La mano que mece la cuna por Brian Fincheltub
La mano que mece la cuna por Brian Fincheltub

ElíasJaua 

 

Un escándalo tras otro es lo que rodea al perdedor de Miranda o como lo llaman sus compañeros de partido, el “Protector de Miranda”. Un título nobiliario que le dieron tras ser derrotado en las elecciones regionales de diciembre de 2012 y que le ha permitido prácticamente manejar más presupuesto que el gobernador electo por mayoría democrática, Henrique Capriles Radonski. Jaua tras su fracaso electoral ha enfilado todos los recursos, propaganda y poder mediático a su disposición para tratar de descalificar e implosionar la gestión de gobierno en Miranda y el municipio Sucre.

Para Jaua un punto de honor es recuperar su perfil político y hacerse un camino independiente hacia instancias más altas de poder. Él siempre se ha considerado uno de los hijos predilectos de Chávez y en su interior también se ha planteado como proyecto personal cobrar su herencia: Dirigir los destinos de la nación. Un camino nada fácil, si consideramos que sus más cercanos competidores no se dejarán quitar el terreno ganado, hablamos de Diosdado Cabello y Tareck El Aissami.

Pero aunque estos dos últimos tienen enorme poder económico, Jaua confía que su trabajo de años dirigiendo el denominado Frente Francisco de Miranda, le permita tener una estructura alterna al partido al momento de negociar. Dándole la posibilidad en caso de no resultar victorioso, de exigir una tajada en caso de una hipotética continuidad del chavismo en Miraflores.

En este sentido, quiere en este momento asegurar su futuro político y evitar así que se consume el plan de sus adversarios dentro del partido para sacarlo del juego. Camino que se inició hace unas semanas cuando fue removido de su cargo como canciller.

Pero Jaua tenía un as bajo la manga que nadie esperaba. En los últimos días ha estado en la palestra noticiosa por un viaje de paseo que le costó un grave incidente diplomático con  uno de los principales aliados de Venezuela en la región: Brasil. Muchos en el chavismo sospechan pueda tratarse de una venganza contra Rafael Ramírez, su sucesor en la cancillería, quien ahora tendrá que aplacar el malestar en el gigante sudamericano. Piensa mal y acertarás.

El caso de la niñera de Jaua revela además de corrupción, una enorme pugna dentro del chavismo por el poder. Retrata a la perfección el cuadro de una familia donde se muere el padre millonario y todos quedan peleando por la herencia. Allí todos se creen más  herederos que Maduro y aunque aceptan la voluntad de Chávez, no renunciarán al derecho que también creen tener para gobernar el país.

El caso de la niñera armada muestra lo qué hay detrás de la mano que mece la cuna. La mecen la codicia y sed de poder de unos pocos que no les importa en lo absoluto destruir Venezuela solo para lograr sus objetivos personales.

 

@brianfincheltub

Brian@juventudsucre.com