Trump y Venezuela, por Tony Bianchi - Runrun
Tony Bianchi Abr 10, 2019 | Actualizado hace 5 años
Trump y Venezuela, por Tony  Bianchi

LAS RELACIONES ENTRE ESTADOS UNIDOS (principalmente de su presidente Donald Trump) y Venezuela giran alrededor de cuatro aspectos fundamentales: (a) La crisis fronteriza con México y la inmigración centro americana, (b) La importancia del triángulo Cuba-Venezuela-Nicaragua, (c) Las próximas elecciones presidenciales de los Estados Unidos y (d) El potencial de negocios que representaría la recuperación industrial y económica de Venezuela bajo un gobierno democrático.

La crisis fronteriza con México y la inmigración centro americana no tiene una fácil solución tal como la erección de un gran muro o cerca para impedir o disuadir la inmigración clandestina como profesa Trump.

La crisis es causada por la gran cantidad de prófugos y no tan prófugos centroamericanos que atraviesan territorio mexicano y se vuelcan a la frontera con Estados Unidos para solicitar acceso y buscar un mejor futuro.

Aparte de un 20 % que intenta penetrar ilegalmente, la cantidad de prófugos es tan grande que los puestos de frontera estadounidenses están colapsados y no pueden procesar la cantidad de aspirantes emigrantes que hacen larguísimas colas para obtener algunas de las limitadas visas que se están otorgando.

Los prófugos se acumulan como verdaderos gitanos cerca de las fronteras en campamentos donde hace falta luz, agua y servicios higiénicos y sobreviven a duras penas esperando turno para presentar sus solicitudes de entrada.

Pero lo peor es la discriminación y algunas de las drásticas medidas implementadas por las autoridades fronterizas que siguen las estrictas instrucciones de Washington, tales como la separación de niños de los padres y esposas de los esposos que junto a la masa de prófugos en la frontera han convertido el problema de la inmigración en una crisis humanitaria.

 

El triángulo Cuba-Venezuela-Nicaragua

No solamente en Washington, pero también en varias capitales de América Latina el “eje Castrista” de la Habana, Caracas y Managua está preocupando cada vez más a los países del hemisferio y la Organización de Estados Americanos (OEA).

Los rotundos fracasos de los gobiernos izquierdistas del eje no están convenciendo a los gobiernos democráticos del continente que el “peligro rojo” ha desaparecido o está en vía de extinción.

Luego de haber parado en seco los avances de Barak Obama en el intento de restablecer relaciones diplomáticas con la Habana, Trump está mas bien pensando en promover el fin de la dictadura cubana y empujar el establecimiento un gran continente americano totalmente democrático.

 

Las elecciones presidenciales norteamericanas del próximo año

Aunque pareciera temprano, al superar el escollo de la investigación de la interferencia rusa en las elecciones presidenciales pasadas (2016), Trump se está ya proyectando hacia las presidenciales del 2020 empezando a sumar el apoyo que podría obtener estado por estado y comunidad por comunidad.

Una de las cifras claves es la cantidad de 57 millones de latinos (cerca del 18% de la población) que viven los Estados Unidos que podrían apoyar a Trump y la importancia electoral que tiene el estado de la Florida que cuenta con un altísimo porcentaje de latinos.

Una encuesta de The Washington Post revela que en su gran mayoría los latinos condenan la política inmigratoria de Trump, quieren ver un esfuerzo mayor de parte de Washington para eliminar la dictadura castrista en Cuba y estaría muy contrariada con Trump si no ayuda a Venezuela  a reestablecer un gobierno democrático después de todas las amenazas y promesas que ha hecho.

Finalmente, no olvidemos el factor económico que representa la restructuración de la industria petrolera venezolana y el aprovechamiento de las empresas del arco minero que tiene a que ver con diamantes, oro, coltán, hierro y bauxita para elaborar aluminio.

Hace pocos días nuestro economista estrella Ricardo Hausmann, en una intervención muy acertada, indicó a la China que puede tener una gran participación en la recuperación económica venezolana insinuando que no tendría nada más que buscar con la presente dictadura de Maduro.

Washington y Trump saben todo esto.

* Tony Bianchi tiene varias décadas en el periodismo internacional para medios europeos y estadounidenses. Fue director del diario caraqueño The Daily Journal y por varios años en la década de los 60 fue el corresponsal de la agencia Reuters en Venezuela.