El trabajador con casi 40 años de experiencia en la industria petrolera fue vinculado a un supuesto plan para atentar contra las refinerías de Amuay y Cardón hace tres años

Amnistía Internacional pidió una medida sustitutiva de libertad por su edad y estado de salud 

A las 3 de la mañana del 14 de noviembre de 2020, funcionarios de la Dirección General de Contrainteligencia Militar (Dgcim) se llevaron de su casa en Coro, estado Falcón, al extrabajador de Petróleos de Venezuela S.A. (Pdvsa) Guillermo José Zárraga Lázaro. Su pecado: haberse tomado una foto con el entonces presidente interino Juan Guaidó y desmentir con fundamentos un supuesto plan terrorista para atentar contra la industria energética nacional.   

De acuerdo con un acta del Ministerio Público Zárraga, de 59 años de edad, fue acusado de proporcionar información sobre seguridad nacional al estadounidense John Matthew Heath, quien había sido detenido en septiembre de 2020 por supuestamente hacer planes conspirativos para atentar contra las refinerías de Amuay y Cardón en la península de Paraguaná.

A Matthew, el Gobierno de Nicolás Maduro y específicamente el entonces ministro de petróleo, Tareck El Aissami (hoy en día desaparecido luego de una trama de corrupción en su entorno), lo señalaron de ser un marine que había prestado servicios para la Agencia Central de Inteligencia (CIA por sus siglas en inglés). 

“Están todas las pruebas, las fotografías, los videos. Se le capturó con armamento pesado, especializado, y gran cantidad de dólares en efectivo”, dijo Maduro.

En el marco de la denominada “Operación Gedeón”, Matthew fue aprehendido por dos años y excarcelado producto de un intercambio de reclusos entre el régimen madurista y la administración del presidente estadounidense Joe Biden que devino en la liberación de los sobrinos de Cilia Flores, Franqui Flores y Efraín Campo Flores, condenados por una corte norteamericana por delitos de narcotráfico. 

La coordinadora general de la ONG Justicia, Encuentro y Perdón, Martha Tineo, indicó que el Gobierno acusó a Zárraga de suministrar información a Matthew cuando este último ya tenía dos meses preso.

“Es ilógico, además dijeron que había entregado planos de las refinerías que se pueden obtener por Google”. 

La activista sostuvo que es absurdo que al extranjero involucrado en la supuesta conspiración lo hayan devuelto a su país y hayan dejado presos a los nacionales.

La abogada dijo que Zárraga, en su condición de técnico y dirigente del Sindicato Único de Trabajadores del Petróleo, había advertido las condiciones precarias en la que se encuentran las refinerías falconianas. “Haber contrariado la versión oficial fue lo que detonó su detención”, comentó. 

Tineo informó que debido a amenazas y a las probabilidades de una nueva detención, Diego, hijo de Guillermo, se vio obligado a salir del país.

“El también trabajaba en la industria petrolera y un supervisor amigo le avisó que era el próximo objetivo. Está exiliado en Colombia junto a su hermano, quien también debió huir por haber participado en las manifestaciones de 2017”.

La cofundadora de Justicia, Encuentro y Perdón sentenció que debido a la partida de sus hijos, Ana Emilia de Zárraga, esposa de Guillermo, vive sola en Coro y cada vez más alejada de la posibilidad de visitarlo en la cárcel de Yare II, ubicada en el municipio Simón Bolívar del estado Miranda.

Salud en picada

Ana Zárraga denunció que la salud de su esposo se ha ido deteriorando debido a su reclusión. 

“Ha tenido meses duros, ha mejorado un poco de la afección respiratoria, pero igual sigue padeciendo de la patología que presenta”. 

Tineo dijo que además de las enfermedades que padece Zárraga presenta actualmente un cuadro de desnutrición. 

“Ha perdido más de 20 kilos, sufrió un síncope cardíaco, tiene enfermedades prostáticas, fue diagnosticado con anemia severa. En una ocasión perdió el conocimiento se cayó y golpeó la cara y rodillas, padece glicemia alta y tensión baja”, narró. 

Como la mayoría de los presos políticos,  Zárraga ha sido víctima de torturas, tratos crueles, inhumanos y degradantes.

La activista manifestó que, debido al estado de salud de Zárraga, Amnistía Internacional emitió una acción urgente para que fuera liberado por razones humanitarias.

“La vida de Zárraga no puede seguir en peligro por la negativa de las autoridades penitenciarias a garantizar su derecho a unas condiciones decentes de reclusión y a la integridad física. Ha sufrido un grave deterioro a consecuencia de las inhumanas condiciones de reclusión y la falta de nutrición adecuada. Sufrió un síncope cardíaco y los análisis de sangre revelaron alteraciones severas que necesitan tratamiento médico urgente y fiable”, reza el texto de AI.

Para Tineo, una medida sustitutiva de privativa de libertad aplicaría para Zárraga no solo por las condiciones de salud, sino también por su edad y en vista de que a su única familiar le resulta difícil la manutención del preso político: “Le cuesta mucho visitarlo. Ella  tiene toda la responsabilidad de dotarlo de comida, medicinas, insumos para aseo personal, entre otras cosas”. 

Violaciones constantes al debido proceso

La profesional del derecho denunció que el juicio de Zárraga ha estado plagado de violaciones al debido proceso. Ha sido permanentemente interrumpido y sometido a diferimientos continuos.

“A Guillermo le corresponde el decaimiento de la medida, el artículo 230 del Código Orgánico Procesal Penal dice que si han transcurrido más de dos años desde que una persona ha sido detenida y el juicio no se ha realizado debe proceder la liberación inmediata y mantener el proceso judicial en libertad. También establece la excarcelación por medidas humanitarias”, explicó. 

“Las peticiones se han hecho muchas veces, pero todas son negadas, siguen los retardos procesales, mi esperanza la tengo puesta en mi Dios Todopoderoso”, agregó Ana de Zárraga. 

Zárraga indicó que pese a las condiciones de reclusión, su esposo mantiene la fe intacta.

“De vez en cuando se comunica con nosotros cuando paga para llamar desde la cárcel. Él se animó mucho cuando iniciaron las liberaciones (producto del acuerdo de Barbados), pero nuevamente se decae al ver que pasan los días y nadie dice nada de eso. Tenemos la fe en Dios que se abran las puertas de la libertad antes de Navidad”, expresó. 

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