Ataque de Hamás y respuesta militar israelí han dejado un balance provisional de casi 500 muertos
Por medio de un comunicado emitido por la Cancillería General de la República, el Gobierno venezolano considera que la violencia que ha provocado casi 500 muertos por ataques de Hamás y la respuesta militar israelí “es el resultado de la imposibilidad de Palestina de encontrar en la legalidad internacional multilateral un espacio para hacer valer sus derechos históricos”.
“Hoy, más que nunca, se hace necesaria una negociación genuina entre las partes, y que sean restablecidos los derechos de Palestina, para lo cual (Venezuela) exhorta a la Organización de las Naciones Unidas a cumplir su papel de garante de la paz y legalidad internacional”, prosigue el comunicado.
La administración madurista pide el cumplimiento de la resolución 2334 del Consejo de Seguridad de la ONU, adoptada en diciembre de 2016, “que exige a Israel poner fin de inmediato y por completo a todas las actividades de asentamiento y ocupación del territorio palestino, como única vía para alcanzar la paz”.
“El Gobierno venezolano aboga por la pronta solución de la crítica situación de hostilidad y enfrentamiento y por el fin de la violencia en todo el territorio palestino a través del diálogo directo”, sigue la misiva.
Milicias palestinas lanzaron al menos 3 mil cohetes a territorio israelí que impactaron en áreas cercanas, pero también en el centro del país y urbes como Jerusalén o Tel Aviv.
Los ataques aéreos de represalia israelíes sobre Gaza, que junto a los combates en la zona, han dejado al menos 232 palestinos muertos y unos 1.700 heridos.
Desde 2009, el Gobierno de Venezuela es un fuerte aliado de Palestina, especialmente, cuando se convirtió en el primer país del continente americano en reconocerlo como Estado.
Venezuela ha apoyado firmemente “los derechos del pueblo palestino ante la ocupación ilegal y los incesantes ataques de Israel” en la Franja de Gaza y Cisjordania, según se lee en numerosas comunicaciones oficiales.