Menos de uno de cada cuatro candidatos que presentará la Mesa de la Unidad Democrática en las elecciones parlamentarias de este año saldrá de primarias, lo que redujo las oportunidades de los dirigentes independientes y de partidos políticos pequeños de obtener una postulación.
“Los consensos pueden ser positivos, pero no lo son si los deciden solo tres o cuatro partidos en reuniones cerradas que no toman en cuenta a los liderazgos locales, como ha pasado”, denunció Carlos Julio Rojas, coordinador del Frente en Defensa del Norte de Caracas, grupo que la semana pasada se reunió con la MUD para pedir primarias en todo el Distrito Capital, al igual que hicieron para sus estados las organizaciones Aragua en Red y La Causa R, en Bolívar.
El problema de fondo es que el descontento se puede traducir en candidaturas disidentes que restarían votos cruciales a la MUD en contiendas cerradas, lo cual complica las opciones de ganar la mayoría simple de la Asamblea Nacional.
“Yo no me lanzaría aparte; comprendo que existe una dictadura de la polarización. Pero conozco gente irreverente que se va a postular por fuera. La responsabilidad es de los dirigentes de la unidad que no hacen primarias”, considera Rojas.
Esta semana surgió el primer caso de división. Julio Jiménez, mejor conocido como “Julio Coco”, anunció que presentará su nombre por fuera de la MUD para el circuito 3 del Distrito Capital, donde no habrá primarias.
Andrés Velásquez, diputado de La Causa R, advirtió: “Estamos considerando presentar una lista diferente a la de la MUD en Bolívar”. En Lara, donde no habrá primarias, podría pasar lo mismo. El diputado Eduardo Gómez Sigala (circuito 3) alertó que la gente no se quedará de brazos cruzados. “Hay dirigentes que tienen diferencias con sus partidos; gente de la sociedad civil que está en un proceso de valoración y podría proponer nombres alternativos. Si eso se plantea, estoy dispuesto a apoyar una fórmula”, dijo.
Si se mantienen los 87 circuitos que se armaron para las elecciones parlamentarias de 2010, 26 han mostrado una votación histórica reñida. Allí se eligen 35 diputados y todos deberían ser ganados por la oposición para aspirar a tener la mayoría simple en la Asamblea Nacional. 15 de esos candidatos serán escogidos en primarias y 20 por consenso.
En esos lugares, una pérdida de un punto porcentual por culpa de una disidencia pudiese ser la diferencia entre ganar o perder una curul a la Asamblea.
Desde que la sociedad venezolana se ha polarizado entre chavistas y opositores, los dos grupos han perdido posiciones de poder importantes por ir a elecciones con divisiones internas.
En las municipales de 2004 la oposición perdió 36 alcaldías por eso, número que en 2008 bajó a 28 y en 2013 a 14, conforme los acuerdos unitarios se perfeccionaron. En las parlamentarias de 2010 si la MUD y PPT, entonces con Henri Falcón, hubiesen ido como una solo opción hubiesen ganado 71 diputados en vez de 67.
Mayor dificultad. Los 39 candidatos de la MUD que consigan su nominación a través de primarias afrontarán un reto mayor que los 126 que serán escogidos por consenso. 92,3% de ellos competirán en circuitos con una tendencia histórica muy chavista, chavista o reñida, mientras que solo a 47,6% de los seleccionados por acuerdos les tocará ese tipo de lugares.
Las circunscripciones chavistas o muy chavistas son las que el oficialismo ha ganado por promedio de 10 puntos porcentuales o más en las últimas 5 elecciones, mientras que en las reñidas ningún bando supera los 10 puntos de ventaja.
El politólogo John Magdaleno considera que es estratégicamente correcto que la mayoría de las primarias se haga en espacios en los que la oposición no ha ganado.
Opina que las primarias son una precampaña que contribuye a aumentar el conocimiento sobre los candidatos en la elección, permiten introducir temas en la agenda pública antes de que se inicie la campaña oficial y ofrecen una legitimación sociopolítica que, “a juzgar por la experiencia del pasado”, aumenta el potencial electoral de los candidatos.
Desde que se aplican primarias (2010) se han cosechado 20 victorias en lugares chavistas: 16 de candidatos escogidos por esa vía y 4 de dirigentes seleccionados por consenso.
Por su parte, en los circuitos opositores y muy opositores, donde la MUD ha ganado con ventaja promedio de más de 10 puntos, los candidatos por consenso dominan el escenario. Solo 7,7% de los escogidos en primarias va a estos espacios (3 candidatos), contra 8,7% de los abanderados por acuerdos (8 postulados). Esto no cuenta los candidatos que están de primeros en las listas, elegidos por consenso y cuya victoria es también casi segura.
La respuesta. Hacer más internas en este momento es imposible. José Luis Cartaya, presidente de la comisión de primarias de la MUD, explicó que de acuerdo con el cronograma que se acordó con el CNE, ya venció el plazo para los cambios. Lo que puede ocurrir es que se eliminen algunas votaciones en otros lugares donde se llegue a acuerdos, lo que podría pasar en Caracas.
Pese a esto, la oposición argumenta que habrá más primarias que en 2010.
“Los consensos evitan que un partido, que puede ser muy fuerte en un estado o municipio, pueda llevarse todos los cargos. Además, hay espacios en los que se puede predecir quién ganará, por la votación tradicional, y es innecesaria la primaria. Se va a primarias cuando hay equilibrio entre varios partidos”, explicó.
Desacuerdo. Pese a que se sabe que 127 candidatos se elegirán por consenso, sus nombres aún no están definidos.
El diputado Andrés Velásquez (La Causa R) pregunta: “¿Qué arreglos se hicieron cuando ni siquiera hoy se conocen quiénes van a ser colocados en circuitos y listas protegidas por los partidos?”.
Rumores sobran y se infiere que en muchos casos se nombrará como candidatos a personas que no son del estado por el que competirán: paracaidistas.
En Lara no habrá ni una primaria. Eduardo Gómez Sigala, diputado independiente por el circuito 3 de esa entidad, dijo que aunque desea continuar, no lo apoyaron.
“El gobernador Henri Falcón quiere evitar un tropiezo electoral en primarias y permitió que personas que no son del estado, se dice que Juan José Molina (PJ-Zulia) y Alfonso Marquina (PJ-Miranda), puedan ser candidatos”, señaló.
El problema, indican fuentes políticas, es que hay partidos como Primero Justicia que han absorbido a muchos diputados y no encuentra dónde ponerlos. Tomás Guanipa, diputado de PJ de Zulia, podría ir por el municipio Sucre o por la lista de Caracas.
Por otra parte, Luis Florido, dirigente de Voluntad Popular en Caracas, podría ir por Lara.
Gómez Sigala advirtió que “los paracaidistas” pueden comprometer la victoria en espacios reñidos.
