Cinco años de Monitor de Víctimas: punto de encuentro de voces silenciadas - Runrun
Cinco años de Monitor de Víctimas: punto de encuentro de voces silenciadas
El nuevo informe de la plataforma periodística que recoge estadísticas e historias de los homicidios que ocurren en Caracas, Lara, Táchira, Sucre y Zulia, presenta hipótesis analíticas sobre la transformación de las violencias que se han experimentado en los últimos años en el país
Además, pone la lupa sobre las ejecuciones extrajudiciales, el aumento de los feminicidios, las muertes por balas perdidas y las móviles que, porcentualmente, han cobrado mayor cantidad de víctimas con el paso de los años

@loremelendez

 

Ejecuciones extrajudiciales como constante. Hombres jóvenes que mueren baleados. Mujeres asesinadas dentro de sus hogares. Estos y otros hechos han sido expuestos por Monitor de Víctimas, que conmemora sus primeros cinco años con la publicación de un informe especial que analiza los datos recolectados por la plataforma entre mayo de 2017 y diciembre de 2022.

A lo largo de este lustro, Monitor de Víctimas se ha convertido en un punto de encuentro para las voces silenciadas, un espacio donde los datos se convierten en instrumentos de visibilidad y exigencia de justicia. 

A través de las estadísticas recopiladas, en el documento se establece el panorama general de las violencias en Caracas entre 2017 y 2022, se explora su dinámica territorial, se profundiza sobre los móviles más frecuentes y en crecimiento, y se presentan hipótesis analíticas sobre la transformación de las violencia que se han experimentado en los últimos años en Venezuela. 

Uno de los hallazgos que arroja la data de Monitor de Víctimas es que en 2018, 2019, 2020 y 2021, durante los meses en los que la cifra de homicidios superaba el promedio, también había mayor cantidad de operativos policiales y/o militares en distintos sectores de la ciudad, cuyos móviles fueron registrados como “ejecuciones” o “resistencia a la autoridad”. 

A lo largo del período estudiado, 22% de los casos fueron clasificados como ejecución, 19% se registró en la categoría “por determinar”, 17% a causa de robo y 15% por “resistencia a la autoridad». Si se juntan las dos categorías que implican violencia policial o acción de los cuerpos de seguridad del Estado, entonces la fuerza pública fue responsable de 37% de los homicidios ocurridos en Caracas.

La mayor parte de las víctimas de las ejecuciones extrajudiciales –1.171 de 1.182 – son hombres jóvenes. El intervalo de edad más afectado por este móvil va de 20 a 25 años.

Pese a que el informe destaca que la frecuencia de las muertes calificadas como “resistencia a la autoridad” ha disminuido en el tiempo (aunque aún se mantiene de forma significativa), se han incrementado aquellas asociadas a “violencia de género” y “riña o pelea”.  

El informe, además, identificó que de las más de 700 comunidades identificadas como escenarios de las violencias en Caracas, hay 26 en las que se concentraron más homicidios. 

El año 2017 fue especialmente mortal para el Barrio San Blas (Petare, municipio Sucre de Miranda), Misión Vivienda en Fuerte Tiuna y San Agustín (municipio Libertador del Distrito Capital); en 2018, se destacó Maca (Petare, municipio Sucre de Miranda), Los Jardines del Valle y Las Adjuntas (municipio Libertador del Distrito Capital); para 2019 destacaron la carretera Petare-Santa Lucía (Petare, municipio Sucre de Miranda) y El Paraíso (municipio Libertador del Distrito Capital); d) en 2020, destacó Santa Cruz del Este, José Félix Ribas (Petare, municipio Sucre de Miranda) y Coche; e) para el año 2021 llama la atención el Barrio El Carpintero (Petare, municipio Sucre de Miranda), Cota 905 y El Guarataro (municipio Libertador del Distrito Capital); y, f) resaltan Filas de Mariche (municipio Sucre de Miranda), Barrio José Félix Ribas (Petare, municipio Sucre) y Coche para 2022. 

 

Mujeres en la mira

A pesar de que 93% de las víctimas registradas son hombres, llama la atención que las muertes de mujeres han aumentado poco a poco: de representar el 5% del total de muertes en 2018 a ser el 8% en 2022. Aunque estadísticamente pudiera parecer un dato menor, el hecho contrasta con la disminución constante de los homicidios desde 2019. 

De acuerdo con Monitor de Víctimas, la mayoría de las mujeres muere por violencia de género (28%). Otras causas de muerte son robo (18%), bala perdida (10%), riña o pelea (10%), ejecuciones (3%) y otras (3%). El 19% de los casos fue registrado bajo la categoría “por deteminar” y 11% se encuentra sin información de la causa. 

Para ponderar la magnitud de estas muertes, se pueden ubicar estos datos en el contexto de la región latinoamericana. La tasa de mujeres asesinadas en Caracas es de 2,6 muertes por cien mil habitantes, mayor que la de Bogotá (2,2) y Ciudad de México (1,5), ciudades donde la violencia de género ha cobrado visibilidad y produce amplia movilización. 

Otro dato que genera alarma es el aumento de muerte de niñas y adolescentes. En 2020, durante la pandemia de COVID19, se incrementaron al igual que las de mujeres 26 a 30 años. Las causas de estas, según la data de Monitor de Víctimas, fueron violencia de género, riña o pelea, robo, y abuso o maltrato infantil. 

El lugar de ocurrencia de las muertes de mujeres también es diferente al de los hombres. “En general, entre 2017 y 2022, 70% de los homicidios ocurrieron en la vía pública y 23% en las viviendas; sin embargo, esta dinámica está influenciada por el género de la víctima, ya que, en el caso de las mujeres, el porcentaje de muertes ocurridas en el hogar aumentó hasta llegar a representar el 60% de los casos en 2022”, dice el informe.

 

Balas (NO TAN) perdidas en Caracas

El informe de Monitor de Víctimas también señala que, entre 2017 y 2022, hubo al menos 173 casos de muertes por balas perdidas en el Área Metropolitana de Caracas, lo que representa un 4% del total de casos. Al observar año a año las cifras, 2021 muestra el mayor porcentaje de muertes del período con un 8%. Las parroquias en donde se localizaron estos homicidios Petare, en el municipio Sucre del estado Miranda; y Sucre, La Vega, El Valle y El Paraíso, en el municipio Libertador del Distrito Capital. 46% de los afectados fueron personas entre 15 y 29 años y 81% fueron hombres.

“La comercialización y circulación de armas y municiones implican un riesgo latente que debería ser controlado y regulado desde el Estado. Las balas perdidas pueden alcanzar a cualquier persona, pero como tiende a ocurrir con las víctimas de la violencia armada, aquellos que son más vulnerables a sufrir una lesión o muerte por disparos, son personas que también son víctimas de factores estructurales como la desigualdad y la exclusión. Las lesiones y muertes por balas terminan profundizando las vulnerabilidades”, señala el documento. 

Desde 2017, Monitor de Víctimas comenzó a monitorear la violencia homicida en el Área Metropolitana de Caracas. A partir de ahí, se han añadido otros cuatro estados a nuestros registros: Lara (2020), Táchira (2021), Sucre (2022) y Zulia (2022). De esta forma, entre mayo de 2017 y diciembre de 2022, la plataforma ha logrado registrar un total de 5.556 muertes violentas en las entidades ya mencionadas. De estas, 2.061 (37%) han sido asesinatos por letalidad policial, el móvil de mayor frecuencia.