El Coordinador Nacional de Voluntad Popular y preso político en Ramo Verde, Leopoldo López, publicó el primer capítulo de su diario, titulado «La cobardía de Diosdado Cabello», en el que da detalles de su detención en febrero de 2014 y de las visitas que le hizo a su casa, para ese entonces, el presidente de la Asamblea Nacional, Diosdado Cabello.
“El 16 de febrero, dos días antes de que me presentara ante la justicia, 20 hombres vestidos de negro, con capuchas, armas largas y una orden de captura por terrorismo y homicidio (se presentaron en mi casa) Luego de requisar la casa e intimidar a mi familia les informaron que el presidente de la Asamblea Nacional estaba en camino y que quería hablar con ellos (…) Diosdado Cabello al llegar a mi casa nos dijo: lo mejor para todos era que yo me fuera del país, y que incluso, si yo accedía y aceptaba su oferta él «amablemente» podía ayudar con las gestiones necesarias para tal fin”, comentó.
López continúa: «Lo que no sabía Cabello es que ese mismo día más temprano yo le había hecho llegar mi decisión a mi familia a través de la única persona con quien me reuní durante mi clandestinidad: Carlos Vecchio.»
Indicó que ante su negativa, Cabello propuso una segunda solución: que López pidiera asilo y así se encerrara en alguna embajada. El líder de Voluntad Popular asegura que ante la insistencia de su familia de que se estaba cometiendo una injusticia, Cabello afirmó que López era inocente y que se trababa de una «medida política».
López continúa con su relato y explica que horas antes de entregarse, Cabello volvió a visitar a su familia pero en esta oportunidad asegurando que tenía prueba de que querían matarlo, que si de verdad iba a entregarse, que lo hiciera en privado. A pesar de la insistencia de su familia, López se terminó entregando en un acto público en Chacaito.
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