Venezuela sigue cayendo en el Índice de Percepción de la Corrupción - Runrun
Venezuela sigue cayendo en el Índice de Percepción de la Corrupción
Venezuela alcanzó apenas una calificación de 14 de 100

Según reciente informe de la Asociación Civil Transparencia Venezuela, desde el año 2017 nuestro país registra un descenso continuado en el Índice de Percepción de la Corrupción (IPC). De 18 puntos que obtuvo en ese año, para 2021 el país apenas alcanzó una calificación de 14, en una escala de 100, donde 0 es el peor desempeño o la más alta percepción de corrupción.

«Venezuela registró un punto menos que en el período anterior y alcanzó apenas 14 puntos, de una escala de 100, con lo que sigue siendo el país peor evaluado en las Américas, y su calificación lo coloca entre los tres más bajos desempeños de la evaluación global», destacó Transparencia Venezuela.

Dice el informe, que Venezuela solo fue mejor que Somalia (13), Siria (13) y Sudán del Sur (11), las más bajas puntuaciones entre los países evaluados. Al mismo tiempo, Venezuela es el Estado percibido como el más corrupto de América, por octava vez consecutiva, según se desprende del reciente reporte publicado por Transparencia Internacional.

El Índice de Percepción de la Corrupción 2021, que clasifica a 180 países y territorios según el nivel de percepción de la corrupción en el sector público de cada uno, en una escala de cero (muy corruptos) a cien (muy limpios), indica que los niveles de corrupción se encuentran estancados a nivel mundial, con escaso o ningún progreso en el 86% de los países evaluados en los últimos diez años. De hecho, la puntuación media global se mantiene en 43 puntos por décima vez consecutiva, mientras dos tercios de las naciones no llegan a 50.

La región con mayor puntuación en el índice es Europa Occidental con una media de 66 seguida por Medio Oriente África del Norte con 45 y América con 43.

Las regiones con puntuación más baja son Europa oriental y Asia central (36) y África subsahariana (33). Pero, con un puntaje promedio de 43 por tercer año consecutivo, y 22 países sin cambios estadísticamente significativos en su lucha contra la corrupción, América está completamente paralizada en la lucha contra la corrupción.

A pesar de la existencia de una amplia legislación y un compromiso regional para combatir este mal, la corrupción en el continente continúa socavando la democracia y los derechos humanos.

Transparencia Internacional identificó, además, que los países que vulneran las libertades civiles obtienen de forma consistente puntuaciones más bajas en el IPC.

La complacencia en la lucha contra la corrupción da pie a violaciones de derechos humanos de mayor gravedad y socava la democracia, detonando así una espiral viciosa. Conforme se erosionan los derechos y las libertades y se debilita la democracia, el autoritarismo avanza, lo cual contribuye a aumentar aún más la corrupción.

Los derechos humanos, continúa el informe, son más que algo deseable en la lucha contra la corrupción. Los modelos autoritarios destruyen los controles y contrapesos independientes y hacen que tomar acción contra la corrupción dependa de los caprichos de una élite.