YA DIOSDADO LO AMENAZÓ cuando le dijo: ¡si la última vez lloraste no sé cómo vas a hacer esta vez…gritarás! Esa admonición del superministro -que controla más de lo que la gente se imagina- pudiera hacerse realidad muy pronto apenas el plan anunciado por el ministro de finanzas y planificación se venga abajo como pronostican todos los que sí saben de economía. Inflación y escasez, decrecimiento y deterioro mayor de empresas y sobre todo declive inmediato de la ya pobre calidad de vida venezolana.
Cuando el “monje” Giordani amenazaba a las casas de bolsa y a quienes intermediaban entre la moneda verde y el bolívar débil no se daba cuenta que a su lado izquierdo tenía a uno de los responsables de las acciones que el propio Giordani inflaba, cuando no inventaba, y acusaba a los que por años vienen haciendo el negocio que desde las alturas del poder permitían y más que eso: propiciaban en negocios conjuntos altos funcionarios con sus amigos y socios en el sector financiero. Solo para recordar, fue el propio Merentes quien inició con aquellos bonos Boden de la nación argentina el mercado de permuta de títulos y luego -en grande- con las notas estructuradas.
Este fue el negocio más grande de repartición de comisiones por intermediación financiera que se conozca en el país. Se habla de una cantidad de $ 3500 millones en ese reparto. Por eso llamó la atención que el consentido de Chávez, en esta disputa entre dos visiones de la actual coyuntura económica, hablara de “mecanismo de extracción de divisas o una bicicleta financiera” siendo éste el término que aplican los argentinos.