La ONG Prepara Familia advierte que siete niños murieron en 2023 y al menos 82 han fallecido desde el 2017 en el servicio de nefrología del J. M. de los Ríos por falta del Sistema de Procura de Órganos y Tejidos
La Organización No Gubernamental Prepara Familia informó que tres niños han muerto esperando un trasplante de riñón en el servicio de Nefrología del Hospotal J. M. de los Ríos, ubicado en Caracas, durante los primeros 15 días del mes de enero del 2024.
A través de la red social X (antiguamente Twitter), la ONG expresó sus condolencias a las familias de Sebastián Dávila (quien falleció el 11 de enero a sus ocho años de edad), de Adrián Rodríguez (quien murió el 13 de enero a sus nueve años) y de Scarlet González (quien falleció el 5 de enero a sus 14 años).
Los niños, niñas y adolescentes del servicio de Nefrología del Hospital J. M. de los Ríos están amparados por medidas cautelares emitidas por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) en el 2018, ya que el Estado venezolano suspendió el Sistema de Procura de Órganos y Tejidos (SPOT) por casi siete años.
En estos primeros dias del mes de enero de 2024 perdimos a Scarlet, Sebastián y Adrián del servicio de nefrología del Hospital J.M de los Ríos, desde todo el equipo de Prepara Familia expresamos nuestras más sinceras condolencias a sus familiares y amigos. pic.twitter.com/9FrnCB7Ce3
Primero, en el año 2014, el gobierno de Nicolás Maduro, desde el Ministerio de Salud, eliminó el SPOT de la Organización Nacional de Trasplantes (ONTV) y creó la Fundación Venezolana de Donaciones y Trasplantes de Órganos, Tejidos y Células (FUNDAVENE), adscrita a dicho Ministerio. Luego, el Ministerio de Salud suspendió las funciones de la Fundavene permanentemente en 2017.
Prepara Familia dijo que siete niños murieron en 2023 y al menos 82 han fallecido desde el 2017 en el servicio de Nefrología del J. M. de los Ríos por falta de trasplantes de riñón. La ONG advirtió que más de 130 niños, niñas y adolescentes siguen a la espera de un trasplante en este año.
Los venezolanos que padecen enfermedades y no consiguen tratamientos podrían pedir asilo humanitario ante las embajadas en el país, advirtió el presidente de la Coalición de Organizaciones por el Derecho a la Salud y a la Vida (Codavida), Francisco Valencia, durante una marcha para exigir al gobierno la apertura del canal humanitario para resolver la crisis.
Pacientes, familiares y activistas por la salud de los venezolanos tomaron las calles de Chacao la mañana del lunes 20 para pedir al gobierno las medicinas que necesitan para poder vivir, como es el caso de las personas que han recibido transplantes de órganos y deben tomar inmunosupresores para mantener su cuerpo en funcionamiento.
Es el caso de Ruben Canales, un adolescente de 15 años que el sábado pasado cumplió un año de haber recibido un riñón, pero que desde hace dos meses y medio no toma las medicinas necesarias para que su cuerpo continúe aceptando el nuevo órgano.
«Cada día vemos que su salud se va deteriorando. Ha tenido que dejar de estudiar porque ya tiene esa sintomatología de rechazo. Ha adelgazado y no come con regularidad. Se está debilitando y ya no tiene aquella chispa que tenía cuando fue transplantado » dijo su padre, Jorge Canales, mientras marchaba.
«¿A quién uno acude?», se preguntó Canales, quien visita semanalmente el Hospital J.M. de los Ríos para preguntar por la medicina de su hijo. Señaló que hace poco fallecieron en el hospital caraqueño dos niños provenientes de Coro por la falta de inmunosupresores. «Parece que nadie nos escucha».
Katherine Martínez, la directora de la ONG PreparaFamilia, declaró que «el Estado está vulnerando los derechos de los niños, niñas y adolescentes» al no proveer los insumos necesarios para garantizar su salud. Los menores que necesitan transplantes de órganos para poder vivir no tienen acceso al procedimiento, pues los transplantes están suspendidos en toda Venezuela, denunció Martínez. La organización aboga por los derechos de aproximadamente 130 niños que están hospitalizados en el J.M. de los Ríos, más los niños de las consultas, quienes no cuentan con reactivos en el laboratorio, rayos X, tomógrafos y resonadores a pesar de el centro asistencial fue remodelado hace meses.
Los integrantes de «Amigos Transplantados de Venezuela» recordaban con pancartas que «Belkys Solorzano somos todos», una mujer que falleció hace una semana por complicaciones al rechazar el órgano que le fue transplantado. «No estamos pidiendo nada, solo queremos nuestros medicamentos», comentó una paciente que tiene dos meses sin recibir los inmunosupresores.
El diputado Juan Mejías acompañó la protesta para exigir la apertura del canal humanitario. «La disposición está ahí. Gobiernos internacionales han dicho que pueden ayudar. Lamentablemente lo que se requiere aquí es la disposición del gobierno nacional para permitir que la ayuda ingrese», declaró.
El parlamentario comentó que la comunidad internacional solo exige garantías de que la ayuda llegue a donde deba llegar, que no sea objeto de manipulaciones políticas o corrupción, pero «el gobierno, que maneja todo con opacidad y con una óptica política, no quiere que esto se maneje de una manera imparcializada porque sería reconocer su propio trabajo».
Valencia presentó la problemática de los venezolanos ante la embajada canadiense, y realizó la misma solicitud ante las embajadas de Perú y Costa Rica, que esperaban por la información. El presidente de Codevida afirmó también que solicitó acudir a la próxima reunión de los 12 países que integran el Grupo Lima para exponer la crisis humanitaria venezolana.
Asimismo, detalló que «la emergencia humanitaria no puede esperar los lapsos de las mesas de diálogo», y consideró que la prioridad es aliviar las carencias del pueblo, que necesita medicinas y alimentos, para luego pedir elecciones limpias.
Asilo humanitario
«No es de extrañarse que en las próximas semanas hayan peticiones de asilo por la situación humanitaria, no política. Quiere decir que la gente va acudir a las embajadas porque no encuentra el tratamiento y se va a morir», advirtió Valencia.
Sin embargo, aclaró que el asilo humanitario no está siendo ofrecido por las embajadas, sino que «la situación crítica y la desesperación llevará a los pacientes a realizar las peticiones», razón por la cual alerta a las embajadas para que estén preparadas ante el evento.
Confesó que espera que el gobierno de Nicolás Maduro reaccione y aperture un canal humanitario. «A la sociedad civil, a los sectores políticos: la emergencia humanitaria no puede esperar, la gente se está muriendo».
