Con las dos manos forma un corazón
Paul León trabaja en el canal VPItv y fue detenido mientras se preparaba para cubrir una manifestación en Valera
Paul León trabaja en el canal VPItv y fue detenido mientras se preparaba para cubrir una manifestación en Valera, estado Trujillo.
En una audiencia telemática, un tribunal especial en Caracas lo imputó por delitos de terrorismo. Con Paul, son cuatro los trabajadores de la prensa que están detrás de las rejas posteriores a las elecciones del 28 de julio.
“Mis viejos, mis abuelitos, tía Mari, mis hermanos y Daniela, estoy bien. Llegará el momento de hablar de esto, pero quiero concentrarme en decirles que ustedes son todo lo que tengo, y confío en que vamos a salir de esta situación que, no les negaré, me entristece mucho, pero me llena de fuerza pensar en ustedes y en volverlos a ver pronto. Gracias por todo lo que están haciendo por mí. No tendré cómo pagarles cuando estemos juntos de nuevo. LOS AMO. Dios con nosotros”.
La carta estaba escrita a mano, con lápiz de grafito, en un pedazo de hoja arrugada. Las letras no eran uniformes, algunas parecían más bien garabatos. Quizá, al escribir, la mano temblaba, ¿de miedo, rabia, cansancio, tristeza?
Sin embargo, por la sintaxis y en general por la cuidada redacción, era claro que detrás de esas líneas temblorosas estaba Paul, el joven tesista de comunicación social que ya trabajaba como periodista y camarógrafo en Valera, la ciudad de Trujillo, donde nació y creció.
Sin participación en la política
Al leer la carta, el 5 de agosto de 2024, su familia se sintió aliviada. Habían pasado cinco días —cinco interminables días— sin certezas, ahogados en la angustia de no saber nada de él. La carta, que llegó a sus manos como un rayo de esperanza, estaba cargada de sus palabras temblorosas, pero que al menos confirmaban su existencia y la voluntad de contar su versión de los hechos.
Paul nunca se había involucrado en la política. Era conocido en su entorno como locutor y presentador deportivo, especialmente por su afición al Trujillanos Fútbol Club. Además, había fundado, junto a amigos de la universidad, Voces Solidarias, una ONG que ayudaba a los niños en desnutrición. Su nombre también resonaba en la escena de la música alternativa en Valera.
La mañana del 30 de julio, justo el día en que sería detenido, había salido temprano de su casa para encontrarse con Daniela, su novia, en un puesto de comida rápida de la ciudad. Se sentaron a desayunar y, mientras comían, hablaron de los temas candentes de la nación: las elecciones del 28 de julio.
El Consejo Nacional Electoral había anunciado la reelección de Nicolás Maduro, pero las actas de escrutinio recabadas por la oposición mostraban resultados radicalmente distintos. Trujillo, según esos documentos, había votado en un 64% por el opositor Edmundo González, desafiando la narrativa oficial.
Conversaron sobre el país, la creciente incertidumbre y el futuro incierto. Daniela, también periodista, había planteado en diciembre de 2023 la posibilidad de abandonar Venezuela. Sin embargo, a pesar de tener familiares y amigos en el extranjero, Paul había sido renuente a dejar su tierra natal. ¿Cambiaría de opinión ahora?
Valera, una ciudad con cerca de 600 mil habitantes, es más bien un pueblo grande, siempre tranquilo. Esa mañana, parecía más apagada que de costumbre. La mayoría de los locales permanecían cerrados, y por calles y aceras se paseaba más la basura arrastrada por el viento que los autos y peatones.
Pronto, sin embargo, habría más movimiento. La gente, sin una organización formal, había convocado a una manifestación a las 11:00 de la mañana cerca de la Avenida Bolívar. Era una de las muchas que surgieron en todo el país tras el anuncio del CNE. Entre el 29 y el 30 de julio, el Observatorio Venezolano de Conflictividad Social documentó 915 protestas.
Después de desayunar, Paul se dirigió hacia el lugar de la concentración, para encontrarse con la periodista Mayra Linares, su compañera en el canal VPItv. Aunque Paul solía cubrir temas deportivos, la situación exigía su colaboración en la cobertura de la protesta como camarógrafo.
En el camino, notó que otras personas también se dirigían hacia el lugar de la manifestación y que había piquetes policiales en distintos puntos de la carretera. La tensión era palpable entre él y Mayra, pero siguieron adelante con sus credenciales, cámaras y micrófonos, listos para enfrentar lo que viniera.
Esta historia es original de La Vida de Nos, puedes extender este texto en su página web.
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