el campo de batalla. Estamos ante suculento menú de informaciones, pero ahora solo nos ocuparemos del análisis que hace sobre la naturaleza del ejército y de sus vínculos con la sociedad. La descripción de la trascendencia del cuerpo armado, y de cómo puede determinar la vida de las personas comunes, es un asunto que no solo refiere a los problemas de su tiempo sino también a los que se presentarán en el futuro. De allí que convenga enterarnos de un punto de vista que seguramente ignora la mayoría de los lectores.

Veamos cómo describe Soublette, desde su autorizada atalaya, a un cuerpo que ha logrado el triunfo sobre los realistas y del cual depende la estabilidad de Colombia. Dice ante los representantes del pueblo:

Los individuos que componen el ejército permanente han perdido el goce de sus derechos naturales, ya sea por el tiempo que la nación les exige servicio personal en las filas, o ya por el que quieren comprometerse voluntariamente más allá de aquel término. Si se me pregunta en qué se funda esa aserción, responderé que en la naturaleza de las cosas; pues así como el hombre sacrifica una parte de su libertad en beneficio del buen orden social, y en aumento de su propia seguridad, así el soldado, a quien se dan todos los medios de ofender, debe sentir un freno más pesado para no hacerse nocivo a la comunidad que le arma en su defensa.

Como se ha visto, establece una distinción entre los miembros del ejército y los integrantes de la comunidad civil, sin dejar de señalar la preeminencia de la segunda sobre el primero debido a que le concede autoridad para que la proteja, debido a que le entrega armas para su conservación. Pero, a la vez, llama la atención sobre la pesada carga de los soldados, si se compara con las obligaciones del resto de la ciudadanía. Ya asoma una distancia de entidad entre las dos partes del todo colombiano, que se hace mayor cuando se detiene en el punto crucial de la posesión de fuerza para un predominio que puede ser peligroso. Es ahora cuando aborda el asunto que debe conducir a mayor preocupación. Veamos:

(…) Las leyes penales, la suma de autoridad y los medios de coacción que bastan para gobernar y contener a cien mil personas diseminadas en una provincia, distribuidas por familias y entregadas a las pacíficas ocupaciones de la vida civil y campestre, serían nulos para conducir a mil hombres reunidos en un cuartel y dedicados por el oficio a estudiar el uso de sus fuerzas individual y colectivamente. Diferencias esenciales distinguen, pues, el ejército de la sociedad; esta se halla habitualmente inerme, y aquel constantemente armado; los miembros de la segunda aislados para ofender y defenderse, y el militar reconoce una bandera, y forma una masa organizada con todos los compañeros que le rodean; el ciudadano que no pertenece a las filas, jamás recibe órdenes que le comprometan a hartas penalidades, o que pongan en inminente riesgo su existencia, y al soldado se le previene arrostrar todas las miserias y presentarse diariamente a la muerte; el contacto del particular con el magistrado, es las más veces buscado por el primero, de modo que la autoridad apenas se deja sentir, al paso que el deber de la obediencia ha de ejercitarse en la milicia sin intermisión y sin excepción. Así no hay duda en que el ejército con una pesada carga de obligaciones incomparablemente mayor que la que gravita sobre el pueblo, tiene en su mano medios mil veces más eficaces para rehusarla o sacudirla.

La descripción lo lleva  a una conclusión contundente que no puede pasar inadvertida para los destinatarios del mensaje, pero también por quienes la conocemos en la posteridad. Agrega, desde su cargo de ministro y oficial del más alto grado, de héroe en numerosos combates:

No tengo escrúpulo en asegurar que vale más carecer de ejército que tener uno en el que se haya perdido el espíritu de subordinación por parte de los que obedecen, y (como un resultado necesario) la firmeza y la confianza por parte de los jefes. Es una verdad confirmada por muchos ejemplos que la tropa en que se relaja la disciplina y se olvida la obediencia, es tan cobarde en el campo de batalla como osada en las plazas públicas, y que cambiando el deseo de combatir por la armonía de resolver de hecho sobre los intereses nacionales, se hace ominosa a su propio país, y despreciable a los enemigos externos. Un ejército en tal estado es peor que inútil y gravoso; es una sedición armada permanente.

Soublette se conforma ahora con reafirmar la importancia de la disciplina en los cuerpos armados, de fortalecer una “aureola de mando” inapelable, sin ofrecer otros pormenores sobre el crucial negocio. Debe tratar numerosos temas sobre el trabajo de su despacho durante un agitado 1826, cuando comienzan movimientos secesionistas que debe manejar con cuidado. Tal vez por esas agitaciones, y por las que puede pronosticar desde su oficina de Bogotá, se atreva a plantear en la principal tribuna pública de la época sus preocupaciones sobre la conducta de los hombres de armas, es decir, sobre los peligros que pueden conducir al descalabro del republicanismo en ciernes.

El contraste que establece entre unos contingentes habituados a la acción y expuestos a la muerte, y un conglomerado cuyos vínculos con la autoridad son más flexibles -o más cómodos, tal vez quiso decir- y la alternativa que sugiere de la imposición de la soldadesca sobre la fuente de su poder, nos introducen en un fenómeno que traspasa los límites del tiempo  en el cual se perfilaba. Que los haya planteado un prócer de su talla, vanguardia en numerosos hechos de guerra, futuro jefe de Estado en Venezuela y promotor de una administración morigerada, hace de su Memoria de 1827 un documento excepcional.

Orlando Viera-Blanco Jul 06, 2021 | Actualizado hace 1 mes
Hora de romper cadenas
Fue la resistencia a la ocupación, la sumisión, la humillación al acatamiento colonial y el desplazamiento cultural, lo que inspiró el grito de la soberanía

 

@ovierablanco

Cuatro patriotas del Congreso de la República de Venezuela de 1811 fueron claves  para la declaración de nuestra independencia del imperio español. Juan Antonio Rodríguez, presidente del Congreso; Luis Ignacio Mendoza, vicepresidente; Juan Germán Roscio, corredactor de la Constitución de 1811 y Francisco Isnardo, secretario del Congreso Constituyente.

Después de la firma del Acta de Independencia (A. I.) aquella tarde del 5 de julio de 1811 en la capilla de Santa Rosa de Lima, nace la I República que rápidamente cae con la capitulación de San Mateo del Generalísimo Francisco de Miranda, el 25 de julio de 1812. Bolívar marcha a Colombia e inicia la fundación de la II República (1813) tras la Campaña Admirable. Desde la Batalla de Cúcuta y la recuperación del río Magdalena, Bolívar lidera las victorias de las Batallas de Agua de Obispo, Niquitao, los Horcones y Taguanes, y mil kilómetros de ruta gloriosa. Finalmente entra triunfante a Valencia, La Victoria y Caracas, donde es proclamado El Libertador.

No hubiese habido 5 de julio de 1811 sin 19 de abril de 1810, cuando fue sustituido Vicente Emparan, otrora gobernador de la Capitanía General. Bueno destacar que Venezuela fue el primer país latinoamericano en declarar su independencia de España. El A. I. consagró tres valores fundamentales: i. La justicia como instrumento sanador de la infamia, la instigación y “la guerra entre hermanos”; ii. El ideal de soberanía (sin negar nuestra esencia hispana, mestizaje y el catolicismo como misma religión); y iii. La felicidad como derecho y anhelo de los pueblos autónomos.

En los caminos andados por los padres de la patria está la ruta para refundar la nueva república. Virtudes republicanas sembradas en el A. I. de 1811, donde libra el deber histórico de rebelión y emancipación.

La guerra y la paz

Rodríguez, Mendoza, Roscio e Isnardi redactaron el A. I. sobre los valores de dignidad de los hombres, igualdad de los individuos, libertad de expresión y prohibición de la censura. Marca el inicio de nuestra soberanía constitucional, un Estado libre, independiente y federal. Nace nuestra primera constitución (1811), que nos emancipa de las prácticas coloniales impuestas durante trescientos años de la América española.

La influencia de las ideas de la Ilustración y la Revolución Francesa, fueron historia viva y precursora. Recordemos el texto del acta: “Sordos siempre a los gritos de nuestra justicia, han procurado los gobiernos de España desacreditar todos nuestros esfuerzos declarando criminales y sellando con la infamia, el cadalso y la confiscación, todas las tentativas que, en diversas épocas, han hecho algunos americanos para la felicidad de su país”. Historia de independencia, libertad y soberanía de los pueblos, que es historia de rescate de la verdad…

Continúa el acta: “Conducidos a la horrorosa suerte que vamos ya a apartar de nosotros para siempre; con esta atroz política (sordos a la justicia), han logrado hacer a nuestros hermanos insensibles a nuestras desgracias, armarlos contra nosotros, borrar de ellos las dulces impresiones de la amistad y de la consanguinidad, y convertir en enemigos una parte de nuestra gran familia.” Dos siglos más tarde, Venezuela reedita esa política aterradora de oídos sordos a la justicia que “hace a nuestros hermanos insensibles a nuestras desgracias”.

Sentencia el Acta de Independencia: “Mas nosotros, que nos gloriamos de fundar nuestro proceder en mejores principios, y que no queremos establecer nuestra felicidad sobre la desgracia de nuestros semejantes, miramos y declaramos como amigos nuestros, compañeros de nuestra suerte, y partícipes de nuestra felicidad, a los que, unidos con nosotros por los vínculos de la sangre, la lengua y la religión, han sufrido los mismos males en el anterior orden…”.

Un credo con plena vigencia en nuestros días: rescatar nuestro sentido familiar por ser nación de “una misma lengua, sangre y religión”, y nuestra voluntad de redimir diferencias como pueblo amante de la amistad y de la paz. Valores sensiblemente libertarios pero profundamente humanos, presentes ayer y hoy por nuestra independencia.

La guerra se impuso por el empeño de la corona de conservar sus dominios y usanzas. Fue la resistencia a la ocupación, la sumisión, la humillación al acatamiento colonial y el desplazamiento cultural, lo que inspiró el grito de soberanía. La política de “la infamia, el cadalso y la confiscación de todas las tentativas”, como negación del derecho fundamental de vivir en paz y prosperidad, selló el levantamiento repuplicano.

Demos nuestras vidas, nuestras fortunas y nuestro honor…

Concluye el acta del 5 de Julio de 1811: “Nosotros, pues, a nombre y con la voluntad y autoridad que tenemos del virtuoso pueblo de Venezuela, declaramos solemnemente al mundo que sus Provincias Unidas son, y deben ser desde hoy, de hecho y de derecho, Estados libres, soberanos e independientes, absueltos de toda sumisión y dependencia de la Corona de España… y que como tal, tiene pleno poder para darse la forma de gobierno que sea conforme a la voluntad general de sus pueblos, para hacer y ejecutar todos los demás actos que hacen y ejecutan las naciones libres e independientes (…) Para hacer válida, firme y subsistente esta nuestra solemne declaración, demos y empeñamos mutuamente unas provincias a otras, nuestras vidas, nuestras fortunas y el sagrado de nuestro honor nacional”.

Es hora de hacer y ejecutar la paz, hora de romper cadenas y restituir la república, de una misma sangre, de un mismo corazón, una misma lengua y religión. No más ocupación.

¡Cúmplase!

* Embajador de Venezuela en Canadá

Y saldrán corriendo

Y saldrán corriendo

Las opiniones emitidas por los articulistas son de su entera responsabilidad. Y no comprometen la línea editorial de RunRun.es

Política inteligente, sin teléfonos inteligentes
Para un dirigente político que limita su accionar político a las redes sociales, esto es una tragedia y si ese dirigente político es venezolano, donde solo el 15% tiene teléfonos inteligentes, la tragedia es babilónica

 

@juliocasagar

Gabriel García Márquez relataba en una entrevista, a propósito de su vida en Venezuela como reportero de Elite y otras publicaciones, que el nuestro era un país peculiar. Dijo que aquí, a diferencia de otros países que había conocido, “las cucarachas volaban”. Estudios de mercadeo descubrieron igualmente que «se bebía más Pepsi Cola que Coca Cola y que se fumaban más cigarrillos cortos que largos”.

Pues bien, esas eran algunas de las peculiaridades de nuestro pasado. Una de nuestros días, ocasionada por la dramática situación que nos ha hecho vivir este régimen de pesadilla que nos ha tocado, es que, a diferencia de nuestros países hermanos, en Venezuela solamente el 15 % de sus habitantes tiene teléfono inteligente.

En efecto, el país que fue mejor comunicado de la América Latina, ha visto decrecer paulatinamente su capacidad de estar interconectado. La crisis económica que afecta a nuestras familias no da para comprar o reparar teléfonos inteligentes.

Paradójicamente, una parte muy importante de nuestra dirigencia política, homologando los comportamientos de otras latitudes, se ha afincado para su comunicación, y para sus análisis, en los recursos de unas redes que, en realidad llegan a muy poca gente.

Ojalá que no se pretenda dar un debate afirmando la importancia de estar en las redes y de acceder a la comunicación digital; y a reforzar la idea de que la guerra híbrida de hoy en día se da en el espacio cibernético más que en las trincheras on the ground. En eso estamos de acuerdo y es un tema inobjetable. Lo que está en discusión es su pertinencia y su peso específico en un país como Venezuela, con la situación que hemos descrito.

Todos sabemos que las redes, e internet en general, están manejadas por algoritmos que son órdenes que se dan a los aparatos que usamos, basadas en cálculos matemáticos sobre nuestros hábitos de consumo, nuestras costumbres, nuestras pertenencias sociales, políticas y religiosas. Eso es lo que hace que si estamos leyendo un interesante artículo sobre el arte cubista, por ejemplo, de repente nos salga un banner anunciándonos la última oferta de pizza y de hamburguesas con papitas fritas. Basta que hayamos usado alguna aplicación para hacer un pedido, para que seamos víctima de un bombardeo inclemente de propaganda para que volvamos a consumir lo que ya una vez consumimos.

Así trabajan los algoritmos y eso es bueno para vender pizzas y hamburguesas, pero no necesariamente para hacer política.

Esta realidad es una de las cosas que hace inducir a los usuarios de las redes a manejarse en burbujas de iguales, es decir, entre gente que opina parecido, que come parecido, que va a los mismos sitios, que se interesa por cosas parecidas etc., etc.

Para un dirigente político que limita su accionar político a las redes sociales, esto es una tragedia. Y si ese dirigente político es venezolano, la tragedia es babilónica. Ese dirigente está limitando su análisis y su comunicación únicamente al círculo al que él pertenece, con el agravante de que aquí ese círculo se escoge de entre solo un 15 % de la población.

Hace algunos meses publicamos una nota que se intitulaba LA POLÍTICA ES ANALÓGICA, NO DIGITAL y, hace algo más de un año, otra intitulada LA VIDA NO ES UN ALGORITMO, que pretendían poner en evidencia esta realidad y que hacia énfasis en otro enorme error de una importante fracción de nuestra dirigencia que había abandonado el contacto personal (el único que a nuestro juicio obra prodigios en la comunicación política) en favor de Instagram y Facebook; que había dejado de estar con la gente de carne y hueso; y había sustituido esa presencia por el selfi con la gente como backing de escenografía.

Ojalá que esta reflexión no se asuma como una lucha chimba de lo nuevo contra lo viejo, porque no es así. Se trata de un simple llamado de atención a la necesidad de regresar al olvidado terreno del insustituible contacto personal y la lucha social. Tomemos por ejemplo la siguiente realidad: mucha gente se sorprende de que se hagan convocatorias por las redes para actividades que, a veces, tienen más “likes” en el “flyer” en el que se llama al acto, que gente presente. La verdadera razón es que, además, esos llamados solo son vistos por menos del 15 % de las personas.

No hay dirigentes de carne y hueso activando entre la gente, dando la palmadita en el hombro para que el vecino vaya, o despertando a la vecina para que se vista a acudir a la cita; y tampoco, lo cual es peor, hay muchos dirigentes que no se han probado en sus comunidades en luchas concretas a quienes los potencialmente convocados agradezcan algo o que les admiren por algo. Es muy difícil atender a una invitación de quien no se conoce, no se aprecia o no se admira.

Ya sabemos que para un dirigente opositor en Venezuela es cuesta arriba el trabajo que en otros países es relativamente normal. Aquí tenemos la represión, el control social del régimen, la inseguridad personal, la escasez de recursos de movilización incluyendo la falta de gasolina, la precariedad económica y, para colmo ahora, la pandemia. Pero eso solo debe aguzarnos la inteligencia para agenciarnos los medios alternativos de comunicación y de relacionarnos con la gente.

El otro asunto que es necesario plantear es el de la formación de nuestros dirigentes. ¡Abramos el debate! Hace muchísimos años en nuestros partidos casi ha desaparecido la discusión de ideas, la formación política, el estudio. Dejamos que se cuele gente que llega para colmar aspiraciones. Y las aspiraciones, que son claves en la política, cuando están en la cabeza y el corazón de un dirigente formado y con conocimiento de su misión, son virtudes. Pero cuando esas aspiraciones están en la cabeza y el corazón de alguien que desdeña la formación, los valores, el compromiso, el resultado es lo que estamos viendo al frente del Estado venezolano.

De manera que son muchos los desafíos que tenemos por delante y lo relevante es que, además de muchos, debemos resolverlos rápido y con inteligencia. De que hagamos esto correctamente, va a depender en mucho lo rápido o lento que salgamos de esta pesadilla.

Un ítem sobre este tema, en los continuos encuentros del liderazgo opositor, que culmine en un esfuerzo por la formación de nuestros dirigentes y sobre la manera de comunicarnos con nuestros ciudadanos, es clave y necesarísimo en este momento.

Aliados para el cambio

Aliados para el cambio

Las opiniones emitidas por los articulistas son de su entera responsabilidad. Y no comprometen la línea editorial de RunRun.es

Eddie A. Ramírez S. Jul 06, 2021 | Actualizado hace 1 mes
Disparar a discreción
Algunos demócratas consideran que lo importante es disparar. No importa si es al enemigo o a los suyos. A veces dicen falacias, medias verdades o dan declaraciones que no suman

 

Disparar a discreción, es decir según criterio propio, se justifica solo en pocos casos. Por ejemplo, si un pelotón de soldados es emboscado, cada uno de sus miembros decide motu proprio cuándo disparar y en qué dirección, o el jefe de la unidad les otorga la libertad de proceder. Por el contrario, las más de las veces el comandante ordena hacia qué dirección y en qué momento debe abrirse fuego. En esta lucha por la democracia, los civiles solo disponemos del arma de la palabra para denunciar los atropellos de la dictadura.

Lamentablemente, algunos demócratas consideran que lo importante es disparar. No importa si es al enemigo o a los suyos. A veces dicen falacias, medias verdades o dan declaraciones que no suman.

Todos tenemos el derecho y el deber de criticar a nuestros dirigentes, pero sin descalificarlos cuando no coincidimos. Los excelentes artículos de Carolina Jaimes, Mari Montes y Soledad Morillo deberían ser la pauta. Hay varios tipos de ciudadanos que disparan a discreción.

 Los despreciables

Son aquellos que para descalificar a determinado opositor se valen de la bajeza de hacer referencia a su inclinación sexual, sea o no cierta. Es inadmisible que hoy en día se utilicen argumentos homofóbicos, como en recientes artículos de un expolicía con nombre de soberano inca y de otro atorrante con apellido de esquina caraqueña. Ambos despreciables.

 Los frustrados

Son aquellos que se sienten molestos porque nadie ha podido sacar al régimen. Quizá nunca se han preocupado por la política, pero ahora sufren la situación desastrosa de los gobiernos de Chávez-Maduro. Disparan a discreción a los dirigentes de la oposición. No discriminan. Califican de corruptos, vendidos, colaboracionistas o complacientes a los dirigentes que predican que se requiere dialogar, negociar, votar o abstenerse.

 Los serrucha pisos

Se consideran los salvadores de la patria. Están convencidos de que solo ellos pueden sacar a Maduro y a sus compinches. Están informados de que el presidente legítimo Guaidó es quien tiene el reconocimiento de varios países y quien está relativamente mejor ubicado en las encuestas, pero esos les parecen detalles de poca monta. En este grupo hay gente luchadora en contra del régimen. Uno quisiera pensar que actúan de buena fe porque los aprecia, pero, a sabiendas de que son inteligentes, queda la percepción de que proceden así por considerar, equivocadamente, que les reporta beneficios políticos. Predican que el gobierno interino ya está muerto, pero no tienen una opción viable para sustituirlo. Desearíamos que, incluso en beneficio de ellos mismos, fuesen más prudentes en sus declaraciones.

¿Por qué algunos disparan a discreción?

Desde luego hay quienes actúan de mala fe, como son los llamados alacranes. Este calificativo no se debe a que hayan participado en la farsa electoral de las parlamentarias, ya que algunos lo hicieron pensando que era la única opción. Son alacranes por sus declaraciones a favor del régimen o por haber aceptado que el Tribunal Supremo de Justicia les regalara las tarjetas de los partidos a los que pertenecían como miembros de segunda categoría. También son alacranes quienes se congraciaron con el régimen para obtener la legalidad de partidos de maletín. Sin embargo, tenemos la percepción que la mayoría de los usuarios de las redes disparan a diestra y siniestra por estar desorientados.

¿A qué se debe esta proliferación de compatriotas que abren fuego a discreción? Dejando de lado a los corruptos alacranes, pareciera que los compatriotas que disparan a discreción es por falta de comando con suficiente autoritas que guie hacia quién disparar, cuándo y con qué tipo de arma cívica. Este es un problema que se inició con la llegada de los rojos al poder. Los ciudadanos perciben que los líderes de entonces no actuaron con coraje para impedir la inconstitucional Asamblea Constituyente. Algunos tardaron en aceptar que Chávez violaba la Constitución y que había presos políticos, por lo que perdieron credibilidad. Sin embargo, tampoco la nueva generación ha logrado enamorar a los venezolanos, lo cual cuesta explicar.

¿Qué hacer?

La negociación está en marcha. Al frente de la misma está Gerardo Blyde, quien merece nuestra confianza. Ojalá logre unir al resto de nuestros representantes. Conseguir condiciones electorales de acuerdo con los estándares internacionales debe ser el objetivo primordial. Si el régimen no acepta, la negociación no debe continuar. Caso de que se logre, el segundo objetivo sería que acepte nueva elección parlamentaria y presidencial. De no haber acuerdo sobre estos dos últimos puntos, habría que exigir compromiso de fecha para realizar un referendo revocatorio presidencial sin trabas para la recolección de firmas.

Los puntos de los presos políticos, de los exiliados y de la ayuda humanitaria no pueden obviarse. De nuestro lado es imprescindible prepararnos para las regionales, seleccionando candidatos apoyados por todos. En el supuesto de que la negociación fracase, la dirigencia opositora debe decidir unánimemente si participa o no en las regionales. Una vía podría ser consultar a los electores si quieren o no votar bajo las condiciones que imponga el CNE. Si todo fracasa, nuestros dirigentes deben someterse a un proceso de legitimación.

Como (había en botica)

Por presentar foto del exministro Rodríguez Chacín y su esposa conversando con la narcoguerrilla de la FARC y por informar sobre la derrota que sufrió la Fuerza Armada de Padrino López y de Ceballos, fue motivo para que Maduro ordenara imputar y apresar a Javier Tarazona, Rafael Tarazona y a Omar García, de la ONG de Derechos Humanos Fundaredes, por traición a la patria, terrorismo e incitación al odio. Además de este atropello, no les permitieron la asistencia de sus abogados.

El Informe actualizado de Michelle Bachelet señala que siguen las torturas en nuestras cárceles.

La dictadura de Daniel Ortega en Nicaragua continúa violando los derechos humanos.

Lamentamos los fallecimientos de Enrique Zabala, Gustavo Marcano, Rolando Cubillán y de Humberto Gómez Acuña, compañeros de Gente del Petróleo y de Unapetrol.

¡No más prisioneros políticos, ni exiliados!

eddiearamirez@hotmail.com

Las opiniones emitidas por los articulistas son de su entera responsabilidad. Y no comprometen la línea editorial de RunRun.es

Informe Otálvora | CIA inicia diplomacia suramericana de Biden

Jair Bolsonaro recibe al director de la CIA William J. Burns el 01JUL21 en el Palacio de Planalto.

El veterano diplomático William J. Burns, designado como cabeza de la CIA por Biden, aterrizó en Bogotá presumiblemente el 29JUN21

 

@ecotalvora

El director de la Agencia Central de Inteligencia realizó una sigilosa gira a varios países de Suramérica, convirtiéndose en el más alto funcionario estadounidense en visitar Colombia y Brasil desde el inicio del gobierno de Joe Biden.

El veterano diplomático William J. Burns, designado como cabeza de la CIA por Biden, aterrizó en Bogotá presumiblemente el 29JUN21. El gobierno colombiano se abstuvo de comentar la visita de Burns, salvo las declaraciones del todavía embajador colombiano en Washington Francisco Santos, quien previamente dijo que se trataba de una “misión delicada” y de “una misión importante en materia de inteligencia que logramos coordinar”.

La presencia de Burns en Brasilia fue conocida por dos filtraciones del propio gobierno brasileño: en declaraciones informales a un grupo de simpatizantes Bolsonaro reveló haberse reunido con el enviado de EE. UU., con el cual habría analizado “las cosas en América del Sur”. El encuentro se produjo en el Palacio de Planalto a media tarde del 01JUL21 con presencia del embajador estadounidense Todd Chapman y ministros del área de seguridad brasileños. Luego del encuentro presidencial, ya en horas de la noche, Burns habría participado en una cena ofrecida por Chapman en su residencia oficial en Lago Sur de Brasilia, a la cual fueron invitados los generales (retirados) Luiz Eduardo Ramos y Augusto Heleno, ministros de la Casa Civil y de Seguridad Institucional.

*****

El día anterior al viaje de Burns a Bogotá, Joe Biden había realizado una inusual conversación telefónica con el presidente de Colombia Iván Duque. Algunos miembros del entorno cercano de Biden se muestran poco amistosos con los gobiernos de Brasil y Colombia, pero la definición de estos países como aliados estratégicos se mantiene en la práctica.

Dos eventos habrían apurado la decisión de Biden de comunicarse directamente con Duque: la explosión de un carro bomba dentro de un cuartel del ejército colombiano el 15JUN21 y el ataque con disparos al helicóptero que transportaba a Duque y a sus ministros de Defensa y del Interior ocurrido el 25JUN21. Ambos eventos tuvieron lugar en la zona fronteriza colombo-venezolana. El ataque del carro bomba se produjo contra la sede de la Trigésima Brigada del ejército colombiano basada en Cúcuta. Esa unidad militar es la encargada de organizar y ejecutar las principales operaciones antinarcóticos en la zona del Catatumbo colombiano fronteriza con Venezuela. Personal militar estadounidense, perteneciente a la “U.S. Security Force Assistance Brigade” y que realizan actividades de asesoramiento en el terreno, se encontraban en la sede militar de Cúcuta al momento de la explosión.

Por su parte, el atentado contra Duque ocurrió con disparos desde tierra, cuando retornaba de una visita de trabajo a Sardinata, en la zona de operaciones antinarcóticos del Catatumbo. Su aeronave se desplazada, ya en aproximación al aeropuerto de Cúcuta, a menos de dos kilómetros del rio Táchira que marca el límite entre Venezuela y Colombia

*****

Tras la conversación Biden-Duque el 28JUN21, la Casa Blanca emitió un comunicado donde dejó saber que el estadounidense expresó su apoyo “tras el ataque al helicóptero presidencial colombiano”. Biden anunció la donación de dos millones y medio de vacunas anti-COVID-19 y se refirió a los “derechos de los manifestantes pacíficos”, aunque igualmente condenó el “vandalismo” en referencia a las protestas y acciones de terrorismo urbano que se escenifican en Colombia desde finales del mes de abril.

Biden se refirió a la “cooperación de seguridad conjunta” entre EE. UU. y Colombia y a la situación venezolana durante la conversación con Duque: “el Presidente compartió su preocupación por la situación en Venezuela y su impacto regional y subrayó la importancia de ampliar el consenso internacional a favor de negociaciones integrales que conduzcan a una elección libre y justa”. Fue la primera vez en la cual directamente el presidente de EE. UU. confirmaba la posición de su gobierno ante Venezuela.

Tras la conexión telefónica, la prensa bogotana procuró a Juan González, el colombo-estadounidense que ejerce como asesor de Biden y encargado del Hemisferio Occidental en el Consejo de Seguridad Nacional de la Casa Blanca. En declaraciones a la cadena Caracol, González introdujo un nuevo elemento en relación a la posición de EE. UU. sobre la crisis venezolana. González reiteró lo expresado por otros altos funcionarios del gobierno Biden en cuanto a que EE. UU. respalda “una negociación en Venezuela que derive en elecciones justas y libres” y “considera que Colombia jugaría un papel fundamental en una eventual negociación”.

Pero González agregó que “Colombia debe tener una silla en la mesa con el resto de la comunidad internacional dada la historia que tienen Colombia y Venezuela”.

De esta manera el asesor de Biden pareciera haberse referido a una suerte de mesa internacional de negociación sobre Venezuela, diferente al esquema de unas negociaciones promovidas internacionalmente pero limitadas al gobierno de facto de Nicolás Maduro y a la “oposición”. Ningún otro vocero de EE. UU. ha confirmado esta afirmación de González.

*****

Mientras Joe Biden conversaba el 28JUN21 con el presidente colombiano, su secretario de Estado, Antony Blinken, se encontraba en la etapa final de una gira europea que lo llevó, entre otros lugares, a la Santa Sede. La visita al Vaticano formó parte de la reconstrucción de los vínculos de la Casa Blanca con los principales centros de poder y advierte sobre una probable próxima visita de Biden.

Blinken sostuvo una reunión de trabajo con los jefes del aparato político del Vaticano, el secretario de Estado Pietro Cardenal Parolín y el secretario de Relaciones con Estados, arzobispo Paul Gallagher. El “retorno a la democracia” en Venezuela fue uno de los temas expresamente tratados entre los jefes de las diplomacias de EE. UU. y el Vaticano. Luego, Blinken fue recibido por el papa Francisco, en audiencia especial, en lo que varios asistentes calificaron como un muy cordial encuentro con casi una hora de duración marcando un nuevo clima entre Washington y la Santa Sede. Según la versión del departamento de Estado, en la conversación entre el papa y Blinken, fue nuevamente abordado el “tema Venezuela” desde el enfoque de la “crisis humanitaria” que vive.

*****

Con la potencial disolución del Grupo de Lima sobre Venezuela, la diplomacia de EE. UU. ha estado procurando un nuevo esquema de respaldo internacional en procura de una salida a la crisis venezolana. La posición de Washington, expresada por altos voceros de la Casa Blanca y del Departamento de Estado, es mantener el esquema de sanciones al régimen chavista, promover negociaciones que conduzcan a elecciones presidenciales con garantías y observación internacional.

La suspensión de las sanciones sería el aliciente, según el anterior y el actual gobierno de EE. UU., para que el régimen venezolano aceptara cambios que pudieran conducir a su desplazamiento del poder. “Nosotros mantendremos la presión de sanciones y la incrementaremos si hay retroceso en ese proceso y estamos dispuestos a levantar la presión si vemos avances concretos” ha expresado Juan González repetidamente.

*****

La línea de EE. UU. se materializó en una inusual declaración conjunta del secretario de Estado Antony Blinken, el ministro de Relaciones Exteriores de Canadá Marc Garneau y el alto representante de la Unión Europea Josep Borrell, difundida el 25JUN21. Los tres voceros afirmaron que “la solución pacífica a esta profunda crisis política, social y económica (en Venezuela) debe provenir del mismo pueblo venezolano, a través de negociaciones de amplio alcance impulsadas por los venezolanos en las cuales participen todos los actores interesados. Un proceso de negociación integral, con plazos concretos, debería posibilitar el restablecimiento de las instituciones del país y permitir que todos los venezolanos puedan expresarse políticamente por medio de elecciones locales, parlamentarias y presidenciales creíbles, inclusivas y transparentes”.

En el contexto de las conversaciones con EE. UU., ya Borrell había anunciado el 21JUN21 el envío a Venezuela de una “misión técnica”. Al finalizar la reunión de ministros de Exteriores europeos de ese día, Borrell afirmo que “en Venezuela hay una posible apertura política. Estoy enviando una misión de evaluación técnica (exploratoria) para ayudar a considerar si se cumplen las condiciones para enviar una misión de observación para las elecciones de noviembre. Lo que estoy haciendo es simplemente enviar una misión técnica para evaluar si se podrían cumplir las condiciones para enviar una misión de observación”. La misión enviada por Borrell debería llegar a Caracas el 06JUL21.

El gobierno de facto de Venezuela convocó a votaciones regionales para el 21NOV21 y con ellas procura mejorar su imagen internacional y argumentar contra las sanciones impuestas básicamente por EE. UU. y en menor grado por la Unión Europea. Normalizar al régimen es el propósito del chavismo con esas votaciones mientras el archipiélago antichavista se debate sobre su participación.

*****

Un pronunciamiento emitido recientemente por un grupo de exrectores de la Universidad de los Andes de Mérida señala que en Venezuela “todos los partidos son ahora pequeños. Las únicas estructuras partidistas de tamaño mayor que quedan son las fuerzas armadas, controladas, por ahora, con la disciplina militar, y la gigantesca burocracia del Estado con disciplina más laxa, unida por los débiles lazos de la dependencia salarial, el miedo, la tácita complicidad, la vagancia tolerada y el silencio”. El documento está suscrito por José Mendoza Angulo, Néstor López Rodríguez y Genry Vargas Contreras.

Artículo publicado previamente en Diario Las Américas

Las opiniones emitidas por los articulistas son de su entera responsabilidad y no comprometen la línea editorial de RunRun.es

Las vacunas en Venezuela: lo imposible y lo improbable
Las vacunas ya no son solamente el nuevo «apartheid» venezolano. Es que ahora ni siquiera son vacunas. Son un experimento cubano, y nosotros sus conejillos de Indias

 

@cjaimesb

Tengo que volver sobre el tema de las vacunas. La semana del 22 al 28 de junio fallecieron en Venezuela, según cifras de la ONG Médicos Unidos, catorce miembros del personal de salud que no habían sido vacunados. Y es que las vacunas ya no son solamente el nuevo “apartheid” venezolano. Es que ahora ni siquiera son vacunas. Son un experimento cubano y nosotros, los pendejos venezolanos, humillados y sojuzgados por Cuba, los conejillos de Indias.

El alto gobierno se vacunó, sí. Pero no con las Abdala… se vacunó con las SputnikV rusas, aprobadas por todos los organismos de salud mundiales. ¿Por qué no han seguido trayendo esas? No hay respuesta de los organismos oficiales. Las Academias científicas nacionales se pronunciaron: las Abdala no deben usarse. La Asociación de Investigadores del IVIC, aparte de confirmar que la Abdalá NO ES una vacuna, sino un “candidato vacunal”, dejaron saber que llegó a Venezuela antes de ser aprobada por las autoridades científicas de la isla y su agencia reguladora de medicamentos, el CecMed.

¿Cuál era el apuro de la vicepresidente Delcy Rodríguez en comprar tantos millones de dosis de unas inyecciones que sabrá Dios qué contienen? ¿Quién manda en Venezuela? Encima, la propuesta de Fedecámaras de adquirir vacunas para sus trabajadores duerme el sueño de los justos, sin que haya respuesta por parte del régimen. ¿Las víctimas? ¡Los venezolanos de a pie!

Por otro lado, nos encontramos con que el mecanismo Covax no fue activado para nuestro país, porque como las cifras en Venezuela NO EXISTEN –y las que existen son imposibles de creer, como las relacionadas con la covid- los últimos números publicados en plataformas del Estado reflejan que un venezolano promedio gana un promedio de $13,000 anuales. ¿Un chiste? ¡No! Cifras viejas, difíciles de creer también. Si las hubieran actualizado, tendrían que decir que un venezolano promedio gana menos de $36 al año y nos hubieran aprobado el Covax de inmediato. Aunque el doctor Julio Castro aseguró que el estancamiento del Covax se debió a que el régimen “cambió el estatus del contrato”. Cualquiera de las dos razones es un exabrupto.

El hecho cierto es que estamos en manos de un régimen que nada le importa, sino mantenerse en el poder a costa de lo que sea y como sea. Que sus miembros se vacunaron todos porque consideraron que ellos eran más “importantes”. En el resto del mundo los mandatarios en general se vacunaron cuando les tocaba por sus edades. No tuvieron trato preferencial. En Venezuela, no solo fue que se vacunaron ellos, sus familias, sus amantes y un largo etcétera: es que negociaron con las vacunas.

Las Sputnik habían llegado en dos dosis cada una y ahora no hay segundas dosis. ¿A quiénes les pusieron esas segundas dosis que hoy no aparecen? ¡Seguramente a quienes las pagaron a un precio exorbitante! Pero por este delito solo hay dos bobos presos. Los cerebros detrás, están libres, vacunados y disfrutando de las pingües ganancias de sus negocios inmundos.

La inmunidad de los impunes

La inmunidad de los impunes

Los hospitales son otro tema: la falta de oxígeno y de electricidad ha matado a más de uno que, en un país normal, se hubiera salvado. Pero estamos en Venezuela, el país donde lo improbable y lo imposible se han transformado en cotidianidad.

Las opiniones emitidas por los articulistas son de su entera responsabilidad y no comprometen la línea editorial de RunRun.es