Presidencia archivos - Runrun

Presidencia

“Sí, quiero ser Presidente, he cometido errores y me he levantado”: Ocariz anunció su precandidatura
«He cometido errores, me he caído y me he levantado», dijo Ocariz 

 

Este domingo, 29 de enero, el exalcalde del municipio Sucre, Carlos Ocariz, afirmó que quiere alcanzar la presidencia del país en los comicios presidenciales previstos para el año 2024.

«¡Sí, yo quiero ser presidente! De Petare aprendí que no hay imposibles, que la creatividad es un arma frente a la adversidad. He dedicado mi vida a servir y desde esta gran escuela, pongo nombre para cambiar Venezuela!», afirmó el exalcalde a través de un video publicado en su cuenta en Twitter.

Carlos Prosperi (Acción Democrática), Delsa Solórzano (Encuentro Ciudadano), María Corina Machado (Vente Venezuela), Juan Pablo Guanipa (Primero Justicia), Juan Guaidó (Voluntad Popular), César Pérez Vivas (Concertación Ciudadana) y Darwin González (Fuerza Vecinal), son los principales nombres que figuran por la oposición para los comicios internos. 

Según refiere el portal web Poderopedia, Ocariz fue candidato de la MUD para las elecciones regionales 2017 por el estado Miranda y se desempeñó como alcalde del municipio Sucre del estado Miranda. Es miembro y fundador del partido Primero Justicia (PJ).

Desde 1996 hasta 1999 fue parte del equipo de trabajo del entonces gobernador de Miranda, Enrique Mendoza, como presidente-coordinador de la Política Social y en la Fundación de Desarrollo Social. En 1995 se desempeñó como consultor de programas sociales en el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), con sede en Washington, DC, Estados Unidos.

En el año 2000 obtuvo un escaño en la Asamblea Nacional (AN), por lo que se constituyó entonces, con 29 años, en el diputado más joven. Antes de ser alcalde, se postuló en 2004 para el mismo cargo, siendo derrotado por José Vicente Rangel Ávalos.

 
Debate presidencial en Colombia: Petro minimiza crisis en Venezuela y Gutiérrez lo confronta
Gustavo Petro y Federico Gutierrez debatieron sobre la situación de Venezuela, la crisis migratoria y la dependencia del petróleo

 

Este lunes, 23 de mayo, los candidatos a la presidencia de Colombia Gustavo Petro, Federico Gutiérrez y Sergio Fajardo protagonizaron un debate, organizado por la Revista Semana, previo a los comicios del 29 de mayo. 

La directora de Semana, Vicky Dávila, en un momento del debate, le preguntó a Gustavo Petro: “Sus críticos lo comparan con Hugo Chávez y dicen que lo que usted no va a hacer es lo mismo que dijo Chávez que no iba a hacer y que luego hizo”.

A lo que el candidato Petro respondió: “Es simple: Chávez y Maduro llevaron a Venezuela a depender del petróleo. ¿Yo estoy proponiendo que Colombia dependa del petróleo? Propongo que dependa de la agricultura, industria y el turismo sobre la base de una sociedad del conocimiento. Completamente diferente, radicalmente diferente. Quien llevó a Colombia a depender del petróleo, y quieren seguir manteniendo esa dependencia, son mis rivales políticos, unos en el gobierno, otros en campaña. Ellos sí se parecen a Chávez y Maduro”.

El régimen político-económico de Venezuela, es parecido al de Colombia, mataron a estudiantes por salir a protestar. Acá, también. Allá concentraron el poder político juntando parlamento, órganos de control y justicia en manos del presidente y acá también, la demostración es el alcalde de Medellín que ha sido destituido por un órgano de control. Y allá han destituido a gobernadores por órganos de control y de justicia ¿Cuál es la diferencia del régimen político venezolano y del colombiano, que allá vinieron dos millones de migrantes? De Colombia salieron seis millones de migrantes”, continuó Petro.

La respuestas de Fico Gutiérrez 

Al escuchar las declaraciones de Petro sobre Venezuela, el candidato Federico Gutiérrez expresó su rechazo y lo señaló de minimizar la crisis causada por el chavismo.

“Oiga, qué forma tan fácil de minimizar un problema tan grave como el de Venezuela: violación de derechos humanos, relación con grupos narcotraficantes, corrupción. Como si fuera simplemente un tema de modelo económico alrededor de hidrocarburos. Yo recuerdo que admiraba mucho ese modelo con el que acabaron con Venezuela. Acá hay dos millones de venezolanos aguantando hambre. Yo como colombiano y como presidente seré solidario y mantendré el estatus migratorio y vale la pena dar un debate sobre el tema del petróleo, esa sí que sería una idea absurda, la de acabar el petróleo al otro día. Representa 34% de las exportaciones del país (Colombia) 12% del presupuesto de inversión social, condenas a la gente de manera inmediata a la pobreza. Yo sí creo en la transición energética de manera responsable. Ese debate vale la pena darlo”, sostuvo.

Fico Gutiérrez finalizó insistiendo en que Petro admira el régimen de Nicolás Maduro y señaló su relación con Piedad Cordova, señalada de mantener relaciones con Álex Saab, acusado por los Estados Unidos de ser el testaferro de Nicolás Maduro. 

Trump en su despedida: Hicimos lo que vinimos a hacer y mucho más
Trump condenó nuevamente el asalto al Capitolio que ocurrió el pasado 6 de enero

El saliente presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, dio este martes su último discurso como mandatario norteamericano, donde agradeció a los miembros de su gabinete la participación dentro de su administración y resaltó los logros de su mandato.

“Compatriotas estadounidenses: Hace cuatro años, lanzamos un gran esfuerzo nacional para reconstruir nuestro país, renovar su espíritu y restaurar la lealtad de este gobierno a sus ciudadanos. En resumen, nos embarcamos en una misión para hacer que Estados Unidos vuelva a ser grande, para todos los estadounidenses”, expresó Trump en el mensaje grabado y publicado en la red social YouTube.

Asimismo, el mandatario agradeció al pueblo estadounidense por haber confiado en él, lo que calificó como “un privilegio”. “Ser su presidente ha sido un honor indescriptible. Gracias por este extraordinario privilegio. Y eso es lo que es: un gran privilegio y un gran honor”, señaló.

De la misma manera, el aún jefe de Estado manifestó sentirse orgulloso de ser el primer mandatario estadounidense “en décadas” en “no haber iniciado nuevas guerras”.

En el video de casi 20 minutos de duración Trump repasó los hitos de su administración, entre ellos la reducción de impuestos, el acuerdo comercial con Canadá y México, la construcción de más de 700 kilómetros de muro en la frontera con México, la muerte del líder del grupo terrorista ISIS, Abu Bakr Al Baghdadi, y del jefe de la fuerza Quds del regimen iráni, Qassem Soleimani, y los “Acuerdos Abraham” en Medio Oriente, entre otros.

“Todos los estadounidenses quedaron horrorizados por el asalto al Capitolio. La violencia política es un ataque sobre todo los que los estadounidenses defienden. No puede ser nunca tolerada”, señaló sobre los eventos del 6 de enero, cuando miles de seguidores de Trump irrumpieron en el edificio del Congreso, dejando un saldo de cinco muertos y decenas de heridos.

Tras el incidente, las cuentas de Trump en las diferentes redes sociales fueron vetadas, luego de que las compañías argumentaran que el presidente las había usado para arengar a sus seguidores para que actuaran con violencia, en una polémica medida que para muchos afecta la libertad de expresión.

Al respecto, Trump consideró que “sólo si nos olvidamos de quienes somos y cómo llegamos aquí es que podemos permitir la censura política y las listas negras en Estados Unidos”.

Donald Trump triunfó en las elecciones presidenciales de 2016 tras enfrentarse a la demócrata Hillary Clinton, y asumió su mandato el 20 de enero de 2017. Su victoria significó la vuelta al poder del Partido Republicano tras los ocho años del gobierno de Barack Obama y revitalizó al campo conservador en la política estadounidense.

“Hace cuatro años, vine a Washington como el único outsider verdadero en ganar la presidencia. No había pasado mi carrera como político, sino como constructor mirando horizontes abiertos e imaginando infinitas posibilidades. Me postulé para presidente porque sabía que había nuevas cumbres imponentes para Estados Unidos esperando ser escaladas. Sabía que el potencial de nuestra nación no tenía límites siempre y cuando pusiéramos a Estados Unidos en primer lugar”, expresó.

El mandatario aseguró que la dirección económica de EEUU se encontraba en el sitio correcto después de los acuerdos con Canadá, México y China; pero que la pandemia por coronavirus “los obligó a cambiar de vía”.

“Peleé por Estados Unidos y todo lo que representa, para que sea segura, fuerte, orgullosa y libre. Ahora, mientras me preparo para hacer el traspaso de mando a una nueva administración el miércoles al mediodía, quiero que sepan que el movimiento que fundamos está apenas comenzando”, indicó.

“Dejo este sitio majestuoso con un corazón leal y dichoso, un espíritu optimista y la confianza suprema en que lo mejor está por llegar para nuestro país y nuestros hijos. Gracias y adiós, Dios los bendiga y Dios bendiga a los Estados Unidos de América”, concluyó.

Joe Biden promete sanar y unificar a Estados Unidos
Prometió trabajar para ganarse la confianza de todos, incluso la de los que no le votaron

El presidente electo de Estados Unidos, Joe Biden, afirmó que el «pueblo ha hablado, nos han dado una victoria clara y convincente» en las elecciones celebradas el pasado martes y cuyo resultado se definió este sábado.

Biden destacó que hoy se ha podido apreciar un clima de esperanza y fe renovada en su país.

«Me comprometo ser un presidente que no busque dividir, sino unificar», dijo luego de ganar la contienda electoral al presidente, Donald Trump.

En su discurso de victoria en Wilmington (Delaware) opinó que Estados Unidos tiene una «oportunidad de derrotar la desesperanza», y pidió a los ciudadanos que se unan a él para conseguirlo y «decidir» que quieren cooperar en vez de pelear.

Prometió trabajar para ganarse la confianza de todos,  incluso la de los que no le votaron. 

Aseguró que durante su administración buscará que «Estados Unidos sea respetado en el mundo».

Definió a Estados Unidos como el país de las posibilidades, «siempre estamos viendo hacia adelante, un país más libre y más justo, un país que nunca se rinde».

Adelantó que el lunes nombrará un equipo de expertos que se encargarán de la situación generada por la pandemia.

Biden vence a Trump en Pensilvania y gana la presidencia de los Estados Unidos, según medios
Un factor clave de estas elecciones fue el voto por en las papeletas por correo, que rompió récord este año por las restricciones de la pandemia

Después de cuatro intensos días de conteo de votos, acusaciones de fraude y mucha intriga, Joe Biden superó los 270 votos electorales, lo que lo convierte en el nuevo presidente de los Estados Unidos.

Medios como el New York Times, en su transmisión en vivo de los votos en las elecciones, marca que Biden obtuvo la victoria en el estado de Pensilvania, que le dio 20 votos electorales para superar los 270.

Aunque este medio no ha marcado el estado de Arizona, otros como The Guardian y The Associated Press señalan que Biden fue ganador en ese territorio, adjudicándole los 11 votos electorales marcados en ese lugar, para un total de 284.

Otros medios de comunicación como CNN, NBC News y CBS News también anunciaron el triunfo del candidato demócrata antes de las 11H30 (16H30 GMT), luego de declararlo vencedor en Pensilvania.

El mapa de las elecciones se tiñó de azul en algunos estados en los que Donald Trump esperaba ganar, e incluso, llevaba la delantera en un principio, como Winsconsin, Míchigan y Pensilvania.

Sin embargo, todavía falta reportar el conteo de votos en los estados de Georgia, Alaska, Carolina del Norte y Nevada. Aun así, Biden ya obtuvo los votos necesarios para ganar la presidencia.

Durante todo este proceso, Trump hizo acusaciones contra Biden, asegurando desde la Casa Blanca el jueves que este intentaba “robar” las elecciones con los que consideró “votos ilegales”.

 

Un factor clave de estas elecciones fue el voto por en las papeletas por correo, que este año superaron su récord debido a las restricciones de movimiento por la pandemia de COVID-19.

Biden reacciona

A través de su cuenta de Twitter, Biden agradeció a los ciudadanos estadounidenses por haberlo elegido para dirigir a los Estados Unidos.

«El trabajo que tenemos por delante será duro, pero les prometo lo siguiente: seré un presidente para todos los estadounidenses, ya sea que voten por mí o no», señaló.

Sin embargo, este mismo sábado, 7 de noviembre, Trump insiste en haber ganado las elecciones. A través de Twitter escribió: «¡Gané esta elección, por mucho».

Juan Guaidó: Entre lo real y lo virtual

Un sol picante de mediodía, la indumentaria de la marcha, gorra, franela, jeans y una bandera o cartel exigiendo derechos. Las calles caraqueñas se llenaban de personas que se preguntaban qué haría Juan Guaidó, recién electo presidente de la Asamblea Nacional. Más de uno ya exigía que asumiera el cargo de presidente encargado de Venezuela, pero hasta ese momento el parlamentario de Voluntad Popular lo había evadido.

Al final del trayecto, una tarima esperaba, con un atril y una bandera, por quien minutos más tarde se juramentaría como presidente encargado  a partir de una interpretación del artículo 233 de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela y cumpliendo el deseo de millones de ciudadanos. La expectativa crecía, era tangible, se podía sentir con cada bocanada de aire inhalada hasta que la emoción traspasó los niveles de medición cuando levantó su mano. Los demás lo siguieron, como en un acto de fe y desde ese momento se empezó a repetir como un mantra el “cese de la usurpación, el gobierno de transición y las elecciones libres”.

A partir de ese 23 de enero, que celebra además el regreso a la democracia en el país, y con el apoyo del resto de los diputados del Parlamento, Juan Guaidó en su condición de presidente encargado ha tomado varias decisiones que han tenido traducción real, otras solo existen en el ámbito virtual y muchas leyes han quedado en una gaveta sin la aprobación del Ejecutivo Nacional, con Nicolás Maduro a la cabeza a pesar de que los 60 países más poderosos del mundo no lo reconocen.

Pero esto de tener dos encargados para un mismo poder no es nada nuevo en el país. De hecho desde hace dos años están en funcionamiento dos Poderes Legislativos, dos Tribunal Supremo de Justicia, dos Fiscales General y también ahora dos Procuradores. Pero esta bicefalia va en aumento porque Juan Guaidó desde la Asamblea Nacional, ha hecho nombramiento de representantes diplomáticos, pero al mismo tiempo en esos países hacen vida los embajadores que representan a Nicolás Maduro.

¿Dónde despacha Guaidó? Hace dos meses el hotel Paseo Las Mercedes, de Caracas, fue cerrado por el Seniat porque, al parecer, ahí se instaló y despachó Guaidó. Posteriormente, según publicó el periodista Anatoly Kurmanaev en el New York Times el 21 de mayo, “se ha estado moviendo entre casas seguras para evadir una posible captura” después de la rebelión fallida del 30A. Hasta el momento no se sienta en el despacho de Miraflores, aparece sin mucho aviso en encuentros -unos muy concurridos y otros no tanto- en varias ciudades del interior del país, todo mientras trata de lograr un quiebre dentro de la de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana, que aún parece ser fiel a Maduro.

En el exterior Guaidó cuenta con 38 representantes diplomáticos, aunque casi ninguno ejerce o tiene despacho a excepción de Carlos Vecchio en Washington y María Faría en Costa Rica. También se hizo con el manejo de Citgo en Estados Unidos y se empeñó en la entrada de la ayuda humanitaria con donativos en su mayoría provenientes de EEUU. También creó el Centro de Comunicación Nacional, una suerte de ministerio de Comunicaciones que, por ahora, es solo una cuenta de Twitter y su representante, Alberto Ravell, vive fuera de Venezuela.

Así que es posible preguntarse si Guaidó realmente ejerce.

Hay opiniones encontradas. Para la analista político Carmen Beatriz Fernández la presidencia del parlamentario no es virtual ni simbólica, en efecto ejerce aunque sea con acciones desde el exterior. Parte del hecho, además, de que cuenta con la legitimidad de origen de la Asamblea Nacional y que se la transfirió a él. “No es un líder popular por su carisma, lo es porque, en un país con instituciones ‘demolidas’, el Parlamento cuenta con legitimidad de origen”.

De igual forma el politólogo Luis Salamanca apoya esta tesis y agrega que Guaidó tiene legitimidad por cumplir con la legalidad, al haber sido electo como diputado en las elecciones de diciembre de 2015.

El hecho de ser elegido como diputado le da la base para convertirse en el presidente del Parlamento y de lanzar “una operación” política para cuestionar la legitimidad de origen de Nicolás Maduro, que ganó unas elecciones cuestionadas el 20 de mayo de 2018 y se juramentó para seis años más de presidencia el 10 de enero de 2019. “Ese cuestionamiento es completamente fundamentado en el sentido de que Maduro maniobró con las instituciones para hacer unas elecciones en las que él no pudiera perder”.

A eso, le suma la legitimidad política porque la gente lo apoya y “pasa a representar las aspiraciones nacionales de, por lo menos, el 80% del país”, según Salamanca y el hecho de que cuenta con el apoyo de 50 países y ha podido emprender algunas acciones en el plano financiero en Estados Unidos.

Este apoyo internacional también es reconocido por el periodista e investigador Andrés Cañizalez, pero hace la salvedad de que Juan Guaidó tiene, incluso como presidente de la Asamblea Nacional, “un poder netamente declarativo, un poder simbólico. El poder real lo sigue teniendo Nicolás Maduro y su entorno”.

Tanto Salamanca como Carmen Beatriz Fernández aseguran que se trata de una bicefalia del Estado. “A esa bicefalia nadie le hubiera augurado un mes, pero ya vamos para casi cinco meses. Tiene sentido hablar de una usurpación del cargo y no tienes el poder de la fuerza para que se desocupe esa usurpación. Así sería todo muy fácil, pero no tiene ese poder”, explica Fernández, que agrega que en un futuro a los venezolanos nos estudiarán como a unos locos.

Para Salamanca hay una dualidad del Estado, que debería, en condiciones normales, estar unificado y bajo un mismo objetivo. “En Venezuela no tenemos eso y se está viendo en decisiones tan importantes como, por ejemplo, lo que está pasando en Citgo. Allí se ve que esto no es meramente simbólico. A nivel internacional Guaidó ha logrado el reconocimiento y eso le ha dado efectividad”.

Salamanca se refiere a que Guaidó nombró una junta ad hoc tanto para Pdvsa Holding Inc y Citgo. Además, anunció el pago de intereses del bono Pdvsa 2020, contando con el respaldo del informe de la Comisión de Finanzas y Desarrollo Económico de la Asamblea Nacional.

También desde el Parlamento se aprobó el nombramiento de una junta directiva ad hoc de la empresa Monómeros, filial de Pequiven. En una nota de prensa se explicó que este activo que se encuentra en territorio colombiano representa más del 40% del mercado de fertilizantes en el país andino.

“Ahora todo esto que se está viendo en el plano financiero también es muy importante. No es un gobierno imaginario. Es un gobierno que tiene un poder real y no es el poder total, ni está sentado en el despacho de Miraflores, pero poder si tiene. Tampoco es para desmerecerlo”, agrega Carmen Beatriz Fernández.

Cañizalez agrega que Guaidó tiene la capacidad de poder convocar a la gente a la calle y salen masivamente. “En ese sentido creo que el poder sobre el pueblo lo tiene Guaidó. Pero el poder sobre el aparato del Estado, especialmente el represivo, lo tiene sin duda Maduro”.

 

La institucionalidad móvil

Para el también profesor universitario la figura de Juan Guaidó es simbólica y representa para los venezolanos la idea del cambio y no solamente del chavismo. “Me atrevo a pensar que lo que encarna Guaidó como figura es también un cambio generacional en la política venezolana y creo que eso es bien importante”.

El atril, la bandera y la vestimenta formal forman parte de la indumentaria de Juan Guaidó para presentarse como el presidente encargado de Venezuela. Como lo declaró para la entrevista que le hizo el periodista Luis Carlos Díaz en la revista mexicana GQ, “los símbolos del poder tienen peso cuando los llevas y representas (…) Hay quien cree que las formas son distancia y en realidad son respeto”.

Sobre esto la analista político Carmen Beatriz Fernández concuerda con el significado de estos símbolos. “En la comunicación política siempre el lenguaje simbólico es importante y potente”.

Fernández hace hincapié en que Guaidó no necesita reforzar su legitimidad con el uso del atril y la bandera en cada mitin que va, es un mensaje y símbolo de poder. Lo mismo con la vestimenta.

Sin embargo desde que se juramentó en la avenida Francisco de Miranda de Caracas con la presencia de miles de manifestantes, el presidente encargado lleva su atril y su bandera, para darle peso a la institucionalidad y al cargo que ejerce. Lo mismo con su vestimenta, que para la analista Carmen Beatriz Fernández se había perdido con el chavismo.

En esto también concuerda el investigador Andrés Cañizalez, que el uso de los símbolos patrios y el escudo es darle solemnidad al poder. “Todo eso forma parte de restituir los valores sobre los cuales estuvo sustentada la república y que fueron cambiados arbitrariamente”.

Igualmente sobre la vestimenta de Guaidó el profesor universitario destaca que ha tratado de cuidarse más y que “luego de 20 años donde se desacralizó toda esa solemnidad y donde se llevó a los extremos, incluso en términos de vestimenta, de los principales actores políticos del país”.

Salamanca expone también que estos elementos que utiliza el presidente de la Asamblea Nacional son para crear una simbología propia. “Transmite la idea del respeto a la colectividad y también el de un hombre de trabajo, porque una persona que se quita el saco, se arremanga la camisa y se afloja la corbata es una persona que transmite que trabaja”.

El politólogo destaca el hecho del 30 de abril, cuando Juan Guaidó junto al líder de Voluntad Popular, Leopoldo López y un grupo de militares se presentaron a las afueras de la base aérea La Carlota en un intento de alzamiento contra Maduro. “Es valorable que haya dado ese paso, de desafiar militarmente a un régimen cuya única base de sustento es la militar. Eso le dio, en la mentalidad colectiva, un mayor nivel de legitimidad porque le agrega una valentía sin igual”.

Guaidó no tiene un despacho presidencial, aunque el Gobierno decidió cerrar Paseo Las Mercedes a finales de marzo porque durante el apagón trabajó desde allí. La oficina del presidente de la Asamblea Nacional, se encuentra en el Palacio Federal Legislativo -en el centro de Caracas- donde también sesiona la Asamblea Nacional Constituyente y donde los grupos de colectivos cercanos a Maduro y la Guardia Nacional Bolivariana entorpecen el acceso a los diputados opositores con frecuencia. Pero apartando esto, Maduro es quien todavía se encuentra dentro del palacio de Miraflores, la sede legal del Ejecutivo venezolano. Aunque Guaidó aseguró en una concentración en Caracas -a principios de marzo- que cuando tengan “las fuerzas alineadas, vamos a ir a Miraflores a buscar mi oficina”.

Además la mayoría de sus nombrados “representantes diplomáticos”, excepto por Washington y Costa Rica, tampoco cuentan con una sede física. Muchos han optado por abrir una cuenta de Twitter e ir informando por allí de las acciones que se están llevando a cabo para el “cese de la usurpación, gobierno de transición y elecciones libres”.

Aunque hay países que han reconocido a estos representantes diplomáticos, estos no han podido hacer la toma completa de las embajadas o consulados, porque siguen en mano de los representantes de Maduro. Incluso está el caso de María Teresa Belandria, a quien le iban a entregar la credencial este próximo 4 de junio en Brasil, pero a última hora fue retirada la invitación por presiones militares de ese país, según reporta el diario Folha.

A pesar de esta información, el presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, si recibió a Belandria para reconocerla como embajadora del presidente encargado Juan Guaidó. Igualmente el parlamentario le agradeció a través de su cuenta de Twitter por el «compromiso» del Gobierno de Brasil con la «lucha de todos los venezolanos». 

 

De la Gaceta al Twitter

Con el argumento de un “desacato” todas las leyes y acuerdos aprobados por la Asamblea Nacional quedaban “ilegalizados” por sentencias que iban publicando los Magistrados del Tribunal Supremo de Justicia.

No mejoró la situación y con la juramentación de la presidencia encargada de Juan Guaidó se intensificó. Aunque se siguen discutiendo y aprobando temas sobre el país en el Parlamento, esto queda plasmado en el papel virtual de la página web de la Asamblea Nacional, la cuenta de Twitter del presidente y en el recién creado Centro de Comunicación Nacional, que solo funciona a través de la red social.

Desde que la oposición ganó la mayoría del Parlamento en 2015 ninguna de sus leyes o acuerdos ha aparecido impreso en la Gaceta Oficial. Mucho menos ahora los nombramientos de representantes diplomáticos, del Banco Interamericano de Desarrollo o las juntas directivas de las petroleras en el exterior.

Luis Salamanca aduce que esto se da a partir de la juramentación de Nicolás Maduro como presidente de la República y con el posterior cuestionamiento de este acto por parte de Guaidó y del Parlamento.

“El Estado se fracturó por dentro con dos presidentes. Ya estaba fracturado con dos Poderes Legislativos, porque Maduro hace un poder legislativo paralelo con la creación de la Constituyente, dos Fiscales, uno en el exilio y otro internamente, dos Tribunales Supremos de Justicia, uno interno y otro externo. Solamente falta el poder electoral”, agrega.

López Obrador asume la presidencia de México

ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOR juró hoy como el primer presidente de izquierda en la historia reciente de México, con la promesa de lograr cambios profundos en una sociedad que en los últimos años ha padecido una violencia y corrupción creciente.

La llegada de López Obrador al Ejecutivo marca un punto de inflexión en uno de los experimentos de apertura de mercado y privatización más radicales del mundo, destacó AP.
«Hoy no sólo inicia un nuevo gobierno, hoy inicia un cambio de régimen político», dijo el izquierdista de 65 años desde la tribuna de la Cámara de Diputados.
«A partir de ahora se iniciará una transformación pacífica y ordenada, pero al mismo tiempo profunda y radical porque se acabará con la corrupción y con la impunidad que impiden el renacimiento de México». 
Sin embargo, y tal como lo dijo tras ganar las elecciones de julio, el nuevo mandatario señaló que no piensa perseguir a los funcionarios de gobiernos anteriores porque no lo anima la «venganza» y que es «partidario del perdón y la indulgencia».
Esta posición le ha valido desde hace semanas diversas críticas de quienes piensan que eso abre paso a la impunidad que también ha dicho que combatirá.
López Obrador dijo, sin embargo, que si algún funcionario o familiar comete algún delito o incurre en prácticas de corrupción se les investigará y castigará.
Durante años, México tuvo una economía cerrada controlada por el Estado, pero desde la entrada en vigor del Acuerdo General sobre Aranceles y Comercio en 1986, la nación firmó más acuerdos de libre comercio que casi cualquier otro país y privatizó casi todos los sectores de su economía, a excepción del petróleo y la electricidad.
Ahora, sin embargo, López Obrador ofrece un discurso inaudito en el país desde la década de 1960: quiere construir más refinerías de petróleo estatales y anima a los mexicanos a «no comprar en el extranjero… vamos a producir en México lo que consumimos». 
Junto a un profundo sentido del nacionalismo y de su lugar en la historia, la toma de posesión de AMLO, como se le conoce popularmente, podría ser el traspaso de poder más local y populista en décadas.
Después de prestar juramento ante la Cámara de Diputados, López Obrador planea celebrar otra ceremonia el sábado más tarde en la principal plaza de la Ciudad de México, el Zócalo, donde un líder de las comunidades indígenas le entregará un símbolo tradicional de autoridad: un bastón ceremonial de madera.
El acto será una gran celebración que incluirá música tradicional. La ceremonia formal se realiza ante la presencia de varios líderes y presidentes de distintos países.
Antes de la llegada de López Obrador, legisladores conservadores colocaron una pancarta con la leyenda «Maduro no eres bienvenido» para protestar contra el presidente venezolano, uno de los invitados, y cuya llegada aún no estaba confirmada. 
El nuevo mandatario trasladará su oficina al Palacio Nacional, ubicado en uno de los costados del Zócalo, y seguirá viviendo en su casa en lugar de mudarse a la lujosa y custodiada residencia presidencial de Los Pinos, ubicada a nueve kilómetros al oeste.
Cerrada al público desde que se construyó en la década de 1935, la residencia ahora será utilizada para eventos públicos. Y el sábado, de hecho, fue por primera vez abierta al público.
Jesús Basilio, un comerciante de 55, fue uno de los primeros en llegar para entrar a la que llamó «la casa del pueblo». Es, dijo, «un lugar emblemático en el que por primera vez vamos a poder ingresar».
Gabriela Barrientos, una secretaria jubilada de 71 años, también llegó temprano.»Este día no se va a volver a repetir. Estive al pie del cañón y por fin llegó ese día», dijo una mujer que aseguró ser una seguidora desde hace mucho de López Obrador.
El traspaso del poder comenzó a medianoche, cuando los nuevos secretarios del gabinete prestaron juramento para ocupar puestos clave de seguridad, una tradición destinada a garantizar que siempre haya alguien al frente del Ejército, la Armada y de la Secretaría de Gobernación, la principal agencia de seguridad interna del país. 
 La nueva secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, dijo en una ceremonia posterior a la medianoche que el nuevo gobierno escuchará a todos, «a la mayoría y a las minorías, pues en democracia todas las opiniones pueden expresarse».
AMLO ganó relevancia como político de izquierda al liderar protestas contra la contaminación por hidrocarburos en su estado natal, Tabasco, pero no ha dado ningún indicio de si cancelará los contratos privados de prospección petrolera o si retirará al país de sus acuerdos de libre comercio con 44 naciones.
Aun así, está claro que el primer gran cambio de dirección tras tres décadas de políticas «neoliberales» y de libre mercado ocurrirá en su mandato de seis años. «¿Ha estado muy bien el neoliberalismo, hay que aplaudirle?», manifestó López Obrador en septiembre.
«¿Por qué no aceptan que fue un fracaso la política neoliberal, que sólo benefició a una pequeña minoría, empobreció a la mayoría del pueblo, produjo la inseguridad, la violencia?».
López Obrador logró una aplastante victoria en las elecciones del 1 de julio tras dos fracasadas candidaturas a la presidencia, y es el primer líder desde la Revolución Mexicana que se hizo un nombre como líder activista. 
Considera su llegada al poder como la «cuarta transformación» del país, luego de la independencia mexicana de España, las reformas liberales que acabaron con el dominio de la Iglesia en 1850 y la revolución (1910-1917). 
Su predecesor, Enrique Peña Nieto, deja el cargo con un índice de aprobación en mínimos históricos, que algunas encuestas sitúan entre el 20 y el 24%.
Peña Nieto no logró frenar el aumento de la delincuencia ni gestionar la llegada de miles de migrantes centroamericanos a la frontera con Estados Unidos, donde están acampados, lo que hace que esos dos asuntos sean los retos más inmediatos para la nueva presidencia.
¿Un Presidente en el exilio?, por Edward Rodríguez

 

Recuerdo que para finales del año 2002 vi una película colombiana que se llamaba “Bolívar soy yo”, la trama consistía en la contratación de un actor para personificar al Libertador en el comité de bienvenida a un grupo de mandatarios de las naciones que libertó Bolívar en su gesta independentista.  Aquel actor, que montando a caballo llega al acto, da unas palabras de recibimiento, todos quedan altamente impresionados con el histrionaje del personaje, pero se vuelve loco, sí, se vuelve loco pues se creyó que realmente era Simón Bolívar.

Secuestra a los Presidentes y huye del lugar llevándoselos de rehenes; es perseguido por todos los cuerpos de seguridad, recorre el río Magdalena en una embarcación y de repente  unos uniformados lo abordan. Los mandatarios se emocionan pensando que llegaron a rescatarlos, pero de pronto aquellos uniformados saludan con honores a “Bolívar”, evidentemente los rehenes quedan boca abierta al ver semejante disparate. Al final aquel grupo armado resultó ser la guerrilla de las Farc.

Relato esta historia pues así de disparatadas son las pretensiones de algunos dirigentes políticos venezolanos que están en el exterior que en un arranque de delirio quieren construir y establecer la figura de “Presidente de Venezuela en el exilio”, que goce del reconocimiento de países e instituciones, algo que si terminaría de ponerle la guinda a la maltrecha oposición.

Ya suenan nombres candidateables como los de Diego Arria y Antonio Ledezma, quienes al parecer andarían en esa jugada acompañados de banqueros prófugos y opositores radicales que ven desde Miami en algún café de Brickell la posibilidad de tumbar a Maduro o de formar un “gobierno venezolano” paralelo desde la ciudad norteamericana.

Si usted aún no ha escuchado este cuento pues váyase enterando que en esa jugada andan supuestamente esos personajes. Hoy en día nos guste o no, la institución que se mantiene en pie es la Asamblea Nacional, a mi criterio de bajo perfil para el tamaño del problema en el que andamos metidos.

La otra es el TSJ en el exilio nombrado por ese mismo Parlamento que se debate entre vivir o morir luego de la extraña aparición del nombre de Henrique Capriles en la sentencia contra Maduro; se especula  que las manos de quienes comulgan con ese semejante disparate de “Presidente en el exilio” están metidas en ese asunto contra Capriles. Por cierto, ya varios magistrados se pronunciaron al respecto.

¿Qué ganan los venezolanos con un Presidente en el exilio? ¿Quién lo nombra? ¿Cómo ganó esas elecciones? ¿Quiénes le darán el poder firmado de respaldo sin haber pasado por un sufragio?, son algunas de las preguntas que saltan a la cabeza al escuchar y ver que un grupo delirante comienza a transitar ese camino.

Mientras que Nicolás siga en el poder todo lo que se pelee del lado de la oposición es una botella vacía, sólo la UNIDAD verdadera de opositores  dentro y fuera del país permitirá que no se nos vuelvan locos los actores que aspiran ser “Presidente de Venezuela en el exilio”, sin duda esto es una bufonada y otro disparate más.

@edwardr74