Crisis humanitaria profundiza la vulnerabilidad sistemática de las mujeres venezolanas - Runrun
Crisis humanitaria profundiza la vulnerabilidad sistemática de las mujeres venezolanas
Lissette González, socióloga y miembro de la ONG Provea, señaló que en este día las mujeres venezolanas no tienen «mucho qué celebrar»

Este miércoles, 8 de marzo, se conmemora el Día Internacional de la Mujer. En nuestro país, la crisis humanitaria profundiza la vulnerabilidad sistemática de las mujeres venezolanas.

De acuerdo con un hilo publicado en Twitter por la ONG Caleidoscopio Humano, la ONU Mujeres señala que en todas las regiones a las mujeres se les paga menos que a los hombres, teniendo una brecha salarial de género estimada de alrededor del 20%.

«En un contexto de crisis humanitaria como la que vive Venezuela, esto profundiza la vulnerabilidad sistemática de las mujeres», advirtió la organización.

Debido a que las mujeres invierten mucho tiempo en labores de cuidado, aunado a la precarización de los servicios que ha impuesto el Estado, como el acarreo de agua, la autonomía financiera de las mujeres se ve limitada, así como sus posibilidades de crecimiento.

Caleidoscopio Humano señala que las mujeres venezolanas deben «gestionar y financiar la higiene menstrual, los estudios médicos de rutina, la manutención de los hijos y de los mayores».

Mientras que las mujeres tienen que costear todo eso, «la negligencia del Estado no le garantiza salarios dignos, acceso oportuno al servicio eléctrico, ni al Internet».

Décadas de derechos perdidos

Lissette González, socióloga y miembro de la ONG Provea, señaló que, en este día, las mujeres venezolanas no tienen «mucho qué celebrar».

«Las últimas décadas han significado una pérdida de derechos», señaló González en un hilo publicado vía Twitter.

En primer lugar, la socióloga señaló que las mujeres en Venezuela hoy en día tienen «menos autonomía económica por la caída en la tasa de participación laboral».

Asimismo, advierte que las mujeres tienen menor autonomía reproductiva «por el bajo acceso a métodos de planificación familiar, bien porque escasean, bien por su alto costo».

También, señala que muchas niñas y mujeres no pueden estudiar o trabajar por no poder costear artículos de higiene menstrual.

González añadió que la mayoría de las mujeres se dedica a ser madre, pero es una elección peligrosa: «Tenemos alta incidencia de mortalidad materna por la precariedad del sistema público de salud», dijo.

Todas esas restricciones, aunado a los estereotipos de género, «impiden la participación plena de las mujeres en la vida social y política».