Venezuela y Guyana responden tras marina venezolana interceptar buques de investigación de ExxonMobil
Venezuela y Guyana responden tras marina venezolana interceptar buques de investigación de ExxonMobil

UNA EMBARCACIÓN DE LA MARINA VENEZOLANA se aproximó a un buque de investigación sísmica contratado por ExxonMobil frente a las costas de Guyana, uno de los incidentes más serios a la fecha en la rica zona petrolera que Venezuela reclama como propia desde hace tiempo.

La Marina venezolana no abordó el barco, que ya abandonó la zona, según un comunicado emitido por Petroleum Geo-Services, con sede en Noruega. El barco realizaba investigaciones sísmicas a nombre de ExxonMobil, con sede en Irving, Texas.

Bard Stenberg, vicepresidente de comunicaciones de PSG, declinó dar más detalles sobre el incidente, pero indicó que el buque, Ramform Tethys, no ha reanudado sus operaciones y ahora se dirige hacia el este.

Comentó que el barco contaba con todos los permisos requeridos por las autoridades de Guyana.

A través de un comunicado, ExxonMobil señaló que trabaja para garantizar la seguridad de todos los tripulantes.

Guyana condenó la incursión del buque de la armada venezolana e informó que dará a conocer a la ONU de lo sucedido, lo cual califica como «ilegal» y de «descarado irrespeto a la soberanía» del país, según Guyana Chronicle.

«Nuestro gobierno está en proceso de informar de lo ocurrido a todos los gobiernos de los 70 tripulantes del buque. El gobierno de la República Bolivariana de Venezuela también recibirá una comunicación formal», señaló el Ministerio de Relaciones Exteriores de Guyana en un comunicado.

El gobierno de Nicolás Maduro respondió en otro comunicado que ante la «flagrante violación de la soberanía» procedieron mediante los protocolos internacionales correspondientes a la situación.

Asimismo, el texto destaca que los oficiales venezolanos informaron a los capitanes de los buques de exploración, quienes argumentaron tener el permiso de Guyana, que dicho país no tiene jurisdicción en la proyección marítima del Delta del Orinoco, por lo que decidieron levantar faena.

Venezuela admite haber informado al Secretario General de las Naciones Unidas y trasladado la correspondiente nota de protesta al gobierno de la República Cooperativa de Guyana «ante esta inaceptable violación a la soberanía nacional que, mucho más allá de la controversia territorial sobre la Guayana Esequiba, ha traspasado con esta inédita incursión todos los límites, al pretender disponer de espacios marítimos de la proyección del Delta Amacuro, de indudable soberanía venezolana».

Exxon excavó con éxito su primer pozo frente a las costas de Guyana en 2015 y desde entonces ha realizado otros nueve descubrimientos, incluyendo uno este mes que incrementó los estimados de reservas de la compañía a un equivalente de 5.000 millones de barriles de petróleo en la zona de aguas profundas.

Los descubrimientos recientes significan que el pequeño país de 750.000 habitantes está en ritmo de rebasar a Venezuela y México para convertirse en el segundo mayor productor de petróleo de Latinoamérica dentro de la próxima década, solo detrás de Brasil, según un reporte del despacho de investigación energética Wood MacKenzie, publicado este mes.

Sin embargo el presidente de Venezuela Nicolás Maduro ha dicho que las perforaciones petroleras de la compañía estadounidense son ilegales, y muchos temen que conforme el país socialista se tambalea al borde del caos, busque provocar a la nación vecina.

Desde el Siglo XIX, Venezuela ha reclamado como propia la vasta región minera al oeste del Río Essequibo en Guyana, una postura que comparten incluso algunos de los más férreos opositores de Maduro. En 1989, un tribunal internacional decretó que el área era parte de Guyana, que en ese momento era una colonia británica. La zona en disputa conforma el 40% de Guyana.

A principios del año, el secretario general de Naciones Unidas, Antonio Guterres, envió el caso a la Corte Internacional de Justica después de que un intento auspiciado por la ONU fracasó en concretar un acuerdo.

En 2013, la marina de Venezuela incautó en esa misma zona a un barco de investigación petrolera alquilado por Estados Unidos en 2013 y lo retuvo durante más de una semana, antes de liberar al buque y a sus 36 tripulantes de Estados Unidos, Rusia, Indonesia y Ucrania.

*Con información de Associated Press