Fiscalía anuncia detención de ocho presuntos implicados en masacre de Ikabarú y líder indígena lo desmiente - Runrun
Fiscalía anuncia detención de ocho presuntos implicados en masacre de Ikabarú y líder indígena lo desmiente
Transcurrieron casi dos semanas para que las autoridades divulgaran información sobre la matanza que, de acuerdo con los pobladores de la zona, fue ejecutada por las fuerzas de seguridad del Estado y no por una banda criminal, como dice la versión oficial

@loremelendez / Foto: Correo del Caroní

 

Trece días después de la masacre de Ikabarú, el Ministerio Público venezolano informó sobre la detención de ocho presuntos implicados en el suceso que se registró en esa comunidad del sur del estado Bolívar, cerca de la frontera con Brasil, y que dejó ocho mineros asesinados. Se trata de la primera declaración pública que ofrece esta instancia sobre el hecho desde que ocurrió.

Tarek William Saab, fiscal general de la República nombrado por la asamblea nacional constituyente, informó que desde el 23 de noviembre, un día después de la matanza, su despacho designó a los funcionarios de la Fiscalía 6ª de Bolívar para que se encargaran del caso y estos se trasladaron al sitio el día 24 en la mañana. Posteriormente, añadió, fueron designadas 3 fiscalías nacionales y una regional con competencia en derechos humanos.

La versión oficial señala que el crimen fue perpetrado por la banda liderada por Reiniero Alberto Murgueytio Bastardo (apodado El Ciego), quien tiene orden de aprehensión pendiente por el delito de homicidio intencional. Sin embargo, pobladores de la zona insisten en que los victimarios fueron funcionarios de las fuerzas de seguridad del Estado.

Las primeras averiguaciones, según Saab, condujeron a la detención de Braunis González Miranda, quien fue capturado en Los Caribes, a unos 15 kilómetros de Ikabarú; y de Jhonny Youseth López Marcano, arrestado en Santa Elena de Uairén. Ambos fueron presentados y privados de libertad por homicidio intencional calificado por motivos fútiles e innobles, robo agravado, robo agravado de vehículo automotor y agavillamiento.

En las últimas horas fueron detenidos otros seis implicados en el caso, informó el Ministerio Público. Entre ellos están Luis Eloy Acosta Castillo y Evimael Ozanin (indocumentado de nacionalidad brasileña), a quienes se les decomisó un pistola con seriales devastados y 198 municiones de distintos calibres. En otro procedimiento fueron capturados Derwins Casanova, Juan Carlos Valdemar, David Medina y José Ángel Morales, a quienes se les incautó una pistola.

El miércoles en la tarde fue el gobernador de Bolívar, Justo Noguera Pietri, quien habló sobre el caso desde la Base Aérea Teófilo Méndez, en Puerto Ordaz, a donde arribaron cuatro de los detenidos.

Según Noguera, para aprehender a los presuntos autores materiales de la masacre se aplicaron «maniobras de desgaste». Explicó que, en lugar de dispararles, los efectivos de la  Región Estratégica de Defensa Integral (Redi) Guayana y de la Zona de Defensa Integral (Zodi), junto a la Guardia Nacional, aislaron a los supuestos victimarios y les conminaron a estar sin comida ni posibilidad de movilización hasta que se rindieron.  

«Poco a poco se fueron entregando», afirmó Noguera Pietri quien insistió en que en medio de los trabajos de inteligencia y las operaciones «no letales», ocurrieron enfrentamientos entre la presunta banda armada y los funcionarios, pero no se registraron muertos ni heridos.

Para el gobernador, la masacre se produjo por «una disputa entre grupos por querer apropiarse de lo que hay en el entorno minero». «Es posible que haya sido para apropiarse del tráfico de oro, combustible o drogas, pero ya eso queda en manos del Ministerio Público», indicó.

Horas antes de esta declaración, el líder indígena Ricardo Delgado, exalcalde de Gran Sabana ahora en el exilio, aseguró que las detenciones eran un montaje hecho por el gobierno y que a cada uno lo llevaban con el rostro tapado, lo que dificultaba que la comunidad supiera a quien inculpaban.

Vía redes sociales, Delgado afirmó que López fue herido durante la masacre y el gobierno le ofreció trasladarlo hasta el hospital de Boa Vista, en Brasil, para que pudiera tratarse. Sin embargo, fue arrestado al momento de pasar la frontera.

El líder indígena señaló que la versión sobre la detención de José Ángel Morales es que este iba desde la comunidad de Playa Blanca hasta Ikabarú, cuando guardias nacionales lo bajaron de su vehículo y lo apresaron en la entrada del pueblo. «Ese mismo libreto cubano», apuntó Delgado, se repitió con las aprehensiones de Franklin Fernández y Leandro Girón, cuyos nombres no aparecen entre los difundidos por el Ministerio Público.