Los controles están dirigidos a erradicar el microtráfico, trata de personas, y explotación de niños y adolescentes
El gobierno de Colombia puso en marcha desde el viernes una serie de nuevas acciones para atender el tema migratorio. La medida se tomó en algunos municipios que presentan problemas de seguridad, informalidad y espacio público.
La iniciativa se origina luego de que el Concejo de Cúcuta aprobó una proposición para que el presidente Iván Duque restableciera relaciones diplomáticas con Venezuela.
La moción se presenta con la finalidad de poner fin a casi cinco años de aguda crisis social en los dos países, reseñó La Opinión de Colombia.
El concejal Guillermo León Báez aseguró que Cúcuta no resiste más la explosión social que se desató con el cierre de la frontera en 2015.
El alcalde Eugenio Rangel Manrique mencionó que esta intervención era necesaria porque en ese sitio se instalaron más de 50 refugios en los que convivían ancianos y niños en difíciles condiciones. Ahora lo que sigue es el sector de Las Parrillas y La Parada, en los que se concentra el mayor volumen de migrantes y también de problemas.
Los controles están dirigidos a erradicar el microtráfico, trata de personas, y explotación de niños y adolescentes. Problemas que se acrecentaron en este territorio en el último año, dijo el mandatario.
Expresó que Villa del Rosario es quizás el municipio del país más afectado por la crisis migratoria, pero también el más olvidado. Allí se encuentran 36.000 venezolanos, los que se suman a los 90.000 habitantes que tiene el municipio.
«Tenemos problemas de todo tipo y ello demanda inversión, y para ello no contamos con recursos», subrayó Rangel.
Lo que se pretende con los controles en Villa del Rosario es que el espacio público no se convierta en sitio de estancia.
Flujo educativo aumenta
El gerente de la Frontera, Felipe Muñoz, indicó que se registró un incremento de 60% en la matrícula de niños venezolanos en municipios del área metropolitana.
En Norte de Santander el año pasado se venía prestando el servicio a 9.600 escolares, pero este año se pasó a 15.200 alumnos. En Cúcuta se pasó de 9.000 a 14.000 estudiantes. Los municipios afectados con este incremento son también Villa del Rosario, Ocaña, Tibú, El Tarra, Los Patios y Pamplona.
Muñoz insistió en que la problemática con los venezolanos es causada por el régimen de Nicolás Maduro. Ratificó que el gobierno de Colombia mantiene el compromiso de apoyar a Venezuela en las necesidades humanitarias que se tengan.
Tienditas dejó de ser acopio
Muñoz manifestó que desde agosto del año pasado se cerró el centro de acopio Tienditas donde se encontraba una serie de donaciones de ayuda humanitaria. Todos los elementos que había allí fueron distribuidos a ONG y organizaciones de migrantes.
Dijo que con el liderazgo de la representación de la Embajada de Colombia del gobierno interino de Venezuela y con conocimiento de los países donantes se implementaron estrategias para realizar la distribución de los suministros a venezolanos, en Colombia, que por cuenta de la crisis que atraviesa el país llegaron hasta el territorio neogranadino. Dicha entrega se originó con base en la identificación de necesidades críticas, beneficiando también a algunas poblaciones colombianas vulnerables.