El ingenio del heredero ilegítimo, por Armando Martini Pietri - Runrun
El ingenio del heredero ilegítimo, por Armando Martini Pietri

ESTE LUNES LA CADENA DE RADIO Y TELEVISIÓN fastidió menos, fue un largo ejercicio de espejismo que hace recordar fantasías como el mundo mágico de Harry Potter, la isla donde un millonario sacó un mundo jurásico de un zancudo prehistórico o el universo multirracial de Star Wars.

Hay que reconocerlo, la imaginación del repudiado, y quien o quienes lo ayudan a escribir su discurso presumido y fantasioso ante la hipnotizada y obediente Asamblea Nacional Constituyente cubana, para ser difundido a quienes no tienen acceso a medios de comunicación diferentes a los que controla Conatel por el momento, -el régimen repudiado anuncia su intención de intervenir medios electrónicos-, es de enorme, aunque descalabrada dimensión.

Lo del sabotaje como causa del apagón en el Hospital Universitario, y que tras varios muertos habría sido “solventado” según el también solucionado expresidente, es una ilusión superada sólo por la comiquita digna de los Simpson sobre el arresto y liberación del Presidente (e) Juan Guaidó en versión de la cabeza facultativa de trastornos mentales, paladín de la comunicación y propaganda de esta tiranía desconocida por buena parte del mundo. Ubicar el desempleo en apenas 2% mientras empresas cierran o reducen nóminas; eliminar la pobreza -“cero por ciento”, dijo el bigote impertérrito, sin temblores de voz pero con flatulencias atravesadas, eructo agazapado y poco disimulado; consolidar un sistema educativo que abarque el 100% de la primaria y secundaria, producir 5 millones de barriles diarios de petróleo, entre otras prestidigitaciones, malabarismos y embustes desconsiderados, son señales claras de que puede ser el peor Presidente -sin olvidar algunas vergüenzas históricas- pero que en cambio muestra imaginación hirviente para describir un país inexistente y tener el descaro para ofrecerlo públicamente y sin recato.

Eso en lo concreto, porque en lo abstracto volvió con lo de “país potencia”, concepto que fascina a los chavistas excitados de legado y sin conocimientos de nada; lanzó la estulticia de “una nueva geopolítica nacional que permita garantizar la paz planetaria”, dejó de lado la verdad de la minería en manos rusas y militares para ofrecer “colaborar con la preservación del medio ambiente y de la vida en el mundo con el desarrollo de un modelo eco/amigable para la recuperación del ambiente” y sin parpadear e inmutarse anunció irresponsable “un nuevo sistema monetario -ante el terror de quienes lo veían y oían, ojos brotaron, escalofríos recorrieron cuerpos y gónadas subieron a los cuellos a velocidad supersónica- que incluirá tanto al petro como al -¡ojo pelado, suena a mayor y menos eficiente control!- ‘bolívar soberano protegido’  “.

Esa isla de la fantasía deshilachada que es la percepción del no reconocido, “nuestro país puede vivir bien con un barril a 40 dólares” (más o menos donde ha estado estos últimos meses de derrumbe de la economía, porque además la Pdvsa uniformada y con gorra roja cada día produce menos, de manera que, para cumplir la promesa, la petrolera tendría que multiplicar por cinco su producción actual mientras reconstruye lo que va quedando de la industria. Culpa de la oligarquía, extrema derecha, el imperio, sanciones y guerra económica, nunca de él sus generales cómplices.

Y, para no perder la costumbre, amenazó “a los que están detrás del dólar criminal”, aunque, sin precisar si se refería a los bolichicos, Gorrín, Globovisión, enchufados, Departamentos del Tesoro o de Justicia washingtonianos, Dólar Today, ladrones del tesoro venezolano, incapaces ministros o los comerciantes usureros de siempre. No podía dejar pasar la oportunidad y volvió a comprometerse a luchar contra la corrupción, batalla que conocemos –y que factores imperialistas conocen mejor, según él-, le envió un mensaje claro y pedagógico al Presidente encargado y reconocido Juan Guaidó, haciéndole ver que el pueblo venezolano está con el ilegitimo, obviando a propósito, con premeditación y alevosía el hecho irrefutable de que los ciudadanos en más de un 80% no lo reconocen y quieren cambio. 

Pero la realidad se impone sin ambigüedades ni vericuetos, se coloca de frente sin consideración e inmisericorde, los ciudadanos de principios éticos, valores morales y buenas costumbres están secuestrados por la caca politiquera, saturada de ignorantes corruptos actuando como imbéciles, embarrados hasta el empalago repugnante de egos, ahogados entre celos de ¿por qué él y yo no? Y entre sollozos exclamando “¡No es justo después de todo lo que hice!”, sedientos y hambrientos de envidia, atiborrados de grosera soberbia, disfrazados de falsedad y enmascarados de hipocresía, los lleva a actuar irresponsables y a cometer errores históricos enviando mensajes erráticos. Y regüeldos, la política mal hecha es indigesta.

Ante el desespero, opté por solicitar los servicios tranquilizantes de los siempre agradecidos y comprensivos sorbos color ambarino para ayudar a digerir tanta vergüenza y avasalladora fantasía mientras, pesar de los pesares, a lo lejos pero cerca por su fortaleza y convicción, se escuchaban gritos de coraje con esperanza y fe ciudadanas de ¡VAMOS VENEZUELA!

@ArmandoMartini