billetes de 100 bolívares archivos - Runrun

billetes de 100 bolívares

Las 7 hipótesis sobre el billetazo
Tres meses después del caos que creó la abrupta salida de los billetes de 100 bolívares anunciada en diciembre pasado, todavía no está claro el porqué desde la Presidencia se tomó tal decisión. ¿Corralito? ¿Mafias malvadas? ¿Experimento fallido? Un abogado y un sociólogo hablan sobre las posibles causas y los efectos que produjo un fenómeno que atentó contra la única moneda en el mundo que no está protegida por ley alguna

 

@loremelendez

EL 11 DE DICIEMBRE DE 2016, el presidente Nicolás Maduro hizo el anuncio más polémico del año: en solo 72 horas, el billete de 100 bolívares, el de mayor denominación en el cono monetario para aquel entonces, saldría de circulación sin mayores explicaciones. La respuesta de la población se tradujo en colas kilométricas alrededor de los bancos y, cuando sólo faltaban horas para que acabara el plazo, la frustración se expresó en saqueos y protestas. Cuando la situación se volvió incontrolable, el primer mandatario informó que se daría dos semanas más para recolectar la moneda que hoy, tres meses después, sigue vigente. Y así permanecerá hasta este lunes 20 de marzo.

La conclusión a la que llegan Luis Cedeño, sociólogo y director de la ONG Paz Activa, y el economista Óscar Torrealba, es que, después de cinco prórrogas de la salida del billete de 100 bolívares, el venezolano dejó de creer en su propia moneda. Hubo un descontento generalizado, además de pérdidas económicas, que impactaron duramente en el Producto Interno Bruto y esto solo se sabrá cuando el Ejecutivo revele las cifras pendientes.

“Yo no creo en la improvisación del Gobierno porque en estos 18 años no la ha habido. Han demostrado que están muy bien organizados y han sido más eficientes que su competencia. No son torpes y toscos como muchos piensan”, advierte Torrealba. “Aquí hubo algo de experimento, algo de delito organizado, algo de ver qué sucedía si se tomaba esta medida. Todavía hay que ver si un grupo, dentro del mismo Gobierno, realmente quería vender el efectivo al Estado”, recalca Cedeño. Ambos presentan las hipótesis y efectos luego de esos días en los que hubo, de acuerdo con registros recabados por Runrun.es, al menos 566 saqueos, 393 detenidos, la sustitución de Nelson Merentes en la presidencia del Banco Central de Venezuela, y ninguna investigación dirigida hacia autores del caos.

Un origen incierto

1.- Grupos irregulares acaparan los billetes para revenderlos al Estado

Lea también: Encuentran en Paraguay 30 toneladas en billetes de bolívares venezolanos

“Te quedas con tu estafa en el exterior, compadre (…) ¡Hay que golpear las mafias!”. Con esas palabras, Maduro contestó a los supuestos grupos irregulares que habían sacado del país miles de millones de billetes de 100 bolívares. Sin embargo, nunca explicó cuál era “la estafa”, ni tampoco en qué consistía la supuesta “guerra financiera” que fraguaban contra la nación. ¿Cómo sacaron esos billetes? ¿Con qué intención se los llevaron?… Esas son las preguntas que al respecto se hace Cedeño. “Nuestra hipótesis es que esos grupos actuaron con la anuencia de alguna autoridad del Estado”, sentencia el director de Paz Activa, y advierte que el efectivo podría haber tenido dos usos: revenderlo al gobierno venezolano a un precio mucho menor del que cuesta imprimirlo (eso explicaría la estafa de la que habló Maduro), o utilizarlo para gastos transaccionales como pagar a quienes ejecutan el contrabando de bienes como la gasolina. Esta teoría ha estado respaldada por dos hechos recientes: la incautación de 25 toneladas de billetes venezolanos en la ciudad de Saltos de Guairá, en Paraguay, los cuales supuestamente se destinarían a comprar dólares en el mercado negro en Bolivia; y el hallazgo de 40 millones de bolívares en una favela de Rio de Janeiro que se canjearían por armas de fuego (fusiles AK 47) provenientes de Venezuela.

2.- Un pequeño corralito

Lea más: Hallaron 40 millones de bolívares escondidos en favela de Río de Janeiro

Torrealba pensó, durante los primeros días posteriores al billetazo, que las medidas implementadas por el Ejecutivo como expandir la base monetaria sin imprimir billetes; mantener desactualizado durante años el cono monetario, y limitar el acceso al efectivo a través de taquillas bancarias y cajeros automáticos, eran parte de un “corralito implícito” (la restricción gubernamental que impide que las personas puedan disponer del dinero que tienen en sus bancos) que perseguía como fin último la nacionalización de la banca. “Si el gobierno anunciaba la nacionalización, los venezolanos iban a tener expectativas negativas”, señala Torrealba, quien apunta que el riesgo de corrida bancaria siempre ha existido. La estatización de los bancos, de la que aún no se tienen señales, permitiría al Gobierno ejercer el control del sistema bancario y manipular el dinero a través de créditos.

bcv16dic

3.- Dinero electrónico

Más allá del efectivo que tenían las “mafias” citadas por Maduro, hay una tesis que explica por qué Venezuela se quedó sin billetes de 100. Según Torrealba, la forma ideada por el Ejecutivo para permitir que el dinero continuara su circulación en el mercado –sin que eso conllevara a una costosa impresión de billetes– fue la creación de dinero electrónico que se  otorgó a través de préstamos e instrumentos financieros de los bancos públicos. “Para el 29 de septiembre de 2016, el BCV amplió la base monetaria en 29 o 30 % y lo hizo creando dinero inorgánico en la banca. Lo que pasó es que el efecto de esa decisión se visualizó en noviembre, cuando la gente tenía plata y quería efectivo, pero no lo podía obtener”, afirma el economista. Tal hipótesis fue ratificada por el mismo presidente de la República durante la presentación de su Memoria y Cuenta de 2016 ante el Tribunal Supremo de Justicia. Allí admitió que su administración debió buscar una fórmula para redistribuir el efectivo disponible en el país entre los empleados públicos y jubilados, a quienes les acababa de pagar los aguinaldos y las utilidades.

4.- Un experimento social fallido

Para Torrealba y Cedeño, esta es la teoría más conspirativa de todas. “Lo que pasa es que este gobierno ha aplicado la misma operación varias veces: corren el rumor, ven cómo la gente reacciona y, luego, deciden si lo aplican o no”, dice el sociólogo, quien recuerda un par de casos: la implementación de horarios de apagones en Caracas, en 2010, y el revuelo creado alrededor de los supermercados y farmacias en 2016, cuando se dijo que estos reservarían sus productos básicos para venderlos a los miembros de los Comités Locales de Alimentación y Producción (CLAP). Los especialistas apuntan que probablemente se buscaba ver cómo actuaba la población al no tener efectivo para así lograr que se bancarizara. “Eso sería una utilización forzosa de la banca y podría estar relacionado con la emisión del Carnet de la Patria, que está enlazado con la banca pública. Por esta vía podrían controlar más el dinero y emitir más dinero inorgánico”, añadió Torrealba.

5.- El adiós a los controles

Lea también: Reportan que 3 bancos fueron saqueados en Guasdualito

Otra de las hipótesis comentada por los especialistas fue la posibilidad de que el billetazo hubiese sido concebido como una gran operación para lavar dinero. La economía se congeló a raíz de la falta de efectivo y esto, a su vez, hizo que tanto el Banco Central de Venezuela como los bancos privados, tuvieran que levantar los controles regulares que evitan la legitimación de capitales: se permitieron cuantiosos depósitos en efectivo y se aligeró el papeleo requerido para abrir cuentas bancarias. En Apure se desataron las reacciones más contundentes ante las irregularidades que se presentaron por este fenómeno. Una fuente de ese estado contó a Runrun.es que durante la primera jornada posterior al anuncio del billetazo, un camión cava cargado de notas de Bs. 100 llegó al Banco Bicentenario de la población fronteriza de El Nula para ser depositado. Los funcionarios de la entidad dejaron de atender al resto de los clientes para dedicarse a contar el cargamento que, supuestamente, provenía de la guerrilla colombiana. Dos días después, el episodio se repitió en las oficinas de los bancos públicos de Guasdualito. El resultado fue que los habitantes, enardecidos por no poder hacer sus transacciones, quemaron las agencias en ambos lugares.

guasdualito-apure-bancos

6.- ¿Dólar Today y billetazo?

Torrealba recuerda que, a finales de noviembre de 2016, el precio del dólar negro subió el doble en cuestión de días luego de haberse mantenido estable durante meses. Esa diferencia de solo 15 días entre esa subida abrupta y el fenómeno del billetazo le creó suspicacia. “Si bien la divisa de Dólar Today tiene un precio exagerado, especulativo y generado por elementos de mercado que no son representativos, es el que se toma como referencia al hacer una operación”, señala. “La única forma para lograr que baje el precio del dólar rápidamente, es tener a un río de gente que los quiera comprar en un mismo período de tiempo, y eso se impulsó con el billetazo”, agrega Torrealba, quien advierte que aún le falta por identificar qué puede estar detrás de ese canje. Aunque la disminución del precio de la divisa lo considera más un efecto que una teoría, subraya que en economía “no hay coincidencias sino causalidades”.

7.- Un freno (momentáneo) a la escasez

Esta tesis también puede ser considerada como un efecto intencionado del billetazo. Cedeño explica que diciembre pasado se preveía como un mes complejo porque se sabía que no había suficiente mercancía que pudiera ser intercambiada por todo el dinero que circularía a raíz del cobro de los aguinaldos y las utilidades. “La gente iba a tener dinero pero no en qué gastarlo. ¿Cómo se podía paralizar la economía para que la escasez no se sintiese tanto? Con el billetazo la gente no pudo vacacionar, no pudo comprar regalos, no pudo salir, y todo esto sucedió en el mes en que, históricamente, se registra la mayor inflación y la criminalidad”, dice el sociólogo. Pero si bien los índices de inseguridad y precios se mantuvieron bajos, estos reventaron en enero, justo cuando la gente tuvo la certeza de que podía gastar y mover sus billetes sin considerarlos una “papa caliente”.

Bolívar desprotegido

Venezuela es el único país del mundo donde los delitos relacionados con la moneda nacional no están establecidos en ley alguna. Cualquier falsificación o acaparamiento de billetes quedaría despenalizado porque el marco legal sobre este aspecto no existe. Así lo afirma el abogado y experto en Derecho Penal Económico, Fernando Fernández, quien rememora que desde 2003, cuando se derogó la Ley del Banco Central de Venezuela vigente hasta entonces, los artículos relacionados con estos crímenes fueron eliminados.

Fernández explica que, antes de 1992, estos delitos estaban dentro del articulado del Código Penal, pero fueron sacados de allí para ser incluidos en la ley del BCV que se publicó durante el segundo gobierno de Carlos Andrés Pérez. Con ese nuevo instrumento legal, según el experto, se buscaba fortalecer el monopolio del principal banco del país. «Ya no se iba a proteger a la moneda como especie sino a todo el género de la única moneda de Venezuela, que es el bolívar», sentencia. Ahí reposaron las penalidades hasta que comenzaron las reformas de leyes de la era Chávez. 

La Convención de Ginebra de 1929, elaborada para condenar la falsificación de la moneda, tampoco protege al bolívar. La razón es que este tratado internacional nunca fue suscrito por Venezuela, debido a que la creación del BCV fue muy posterior a esta fecha.

De esta manera, Venezuela queda como un Estado «corrumpente y criminógeno», sostiene Fernández, porque la moneda está a merced del contrabando. «La existencia misma del Estado es el poder coactivo de las leyes, porque para eso son», ratifica. Pero en el país, no hay normativa que vele por los billetes nacionales.

¿Por qué derogaron estos artículos? Fernández responde que lo que venía en camino era el fallido proyecto de moneda comunal que iba a tener el respaldo del BCV. Se trataba de un instrumento de trueque con un valor libre que podía ser fijado por las comunidades que lo usaran.

 

Año nuevo, billetes invisibles y mismo gobierno

billetess

 

Año nuevo, gabinete y billetes nuevos. Con esa consigna el Gobierno encara 2017. La ampliación del “cono monetario” fue confirmada por las autoridades a comienzos de diciembre y la circulación de los nuevos billetes fue prometida para el 15 de diciembre, su aparición quedó postergada para este año.

“He decidido sacar por decreto la extensión hasta el 20 de enero de la vigencia de los billetes de 100 bolívares (…) El país está buchón y no hay apuro, los tengo derrotados”, dijo Nicolás Maduro para justificar la extensión hasta el 20 de enero de la vigencia del billete de 100 bolívares. Pocos días antes, argumentando que había que “quemarle las manos a las mafias”, había dado un plazo de 72 horas para recoger los billetes de 100 bolívares, una decisión que generó caos e incertidumbre entre consumidores y comerciantes.

Un nuevo capítulo de la historia llegó el 9 de enero. Maduro anunció que será a partir del 16 de enero cuando entren en circulación los ansiados billetes. “Le he pedido a (Ramón) Lobo –nuevo ministro de Economía y Finanzas- y al BCV que a partir del lunes 16 de enero vaya entrando en circulación los nuevos billetes del cono monetario venezolano que han venido llegando a Venezuela a pesar del sabotaje”, expresó el mandatario.

Si en definitiva el plan se cumple, los venezolanos verán 6 nuevos billetes que van desde 500 hasta 20 mil bolívares y monedas de 10, 50 y 100 bolívares. Más allá de facilitar las transacciones diarias de la población, obligada en los últimos meses a cargar fajos de billetes de 100 para sus compras cotidianas, la medida por sí sola no resolverá los problemas y distorsiones que acumula la economía desde que Maduro asumió la presidencia en 2013.

“La economía venezolana arrastra una serie de desequilibrios que requieren medidas de política económica para poder ser corregidos. Hay cuatro grandes desequilibrios que hay que abordar: cambiario, inflación y escasez, déficit fiscal y déficit de cuenta corriente. Es necesario un plan coherente y exhaustivo para romper con la dinámica actual y que la economía retome una senda de crecimiento económico”, refiere un reporte que la firma Econométrica envió a sus clientes en diciembre.

La carrera indetenible de los precios

En la administración de Nicolás Maduro el costo de la vida no ha dejado de subir. Año tras año, el ritmo con el que suben los precios se ha disparado, erosionando el poder adquisitivo de la población. Cifras extraoficiales indican que en 2016 la inflación fue de 500%, una cifra muy por encima del 180,9% que reportó el Banco Central de Venezuela (BCV) para 2015, así como del 68,5% y 56,2% registrados en 2014 y 2013, respectivamente, de acuerdo al BCV.

El Gobierno culpa a los empresarios de causar la inflación como parte de la “guerra económica”, pero uno de los factores principales que explica el alza de precios está en la política fiscal dictada desde Miraflores. Sólo en el segundo semestre del año pasado el financiamiento del BCV a Pdvsa, asfixiada por la caída de sus ingresos y por el tipo de cambio de 10 bolívares por dólar, se disparó 330% al pasar de poco más de 1 billón de bolívares a 4,5 billones de bolívares. Ese auxilio financiero es empleado por Pdvsa para pagar misiones, proveedores y otros compromisos, lo que termina impactando el comportamiento de los precios en la economía al aumentar el dinero circulante y estimular la demanda de bienes en un contexto en el que la producción y la oferta de los mismos está contraída.

A falta de una política antiinflacionaria, la única respuesta a la que apela el Ejecutivo nacional es al aumento del salario mínimo. El 8 de enero Maduro anunció un nuevo ajuste salarial de 50%, trasladando el salario mínimo en 40.638 bolívares y el bono de alimentación en 63.720 bolívares, una medida insuficiente y contraproducente para la espiral inflacionaria que atraviesa la economía.

“Otro aumento de salario, cada vez con más frecuencia, síntoma de que el problema de inflación se agrava (…) Aumento de salarios vía decreto no sólo es garantía de mayor inflación, sino también de más desempleo y cierre de empresas”, expresó en Twitter el economista y director de Ecoanalítica, Asdrúbal Oliveros. El diputado e integrante de la comisión de finanzas de la Asamblea Nacional, José Guerra, también se expresó en la red social: “Un aumento salarial financiado con impresión de dinero por parte del BCV, inevitablemente produce más inflación. Ya eso está estudiado”.

Las estimaciones de organismos como el Fondo Monetario Internacional (FMI) apuntan a que al cierre de 2017 Venezuela podría tener una inflación de cuatro dígitos y llegar a superar la cifra de 1.500%.

Una “depresión” económica estancada

Economistas y firmas especializadas coinciden en que la economía venezolana atraviesa una “depresión”. Aunque aún los datos del comportamiento económico de 2016 no son oficiales, cifras extraoficiales indican que el Producto Interno Bruto (PIB) se contrajo 12% en el año que recién terminó, completando así tres años consecutivos de retroceso. Esa contracción del año pasado, sumada a las registradas en 2015 y 2014, supone que la economía venezolana ha perdido más de 20% en apenas tres años.

“El sector continúa en contracción”, aseveró en diciembre Juan Pablo Olalquiaga, presidente de la Confederación Venezolana de Industriales (Conindustria), al realizar un balance de lo ocurrido en 2016. El año pasado se agudizó la sequía de divisas para el sector privado, lo que impidió a las empresas realizar importaciones de materia prima y causó paralizaciones en fábricas de alimentos, medicamentos, repuestos y ensambladoras de vehículos, entre otras.

Además de la falta de divisas, los industriales también se enfrentan a controles de precios que obligan a vender por debajo de los costos de producción, la caída de la demanda, la crisis eléctrica o la escasez de insumos nacionales provenientes de empresas estatales como Sidor, Pequiven o las cementeras. El propio Maduro reconoció eso el pasado 9 de enero, hasta el punto de que pidió “reestructurar” esas empresas si fuera necesario.

“Hay que intervenir directamente todas las plantas que suministran insumos y materiales fundamentales para el desarrollo industrial del país (…) Por ejemplo, ¿Por qué la petroquímica, Pequiven, no suministra los insumos a las industrias? ¿Por qué? (…) Lo digo públicamente aquí, ¿Qué hace la directiva de Pequiven? El presidente de Pequiven, ¿Qué hace? Le he ordenado al Vicepresidente que lo cite inmediatamente a Miraflores”, se quejó el mandatario.

El año pasado ni el “decreto de emergencia económica”, o la política de los 15 “motores” o el Consejo Nacional de Economía Productiva resolvieron la crisis de la industria. De las datos de Conindustria se desprende que en los primeros meses de 2017 persistirán las dificultades, ya que al cierre del tercer trimestre del año pasado 17% de los industriales estaba sin inventario de insumos y otro 41% apenas tenía para trabajar un mes, de acuerdo a un sondeo realizado por esa organización. “El responsable es única y exclusivamente el Ejecutivo nacional”, aseveró Olalquiaga.

Locura cambiaria

El desconcierto cambiario ha caracterizado a la administración de Nicolás Maduro. En 2016, lejos de resolverse, el problema se agudizó al punto de que el tipo de cambio paralelo –su publicación está prohibida por ley- es 300 veces mayor al tipo de cambio preferencial de 10 bolívares por dólar y unas 5 veces mayor al tipo de cambio complementario del Dicom, que oscila los 680 bolívares por dólar.

La distorsión impacta en el bolsillo de los venezolanos. Cálculos de Ecoanalítica señalan que al cierre del tercer trimestre del año pasado, casi un 30% de las importaciones privadas se financiaron con dólares a tasa del mercado paralelo, impactando al alza el “tipo de cambio ponderado del consumidor”, que para ese momento ya rondaba los mil bolívares por dólar y en categorías como equipamiento del hogar, vestido y calzado, y bebidas alcohólicas y tabaco, entre otras, rondaba los 2 mil bolívares por dólar.

El Dicom, creado en 2016, no es el único ensayo de Maduro para intentar contener el auge del dólar en el mercado negro. El Sistema Margina de Divisas (Simadi), así como el Sistema Complementario de Administración de Divisas (Sicad) fueron otros de los intentos fallidos en materia cambiaria. El presidente de la República también ha desechado planes como el de la “unificación cambiaria” propuesto en 2014 por el entonces Vicepresidente del Área Económica, Rafael Ramírez, o recomendaciones como las formuladas el año pasado por los técnicos de la Unión Suramericana de Naciones (Unasur) –a pedido del propio Maduro- para establecer un solo tipo de cambio.

¿Funcionará el cambio de ministro?

Otras de las constantes de Maduro para enfrentar la crisis ha sido la de cambiar a sus ministros del área económica. El pasado 4 de enero anunció que Ramón Lobo será el ministro de Economía y Finanzas, y el Vicepresidente del Área Económica. “Un joven experto en materia económica, uno de los expertos más grandes que tenemos en temas financieros, presupuestarios”, dijo el jefe de Estado en relación al nuevo jefe de la economía.

Lobo es el cuarto Vicepresidente de economía que nombra Maduro en apenas doce meses y el séptimo desde que asumió la presidencia de la República en abril de 2013. Por ese cargo también pasaron Luis Salas, Miguel Pérez Abad Carlos Faría, Rodolfo Marco Torres, Rafael Ramírez y Nelson Merentes.

“Las expectativas no pueden ser buenas, lamentablemente hemos compartido con el diputado Lobo durante más de cinco años en la comisión de finanzas y sabemos de su desconocimiento sobre la materia, pero además, de su incondicionalidad a un proyecto económico y político que ha llevado a Venezuela a la peor crisis de toda nuestra historia republicana, así que la designación de Ramón Lobo es la ratificación de que los errores que ha cometido el Gobierno de Nicolás Maduro se van a seguir repitiendo este año”, alertó el diputado opositor y presidente de la comisión de finanzas de la Asamblea Nacional, Alfonso Marquina.

La verdad de la prórroga del billete de 100 bolívares en 12 tuits de @NelsonBocaranda

bcv16dic

 

Sin los de 100, venezolanos esperan ansiosos nuevas monedas y billetes

dinero09

Haciendo largas colas en los bancos para depositar a contrarreloj los moribundos billetes de 100 bolívares, los venezolanos esperaban este jueves con avidez la anunciada llegada de nuevas monedas y billetes de mayor denominación, pero por ahora solo vieron muestras en televisión.

La retirada intempestiva en solo tres días del billete de mayor valor y circulación del país, ordenada por el presidente Nicolás Maduro para acabar con supuestas «mafias» que lo acaparaban sobre todo en Colombia, ha sido un dolor de cabeza para la población, que teme quedarse sin efectivo.

Aunque el mandatario anunció que la salida de circulación del billete de 100 (0,15 dólares a la tasa oficial más alta) coincidiría este jueves con la progresiva entrada de un nuevo cono monetario, en Caracas no hubo ni rastro de las primeras monedas prometidas de 10, 50 y 100 bolívares ni tampoco de los billetes de 500.

Sin embargo, en la noche, Maduro mostró en televisión las nuevas monedas y billetes y, aunque celebró como un «éxito» el retiro de los de 100, decidió prorrogar hasta el domingo el cierre de fronteras con Colombia y Brasil.

El mandatario aseguró que las nuevas monedas y billetes de hasta 20.000 bolívares llegarán progresivamente al país a lo largo de esta semana y hasta la primera semana de enero, y también anunció que ya arribaron 76 millones de billetes de 50 bolívares, que deberían ser sustituidos por monedas próximamente.

También decidió reducir de 10 a 5 los días que tendrán los venezolanos para canjear los billetes de 100 que les queden en una treintena de taquillas del Banco Central de Venezuela (BCV), hasta el próximo martes.

Cerca de la medianoche, el ministro de Información y Comunicación, Ernesto Villegas, leyó un comunicado de Maduro prometiendo nuevas acciones en los próximos días para «blindar» la moneda.

Cajeros con billetes de 100

Este jueves, buena parte de los cajeros de la capital solo daban billetes de 100, aunque desde el lunes ya no eran aceptados en muchos comercios.

«¡No entiendo cuál es el chiste! Cuando retiras efectivo de los cajeros automáticos te da billetes de 100 y dentro de la agencia tampoco están los nuevos», decía con enojo Yarelis Carrero, una oficinista que a primera hora de la mañana fue a una sucursal del este de Caracas para depositar sus últimos billetes con el rostro del Libertador Simón Bolívar.

«Nadie ha visto los nuevos todavía, un transportista de valores que conozco me dijo que ellos tampoco los han visto ¡Puras mentiras!», manifestó Saúl Bernal en la fila del banco.

La inflación de tres dígitos que padece Venezuela obliga a los ciudadanos a cargar enormes fajos de billetes para comprar bienes, muchas veces escasos.

Se necesitan unos 50 de 100 bolívares para comprar una hamburguesa y un refresco en un puesto callejero.

En época prenavideña, los venezolanos rescatan ahora como oro los billetes de 10, 20 y 50 bolívares que antes rechazaban, mientras comerciantes y proveedores de servicios restringieron operaciones en efectivo.

Las gasolineras tenían largas colas este jueves. El analista Henkel García graficaba así la imagen: «Pensamiento simulado: Ajá, no he visto un billete de 500 y no tengo de 50. ¿Cómo echo gasolina mañana? Mejor echo hoy».

El dólar negro baja

Analistas económicos habían advertido que la entrega a los bancos del nuevo cono monetario sufrió retrasos que harían imposible responder a la demanda de transacciones en efectivo.

Si esas monedas y el billete de 500 no estuvieran listos en la cantidad que se requiere, se puede prever «una parálisis en los comercios pequeños y el comercio informal», dijo a la AFP Asdrúbal Oliveros, director de la consultora Ecoanalítica.

Hasta noviembre, según el BCV, el 77,15% del efectivo en Venezuela circulaba en la denominación de 100.

Entretanto, el llamado dólar paralelo que muchos empresarios se ven obligados a usar por un férreo control de cambio bajó vertiginosamente este jueves.

El gobierno atribuye esa caída al retiro del billete de 100 y al cierre de las fronteras para evitar el reingreso de billetes supuestamente acaparados.

En su principal referente, la web Dolar Today, la cotización del dólar pasó en una semana de 4.200 bolívares a los 2.480 hacia las 20H00 GMT del viernes. Oliveros tiene otra explicación.

«El mercado financiero está conmocionado porque lo único que está haciendo ahora es retirar el billete de 100. Y en el mercado paralelo no hay compradores, ni hay vendedores, nadie se está atreviendo a movilizar grandes cantidades sospechosas so pena de castigo. Una vez que eso se normalice, se va a ver la reacción del tipo de cambio», estima el analista.

Largas filas, bolsos llenos: la urgente y compleja tarea de deshacerse de los billetes de 100 bolívares

cola-banco

Es sorprendente la cantidad de billetes que cabe en una pequeña mochila vieja.

Uno, dos, tres, cuatro… Parece que no tiene fondo la mochila de Álex, de la que saca varios fajos de billetes de 100 bolívares.

Son las 10 de la mañana del primer día en el que los venezolanos pueden cambiar o depositar en sus cuentas bancarias los billetes de 100 de los que disponen. El que de momento sigue siendo el papel de mayor denominación, el más habitual y usado, dejará de circular el viernes.

Por eso Álex mete de nuevo en la mochila los paquetitos de billetes color marrón. Por la tarde, dice, los llevará al banco.

«Ahora hay que salir de ellos lo más rápido posible», le dice a BBC Mundo.

No parece, sin embargo, que tenga prisa. Álex regenta un abasto, un pequeño y destartalado mercado en el barrio de San Martín, en el oeste de la capital venezolana, Caracas.

_92960996_foto1

Foto: BBC Mundo

Vende snacks, pasta de dientes, huevos y cigarrillos por unidades. Y cervezas. Muy frías. Todo se paga en efectivo.

«Sólo tenemos punto (electrónico para el pago con tarjetas) los fines de semana porque nos lo alquilan. Los días de semana, sólo efectivo», afirma.

Este martes aceptaba los billetes de 100 bolívares. El miércoles, sin embargo, piensa cerrar. Espera que el jueves ya estén en la calle algunas de las nuevas monedas y billetes de mayor denominación, que alcanzarán hasta los 20.000 bolívares.

Álex no parece apurado. Queda tiempo. A partir del viernes, aún los podrá cambiar durante 10 días.

Muchos ciudadanos mostraron este martes más premura por deshacerse de unos billetes que suponen el 48% del papel moneda circulante y que el gobierno ha decidido poner fecha de caducidad.

Filas más largas

El objetivo es, según el gobierno, combatir las mafias que buscan dejar sin efectivo el país. Es lo que el Ejecutivo de Nicolás Maduro llama un «golpe financiero».

_92960999_afpcolas

Foto: AFP

Las filas este martes ante los bancos en Caracas eran más largas de lo habitual. Y así se espera que sea en los próximos días.

«Yo no vengo a cambiar billetes, pero hay mucha más gente. Es un disparate», dice crítico un paciente señor que hace fila desde mucho antes que abra el banco.

«Yo hago todo por Internet. Si no, no hay manera de manejar tanto billete», dice una señora que ronda los 60 años.
Hace fila pero por otro trámite y con sus palabras refleja el uso habitual en Caracas del pago con tarjeta o por transferencia bancaria.

A ello obliga la alta inflación, la mayor del mundo según muchos analistas, que hace que hasta para la más mínima transacción se requiera una buena cantidad de billetes.

_92960997_afpcolas3

Foto: AFP

Y es que el papel de 100 apenas tiene un valor de US$0,15 o de US$0,02, de acuerdo al cambio en el mercado paralelo.

Recelosas, muchas personas se negaron a hablar y a mostrar lo que portaban en mochilas o bolsas de plástico oscuras.

Cargar con bultos de billetes, sin embargo, no quiere decir que se tenga una fortuna. Unos 16.000 bolívares, el límite diario en un cajero automático en una entidad bancaria, equivale a apenas US$4 en el mercado paralelo y suponen 160 billetes de 100.

Sigue leyendo esta nota de Daniel García Marco en BBC Mundo

Capriles sugirió prórroga para canje de billetes de Bs. 100

henriquecaprilesrandonski2

El gobernador del estado Miranda, Henrique Capriles, indicó este lunes que “lo más responsable” que puede hacer el Gobierno es dar una prórroga para que la gente pueda cambiar los billetes de 100 bolívares, que serán sacados de circulación en los próximos días.

“Estamos en la época donde hay un poco más de movimiento en la economía, a pesar de lo golpeada que está. Eso lo haría cualquier gobierno responsable del mundo para que esto no genere ningún tipo de traumas. Recordemos que gran parte de la población maneja efectivo y no tarjeta”, dijo Capriles en una nota de prensa.

Capriles criticó la decisión de retirar estos billetes, que actualmente representan la mayor denominación (un dólar equivale en Venezuela a 670 bolívares).

Dijo que “es mentira” que los billetes se los lleven a Colombia y que, al igual que con el cierre de la frontera entre ambos países, esta medida no resolverá la crisis económica de la nación.

Para el opositor, el principal problema económico del país es la inflación y acusó al Gobierno de no hacer “nada” para arreglarlo.

“Destruyeron la moneda y ahora celebran el retiro de un billete. Secuestraron el (referendo) revocatorio (presidencial) que era para conseguir un cambio y ahora hacen más presión en la economía. Pareciera que la intención fuese amargarle la vida a los venezolanos”, señaló.

Héctor Rodríguez: Ningún venezolano de bien va a perder su dinero

Hector-Rodriguez-RR (1)

Héctor Rodríguez, diputado y dirigente del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), respaldó la medida ordenada por el presidente Nicolás Maduro de sacar de circulación los billetes de 100 bolívares y aseguró que la banca está preparada para responder ante esta modificación.

Señaló que la población no debe preocuparse “por perder su dinero” ante la salida del billete de 100.

«La decisión está muy bien tomada. Tienen 72 horas, luego un conjunto de días hábiles para depositarlos en todos los bancos de Venezuela. Por lo tanto, todo aquel individuo o aquel venezolano que legalmente tiene un grupo de billetes o carga efectivo, puede ir a depositarlo en su cuenta y ser cambiados a los billetes de otra denominación que ya existen o a los nuevos billetes que llegarán o para utilizarlos a través del dinero electrónico», aclaró.

El parlamentario oficialista alertó que “grupos mafiosos ya están cayendo” tras el anuncio hecho por el jefe de Estado.

Marcha del 17

Rodríguez informó que la movilización convocada para este sábado 17 de diciembre tendrá cuatro puntos de salida en la ciudad de Caracas con destino la avenida Bolívar.

Detalló que los cuatro puntos serán: Plaza Brión de Chacaíto, los alrededores del Instituto Nacional de Capacitación y Educación Socialista (Inces) de la avenida Nueva Granada, la avenida Panteón y La Rinconada, desde donde saldrá la fuerza motorizada.

El 17 de diciembre se cumplen 33 años de juramento de liberar y defender a la patria venezolana ante el histórico Samán de Güere, en el estado Aragua, proclamado en 1982 por el entonces capitán del Ejército Hugo Chávez, junto a un grupo de oficiales descontentos por la descomposición social del momento producto de la IV República.

José Alejandro Urdaneta para La Verdad

Maduro anunció que billetes de Bs 100 podrán ser canjeados en bancos privados

NicolasMaduro

El presidente de la República, Nicolás Maduro, aseguró que los ciudadanos podrán realizar el canje de billetes de Bs 100 en la banca privada, así como en la pública, durante una cadena nacional.

Después de que el pasado domingo el mandatario haya ordenado sacar de circulación el billete de mayor denominación en el país, Maduro otorgó un lapso de 72 horas después de la publicación del Decreto de Emergencia Económica para que los venezolanos acudieran a la banca pública y al Banco Central de Venezuela para que declararan y canjearan los billetes de Bs 100.

Previamente, la banca privada solamente estaba autorizada a recibir los depósitos de billetes de esta denominación, mas no podía canjearlos por billetes de otra denominación.

Por otro lado, después de las 72 horas establecidas por el presidente, los venezolanos podrán acudir a las taquillas que el BCV disponga para canjear el resto de los billetes de Bs 100 que aún posean.