Una situación irregular se presentó este viernes en el Abasto Bicentenario de la autopista Charallave-Ocumare, jurisdicción del municipio Cristóbal Rojas, luego que los clientes que permanecían en cola ingresaran de forma abrupta al establecimiento.

En medio de la acción, unas 10 personas resultaron con contusiones, entre ellas una niña de 10 años de edad y cuatro trabajadores del lugar, según reportaron fuentes policiales. La pequeña fue atendida en la Clínica Paso Real. El resto, en el Pronto Socorro y el hospital de Ocumare.

Se supo que desde tempranas horas, numerosas personas acudieron al citado supermercado para hacer sus compras. A eso de la 1:30 pm, debido a la multitud, los encargados del establecimiento bajaron la santamaría, lo que desesperó al colectivo que comenzó a agolparse en la puerta principal, la cual estalló dado que era de vidrio.

Muchos clientes cayeron al piso en medio de la estampida humana, por lo que resultaron con aporreos. Otros presentaron signos de asfixia. Empleados del local también sufrieron serias heridas cortantes, al ser alcanzados por los vidrios que quedaron esparcidos en el suelo, al igual que gran cantidad de productos alimenticios y artículos de limpieza, luego que algunos clientes intentaran saquear. Un testigo del incidente contó que unos consumidores cargaron con paquetes de toallas sanitarias y champú. Así mismo las cajas registradoras fueron lanzadas al suelo por desadaptados.

“Cuando se presentó la trifulca, más de 600 personas estaban dentro del establecimiento”, detalló un trabajador del lugar, acotando que este viernes estaban vendiendo dos pollos, un paquete de toallas sanitarias y dos champús.

Funcionarios de la Guardia Nacional, Policía Municipal, Protección Civil y Bomberos de Miranda se presentaron en el sitio para controlar el desorden y atender a los lesionados. Posteriormente, el abasto Bicentenario cerró sus puertas al público.

El pasado 8 de noviembre, un hecho similar se suscitó en este establecimiento comercial, luego que numerosas personas tumbaran el portón principal en un intento desesperado por comprar.