La farsa roja del “medallero” en Guadalajara - Runrun

El mejor régimen del mundo en propaganda falsa y logros manipulados es sin duda el venezolano, hijo natural de aquella Unión Soviética que mentía y a la que conocimos de verdad tras caer el Muro de Berlín y el comunismo fracasado.

Por días nos han montado una campaña de la “enorme victoria” de los atletas venezolanos en los Juegos Panamericanos de Guadalajara acompañada del ritornello de que este es el gobierno que más ha hecho por el deporte y el agradecimiento a “los maestros cubanos que han engrandecido a nuestros deportistas”.

Leyendo el editorial de Tal Cual del martes pasado pude darme cuenta, a través de las líneas de Teodoro, de la manipulación descarada en torno a la actuación de nuestros jóvenes deportistas.

Los primeros días todos participamos, inclúyome pues entreviste por la radio a algunos de ellos, de la emoción de ver a nuestros nadadores obteniendo varias preseas de oro y plata. La promoción roja apenas comenzaba y los mensajes telefónicos del caudillo recluido en Miraflores mientras pasaba una gripe, no se hicieron esperar. Repetía una y mil veces los logros de la revolución en materia deportiva.

Sin embargo la realidad, tras terminar el evento, demostró otra cosa. Venimos bajando en calidad, y número de medallas de oro y aumentando en el nivel de la propaganda oficial manipulando a los competidores.

Me enardecí cuando escuche al ministro de deportes, un bate quebrado en la materia pues según el propio IND nunca había participado en deporte alguno, echándole la culpa a los réferis y dirigentes de los comités globales de nuestras derrotas. Algo así señaló por la televisora rojita: “Venezuela tiene que meterse en los organismos mundiales del deporte pues al no estar allí nos tratan muy mal en las puntuaciones y no nos miden igual que lo países que si están en esas directivas”.

Las cifras no mienten. En 2003 fuimos sextos con 64 medallas de las cuales 16 fueron de oro. En el 2007 pasamos al séptimo lugar con 70 medallas pero de oro solo 12, y ahora, en México bajamos al octavo lugar con otras 12 de oro de un total de 72. Nos hablan del total para meternos gato por liebre.

Busqué los apuntes que varios colegas han hecho tras la debacle promovida como victoria y aquí reproduzco algunos puntos claves:

Teodoro Petkoff en Tal Cual: “Lo de Guadalajara es penoso. Casi catorce años después hemos descendido en la calidad de nuestra actividad deportiva. Comparemos las tres últimas ediciones de estos juegos y el lugar que ocupamos, para ver claramente que vamos como el cangrejo. En la edición de 2003, en Santo Domingo, ocupamos el sexto lugar, con 16 medallas de oro y 64 en total; en la de Río de Janeiro, en 2007, bajamos al séptimo lugar, con 12 de oro y 70 en total, y ahora en México seguimos palo abajo hasta el octavo lugar, con 12 de oro y 72 en total.

Más abajo del octavo no podríamos llegar porque desde allí comienzan los países pequeños, con escasa capacidad deportiva. Pero, entre los ocho grandes del continente, somos los últimos. Todo el mundo progresa, menos nosotros. Solíamos quedar por encima de Colombia; pues ahora, los vecinos nos duplicaron en medallas de oro, obteniendo 24 contra nuestras 12. En esta  materia la revolución bonita también está raspada”.

Otra crónica en el mismo diario Tal Cual firmada por Simón Boccanegra es mas explícita:

¡Qué riñones!

Este grupo de fracasados que nos gobierna no tiene más respuesta para sus desaciertos que una recrudescencia de su desenfreno propagandístico. Ahora resulta, según los cronistas del oficialismo, que en Guadalajara obtuvimos una “gran victoria”.

¿La razón? Obtuvimos 72 medallas en conjunto, entre las de oro, plata y bronce. ¿Fue que sacamos entonces más que todos los que quedaron arriba de nosotros? ¡Qué va! Apenas dos más que Colombia, que obtuvo 24 de oro contra las doce nuestras.

Los otros seis nos superaron largamente tanto en los oros como en el medallero total. ¿Estos cronistas chimbos nunca han percibido que el ranking de los competidores siempre se establece sobre las medallas de oro? Por algo será. No es el número total de medallas lo que interesa sino el número de ganadores.

Por supuesto, claro está que lo saben, pero el temor de irritar al gran capo los lleva a ganar en la propaganda lo que no pudimos ganar en los estadios. Hace muchos años, cuando la URSS decidió participar por primera vez en los Juegos Olímpicos, en los cuales quedó segunda en oros pero obtuvo un total mayor que el de EEUU, intentó que se cambiara el método de conteo, insistiendo en que el ganador debía ser el que sumara más oros, platas y bronces.

El Comité Olímpico no le paró a la proposición y la propia URSS se olvidó de ella en cuanto comenzó a ganarle a Estados Unidos en medallas de oro.

En lugar de asumir, como lo ha hecho Eduardo Álvarez, presidente del Comité Olímpico Venezolano, con coraje y respeto por la gente, los resultados de Guadalajara como una catástrofe, sin buscar excusas sino pidiendo una revisión a fondo del modo como se dirige la actividad deportiva, se han dedicado a hacer el ridículo con estos malabarismos numerológicos.