Isaac Abadí: Se nos fue un sabio médico, gran venezolano y maestro de al menos 3 generaciones de médicos y científicos - Runrun

Tras el fallecimiento en Miami el pasado primero de abril del doctor Isaac Abadí, destacado internista y reumatólogo venezolano, la comunidad médica del país coincide en la apreciación que deja un gran vacío para la medicina venezolana tanto como para la comunidad científica del país.

Lo conocí hace casi cincuenta años en el Centro Médico de Caracas donde siempre tuvo su consultorio hasta que viajó a Miami en días recientes para asistir al Bar Mitzvah de uno de sus nietos. En 1983 cuando comencé en RCTV mi programa “A Puerta Cerrada” lo invité a varios programas sobre medicina y salud. Siempre un sabio. Siempre un maestro. Con carácter fuerte pero siempre amable conversaba con sus pacientes hasta formarse el cuadro diagnóstico antes de someterlos a su examen. Descubrió las redes sociales y desde allí convirtió su twitter en una vía para concientizar a sus comunidades de distintos problemas, medicamentos, tratamientos e investigaciones médicas. Y sus pareceres sobre el acontecer nacional.

Abadí fue el Fundador del Centro Nacional de Enfermedades Reumáticas y del Servicio de Reumatología del Hospital Universitario de Caracas

Merideño de nacimiento, egresó como Médico Cirujano de la Universidad de los Andes (ULA) y luego tuvo una destacada carrera en la ciudad de Caracas.

Entre sus roles más destacados están los de haber sido Jefe de la Cátedra de Clínica Médica y Terapeútica Médica de la Escuela de Medicina Luis Razetti.

Además, fue Director de la Escuela de Medicina Luis Razetti y fundador del Centro Nacional de Enfermedades Reumáticas. También del Servicio de Reumatología del Hospital Universitario de Caracas y creador de los cursos de Postgrado de Medicina Interna de Ministerio de Sanidad y Asistencia Social.

El postgrado de reumatología del Hospital Universitario de Caracas y numerosas Promociones de Médicos Internistas egresadas de la Universidad Central de Venezuela llevan su firma. El gremio de médicos y de la comunidad científica de Venezuela le reconocen como un docente quien se hizo acreedor de numerosos premios y reconocimientos.

Fue Master of Rheumatology PANLAR 2006 (Maestro de la Reumatología de la Liga Panamericana de Asociaciones de la Reumatología).

En su labor docente y asistencial y sus numerosos trabajos científicos dejó plasmado su profesionalismo en miles de discípulos.

Como profesor de la Universidad Central de Venezuela tuvo especial impacto en al menos  tres generaciones médicas.

Hasta los últimos días estuvo atento a la situación del Covid-19 y usaba sus redes sociales para llevar información científica sobre el tema.

Abadí, de 84 años de edad, estaba contagiado con el covid-19, según informó Juan Caripidis, médico del Hospital Clínicas Caracas. «A pesar de su edad, de su problema de columna, iba religiosamente al consultorio, tenía actividades docentes los sábados, siempre con una sonrisa. Ahora que no está lo añoraremos, ahora que se fue nos  daremos cuenta del profesional y persona que pierde la medicina venezolana«, escribió Caripidis en Instagram.

Paradójicamente fallece en Miami, ciudad en la que tenía familia y ciudad en la que muchas veces  sus colegas médicos lo invitaron a residenciarse y ejercer la medicina y la docencia. Amaba a Venezuela y la conocía hasta el alma.

El investigador, según reseñó Tal Cual, murió por un cuadro respiratorio severo. Habría pedido que le llevaran las radiografías que le habían practicado y, al ver la gravedad de su estado, pidió que le retiraran los respiradores y le inyectaran morfina para morir en paz.

Su sobrina, la Dra.  Lilian Abbo, es la directora de enfermedades infecciosas del Jackson Memorial Hospital (Miami) y estuvo a cargo del cuidado de su tío.  Les comparto el mensaje que ella le envío a sus familiares y amigos poco antes del fallecimiento de su tío: 

“Mi Tío Saky se está muriendo en el MICU de mi hospital.. solito .. en la unidad de CoVID19 con un drip de morfina…con un ARDS severo que no respondió ni a IL6 inhibitors, steroids o prograf.. decidió el mismo ser DNR  (No resucitación) y DNI. (No intubación) . Su mayor preocupación es que mi tía estuviera bien y no se preocupara aunque el estaba severamente hypoxemico…Soy el único familiar que puede entrar al hospital.. además de estar a cargo de liderar todos los esfuerzos de planes de pandemia  y operaciones de nuestro sistema de salud.. Todos saben lo especial que es el Dr Abadi. No solo como tío sino el médico ejemplar que siempre ha sido. Brillante hasta el final.. el lunes me pregunto que como estaba su placa de tórax y ayer se volvió a descompensar..

Mi tío fue mi primer mentor, la persona que siempre me ha empujado a cuestionar cualquier diagnóstico hasta entender la etiología en cada paciente. Fue un pionero de la medicina basada en evidencias. Siempre buscando la excelencia, el ayudar al prójimo en ir más allá que los demás por curar a cada paciente como individuo. Me enseñó que la medicina es una forma de vida y ayudar a morir a un enfermo con compasión y solamente acompañarlo en sus últimos momentos es tan importante como curar”. Tengo un nudo en el corazón. Nunca podré a llegar a tener la mitad de la inteligencia o la semiología de mi tío. Solo espero que en el cielo tengan un lugar muy especial para el Dr Abadi.

Aquí seguiremos luchando contra esta terrible pandemia. Y ojalá que irónicamente los infectólogos podamos conseguir rápidamente una cura con drogas reumatológicas para parar esta tragedia”.