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Benigno Alarcón

Denuncian que el CNE no ha otorgado las claves de validación para postulación de Corina Yoris

Este sábado, 23 de marzo, el dirigente político César Pérez Vivas denunció que el Consejo Nacional Electoral (CNE) aún no ha otorgado las claves de validación necesarias para que las tarjetas UNT y MUD postulen a Corina Yoris.

A través de su cuenta en X, Pérez Vivas indicó que tras casi 72 horas desde el inicio del proceso de postulación aún no hay respuesta por parte del CNE. 

«Alertamos a la opinión pública nacional e internacional este vil atropello de la cúpula roja», expresó Pérez Vivas.

Por su parte, el Director del Centro de Estudios Políticos y de Gobierno de la Universidad Católica Andrés Bello (Ucab), Benigno Alarcón, publicó en su cuenta en X que según la información que han recibido, la plataforma del CNE continúa sin funcionar para las tarjetas que deben postular a Corina Yoris.

«Es importante que esto se denuncie y se sepa a las cuatro vientos, dentro y fuera del país», enfatizó Alarcón.

El periodista y experto en la fuente electoral Eugenio Martínez, explicó en X que el primer paso para postular a Corina Yoris (UNT-MUD o cualquier otra sustituto) es que el sistema de postulaciones admita su cédula de identidad. Si el sistema la admite entonces será una postulación presentada.

Martínez explicó que si el sistema no admite la postulación de Corina Yoris (en la consulta pública del RE no aparece ninguna restricción en su contra), los partidos MUD y UNT tendrán que postular a otra persona (si les notifican el rechazo antes del 25 de marzo).

«Aunque Corina Yoris fue integrante de la Comisión Nacional de Primaria, no estuvo entre los integrantes de la comisión que fueron citados a declarar por el Ministerio Público», señaló el periodista.

Reacciones que generó la propuesta de finalizar el gobierno interino de Guaidó
La propuesta implica que se eliminen todas las estructuras del gobierno interino a excepción de las vinculadas a activos en el exterior

Tras el anuncio de Primero Justicia, Acción Democrática y Un Nuevo Tiempo de querer proponer en la Comisión Delegada de la Asamblea Nacional de 2015 la eliminación del gobierno interino que ha encabezado Juan Guaidó desde 2019, diferentes políticos y académicos han reaccionado negativamente a la idea.

La propuesta implica que se eliminen todas las estructuras del gobierno interino a excepción de las vinculadas a activos en el exterior, como la junta ad hoc de PDVSA, a cargo de CITGO, y la junta ad hoc del Banco Central de Venezuela, involucrada en el caso judicial que se desarrolla en Reino Unido por el oro en el Banco de Inglaterra, reseñó El Impulso. 

El pronunciamiento sería un anticipo de la voluntad de un total de 69 diputados al parlamento legítimo, de suprimir la instancia que preside Juan Guaidó, a partir de enero de 2023.

Para Benigno Alarcón, director del Centro de Estudios Políticos y de Gobierno de la Universidad Católica Andrés Bello, acabar con el interinato no aporta nada a la causa democrática, por el contrario, fortalece al gobierno entregándole la cabeza de Guaidó.

«Esta es una forma de derrotar a Guaidó fuera de la primaria. Sin unidad nunca habrá cambio político», dijo Alarcón a El Impulso.

Alarcón no está de acuerdo con quienes afirman que ha fracasado con su promesa de sacar a Maduro del poder. “Todos lo han intentado y todos hasta ahora han fracasado. Entonces todos son responsables de atornillar a Maduro. Si entregáramos la cabeza de cada líder que fracasó, pues creo que no quedaría nadie”, aseguró.

Al igual que Alarcón, el dirigente político de oposición, Yon Goicoechea, cuestionó la intención de la propuesta de varios partidos políticos.

«Se plantean darle gratuitamente a Maduro la victoria de acabar con el gobierno interino, con cabeza de Guaidó en bandeja», señaló.

Por otra parte, Goicoechea indicó esta movida amenaza con convertir a CITGO «en el mismo desastre» de Monómeros.

Sergio Vergara, diputado a la Asamblea Nacional 2015 (AN) por el estado Táchira, también está en desacuerdo con la propuesta de eliminar el gobierno interino.

Tal Cual Digital reseñó que para Vergara la eliminación del gobierno interino, todos sus órganos y disposiciones, significaría una declaración de rendición ante la dictadura.

«Esto provocaría el derrumbe de toda la plataforma institucional que se ha construido durante estos años y, por la cual, ha comprobado tener efectividad para garantizar reconocimiento internacional, la protección y administración de los recursos del Estado», reiteró.

Además, Vergara aseguró que la propuesta elimina toda referencia a la usurpación. «Desaparece toda mención al desconocimiento a (Nicolás) Maduro y a las autoridades usurpadas. Elimina los capítulos referentes a la reinstitucionalización y la conformación de un Gobierno Provisional”, dijo también el coordinador de Voluntad Popular en Táchira.

El dirigente opositor, Lester Toledo, recriminó a los opositores que solicitaron poner fin al gobierno interino que lidera Juan Guaidó.

Benigno Alarcón: Retrasar las elecciones primarias es peligroso para la oposición
Benigno Alarcón, director del Centro de Estudios Políticos y de Gobierno de la UCAB, advirtió que si se escoge un candidato tarde, posiblemente esa persona “no va a tener tiempo ni de montar campaña, equipos ni estructura para competir en una elección, que siempre va a ser desventajoso para el candidato de la oposición”
“En este momento, no creo que la primaria pueda tener alguna posibilidad de verse afectada por lo que se acuerde en la negociación”, señaló Benigno Alarcón

@Andrea_GP21

 

Las próximas elecciones presidenciales de Venezuela se deberán celebrar en 2024. Para que la oposición participe en ese proceso, señalan algunos partidos y expertos, los candidatos deben medirse en unas elecciones primarias, cuyo ganador será el representante de la contraparte del chavismo en el evento electoral.

En el mes de mayo, la Plataforma Unitaria anunció que escogerá a un candidato presidencial opositor a través de unas elecciones primarias que prevé celebrar en 2023.

Algunos partidos políticos han presentado sus propuestas, tal es el caso de Voluntad Popular, que sugirió celebrar unas elecciones primarias en el primer trimestre del próximo año.

“Retardar la definición de la elección del candidato en primarias es un error, ese candidato debe construir y sembrar esperanzas, debe recorrer el país de lo contrario sencillamente será difícil una victoria. Será muy difícil que el pueblo venezolano acepte una candidatura de consenso”, señaló Voluntad Popular en un comunicado.

 

Hasta ahora, la fecha de unas eventuales primarias son inciertas y expertos aseguran que mientras más se retrase este proceso, la oposición saldrá más perjudicada. 

Los nombres de eventuales postulados

Algunos partidos políticos han manifestado su deseo de participar en unas primarias, incluso, se han señalado algunas opciones de precandidatos para este proceso.

Por Voluntad Popular, el coordinador del partido, Freddy Superlano, propuso a Juan Guaidó como abanderado de la tolda naranja para las primarias, durante el primer Encuentro Federal de Activistas.

 

Por su parte, Carlos Ocariz, integrante de Primero Justicia, se ha referido en repetidas ocasiones a las primarias. Incluso, realizó recorridos en varios estados del país y pidió a la Plataforma Unitaria avanzar en la planificación de este proceso.

El pasado 24 de agosto, Ocariz propuso en entrevista con Unión Radio que las primarias sean en julio de 2023, asegurando que es «una fecha que es buena para que todos puedan participar», al considerar que estos comicios deberían ser «totalmente abiertos».

 

A su vez, a mediados de agosto, los secretarios generales regionales del partido “Acción Democrática en Resistencia” acordaron por unanimidad respaldar la candidatura interna de Carlos Prosperi, secretario nacional de la organización.

De acuerdo con una nota de prensa de AD, la decisión se tomó en un acto presidido por el secretario general de la tolda, Henry Ramos Allup; y por el vicepresidente de la organización política, Edgar Zambrano. También, asistió Williams Dávila, quien señaló que mantiene sus aspiraciones.

 

En la lista también figura Nicmer Evans, abanderado por el Movimiento Democracia e Inclusión, quien ha solicitado a la Plataforma Unitaria acelerar la organización de las primarias.

Asimismo, el pasado 28 de julio, la presidenta de Encuentro Ciudadano, Delsa Solórzano, confirmó sus aspiraciones para ser una de las candidatas que se midan en las primarias opositoras.

También, el exgobernador del estado Táchira César Pérez Vivas, anunció el 13 de agosto su precandidatura para la presidencia de Venezuela. “Estoy aquí para unir a la nación venezolana”, dijo, durante un discurso desde el Teatro Casa Sindical de San Cristóbal.

Por su parte, María Corina Machado, coordinadora nacional de Vente Venezuela, ha comentado que participaría en unas primarias si el proceso es manual y si no lo organiza el Consejo Nacional Electoral.  Planteó una nueva «ruta» de cómo deberían ser las primarias para escoger al candidato presidencial del 2024.

 

También, hay actores políticos que no desean medirse en unas primarias de la Plataforma Unitaria, tal es el caso del partido Soluciones para Venezuela, cuyo presidente, Claudio Fermín, señaló que su organización no participará en ese proceso.

Una primaria universal

Benigno Alarcón, director del Centro de Estudios Políticos y de Gobierno de la Universidad Católica Andrés Bello (UCAB), señaló que las primarias deben servir para “legitimar un líder de oposición” que será el candidato para las elecciones presidenciales del 2024.

“Tienen que servir para legitimar a uno, poder concentrar y polarizar el voto y los apoyos en una persona y no en una dispersión de personas, como hemos tenido en los últimos procesos”, dijo en entrevista con Runrun.es.

A juicio de Alarcón, para que eso suceda, es esencial que estas primarias se realicen bajo reglas que sean aceptables para todos, aunque eso no significa que tengan que “complacer a todo el mundo, porque tiene que hacerse bajo criterios que sean difíciles de rechazar”.

Alarcón consideró que se debe lograr una “primaria universal”, pues desde el punto de vista de los electores, implica que todo aquel que sea mayor de edad vote, “lo cual le da derecho a votar no solo a los que ya están registrados, sino también a los que no se han podido registrar, y eso incluye a gente tanto dentro de Venezuela como en el exterior”.

 

En ese contexto, cabe recordar que Roberto Picón, rector principal del Consejo Nacional Electoral (CNE), informó el 9 de agosto que un equipo supervisado por él y por Enrique Márquez está trabajando en dos proyectos que marchan en paralelo.

“El primero es el voto de venezolanos en el exterior. El segundo, la asistencia técnica a un eventual proceso de primarias de la oposición”, señaló Picón vía Twitter.

Por otra parte, con respecto a los elegidos, una primaria universal debe permitir que toda persona que tenga aspiraciones compita, independientemente de su posición política, si es parte de la Plataforma Unitaria o no, si está inhabilitada por el gobierno o no.

“Quitar a los inhabilitados de la primaria implica legitimar una decisión del gobierno que es inconstitucional (…)  Tú no puedes convalidar este tipo de inhabilitaciones, que son básicamente administrativas y que nadie puede reconocer como válidas”, aclaró Benigno Alarcón.

¿Y si se adelantan las presidenciales?

El pasado 19 de agosto, el presidente del Movimiento Democracia e Inclusión (MDI), Nicmer Evans, exigió a la oposición venezolana adelantar las elecciones primarias ante la posibilidad de que también se adelanten las elecciones presidenciales para el 2023.

“Si hay una fecha adelantada del proceso de elecciones presidenciales y nosotros mantenemos el cronograma electoral o un pre-cronograma electoral para efectuar las primarias a finales del año que viene (2023) y se da el proceso de negociación de adelanto de elecciones presidenciales, se está sirviendo la mesa para que haya la excusa de no desarrollar las primarias en la oposición venezolana”, alertó Evans.

Ante esa posibilidad, Benigno Alarcón señaló que hasta ahora no tiene información de que se produzca o no un adelanto de las elecciones presidenciales. “Esto va a depender de qué tan cómodo se sienta el gobierno a medida que la elección se acerca”, explicó.

Alarcón señaló que el gobierno regula las condiciones de acuerdo a lo que necesita, como si se tratara de la hornilla de una cocina. “Si el gobierno siente que las elecciones están prácticamente cocinadas, pues entonces la hornilla puede ir a fuego lento, no hay prisa en cocinar esas elecciones, y de alguna manera, el gobierno lo que busca con eso es aplacar las voces que descalifican la elección, que la colocan como una elección con ventaja para el gobierno o una elección que no tiene integridad electoral”, dijo.

 

Por otro lado, en la medida en que el gobierno sienta que puede perder la elección, añadió Alarcón, “cierra más la válvula de las condiciones y trata justamente de apurar la elección, inhabilitar candidatos, inhabilitar partidos políticos, de hacer todo lo necesario, como lo hizo Daniel Ortega en Nicaragua, para ganar la elección sin ninguna duda y sin ninguna incertidumbre de que pudiera perderla”.

“Yo creo que en esta oportunidad lo que va a terminar pasando es que el gobierno va a, básicamente, regular el proceso electoral de acuerdo con lo que le resulte conveniente en un momento determinado. Yo creo que lamentablemente eso es lo que nosotros vamos a ver”, señaló.

Hacer las primarias con anticipación

De acuerdo con Benigno Alarcón, es fundamental que las primarias se realicen con suficiente anticipación. De esta manera, quien resulte favorecido tendrá tiempo para armar su equipo de cara a las presidenciales y poder armar su campaña.

“Básicamente, si nosotros atrasamos el proceso, si hoy la oposición decidiera hacer primarias, difícilmente esa primaria pudiera ser antes de marzo-abril, y si seguimos retrasando el proceso, lo que retrasemos en decidir, se va a retrasar también el tiempo para organizarla”, señaló Alarcón.

Advirtió que retrasar las primarias es peligroso para la oposición y recordó el ejemplo del 2018, cuando el gobierno de Nicolás Maduro adelantó las elecciones casi siete meses. “No hay ninguna razón para pensar, ni siquiera es ilegal, que el gobierno lo vuelva a hacer y que la adelante a mayo, abril o marzo”, dijo.

 

En consecuencia, añadió Alarcón, «si se escoge un candidato tarde, posiblemente esa persona no va a tener tiempo ni de montar campaña, equipos ni estructura para competir en una elección, lo que siempre va a ser desventajoso para el candidato de la oposición”.

“No vamos a tener una elección justa ni con plenas condiciones electorales, porque así no estaríamos en democracia y eso hace que el que quede elegido, tenga que organizarse mucho mejor y montar una campaña mucho mejor que si estuviera en un proceso democrático”, alertó.

¿Qué pasa con las negociaciones?

Gerardo Blyde, jefe de la delegación de la Plataforma Unitaria en la negociación, señaló el pasado 15 de agosto, que hay «altísimas» probabilidades de retomar este proceso.

“Estamos con altísimas probabilidades, como han declarado otros voceros de la propia delegación a la que pertenezco, de un pronto regreso al proceso de negociación”, señaló Blyde en entrevista con Unión Radio.

 

Ante la pregunta de si el proceso de negociación podría influir en la realización de las primarias de la oposición, Benigno Alarcón, director del Centro de Estudios Políticos y de Gobierno de la UCAB, señaló que en este momento no ve que las mismas puedan verse afectadas.

Yo creo que hay personas del lado de la oposición cuyas consideraciones de hablar de hacer las primarias antes o después, tienen que ver más con su situación política. Si yo soy un candidato que estoy en este momento en una situación privilegiada para ir a un proceso electoral, entonces yo quiero que la elección se haga mañana. Pero si yo soy una persona que en este momento no tiene ninguna posibilidad real de competir en una elección, pues entonces yo prefiero que se postergue hasta que esté en una situación mucho más favorable para competir en una elección”, señaló Alarcón en entrevista con este medio.

A juicio del experto, hay actores políticos que no expresan las verdaderas razones de su conveniencia en cuanto a hacer las primarias antes o después. Ante ese panorama, dijo, que se “fabrican otras razones”, como esperar a que pase la negociación. 

Sin embargo, desde su perspectiva, la negociación no tendrá un desenlace pronto, y el hecho de que llegue a compromisos que afecten la elección del 2024 va a depender de que se pongan sobre la mesa “condiciones que tienen que ver con el 2024”.

“Pero yo, en este momento, no creo que la primaria pueda tener alguna posibilidad de verse afectada por lo que se acuerde en la negociación”, señaló.

Acuerdos y señales al gobierno

Aunque algunos integrantes de la delegación de la Plataforma Unitaria esperan que se reanude la negociación, Benigno Alarcón no ve un acuerdo a corto plazo, o que el gobierno permita que se midan en las elecciones quien quiera, habilitando a personas que están inhabilitadas.

Asimismo, Alarcón tampoco considera posible que, en el corto plazo, el gobierno permita que la oposición pueda realizar las primarias con el apoyo del Consejo Nacional Electoral (CNE), ni tampoco que se vaya a permitir el voto en el exterior.

“Yo creo que el tema de esperar por las negociaciones es una forma de postergar la decisión y no algo que verdaderamente vaya a tener una incidencia final en el proceso, al contrario, yo soy de los que piensa que adelantar las primarias, ponerle fecha, más bien favorece al equipo negociador”, indicó.

 

En ese sentido, dijo que fijar una fecha a las primarias le enviaría la señal al gobierno de que la oposición “puede fortalecerse”, lo cual obliga al oficialismo a reconsiderar la conveniencia de mantener la negociación paralizada”, debido a que “puede estar en una situación menos favorable después de que se realice la primaria y de que todo el apoyo se concentre en una sola persona que represente a la oposición”.

Apoyo de la gente

Según la encuesta de opinión pública realizada por Delphos para el Centro de Estudios Políticos y de Gobierno de la UCAB, presentada a finales de junio, el 52% de los venezolanos participaría en las primarias de la oposición, aunque la porción baja a 40% si son organizadas por el CNE.

Al respecto, Alarcón señaló que pensaba, al principio, que ese apoyo iba a estar alrededor del 25 o 30%, pero encontraron que “la primaria le interesa a mucha gente”.

“Le interesa a los que apoyan a algún candidato, a los opositores que no apoyan a ningún candidato y le interesa incluso a aquellos que están desafiliados políticamente, que dicen que no están ni con el gobierno ni con la oposición”, dijo.

Lo anterior, indicó Alarcón, tiene que ver con que los actores, unos y otros, “quieren apoyar a alguien que les parece más idóneo para representarlos, inclusive, aquellos que están cansados de la oposición, posiblemente tengan en mente alguien que, si estuviese a la cabeza de la oposición, pues las cosas marcharían mejor”.

“Cuando cruzas por la autodeterminación política, o sea, con quienes son opositores que apoyan a algún liderazgo, opositores que no apoyan a ninguno o que no apoyan ni al gobierno ni a la oposición, nos encontramos que entre quienes se autodeclaran como opositores, el apoyo prácticamente es más del 80%”, finalizó.

CLAVES | Los ocho posibles escenarios políticos para Venezuela en 2022

 

La posibilidad de activar un revocatorio contra Maduro sería el gran debate del año que viene, independientemente de su factibilidad o no, consideró el director director del Centro de Estudios Políticos y de Gobierno de la UCAB, Benigno Alarcón. Ese debate mostrará una vez más las divisiones opositoras
Benigno Alarcón considera que el terreno sigue fértil para la aparición de un outsider que asuma el liderazgo opositor, pero no vislumbra quién puede asumir ese papel. «Alguien ocupará ese espacio, si no es un líder reemergente, será uno nuevo, la gente lo está reclamando»
El gobierno lo logró legitimarse ni con los comicios del #21Nov, ni con el diálogo en México, por lo que es previsible que las sanciones se mantengan y que el chavismo siga aferrándose a sus aliados -que tienen larga experiencia en vivir con sanciones- para adaptarse e impedir que amenacen su permanencia en el poder
Es probable que las manifestaciones aumenten en 2022. La disposición a protestar del venezolano estaba por el orden del 40% según la última medición de julio. Si ocurre un suceso disparador como el de 2017,se podrían activar las protestas masivas
La apertura de una investigación por crímenes de lesa humanidad en Venezuela limitaría la propensión a reprimir eventuales protestas.  «No es lo mismo mandar a un soldado a reprimir una marcha antes de la CPI que después. Habrá mayor resistencia a reprimir», opina el analista Benigno Alarcón

 

@MrsYaky

 

En el marco del foro «¿Venezuela se está arreglando?: Perspectivas 2022», organizado por Ecoanalítica y celebrado el pasado 30 de noviembre, el director del Centro de Estudios Políticos y de Gobierno de la Universidad Católica Andrés Bello, Benigno Alarcón, analizó el escenario político en Venezuela tras los comicios regionales y proyectó lo que puede esperarse en este terreno para el año 2022

Respecto al proceso electoral del pasado 21 de noviembre, Alarcón dijo que el gobierno, además de lograr 19 gobernaciones, cumplió con su cometido de dividir a la oposición en varias «oposiciones pequeñas«, con lo cual juega a mostrarse como una mayoría relativa, aunque en el voto nacional estuvo muy rezagado. 

Añadió que, además, el gobierno concentró la represión en pocos actores políticos y no a nivel general, porque el escenario se prestó para ello.

«La represión fue innecesaria, el régimen podía controlar el costo de tolerar porque logró dividir a la oposición y sirvieron para generar clientelismo político electoral (…) El gobierno jugó a generar abstención y tuvimos la elección con mayor abstención en la historia política venezolana, casi 60%», describió.

Sobre las condiciones electorales opinó que, tal y como lo concluyó la Misión de Observación Electoral de la Unión Europea, no hubo mejoras sustanciales en la integridad del proceso, lo que le derivó en una cuestionada victoria del chavismo que no ayudó a reforzar su legitimidad. 

 «Pese al cambio de rectores, aumentó la abstención .Hubo menos participación. La estrategia del régimen de ‘divide y persevera’ permitió al partido de gobierno ganar el proceso por dispersión y cooptación del voto opositor», sumó.

Después de analizar el panorama poselectoral, Alarcón hizo un repaso por lo que se puede esperar políticamente para Venezuela en el año 2022. A continuación, enlistamos sus apreciaciones. 

«Todos contra todos» en la oposición

El triunfo de gobernadores opositores en tres estados y lo ocurrido en Barinas podría generar una debacle dentro de la oposición, a juicio de Alarcón.

«Habrá lucha de todos contra todos para convertirse en nuevo referente: los que ganaron gobernaciones se sentirán los nuevos líderes de la oposición; los que no ganaron, pero son líderes reconocidos, dirán que los tiempos de Guaidó ya pasaron; otros propondrán primarias -los que están mejor en las encuestas- y los que no están tan bien dirán que para qué hacer primarias, que esperemos hasta 2024″, enumeró el analista político. 

 

 

Considera que la oposición queda nuevamente con un debilitamiento de todo el liderazgo y que esta confrontación de «todos contra todos» para decidir quién va a convertirse en nuevo referente supondrá un  «reordenamiento de oposiciones».

«Creo que, básicamente, podríamos dividir a esos grupos, y posiblemente así funcionarán las alianzas, en dos ejes: qué tan moderados o qué tan radicales son. Los actores radicales estarán liderados por VP, Vente Venezuela, posiblemente AD, Copei, Causa R y Ciudadanos, de Delsa Solórzano. Mientras que la oposición ‘moderada’ estará conformada por  Alianza Democrática, Un Nuevo Tiempo y Primero Justicia si se apega a la tesis Capriles, que es esperar hasta 2024″, indicó. 

Ante esta situación, el gobernante Nicolás Maduro insistirá en su propósito de sustituir a una oposición que le ha sido molesta durante años, desplazar a esa oposición referente y conversar con la «moderada», a quien reconocerá como su verdadera oposición. 

Referéndum revocatorio: la línea que marcará la cancha

La posibilidad de activar un revocatorio contra Maduro sería el gran debate del año que viene, independientemente de su factibilidad o no. Y ese gran debate hará que unos se pongan del lado de la cancha o en la esquina contraria, según Alarcón.

«Algunos dirán que esperemos hasta 2024, y otros que no se puede abandonar la batalla y que hay que darla en otros terrenos», anticipa. 

 

Alarcón destacó que el revocatorio es un tema que tiene casi 80% de aprobación entre los ciudadanos y que va a mover a mucha gente. 

«La demanda del revocatorio es altísima, por lo tanto, habrá gente en ese mercado, promoviendo ese bien, independientemente de su factibilidad (…) El tema del referéndum revocatorio dividirá a la oposición, los que estén en contra vociferarán menos, porque es muy popular, pero trabajarán tras bastidores para que eso no se concrete», pronostica. 

Terreno fértil para un outsider

Aunque el director del Centro de Estudios Políticos y de Gobierno de la Universidad Católica Andrés Bello no ve, por ahora, a alguien que pueda jugar este rol, advierte que si se asoma, la gente lo abrazará inmediatamente, debido a la baja popularidad del gobierno y a la pérdida de confianza en la oposición. 

«¿Recuerdan el fenómeno Lorenzo Mendoza? Él era outisder, él dijo responsablemente que no podía, pero si alguien dice ‘yo puedo’, y tiene credibilidad, puede convertirse en un fenómeno que no estamos viendo venir y puede pasar. La gente reclama una cara nueva, otro liderazgo, hay una enorme desconfianza hacia el liderazgo político. El terreno está fértil, pero no lo tengo a la vista quién puede ser«, expuso.

Prosiguió afirmando que la gente quiere un nuevo líder que «saque a Maduro» y que el mercado está abierto: «Alguien ocupará ese espacio, si no es un líder reemergente, será uno nuevo, la gente lo está reclamando».

Las sanciones se mantendrán y Maduro seguirá adaptándose

Alarcón cree que el gobierno no logró su cometido de tener una mejor reputación internacional luego de los comicios regionales y municipales. No en vano, Estados Unidos, Canadá y la Unión Europea consideraron que estuvieron muy distantes de los estándares internacionales para que fueran verdaderamente libres y transparentes. 

Esto hará que las sanciones se mantengan, aunque podrían someterse a revisión aquellas que puedan afectar a la población.

«Lo internacional sigue igual a como estaba: se aleja la tesis de que se eliminarán las sanciones, por lo que sucedió tanto en la elección como en la mesa de México. El ambiente se mantiene igual, las posibilidades de eliminar las sanciones se alejan tanto por parte de la Unión Europea como de EEUU. Seguramente, la comunidad internacional revisará aquellas que tiene efecto indeseable», plantea. 

Alarcón aclaró en este punto que no es verdad que el gobierno de Maduro esté aislado y que no pueda vivir con las sanciones.

«De hecho, ha aprendido a vivir con ellas, tiene aliados que tienen larga experiencia viviendo con sanciones, los cuales ayudan con el mayor gusto a Venezuela por ser una causa geopolítica. Venezuela no está sola, no está con los socios que quizá quisiéramos, pero tiene otros», acotó. 

Podría aumentar la disposición a manifestar

Alarcón refirió que la última medición sobre la disposición a protestar de los venezolanos, que data del mes de julio, estaba por el orden del 40%. Estima que, actualmente, debe ser más alta después de las elecciones.

«Ya un 40% es una cifra altísima, porque lo que se necesita para que la protesta tenga impacto político es que se movilice 3,5% del país, eso está súper estudiado. El gran inhibidor para protestar es la violencia: la gente la teme y la rechaza. Hay desmovilización por vacío de liderazgo, hay caída de expectativa por lo que se se puede lograr protestando, la gente siente que no puede hacer nada, que ya lo hizo todo y nada sirvió. Pero siempre está allí la disposición, siempre y cuando se le convoque para algo con sentido», expresó. 

Agregó que en países como Cuba sigue latente la posibilidad de que se inicie una ola progresa de manifestaciones. «Y si hay movilizaciones importantes, eso se contagia, es como la primavera árabe. Los dos países con las defensas más bajas para contagiarse son Nicaragua y Venezuela. Y eso lo vimos en 2017. Veníamos de un 2016 tranquilo y de pronto en 2017, a partir de la declaración de la fiscal general sobre el orden constitucional en Venezuela, vino el ciclo de protestas más largo de la historia del país. Si un fenómeno similar dispara las protestas, puede ser que el comportamiento represivo sea distinto», sostuvo.

Ante las desventajas y la fragmentación en la que está la oposición, abunda, el gobierno la obliga a cooperar con sus propósitos, quiera o no quiera: Tiene más poder y la lleva a su terreno. Pero un factor que podría poner el péndulo del lado opositor es justamente la posibilidad de movilizar a la población y hacer que  protesten, porque el juego se hace simétrico. 

Mayor resistencia a reprimir por la investigación de la CPI

El hecho de que la Corte Penal Internacional resolviera abrir una investigación a Venezuela por crímenes de lesa humanidad, aunque no tendrá consecuencias políticas en lo inmediato para funcionarios del gobierno, aumentaría los costos de la represión a posibles manifestaciones.

«No es lo mismo mandar a un soldado a reprimir una marcha antes de la CPI que después. Habrá mayor resistencia a reprimir. Hay una cohesión entre el Alto Mando Militar, pero hay menor cohesión en la cúpula hacia abajo, y a medida que se baja, hay menos cohesión. Eso hay que verlo con cuidado porque podría traer insubordinaciones y cambiar los acuerdos tácitos en la FANB: subordinarse al gobierno, mantenerlo en el poder, no hacer nada contra el gobierno, eso puede ir cambiando si la situación se va enrareciendo», advierte Alarcón.

 

Una hipótesis probable es que, ante movimientos de protesta, no se verá represión en los niveles del año 2017, que son justamente los casos que originaron la apertura de la investigación de la CPI. Eso podría multiplicar la voluntad de la gente de manifestar.

«Si no hay esos niveles de represión ni violencia ,y hay cierto orden en las protestas, estas podrían comenzar a masificarse. Si ocurre, van a crecer, porque la represión, hipotéticamente hablando, va a ser menor», dijo. 

Diálogo sin futuro

El analista ve escasas probabilidades de que este proceso de negociación, que se suspendió luego de la extradición a Estados Unidos de Alex Saab, derive en una transición para Venezuela. 

«Decíamos hace unos meses que es una negociación asimétrica, que el gobierno era más poderoso que la oposición. No fue a un proceso de cambio político y se obligó a la oposición a cooperar, a ir a la elección del 21 de noviembre. El objetivo del gobierno era reducir sanciones, moderarlas, y legitimarse como actor internacional. Tener reconocimiento de una oposición que se sienta con él y de los países que se sientan a interactuar con él. El gobierno no logró su propósito, ni la oposición la transición. Y si el gobierno no lograba un acuerdo, su fin último era mantener el status quo: quedarse con el poder, aunque se mantuvieran las secciones», apuntó. 

¿Qué esperar de la FANB?

Esta pregunta parece tener una respuesta anticipada, ya que el sector castrense ha sostenido a la actual administración de gobierno en el transcurso de todas las crisis políticas. Pero Alarcón no descarta que haya elementos que puedan mover los escenarios progresivamente.

«La Fuerza Armada es un actor fundamental para las transiciones, tanto cuando actúa para hacer el cambio como cuando no hace nada. Puede que permitan que el gran rollo se arme y que el gobierno lo resuelva. Pero siempre terminan teniendo la última o penúltima palabra. Lo que pasa con la Fuerza Armada venezolana es que tiene costos muy altos de tolerancia a un cambio político. Un cambio de la situación política tiene costos altos y significa peligro para ellos. Por eso,  no se tomarán una transición a la ligera, no van a dejar que cualquiera llegue y tome el poder», argumenta Alarcón, al tiempo que recuerda que esta institución tiene «muy bajos niveles de legitimidad», que se mueven al mismo ritmo del gobierno. 

Opinó además que si el sector militar se atreve a poner «freno de mano» al actual gobierno,  la comunidad internacional puede cambiar su posición respecto a ellos y es posible que la oposición, ante una acción de este tipo, se una un poco más de lo que está.

Aún así, precisó, para que esto ocurra y se produzca una transición que sea aceptada por la FANB deben sumarse muchos factores: amplia movilización del ciudadano, división del gobierno (porque se generen incentivos muy altos) y apertura de una oportunidad de negociación en la que sea incluido el sector militar. Y estas condiciones no parecen probables en el corto o mediano plazo.

3x3 | Las concesiones que haga el gobierno no van a disparar el entusiasmo
Mientras promete acabar con los protectorados y el CNE habilita la tarjeta de la MUD, al mismo tiempo fomenta la ley comunal, habla de una reforma judicial y funcionarios encarcelan a miembros de ONG

Francisco Zambrano

 

Por un lado, el gobierno de Nicolás Maduro ofrece la eliminación de los protectorados a las gobernaciones y alcaldías y el Consejo Nacional Electoral presidido por el rector Pedro Calzadilla habilita nuevamente la tarjeta de la Mesa de la Unidad Democrática de cara a las elecciones regionales y municipales del venidero 21 de noviembre; por otro, el propio Maduro alerta sobre una reforma judicial encabezada por Diosdado Cabello y Cilia Flores, impulsa el proyecto de ley de ciudades comunales e imputan y encarcelan por terrorismo e instigación al odio al coordinador de la ONG Fundaredes, Javier Tarazona y a dos de sus colaboradores.

A juicio del politólogo Benigno Alarcón, la abogada y ex embajadora del gobierno interino de Juan Guaidó en Chile, Guarequena Gutiérrez y la coordinadora de la ONG Acceso a la Justicia, Laura Louza, si Maduro pretende que los gobiernos de Estados Unidos, Canadá y la Unión Europea relajen las sanciones a su gobierno, está enviando señales contradictorias.

Tanto las administraciones de Joe Biden, la de Justin Trodeau y los miembros de la Unión Europea ofrecieron una flexibilización de las sanciones al gobierno de Venezuela, siempre que muestren rasgos de democratización y transparencia en los próximos comicios regionales y unos eventuales presidenciales. Eso incluye observación internacional imparcial y condiciones justas y equilibradas para los miembros de la oposición que participen.

Alarcón, Gutiérrez y Louza responden a tres preguntas de Runrunes en torno a este tema.

¿Qué persigue la comunidad internacional con este ofrecimiento de flexibilizar las sanciones?  

Benigno Alarcón: Evidentemente lo que buscan con esto es que las sanciones sirvan de punto de partida para negociar un mejoramiento de las condiciones electorales. Ciertamente habría una flexibilización en caso de que haya concesiones importantes de cara a la integridad del proceso electoral. El problema, es que una mejora de la integridad electoral es un tema de condiciones y de oportunidad. De poco sirve que yo tenga una mejora de las condiciones si el tiempo no permite aprovechar estas mejoras. La comunidad internacional debe estar consciente de lo que la dosificación de condiciones implica para los resultados electorales, por lo cual es difícil que se hagan concesiones significativas a las sanciones si el gobierno no otorga tales condiciones de manera oportuna.  

Guarequena Gutiérrez: Valoro mucho los esfuerzos de la comunidad internacional. La perseverancia que ha tenido en atender, buscar y procurar vías para que la democracia de Venezuela pueda ser reconquistada. Más allá de lo efectivo que pudiera ser, sabemos que la situación de nuestro país es de suma importancia en cada gobierno de los países con los cuales existen lazos basados en fomentar una resolución para acabar con un régimen que viola derechos humanos. 

Laura Louza: Lo que se persigue es que la administración venezolana otorgue garantías y condiciones electorales no solo en los comicios regionales y municipales, sino también en unos eventuales presidenciales, a cambio de eso los gobiernos del extranjero estarían dispuestos a flexibilizar las sanciones, ese es el incentivo que tiene Maduro. Debemos recordar que hay sanciones personales por violaciones a los derechos humanos y corrupción y sanciones colectivas, impuestas a ciertas transacciones del gobierno, especialmente en materia energética, esa flexibilización debe ser en torno a las sanciones colectivas porque son las que afectan al pueblo. Venezuela ha sabido jugar en el tablero, vendiendo el tema de que las sanciones ha provocado la emergencia humanitaria compleja, pero todos sabemos que todo eso viene de atrás. Han maquillado la justicia en los casos de Juan Pablo Pernalete, Fernando Alban y el capitán Acosta Arévalo.  

¿Qué tan creíble puede ser un gobierno que declaró en desacato a la Asamblea Nacional electa en 2015, no la dejó legislar y creó una Asamblea Nacional Constituyente?  

Benigno Alarcón: El régimen está dispuesto a otorgar condiciones, pero esas concesiones tienen un límite en todo aquello que arriesga el control del poder. Incluso es posible que el régimen esté dispuesto a perder en algunos estados y municipios, pero lo que no creo que esté dispuesto es a generar condiciones que disparen el entusiasmo, aumenten de manera significativa la participación de la oposición y pueda traducirse en la derrota del gobierno. El régimen sabe bien, que si otorga condiciones plenas no hay forma de poder ganar las elecciones, en el caso de que la oposición participe de manera unida. Pero la unidad requiere negociación y tiempo para poder lograrse y eso el régimen también lo sabe.  

Guarequena Gutiérrez: Hay que hacer todo por un país libre, y todo significa, presionar, insistir ante el mundo por los crímenes que comete el régimen a diario y lo que ha hecho por años. Los países de la región, así como los de la comunidad europea y los demócratas venezolanos apostamos por vías que incluyan a todos los factores de la sociedad venezolana, porque la construcción legitima de un país libre necesita la mayor cantidad posible de los actores que en este se desarrollen. 

Laura Louza: El gobierno tiene que tomar acciones más concretas si quiere convencer de que está actuando en buena lid. Ellos han mostrado algunos avances, nombraron a un CNE en teoría global, habilitaron la tarjeta de la MUD, que estaba suspendida por una decisión del Tribunal Supremo de Justicia. Es necesario también que revoquen algunas inhabilitaciones, sin embargo, el Contralor General, Elvis Amoroso, dijo que aquellos que no hicieron su declaración jurada de patrimonio no los va a habilitar, además prolongaron por un año la medida contra Acción Democrática, respaldando la junta directiva ad hoc. Maduro ofrece su palabra de que va a dejar a un lado los protectorados, pero creó un sistema jurídico alrededor de ellos.  

¿Cuál es el futuro de la oposición y qué acción deben tomar sus líderes, algunos hasta silentes?  

Benigno Alarcón: El peor escenario para la oposición es participar y ser aplastada porque va dividida o porque no logra sacar a la gente a votar. Recuperarse de una debacle así les resultara muy difícil. La comunidad internacional demanda hechos y eso se verá cuando los actores de la oposición y los expertos consultados por ellos evalúen las concesiones dadas por el gobierno. El intercambio principal se dará en la mediación, si se inicia, y dependerá de demandas concretas y la respuesta del gobierno a ellas. Creo que la dispersión del voto por la fragmentación de la oposición más una abstención importante, puede ser útil para el gobierno, especialmente si se hacen las concesiones de manera tardía. 

Guarequena Gutiérrez: Todos los esfuerzos, los medios y resultados que afloren son de altísima valía. Luchar en la calle, alzar la voz en los países donde esté la diáspora venezolana, procesos electorales con condiciones, respeto a la voluntad de la ciudadanía y tener muy claro que la ruta es un presidente democrático, que es la cabeza de un gobierno, una gestión a través de la cual se restituya el estado de derecho, que haya respeto a los derechos humanos, un país en democracia.  

Laura Louza: Hay una delegación del G4 que ha estado negociando con la comunidad internacional, hasta qué punto pueden garantizar que van a flexibilizar las sanciones y respetar la voluntad popular en elecciones, no se sabe, lo que nos interesa a los venezolanos es que se restituya la institucionalidad y el estado de derecho. Uno de los objetivos del gobierno es eludir una sentencia de la Corte Penal Internacional. Ellos pretenden hacer ver que se está siguiendo una vía democrática, pero son sumamente tímidos, el tema de fondo no cambia, al final del día se ve que la persecución sigue y lo dice el más reciente informe de la comisionada de derechos humanos de la ONU, Michelle Bachelet.   

Centro de Estudios Políticos UCAB: el nuevo CNE no es equilibrado como se quiere vender
«El éxito de este nuevo CNE dependerá de las condiciones que logre construir»

 

El director del Centro de Estudios Políticos y de Gobierno de la UCAB, Benigno Alarcón, afirmó que aún cuando el recién nombrado Consejo Nacional Electoral cuenta con cinco rectores, entre principales y suplentes, que no están bajo el control del gobierno, «no es un CNE equilibrado como han querido vender, sino que sigue siendo evidentemente sesgado hacia los intereses del gobierno con diez rectores que controla».

Si todo sigue igual no podemos esperar que la reputación del CNE mejore, todo va a depender de lo que a estos rectores nuevos que entran en el proceso se les permita incidir en el cambio de reglas.

Alarcón insistió que no es el tipo de CNE que querríamos los venezolanos y que la Constitución obliga, que es un CNE donde deberían ser todos rectores independientes, dijo durante entrevista con Eduardo Rodríguez en el programa A Tiempo de Unión Radio.

Sostuvo que la pregunta a responder es ¿qué se les va a permitir cambiar del proceso electoral?, y recalcó que el éxito de este nuevo CNE dependerá de las condiciones que logre construir.

Benigno Alarcón consideró que cuando sea convocada con suficiente tiempo de anticipación la fecha de las elecciones se deben dar unas condiciones mínimas como: acceso a los medios para poder hacer campaña y mostrar los candidatos, que se levanten las inhabilitaciones a los partidos opositores para que puedan participar, así como permitir la observación electoral internacional para generar confianza en los votantes.

*Con información de UR

Seguimos muy lejos de tener un CNE equilibrado
El director del Centro de Estudios Políticos y de Gobierno de la UCAB, Benigno Alarcón, considera que, «para hablar de un CNE equilibrado, todos los rectores deberían ser independientes, sin vinculación a ningún partido o actor político, como ordena la Constitución y como aconsejan las buenas prácticas internacionales»

 

El abogado Benigno Alarcón, director del Centro de Estudios Políticos y de Gobierno de la UCAB, se refirió vía Twitter al nombramiento de los cinco rectores que conformarán el Consejo Nacional Electoral (CNE) durante los próximos siete años.

«Creo que algunos andan confundidos con lo de los nuevos rectores del CNE. Una cosa es que el gobierno tenga menos rectores provenientes de sus filas, lo cual es una ganancia, y otra muy distinta es decir que tenemos un CNE equilibrado. Seguimos muy lejos de eso», tuiteó.

Al respecto, precisó: «Si contamos rectores principales, el régimen tiene 3 de los 5. Si hablamos del total de los rectores (principales y suplentes), el régimen controla al menos 10 de los estados 15. Pero lo más importante ahora es cómo queda el control de las instancias del CNE».

En opinión de Alarcón, «para hablar de un CNE equilibrado, como algunos pretenden vender a este, la realidad es que todos los rectores deberían ser independientes, sin ninguna vinculación a ningún partido o actor político, como ordena la Constitución y como aconsejan las buenas prácticas internacionales».

En este sentido, considera que «este puede ser un mejor CNE que lo que hemos tenido hasta ahora, pero no es un CNE equilibrado y mucho menos ideal».

Por ello, «solo queda apostar que estos 5 rectores que no controla el régimen sean capaces de hacer una diferencia en el CNE. No será fácil, no creo que el régimen los haya puesto allí para dejarlos hacer, pero su éxito sería ganancia para todos».

Virtuoso: Debemos rescatar del espíritu de unidad del 23 de enero

josevirtuoso

El rector de la Universidad Católica Andrés Bello,  Francisco Virtuoso, dijo que es necesario rescatar del espíritu de unidad del 23 de enero.

El sacerdote, quien ofreció declaraciones en compañía del director del Centro de Estudios Políticos de la UCAB, Benigno Alarcón y del historiador Elías Pino Iturrieta, sentenció que sobre el 23 de enero se ha construido una suerte de mitología.

“Hay que decirlo: el 23 de enero fue en esencia una insurrección militar; no constituye un movimiento civil que fue a sacar al dictador de Miraflores. Todo lo contrario, fue un movimiento de descontento militar, luego secundado por la ciudadanía y los partidos de la época agrupados en la Junta Patriótica. Este movimiento se gestó en rebeldía ante un régimen que se fue haciendo cada vez más personalista, más intervencionista, más controlador y que terminó molestando al Alto Mando que le había dado apoyo. El gobierno de Pérez Jiménez siempre se entendió como el gobierno de las fuerzas armadas, pero fue desde las propias fuerzas armadas que se le asestó el golpe, porque el régimen se fue haciendo cada vez más castrador incluso contra los mismos militares, quienes resintieron tanto intervencionismo”.

 

Virtuoso afirmó que al derrocamiento del régimen que gobernó Venezuela entre 1948 y 1958 se le ha dado un carácter de “gesta popular” que no es del todo cierto.

“Debemos rescatar del espíritu de unidad del 23 de enero. Después de esa jornada se fue generando un proceso por el cual ocurrieron varios fenómenos asumidos colectivamente. A lo largo del año 58, la sociedad civil, los sindicatos, los estudiantes, los empresarios y los políticos de distintas tendencias hicieron un frente común en contra de movimientos militares que pretendían retomar el control del país. También se desarrollaron acuerdos sociales y un pacto de gobernabilidad entre los partidos, que mostraron una voluntad de concertación para definir el rol del Estado, la forma de gobierno y la participación ciudadana. Ese proceso de acuerdo, de pacto, de negociación, es muy pertinente para el momento en el que vivimos. En este momento en el que está planteado el cambio político en Venezuela es fundamental construir una unidad que no solamente sea táctica sino estratégica, de lucha, de espíritu y de valores, en donde los partidos  y todas las fuerzas de la sociedad se activen en defensa de la democracia. Esa es la tarea pendiente hoy en Venezuela”.

Pino Iturrieta calificó el momento como un hito que permitió el retorno de la civilidad a Venezuela.

“Es una exageración decir que fue el bravo pueblo el que derrocó al tirano. La gesta civil es de poca importancia en el 23 de enero. Fue en los cuarteles donde ocurrió todo. Sin embargo, esos hechos dejaron como legado el entendimiento de las élites para acordar una visión conjunta para la resolución de las dificultades. Gracias al 23 de enero se produjo la rectificación de la manera unilateral y encontrada de ver los problemas de la sociedad que habían llevado a cabo los incipientes partidos desde la muerte de Gómez. Todos entendieron cómo su rivalidad había conducido al derrocamiento de Rómulo Gallegos en 1948. Después de una dictadura de 10 años, el 23 de enero abrió paso a un proceso histórico de entendimiento pero también de anhelo de una Venezuela mejor, que significó el apuntalamiento de una sensibilidad unitaria para evitar el retorno de cualquier movimiento militar”.

Benigno Alarcón, afirmó que al igual que hace 60 años, el gobierno se encuentra en una situación de “muchísima inestabilidad” debido a  su pérdida de autoridad frente a los ciudadanos y a su creciente uso de la fuerza.

“En la medida que el gobierno no tiene legitimidad se hace más dependiente del uso de la fuerza y de los sectores que la aplican. Eso genera una estabilidad muy precaria porque  requiere acuerdo entre esos actores (militares, policías, jueces, fiscales) que mantienen al gobierno en el poder. Cuando ese  acuerdo se resquebraja, se genera el caldo de cultivo para que otros actores entren a escena y busquen una salida.  Semanas antes del 23 de enero, nadie se imaginaba que el gobierno de Pérez Jiménez llegaría a su final. Pero apenas el equilibrio perdió su centro vimos cómo ese régimen terminó de caer”.

Con información de Dirección de Comunicaciones UCAB