Solidaridad inmune al coronavirus - Runrun
Francisco Zambrano Ago 19, 2020 | Actualizado hace 4 años
Solidaridad inmune al coronavirus
Organizaciones civiles buscaron alternativas para seguir ayudando a los más necesitados en medio de la pandemia 

@franzambranor

En la vieja normalidad o en pandemia, organizaciones civiles no se lavan las manos con su responsabilidad ante la gente.

Venezolanos siguen ayudando a compatriotas pese a las restricciones de vivir en una perenne cuarentena.

Desde que fue decretado el estado de alarma, algunas empresas se vieron obligadas a cerrar y por ende despedir trabajadores; otras se reinventaron e idearon líneas de producción alternativas.

Las organizaciones civiles y algunas iglesias no se quedaron atrás en su afán de seguir ayudando al más necesitado. Pese al cierre de vías, la cifra ascendente de contagiados de coronavirus y la escasez de gasolina, los voluntarios continuaron con su labor altruista. 

Donde come uno comen 14.400

Desde julio de 2016, el programa Alimenta la Solidaridad ha llevado comida a miles de niños en sectores populares del país. La idea desarrollada por el activista Roberto Patiño nació en un colegio de La Vega en Caracas para atender nutricionalmente a alumnos durante el período de vacaciones escolares. En la actualidad la iniciativa atiende de lunes a viernes a 14.400 niños en 14 estados de Venezuela y cuenta con el auspicio de las embajadas de Alemania y Francia.

La llegada del coronavirus supuso un cambio de estrategia en los comedores de Alimenta la Solidaridad. “Ahora toda la comida es para llevar”, dijo Roberto Patiño.

El propulsor del programa sostuvo que pese a la crisis que ha generado la pandemia, la meta es beneficiar a alrededor de 20.000 en todo el territorio nacional. “Estamos creciendo para atender la lista de espera que tenemos de 5.000 niños adicionales”.

Patiño sostuvo que debido a la escasez de gasolina han recurrido a formas creativas para distribuir la comida en las 215 comunidades donde funcionan. “Hemos tenido que repartir la comida en bicicleta y hasta en burro”. 

El creador de Alimenta la Solidaridad indicó que en zonas rurales de Yaracuy, Lara y Portuguesa se les ha complicado el acceso por la falta de combustible, al igual que en zonas de Caracas como la Cota 905 y Nuevo horizonte. Destacó que, pese a los embates, la comunidad organizada ha conseguido maneras de distribuir los alimentos.

Acción más que solidaria

A pesar del estado de alarma decretado a raíz de la covid-19, Acción Solidaria ha seguido adelante con la recepción de donaciones de medicinas e insumos médicos del exterior de parte de organizaciones humanitarias.

Su presidente, Feliciano Reyna, informó que han entregado 90 toneladas de ayuda a 40 organizaciones aliadas a lo largo del país.

“Para todos fue una tarea titánica a principios de marzo por el tema de la gasolina. Hubo mucha preocupación por la escasez de combustible. También fue un reto para el personal que debió organizarse para apegarse a las normas de seguridad sanitaria”. 

Reyna dijo que a través de una comisión técnica de la Asamblea Nacional, el Ministerio de Sanidad y la Organización Panamericana de la Salud se consiguió una ayuda de 14 millones de dólares para paliar la crisis sanitaria ocasionada por el coronavirus.

“Es una cantidad importante, pero la realidad es que eso alcanza para la dotación de cuatro hospitales. El personal médico necesita insumos a diario porque de eso dependen sus vidas”. 

Reyna señaló que en medio de la pandemia deben seguir atendiendo a personas con enfermedades crónicas. “La persona que recibe diálisis no puede interrumpir su tratamiento por la cuarentena”. 

El presidente de Acción Solidaria señaló que en la organización extremaron las medidas de seguridad en vista de que quienes solicitan ayuda son personas con patologías de consideración. 

“Se trata de una situación sumamente compleja. Tenemos que seguir trabajando en pro de las personas. Hace falta un volumen muy importante de insumos para cada centro de salud”. 

De la olla a la bolsa milagrosa 

A raíz de la crisis alimentaria por la que estaba atravesando Venezuela, la comunidad de la la iglesia La Chiquinquirá, en La Florida, decidió ayudar a la comunidad aledaña a la parroquia. Así fue como surgió en marzo de 2017 la “Olla Milagrosa”, un servicio de comida gratuita dedicado a quienes necesitaban llevarse al menos un bocado al día.

Todos los sábados, desde muy tempranas horas de la mañana, cientos de personas se agolpaban a las puertas de la iglesia en busca del preciado almuerzo. Pero en marzo a raíz de la cuarentena decretada por el gobierno debido al coronavirus, el servicio se vio interrumpido. Pese a que ya no había almuerzos sabatinos, la gente seguía yendo y, por ello, las autoridades eclesiásticas y la sociedad civil decidieron reemplazar parcialmente la “Olla Milagrosa” por “La Bolsa Milagrosa”. “Cada sábado asistía un promedio de 700 personas a almorzar en la iglesia y todavía sigue yendo bastante gente buscando una ayuda, por eso comenzamos con esta iniciativa”, dijo Alcira de Hopkins, una de las organizadoras del evento.

La bolsa contiene harina de maíz, pasta, arroz, granos, medio cartón de huevos, cereales, galletas, enlatados. “Y cualquier otra donación que recibamos de parte de la gente es bienvenida”.

Hopkins aseveró que especialmente intentan beneficiar a madres con hijos y a ancianos. “Tratamos de favorecer al mayor número de familias. Ahora estamos entregando bolsas a unas 70 o 75 familias cada quince días”. 

La organizadora aseguró que ambos programas se concretan gracias a la acción desinteresada de colaboradores. “Empresarios, comercios y gente común y corriente nos hacen donaciones. Cualquier colaboración es bienvenida”. 

Igualmente y debido a la falta de alimentos que sufría el Ancianato Madre Emilia de Montalban, le hicieron una donación de alimentos para ayudarlos a cubrir sus necesidades. 

“Entregar la bolsa milagrosa ha sido posible gracias a la generosidad de muchas personas que siguen colaborando con esta hermosa obra de misericordia. Es nuestro deseo incrementar las  ayudas para atender a un mayor número de familias”.