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Remigio Ceballos advierte sobre “sanciones penales” a quienes perturben la Serie del Caribe
Ceballos informó que más de 5.000 agentes de distintos cuerpos policiales serán desplegados «para garantizar la seguridad integral, la vida y la paz en cada espacio»

 

Este lunes, 30 de enero, el ministro de Interior y Justicia de Venezuela, Remigio Ceballos, advirtió que se aplicarán «sanciones penales» a quienes perturben el desarrollo de la Serie del Caribe 2023, que se disputará en el país entre el 2 y el 10 de febrero.

«Recordamos a nuestro pueblo que va a disfrutar en los estadios mantener una actitud deportiva, pues el incumplimiento de las normas de convivencia acarreará sanciones penales», indicó el funcionario a través de Twitter, sin ofrecer detalles sobre el alcance de los castigos que prevén implementar.

Explicó que más de 5.000 agentes de distintos cuerpos policiales serán desplegados «para garantizar la seguridad integral, la vida y la paz en cada espacio», especialmente en los estadios Monumental Simón Bolívar, de Caracas, y Jorge Luis García Carneiro, del estado La Guaira, donde se disputarán los partidos.

Este operativo, que será continuo hasta el final del campeonato, busca «mantener la protección de la fanaticada», tanto local como visitante, así como de los jugadores y el equipo técnico, subrayó Ceballos.

Por primera vez en la historia del torneo, participarán ocho equipos: Venezuela, República Dominicana, Puerto Rico, México, Cuba, Curazao, Panamá y Colombia, que ganó la última edición, en Santo Domingo, gracias a cinco victorias de los Caimanes de Barranquilla.

El representante de Venezuela en la contienda todavía no se había definido hasta el 30 de enero, fecha en la que los Leones del Caracas y Tiburones de La Guaira disputarían el sexto juego de la final con los Leones arriba en la serie.

*Con información de EFE 

Cabrera es el primer venezolano en alcanzar los 500 jonrones en las Grandes Ligas
El venezolano intentará ahora convertirse en el primer bateador que llega a los 500 cuadrangulares y 3.000 hits en la misma campaña

 

Miguel Cabrera se convirtió en el 28vo pelotero en las Grandes Ligas que dispara 500 jonrones al alcanzar el hito en el sexto inning del juego de sus Tigres de Detroit ante los Azulejos de Toronto.

El venezolano de 38 años conectó un lanzamiento en cuenta de 1-1 del zurdo Steven Matz, depositando la bola sobre la pizarra en el jardín derecho-central. El cuadrangular empató 1-1 el juego.

Los aficionados en el estadio Rogers Centre se pusieron de pie para ovacionar a Cabrera al recorrer las bases. El toletero tuvo que salir de la cueva detrás de la primera base para recibir otra ovación, quitándose el casco para saludar al público.

Cabrera, quien completó la Triple Corona y ganó el primero de premios al Jugador Más Valioso en 2012, es el primer venezolano que alcanza los 500 jonrones. Ahora intenta convertirse en el primer bateador que llega a los 500 cuadrangulares y 3.000 hits en la misma campaña.

Su jonrón 500 fue el hit 2.955 de su carrera y podría alcanzar los 3.000 este mismo de año, de mantenerse sano y promedia un imparable por juego.

Apenas seis jugadores han alcanzado los 3.000 hits y 500 jonrones: Hank Aaron, Willie Mays, Rafael Palmeiro, Albert Pujols, Alex Rodríguez y Eddie Murray.

El asalto de Cabrera a esos trascendentales dígitos han sido un aliciente para un equipo de Detroit que finalmente da señales de salir de un remozamiento, rozando una marca con porcentaje de .500.

Cabrera es el sexto jugador nacido fuera de Estados Unidos con 500 jonrones. Se une a los dominicanos Pujols, Sammy Sosa, Manny Ramírez y David Ortiz, además del cubano Palmeiro. Ortiz había sido el último en lograrlo en 2015.

Cabrera también es el primer jugador que alcanza los 500 con el uniforme de los Tigres.

En 2012, Cabrera se convirtió en el primer jugador en 45 años que ganó la Triple Corona al liderar la liga en promedio de bateo, jonrones y carreras impulsadas.

Cuando Cabrera debutó en las mayores con los Marlins en 2003, tenía apenas 20 años de edad. Su aporte fue clave para conquistar el campeonato de la Serie Mundial ese año.

Los Tigres le adquirieron en un canje con los Marlins en 2007, un año después de perder la Serie Mundial ante San Luis, buscando su primer campeonato desde 1984.

Sin embargo, los Tigres nunca han podido a la cima con su productivo toletero. Perdieron el clásico de 2012 ante San Francisco y al final de la década emprendieron un remozamiento, tocando fondo con 310 derrotas entre 2017-19.

El bateo y la actitud jovial de Cabrera le convirtieron en ídolo en Detroit, pero su producción ha decaído significativamente en años recientes, víctima del paso del tiempo y las lesiones.

Mientras que otros astros de los Tigres, como el lanzador Justin Verlander, fue canjeados, el desplome de la cotización de Cabrera y su enorme salario complicaron poderle transferir a otro equipo. Su jonrón 500 fue el 13ro que conecta esta campaña, su mayor total desde 2017.

En la tabla histórica de jonroneros, Cabrera ha quedado justo detrás de Eddie Murray, un miembro del Salón de la Fama que acumuló 504.

Julio Castillo Sagarzazu May 18, 2021 | Actualizado hace 4 semanas
Mandela, beisbol y Venezuela

@juliocasagar

El año 1991, Nelson Mandela visitó Venezuela y estuvo un par de días en Valencia, donde recibió el doctorado honoris causa de nuestra alma mater, la Universidad de Carabobo. Como era natural, fue igualmente reconocido por el Gobierno de Carabobo con su más importante condecoración y fue huésped del gobernador, junto con su esposa Winnie.

Mandela fue alojado, como correspondía, en una suite del Hotel Intercontinental. El gobernador Henrique Salas Romer le ofreció allí un almuerzo y tuvo la gentileza de invitarme, junto con Asdrúbal González, secretario de Cultura y Jacobo Salas Romer, su hermano. De manera que fue un almuerzo íntimo e inolvidable.

En un momento antes del almuerzo, Mandela observaba, por una de las ventanas, los aledaños del hotel que está enclavado en una muy verde localidad de la ciudad. Enfrente hay un campo deportivo y, a los lejos, se observaban unos niños practicando béisbol. Me le acerqué y de inmediato me pidió que le explicara brevemente cómo se jugaba aquel deporte, que sin duda alguna está emparentado con el cricket que los británicos llevaron desde Inglaterra hasta su Sudáfrica natal.

Menuda tarea. Ya es difícil explicar en español cómo se juega al béisbol. Hacerlo en el idioma más hablado del mundo, que es el inglés mal hablado (así lo dice García Márquez), fue una tarea titánica.

Le advertí que se necesitan años para entender bien el juego, pero sobre todo para comprender sus reglas, la manera como se anotan las jugadas y sobre todo la estrategia. Político portentoso como era, me hizo detener en la estrategia. Le expliqué, y escuchó interesado, que a diferencia del fútbol y el básquet, que son deportes dinámicos con la pelota siempre en movimiento, el béisbol permite pausas y diálogo entre los jugadores y el mánager para ajustar las jugadas. También le interesó mucho la analogía del béisbol con el ajedrez.

No obstante, su sorpresa e interés aumentaron cuando le expliqué que en este deporte se permitía “robar” una base que no te había correspondido en la jugada con la que te embasaste. Para un venezolano que sabe jugar truco, un juego de cartas donde se pueda hacer trampas “legalmente”, es obviamente mucho más fácil entenderlo que para un sudafricano que hereda las flemáticas tradiciones deportivas de la Gran Bretaña. Aun así, traté de explicarle en qué consistía. Le divirtió mucho, al punto de que al despedirse me dijo: “Me encantó lo de robar bases”.

Es sobre el robo de base donde queremos detenernos. Luis Aparicio, nuestro Hall de la Fama, e insigne maestro de este arte peloteril, decía con muchísima propiedad: “la base no se le roba al cátcher, la base se le roba al pitcher”. En efecto, esta jugada es básicamente de sorpresa. Es una incidencia que el cátcher está viendo de frente, de manera que a él no es fácil sorprenderlo. El pitcher es quien da la espalda al corredor. Si este es hábil, se puede situar en la “zona ciega” del lanzador, puede estudiar sus movimientos y pegar el brinco inicial, que es el más importante. El cátcher puede tener buen brazo, y eso es una desventaja para el corredor; pero, cuando tira a la base, ya el 80 % de la jugada esta consumada.

En Venezuela, un país de jugadores de truco y de grandes robadores de base, no es fácil entender cómo nos ha sido complicado “cogerle el tiempo al pitcher”.

La oposición ha pasado mucho tiempo pendiente del cátcher y no del pitcher. Sus posiciones se han hecho extremadamente previsibles y, por ello, cada vez más, perdemos opciones para jugar por el banderín de la liga. Pareciera que nos conformamos con participar en la ronda eliminatoria y la inercia termina gobernándonos. Muchos jugadores se sienten bien en su “zona de confort”, bateando el average promedio de .250 y esperando la próxima temporada con la esperanza puesta de quedar en el roster.

En muchas notas anteriores, hemos hablado de la importancia de las emociones en la política y cómo tocar la tecla adecuada con políticas, imágenes, iniciativas, puede obrar el prodigio de volver a movilizar las conciencias.

Hoy día, lograr esto es capital para la oposición. Es necesario volver a lograr las fotos de la unidad; es necesario volver a poner en la agenda propuesta  políticas que nos devuelvan la iniciativa y el entusiasmo. No es verdad que, porque la gente esté en modo supervivencia, deje de luchar. De hecho, las grandes convulsiones sociales que han logrado trasformaciones de calado suelen lograrse en medio de penosas condiciones sociales y políticas.

La foto que hace falta

La foto que hace falta

Entonces, hay que dejar de ser tan previsibles y tan apostadores a que las cosas se arreglen solas. Maduro (lo hemos anotado muchas veces) es una ínfima minoría en el país. Su poder depende solo de la fuerza (que no es poco), pero se beneficia de su capacidad de dividirnos y de negociarnos al detal.

Hoy, estamos en un momento privilegiado de sorprenderlo. De regresar a un planteamiento audazmente unitario.

Es del domino público que nuestros aliados internacionales propician una nueva ronda de negociaciones. Vamos a aprender de los errores de antes y agudicemos la inteligencia, saliendo de allí y, entre nosotros, con un acuerdo que no se esperen. Que nos permita sorprenderlos, que los deje con la bola en la mano y a nosotros con un corredor más cercano al home, con la carrera del triunfo.

No es tan difícil, como para robar la base, solo hace falta decisión, jugar caribe, un manager con confianza en su corredor y un buen brinco cuando el pitcher inicie el “windup”.

Nota bene: al concluir estas líneas, Juan Guaidó ha comparecido ante los medios y ha abierto el camino para una jugada audaz. ¡Acompañémosle!

Las opiniones emitidas por los articulistas son de su entera responsabilidad. Y no comprometen la línea editorial de RunRun.es

Suspendidos 4 juegos de la LVBP por aumento de positivos de COVID-19
Los juegos serán reprogramados para cumplir con el calendario 

Tigres de Aragua anunció la suspensión de sus próximos cuatro juegos pautados para este semana porque han sufrido «siete casos positivos por covid-19».

«La Fundación Tigres de Aragua en conjunto con la Liga Venezolana de Béisbol Profesional (LVBP) se dirigen a la opinión pública para informar de la suspensión de los compromisos pautados para los días 20/12, 22/12, 23/12 y 26/12 del conjunto bengalí, luego de conocerse los resultados de la última prueba PCR», dijo en un comunicado.

Los Tigres se enfrentarían este domingo a los Navegantes del Magallanes, el 22 y 23 a las Águilas del Zulia y el 26 a los Caribes de Anzoátegui.

Los juegos serán reprogramados para cumplir con el calendario, señaló el equipo en el comunicado.

La LVBP indicó que la suspensión se realizó a fin de «preservar la salud de todos los involucrados y aplicar el debido aislamiento».

Según el Gobierno venezolano, en el país hay actualmente 4.625 casos activos de covid-19, y desde que se inició la pandemia en marzo se han registrado 110.07. De este total «104.462 se han recuperado».

En las últimas 24 horas se detectaron 294 contagios, de los cuales 286 se han dado por transmisión local y el resto son de personas provenientes de Panamá, Turquía y República Dominicana.

Venezuela registra actualmente una tasa de contagio de 14 casos por 100.000 habitantes, una cifra que creció en la última semana, pues venía de reportar dos puntos menos.

Las autoridades, que han flexibilizado la cuarentena durante este mes, han llamado a cumplir con las medidas de prevención, debido a que observan que los ciudadanos no están cumpliendo con las recomendaciones para evitar la propagación de la covid-19.

Nueva temporada de la LVBP se inicia el 15 de noviembre y evalúan permitir público
Nicolás Maduro sugirió que se puede permitir hasta 30 % de asistencia en estos lugares: «Todo siempre con bioseguridad, con bioseguridad todo es posible, les dejo esa idea para que la hagan viable» 

Nicolás Maduro anunció este domingo que la Liga Venezolana de Béisbol Profesional (LVBP) comenzará su torneo el próximo 15 de noviembre y pidió al gobierno estudiar la posibilidad de permitir público en los estadios.

«La liga venezolana de béisbol arranca el 15 de noviembre», dijo en una llamada telefónica que fue transmitida por el canal estatal VTV.

Luego, Maduro pidió «estudiar el aforo» que se pudiera permitir para que el público asista a partidos de béisbol y otros deportes en Venezuela, entre los que mencionó el fútbol y el baloncesto.

«Todo siempre con bioseguridad, con bioseguridad todo es posible, les dejo esa idea para que la hagan viable», expresó Maduro, que sugirió permitir hasta un 30 % de asistencia en estos lugares.

Venezuela permite desde hace algunas semanas la celebración de eventos deportivos sin público mientras avanza en lo que el Gobierno considera un camino hacia la nueva normalidad, toda vez que el país tiene uno de los saldos más bajos de muertes por covid-19, según el balance oficial.

Con información de EFE

Delcy Rodríguez reporta 312 casos de COVID-19 y asegura que la curva se está aplanando
Nicolás Maduro anunció que el próximo 15 de noviembre iniciará la nueva temporada de béisbol profesional 

La vicepresidenta, Delcy Rodríguez informó que en las últimas 24 horas se registraron 312 casos de COVID-19, con lo cual la cifra de casos asciende a 92.325 contagios.

Rodríguez señaló que del total de casos, 300 son comunitarios y 12 son importados, de venezolanos que han regresado desde Colombia. El estado con mayor cantidad de casos este domingo, 1 de noviembre, es Carabobo con 60; Zulia con 45; Yaracuy con 36; Distrito Capital con 33; Miranda con 23; Táchira con 22; Nueva Esparta 18; Portuguesa con 16; Cojedes 14; Vargas con 13; Sucre con 7; Aragua con 5; Apure con 4; Anzoátegui con 3 y Bolívar con 1.

Igualmente anunció el fallecimiento de tres personas por COVID-19, una mujer de 33 años en Táchira; un hombre de 44 años, igualmente de Táchira y una mujer de 63 años de Mérida. El total de fallecidos llegó a 801 en todo el país.

Además indicó que 87.156 pacientes están recuperados, es decir, el 94%, y tan solo 4.368 casos serían «activos». Hay 2.735 pacientes en hospitales; 1.585 en CDI y 48 en clínicas privadas. 

Play ball

Nicolás Maduro, quien estuvo en la reunión a través de una llamada telefónica, anunció que el próximo 15 de noviembre se inicia la temporada de béisbol profesional en el país. Igualmente «propuso» que pueda entrar un 30% del público.

Maduro ratificó que estos próximos siete días serán de «flexibilización plus» y Delcy Rodríguez agregó que 50 sectores podrán trabajar esta semana. Sin embargo acotó que esta semana de «cuarentena radical» que terminó, el 24% de los comercios no cumplieron con las medidas.

Pero Nicolás Maduro aseveró que el «modelo venezolano» del 7×7 es fiable y efectivo. «Permite combinar la cuarentena con la flexibilización organizada. El 7×7 es el camino», agregó, al mismo tiempo que Delcy Rodríguez expresó que la «curva se está aplanando».

«Hay una tendencia de aplanamiento, de disminución de los casos, de los fallecidos y de aumento del número de personas recuperadas. Son números que día a día nos hacen decir que el 7×7 plus es el camino. Se lo propongo a los gobiernos del mundo», señaló Maduro.

En la reunión también estuvo Carmen Melendez, nueva ministra de Interior y Justicia, quien explicó que este domingo abrieron las iglesias y templos religiosos y que se mantendrá así hasta el próximo domingo, luego tendrán que cumplir con la «cuarentena radical». 

«Firmamos un instructivo de todas las medidas que se deben tener en las iglesias y templos religiosos en todo el país. Sacamos una resolución con el visto bueno del Ministerio para la Salud. Hoy se cumplieron todas las medidas, con un aforo del 40%», puntualizó.

Orlando Viera-Blanco Mar 10, 2020 | Actualizado hace 2 semanas
Juguemos a ser libres
“Seamos el niño que fuimos… Ese día nadie nos dejará en el terreno con los grilletes en los pies, avergonzados y con el más pesado de los recuerdos”

@ovierablanco

Existen similitudes previsibles entre el béisbol, la filosofía y la política. Quizás una de las fundamentales es jugar en equipo, hacer las jugadas de rutina y obedecer las señas del mánager. Sin estas reglas no hay hit o estacazo de cuatro esquinas que valga, porque al final lo que produce la victoria no es hacer las cosas como uno piensa, sino como son por bien cumplidas. Es ese el carácter que intimida al contrario desde el mismo momento que nos ve el uniforme en el campo. “A estos tipos va ser difícil vencerlos”, exclama asustadizo cuando palpa armonía en su rival. Tanto en béisbol como en la política la derrota o el triunfo muchas veces está antes de cotejo…

Adivinar la seña del contrario…

Hace unas semanas fue invitado por el presidente de Venamerica, Luis Corona, para dar honrosa clausura a la Asamblea Ordinaria de la NGO. Qué podríamos decir a esta alturas del partido que no se haya dicho para convencernos que en la unidad está la fuerza y que el juego no se acaba hasta que se acaba [Dixit Yogi Berra/It ain’t over till it’s over]. En materia de liderazgo y del track del ser, lo predecible, lo evitable, es esencial. Y uno de los valores esenciales del poder, es querer, que es creer, que es la representación de la voluntad. Creer que las cosas se anticipan ha sido el método del racionalismo clásico que dio pie a la cultura política más importante del mundo democrático y a la codificación más prolija de la humanidad, esto es, el existencialismo normativo devenido del eurocentrismo románico-greco-germano.

En el béisbol también es clave anticiparse a la jugada, hacerlo con el librito. Si el equipo gana por diferencia de una carrera y el contrario logra una base sin outs, normalmente el bateador de turno tratará de tocar la bola para avanzar al corredor. En ese momento debemos jugar cuadro adentro para esperar el toque y el pitcher deberá lanzar a la barbilla del bateador, para evitar el avance… En política ocurre lo mismo. Si tenemos al contrario tratando de sobrevivir y anotar, lo menos es creer que el partido lo tenemos ganado, por lo que hay que asegurarlo y lanzar al cuello. Ello implica movimiento y tenacidad…

Cualquier jugada cuenta y más cuando tenemos al árbitro comprado, el mánager del otro equipo chimbo por tramposo y poco sobrio; refuerzos que nadie autorizó y bates sembrados con corchos…

Yogi Berra tambien decía: “You’ve got to be very careful if you don’t know where you are going, because you might not get there”. En política es lo mismo. Debemos tener mucho cuidado si no sabemos adónde vamos porque podemos no llegar allí. Me da la impresión de que muchos por estos días andan más perdidos que el fulano mánager «embotellado». Y en la pelota, como en el dominó, los mirones son de palo. Cuidado, porque nos hacen llegar adonde no queremos ir…

Squeeze play

Compartí con mis oyentes de Veamérica una experiencia de vida.  Siendo un niño de 12 años, Julio Castro padre, nuestro mánager de los Tigres de Prados del Este, me grita [jugando yo  tercera base]: “Baja a la goma boca abierta que te van a dejar la bola en los pies”… El juego estaba empatado y el rival [Panteras] tenía hombre en tercera base con dos outs, último inning. No le hice caso a Julio [padre de nuestro querido médico/infectólogo Julio Castro, quien  no solo es un gran galeno sino un peloterazo, un catcher fenomenal]. Ciertamente el bateador tocó la bola, la pelota quedó en mis pies [y en mis peores recuerdos] y nos dejaron en el terreno. Por años pensé que no era lógico “tocar la bola, con dos outs”, pero ese no era el tema: el asunto era hacer caso, esperar la dominicana, anticipar la cubanada. Comprendí que obedecer es vital, no echarle la culpa al otro y asumir el error, para corregirlo y redimirlo. Esperar lo inesperado para evitar lo indeseado. Perder un partido con “squeeze play” fue a lo menos vergonzoso por lo que siempre hay que estar atento, cuadro adentro, moviéndose  y bien agachado… Ver a las gradas es-además-correr el riesgo de un pelotazo.

“No sería el hombre que soy si no fuese El Niño que fui” escribió Albert Camus. En la vida he podido evitar algunos tropiezos simplemente siguiendo pautas clásicas: previendo y evitando lo inevitable por predecible; por creer y hacer lo correcto aun cuando luzca inaplicable. Corrigiendo inocente pero sana y noblemente.

Muchos piensan en estos momentos que tenemos el juego perdido. Otra de Yogi Berra: “Love is the most important thing in the world, but baseball is pretty good, too…” y esta de Albert Camus: “No ser amado es una simple desventura. La verdadera desgracia es no saber amar…». Si cruzamos la «filosofía del pelotero de San Luis y el filósofo argelino, el resultado será el mismo.  Aplicable a lo político, a lo social, a lo grupal y a lo íntimo: amar es lo más importante del mundo, pero la política también es muy buena […] Nuestra desgracia ha sido no saber amarnos a nosotros mismos, no creer en nosotros, no confiar en el equipo, obedecer al mandamás, por lo que creemos !que el juego se acabó cuando aún no ha terminado!

“Seamos el niño que fuimos”… Ese día nadie nos dejará en el terreno con los grilletes en los pies, avergonzados y con el más pesado de los recuerdos.  !Juguemos a ser libres! No hacerlo es no saber amarnos, por lo que es una trágica desventura…

Orlando Viera-Blanco. Embajador de Venezuela en Canadá.

Crisis en Venezuela afecta también a fanáticos del béisbol

En esta foto del 12 de octubre de 2018, fanáticos y peloteros escuchan el himno nacional durante el juego inaugural de la temporada entre los locales Leones del Caracas y los Tiburones de La Guaira.  (AP Foto/Fernando Llano)

 

DURANTE UNA DÉCADA, DESDE QUE SE HICIERON AMIGOS EN EL TRABAJO POR SU AFICIÓN COMPARTIDA POR EL BÉISBOL, Franlet Bencomo y Elbert Albarrán han acudido siempre juntos al juego inaugural de la temporada.

Pero este año, decidieron no llevar a sus hijos. Además, tomaron un desayuno abundante antes de dirigirse a ver a sus amados Leones del Caracas. No querían que les diera hambre en el parque, donde un hot dog cuesta más del 10% del salario mínimo de unos 30 dólares que cada uno devenga en su empleo.

“Ahora hay que venir tras haber comido, a ver tu juego e irse a la casa”, explicó Bencomo, formado en la fila para comprar boletos seis horas antes de que comenzara el encuentro del viernes, que marcó el comienzo de la campaña. “No hay chance de otra cosa”.

Y en todo el país, al ponerse en marcha la actividad de la Liga Venezolana de Béisbol Profesional, los fanáticos realizan sacrificios similares para seguir alimentando su pasión por la pelota.

La hiperinflación ha pulverizado los ingresos, y los precios de los boletos se han vuelto prohibitivos para muchos. Otros evitan ir al parque por el temor a los asaltos en las calles o porque no saben cómo volverán a casa, dada la crisis nacional del transporte. En respuesta, se realizan más juegos diurnos.

Los ocho clubes profesionales de Venezuela pasan penurias. Por segundo año consecutivo, la petrolera estatal PDVSA debió inyectar 12 millones de dólares para cubrir desde el costo de las pelotas importadas hasta los salarios de los siete jugadores extranjeros, en su mayoría prospectos de las ligas menores en Estados Unidos,  en el roster de cada equipo.

Durante el receso previo a la campaña, vándalos ingresaron en distintos estadios y se robaron los grifos de agua de los baños. Los encargados del mantenimiento del terreno han enfrentado dificultades por la escasez de agua en distintas ciudades.

Y los precios de las entradas siguen siendo un misterio. Muchos clubes los ajustan cada semana para seguirle el paso a la inflación, que de acuerdo con un estimado del Fondo Monetario Internacional llegará pronto a 10 millones por ciento.

En Maracaibo, la segunda ciudad más grande de Venezuela, la situación es tan adversa que las Águilas del Zulia cancelaron su juego inaugural y otros cinco como locales este mes, luego de que un inspector contratado por la oficina de las Grandes Ligas en Estados Unidos determinó que el diamante no cumplía con los requisitos mínimos de seguridad. El club informó que fueron robados los cables de cobre en varias torres de alumbrado, y que el gobierno estatal, dueño del inmueble, no había reunido la suma relativamente modesta de 39.000 dólares que se necesitaba para reparar el sistema de iluminación.

El béisbol menor se niega a ser sacado out por el hambre

Las Águilas sí estarán jugando como visitantes.

La liga venezolana, que antaño era altamente competitiva, ha estado en decadencia durante años.

Hay 70 peloteros venezolanos en las nóminas de las Grandes Ligas, y varios vuelven a su país para disputar algunos encuentros cada temporada. Pero muchos de los que vienen este año, como el lanzador Eduardo Paredes, de los Dodgers de Los Ángeles, o el pelotero de cuadro Harold Castro, de Detroit, son poco conocidos y difícilmente reflejan el tremendo talento de este país.

En tanto, las organizaciones de las mayores han cerrado todas sus academias en este país.

La próxima Serie del Caribe, en la que participan los monarcas de las ligas invernales de Venezuela, República Dominicana, México, Puerto Rico y Cuba, se realizaría en febrero en Barquisimeto, una de las ciudades más afectadas por los apagones que suelen presentarse en buena parte del territorio nacional. El año pasado, este certamen debió mudarse de Barquisimeto a Guadalajara, México, debido a las violentas protestas contra el gobierno socialista de Venezuela.

Ramón Guillermo Aveledo, expresidente de la liga venezolana y prominente líder opositor, recordó un tiempo en que acudía al parque con su padre, durante el auge petrolero de la década de 1960. Tuvo la oportunidad de ver a Earl Weaver, futuro miembro del Salón de la Fama, quien era manager de los Cardenales de Lara en Barquisimeto.

“En aquel momento, la diferencia en los salarios de las Grandes Ligas y los que Venezuela podía pagar no era tanta”, dijo Aveledo.

Por un momento, Aveledo se aleja de sus habituales y duras críticas al presidente Nicolás Maduro. Aplaude la decisión del gobierno de destinar parte de sus pocos dólares disponibles al béisbol, aun cuando reconoce que hay necesidades más apremiantes.

Desde los trabajadores en los estadios hasta los revendedores de boletos y los expendedores de hot dogs, hay miles de personas cuyas familias dependen del béisbol para obtener su sustento. Y Aveledo recalca que los estadios han sido durante años una especie de santuario deportivo, donde fanáticos de todos los estratos sociales y filiaciones políticas pueden dejar a un lado sus diferencias y las dificultades que enfrentan.

“Es un tema muy unificador, la temporada de béisbol”, comentó. “Hay un ambiente distinto estos tres meses (que dura la temporada)”.

De hecho, el número de espectadores en los estadios subió 5% el año pasado, aun en medio de la crisis política y económica. Pese a ello, la cifra es un tercio menor a la máxima registrada en la historia, durante la campaña 2013-14.

En esta foto del 12 de octubre de 2018, Ozzie Guillén, manager de los Tiburones de La Guaira, participa en una práctica de bateo antes del juego inaugural de la campaña ante los Leones del Caracas en la capital venezolana.  (AP Foto/Fernando Llano)

 

No sólo los fanáticos deben hacer sacrificios para seguirle el pulso a la pelota.

Ozzie Guillén, excampocorto de las Grandes Ligas, dijo que estuvo tentado a no volver a su país para dirigir a los Tiburones de la Guaira por tercera campaña consecutiva. Además de los viajes en autobús de un extremo a otro del país por carreteras peligrosas, los peloteros que llegan de Estados Unidos corren el riesgo de intoxicarse con alimentos en restaurantes de mala calidad, y deben lidiar con los frecuentes apagones.

“Pero yo no voy a venir aquí a llorar”, dijo Guillén, quien disputó alguna vez el Juego de Estrellas y contó que, por primera ocasión desde que creció en la pobreza cerca de Caracas, no tiene agua corriente en su casa, ubicada en un distrito adinerado de la capital.

En 2005, Guillén fue el primer manager latinoamericano en conquistar una Serie Mundial, con los Medias Blancas de Chicago. El piloto dijo que la pasión de los venezolanos por el béisbol no parece apagarse a pesar de los problemas del país.

Aunque los precios de los boletos y la cerveza aumentan vertiginosamente, Guillén insiste en que el parque de pelota sigue siendo “el bar más barato que tiene Venezuela”.

“A los fanáticos: Yo sé que las cosas están difíciles”, expresó Guillén, cuyos pronunciamientos francos sobre temas políticos lo han metido en problemas más de una vez. “Pero yo creo que esto trae más felicidad y más alegría a los fanáticos que tristeza”.