Todo por ver a Venezuela - Runrun
La Pizarra del DT Ene 20, 2019 | Actualizado hace 5 años
Todo por ver a Venezuela

@LaPizarraDelDT_

 

EN LA CONFERENCIA DE PRENSA, RAFAEL DUDAMEL, tras terminar el partido con victoria de Venezuela contra Chile respondió la segunda pregunta de la tanda con muchísimo orgullo, dejando entrever su posición con respecto a la situación que se vive en el país y la migración que se ha tenido, siendo Chile uno de los principales destinos para el pueblo venezolano.

Si bien se escuchó claramente durante el partido, en el público, cánticos referentes a Venezuela, los más de 10.000 asistentes se dividían entre camisetas rojas, blancas y vinotinto. Pudiendo oír un chi-chi-chi-le-le-le seguido de un “vamos Venezuela” en el mismo sector de la cancha y sin ningún tipo de delimitación.

Pero más sorprendente que la grata mezcla que se vio en el Estadio El Teniente fueron algunas condiciones en las que viajaron los venezolanos a ver a una categoría sub 20.

Si pudiese ser raro ver a chilenos y venezolanos conviviendo en un estadio a base de cánticos, era más raro ver el trajín a pasar por parte de dos jóvenes que viajaron por 5.000 pesos en un bus que te deja en medio de la autopista en el viaje entre Talca y Rancagua.

Público en el partido de la Vinotinto en Chile

A ver, para hacer la historia más clara. A las 2.30PM desde Talca, una ciudad de 220.000 habitantes, salió uno (de los tantos autobuses) vía Santiago de Chile. Ellos hacen parada en la carretera para dejar a los pasajeros en la zona sur de Rancagua. A unos 15 minutos caminando del estadio.

Entre la gente que viajaba en dicho autobús se encontraba un valenciano y un maracucho. Y solamente un ticket para el partido entre ambos, ya que el de la región zuliana no contaba con su pase al estadio. Al igual que decenas de personas, buscaban entrada. La diferencia es que él venía de hacer un sacrificio por tierra para ver si tenía la suerte de conseguir.

Las entradas son gratis, no obstante el chico valenciano compró la suya por 5.500 pesos (8 USD) a un compatriota que le sobraba. Y no fue el único caso. Aprovechando la alta demanda y poca oferta comenzó una venta informal a las afueras del estadio.

Como dato extra de ambos chicos, no tenían como devolverse el mismo día. El transporte entre ciudades en Chile suele funcionar hasta horas determinadas y cuando se viaja a ciudades o pueblos su comunicación nocturna es un poco más precaria. Por lo que su viaje era con ida, sin regreso. Todo para ver a Venezuela.

Otro caso fue el de una chica viajó sola desde Santiago y estuvo desde cinco horas antes del hotel de concentración de Venezuela a la espera de la posibilidad de conseguir una entrada el mismo día del partido. Logró su cometido y pudo ver la victoria venezolana desde dentro del estadio.

La hinchada venezolana en Chile

Pero no solo aficionados se vieron afectados. Periodistas que viven en Santiago bajaron a Rancagua para hacer cobertura del partido. Algunos de ellos no contaron con tantas facilidades en transporte y tuvieron que regresarse antes de la zona mixta post partido para poder agarrar de los últimos buses que te suben a Santiago. Otros optaron por pasar la noche en Rancagua. Y así…

Extrañamente, a pesar de las sendas victorias, la selección sub 20 ha logrado unir a Venezuela muy lejos de ella. Y lo extraño va por cuenta de la categoría y el tipo de torneo que es, donde poco marketing se le ha hecho y no cuenta con un peso significativo tan grande en la región.

Pero como comentó Rafael Dudamel, lejos, muy lejos de Venezuela, se sigue dejando el nombre del país en alto.