Sudamericano de fútbol Sub 20: Rancagua, corazón vinotinto - Runrun
Sudamericano de fútbol Sub 20: Rancagua, corazón vinotinto
Por Víctor Grao 

 

EL SUDAMERICANO SUB 20 ES EL TORNEO de categorías menores más importante de Sudamérica. Las diez selecciones Conmebol compiten cada dos años para lograr uno de los cuatro cupos que otorga la FIFA para el Mundial de la categoría. Este año el torneo se está jugando en Chile.

El partido inaugural sería jugado por la vinotinto contra Colombia, en Rancagua. Es una ciudad pequeña a tan solo a una hora de Santiago en carro. Existe la posibilidad de traslado en autobús o en metro-tren. La última opción, la más segura como transporte público.

Por la facilidad en la comunicación con la capital chilena, muchos venezolanos bajaron unos kilómetros a apoyar a Venezuela. Aunque fuese sub 20, un pedazo del país yace en esa selección donde jugadores de 18 y 19 años dejan al país en alto.

En el metro-tren se veían muchas personas con camisas vinotinto y blanca. El transporte cuesta unos 2500 pesos (solo ida) a Rancagua, el equivalente a unos 4 dólares. Las entradas para el partido son gratuitas. Lo único necesario es irlas a buscar dos días antes en los puntos destinados para ellas y existe un limitante por persona. De igual manera, a las afueras del estadio se podían ver ciertas personas regalando entradas sobrantes y unas cuantas más buscando.

Venezuela estrenó uniforme de una marca italiana y estrenaba también su participación en el campeonato. Jan Hurtado, Samuel Sosa y Christian Makoun los principales exponentes de esta selección, los tres jugando en el extranjero; los dos primeros en Argentina y el último en Italia.

El partido estaba próximo al inicio y la gradería –semi llena– reflejaba sectores con alta cantidad de público venezolano y banderas tricolores por doquier. Al ser Chile uno de los países con mayor cantidad de criollos en sus tierras, resultaba lógico el hecho de que compatriotas se acercaran a ver a su selección. Camisas del Aragua FC, Deportivo Táchira o Caracas FC se podían observar también a la distancia en las gradas del estadio El Teniente.

El partido dio inicio y Venezuela se sentía local, no por el juego, pero sí por el público. Colombia fue más en el primer tiempo, pero con los pitazos del árbitro se fueron al descanso sin goles y con unas cuantas tarjetas amarillas de por medio.

El salir a los camerinos sin un gran fútbol en la primera mitad, pero con el apoyo de la afición sobre el túnel del vestuario es un gran incentivo para jugadores que recién dan sus primeros pasos en su carrera deportiva.

El segundo tiempo inició con una expulsión para Venezuela. Navarro recibía su segunda tarjeta y se quedaban con inferioridad numérica contra los cafeteros.

Pero todo cambiaría. Una falta al borde del área con suma similitud a aquella de las semifinales del Mundial Sub 20 en 2017 contra Uruguay tendría Venezuela al minuto 69. El ejecutante Samuel Sosa. Zurdazo, poste y gol. Entraría con lo justo, pero sería lo suficiente para poner la ventaja definitiva para que la vinotinto sumara sus primeros tres puntos del torneo.

Felicidad plena en las canchas de “El Teniente” de Rancagua y una nueva alegría en tierras foráneas generada por el deporte.

Venezuela ahora deberá esperar enfrentarse a Chile, Bolivia y Brasil, para intentar entrar entre los tres primeros del grupo que clasifican al hexagonal final, donde buscará obtener el pase para viajar a Polonia al Mundial de la categoría.