Es lo que se lee entre líneas de las declaraciones del ministro del Poder Popular para la Energía y Petróleo, Rafael Ramírez después de sostener una reunión con su par de Turquía, Taner Yildiz, en el cual establecieron distintos acuerdos de cooperación en materia energética y de infraestructura. El gobierno venezolano acude a la ayuda de Turquía ya que según las declaraciones del ministro, la nación euroasiática tiene la capacidad de construir 470.000 viviendas al año.
Esas cifras hacen quedar en una posición un poco vergonzosa al ministro del Poder Popular para la Planificación y Finanzas, Jorge Giordani, ya que hace unos días afirmó que “… se hará el intento de construir 150.000 viviendas en todo el país” para solucionar el problema de los damnificados.
Aparentemente los ministros no tienen mucha comunicación ya que mientras uno firma acuerdos para cubrir en un 300% el problema de las viviendas en Venezuela, aceptando por supuesto la participación de Turquía en dos bloques de la Faja Petrolífera del Orinoco, el otro establece que “intentaran” vagamente de solucionar el problema.
Sin embargo, después de escuchar las siguientes declaraciones del ministro Ramírez, entiendo porque Giordani no tiene ni fe ni esperanza en las cifras que promete. Ramírez expresó que “No hay una industrialización del sector de la vivienda, por eso las construcciones son muy costosas y hay muchos cuellos de botella, muchos insumos están en una posición monopólica y de dominio por parte de algunos sectores que impiden que nosotros podamos dar un salto cualitativo en el tema de vivienda”.
Ahora bien, si el gobierno Venezolano ha tomado el control del cemento y de las cabillas del país gracias a distintas expropiaciones, y a su vez está inmerso en una lucha para asfixiar a los constructores nacionales los cuales están de manos atadas, entonces ¿Quién está impidiendo que se pueda dar un salto cualitativo en el tema de vivienda estimado ministro? ¿Acaso no se da cuenta que las personas responsables de que construir sea muy costoso son aquellos mismos que tienen el monopolio del cemento y de las cabillas?
Quedarían mejor si admiten primeo abiertamente que no tienen la capacidad para construir y segundo que para “tratar” de solucionar sus ineficiencias el plan es quebrar al país.
Más foto de la reunión con Turquía para la construcción de viviendas:
Tomas Horacio Hernandez
@TomasHHR