Un informe de la Polimiranda revela que en lo que va de año el cuerpo de seguridad con más víctimas es la Policía Nacional Bolivariana
Un informe elaborado por la Policía de Miranda revela que los homicidios de funcionarios de cuerpos de seguridad, civiles y militares, en esa región y en el municipio Libertador han incrementado este año, por lo menos, 20% respecto a 2013.
El documento elaborado en noviembre indica que hasta la fecha han muerto 120 agentes policiales o integrantes de componentes de la Fuerza Armada Nacional, mientras que durante 2013 la cifra fue de 100 personas.
La institución que más víctimas ha aportado es la Policía Nacional Bolivariana, con 29 miembros. En 2013 ese cuerpo también ocupó el primer lugar de funcionarios ultimados, con 26. En 2 años han matado a 55 oficiales de esa institución solo en Distrito Capital.
Este año 22 militares han sido víctimas de la violencia capitalina: 12 de la Guardia Nacional Bolivariana, 9 del Ejército y 1 de la Dirección de Contrainteligencia Militar.
80% de los funcionarios muertos estaba en su tiempo libre. En 19% de los casos reportados el policía o militar estaba en su vivienda o muy cerca de ella. Además, en 1% de esos homicidios el ataque al funcionario ocurrió con un arma blanca en intentos de robo. En otro 5%, el agente estaba en un local comercial cuando ingresaron los maleantes.
Solamente en 13% de los casos reportados este año el agente debidamente uniformado falleció como consecuencia de un enfrentamiento o en el desarrollo de un procedimiento policial.
Los principales objetivos de los atacantes fueron los robos de las armas de fuego (36%), o de sus motocicletas (22%). A veces, la arremetida contra la víctima perseguía ambos objetivos.
Este año los agresores han incrementado el uso de carros o camionetas a la hora de ir contra los funcionarios.
El Ministerio de Relaciones Interiores, Justicia y Paz comisionó en octubre a la policía judicial para hacer un arqueo de todos los casos de policías o militares ultimados en todo el país este año. Ese reporte servirá como insumo para tomar decisiones sobre posibles restricciones al porte de armas para estos funcionarios cuando estén en sus horas de ocio.