Ni tan histórico por Luis DE LION
Luis De Lión Ago 16, 2015 | Actualizado hace 9 años
Ni tan histórico por Luis DE LION

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El pasado viernes 14 de agosto, fue considerado, como histórico por la opinión internacional. No era para menos, por cuanto ese día el jefe de la diplomacia estadounidense, John Kerry, estuvo en La Habana, en la sede de la embajada de su país izando su bandera.
De esa manera se ponía fin a 54 años de guerra fría, entre Cuba y los Estados Unidos.
Sin embargo, antes y ahora, el gran ausente sigue siendo el pueblo cubano. Una razón de sobra, para no esperar concesión alguna por parte de la tiranía cubana, en temas de libertades ciudadanas.
Este viernes, Granma, no le otorgó su primera plana al acto que tendría lugar en la sede habanera de la embajada de los EEUU. En su lugar el diario oficial prefirió dedicar sus titulares al encuentro de Morales, Maduro y Fidel Castro, con motivo del cumpleaños de éste último.
Así mismo, muchos periodistas de Miami, se quejaron, porque no fueron acreditados por el régimen cubano, para cubrir la ceremonia desde La Habana.
Por su parte el Departamento de Estado tampoco se esforzó mucho por otorgarle espacios a la disidencia cubana, dejando que el acto fuera eminentemente oficial.
Es cierto que era un acto entre «gobiernos» como señalara el propio Kerry justificándose. Pero es poco menos que escandaloso que en la nueva doctrina Obama, la disidencia cubana, tanto la de afuera, como la martirizada dentro de la isla, ha sido puesta completamente de lado.
La opinión internacional, no solo se queda, en lo histórico del acto en La Habana. Por añadidura, considera que es una manera de impulsar un cambio de régimen. Sin duda, un optimismo que tiene más que ver con el embeleso por el presidente Obama, que padecen algunos medios.
De tal manera que, la vedette, de éste histórico acercamiento están siendo los inversionistas, cuando se esperaba que ese papel, el de actor principal, lo encarnan los ciudadanos cubanos.
Del lado cubano, para nadie es un secreto, que el grueso de esos «inversionistas» son principalmente miembros de la familia Castro y militares.
Por último, en el aspecto estrictamente político, La Habana, sigue actuando a su antojo. Es así como en la víspera del acto «histórico», la provincia Venezuela, le concedió la libertad condicional a un militar chavista venido a menos. Sin duda, un gesto hacia Washington, pero que en el fondo, no tiene costo político alguno para Caracas.

@LDeLION