Canova: Es una necedad seguir planteando que sea el Estado el que nos eduque - Runrun
Canova: Es una necedad seguir planteando que sea el Estado el que nos eduque
La organización no gubernamental Un estado de Derecho ha llevado a cabo investigaciones sobre expropiaciones, parcialización del Tribunal Supremo de Justicia, manipulación del lenguaje oficial y fraude electoral

Durante su intervención en Primer Encuentro de la Alianza Nacional Todos por la Educación, realizado este 21 de julio en Espacios Foro XXI, el director general de la organización no gubernamental Un estado de Derecho (UeD), Antonio Canova, cuestionó el enfoque estatista tradicional, predominante en Venezuela, de la cuestión educativa.

Como invitado del panel “Retos para el financiamiento del sistema educativo venezolano y el rol del sector privado y la sociedad civil en la masificación de la educación y en el aumento de su calidad”, el investigador y docente universitario argumentó a favor de una nueva perspectiva para estudiar e identificar soluciones realistas al grave problema educativo nacional.

A su juicio, después de décadas de repetidos errores estatales, resulta ya casi una inmoralidad continuar porfiando con el mismo modelo una y otra vez fracasado. “Es una necedad seguir planteando que sea el Estado el que nos eduque”, afirmó.

Canova, abogado y profesor de la Universidad Católica Andrés Bello (Ucab) y de la Universidad Francisco Marroquín (UFM) de Guatemala, compartió panel con César Guillén, representante de Fedecámaras, y Fausto Romeo, presidente de la Asociación Nacional de Instituciones Educativas Privadas (Andiep). Y de inicio puntualizó: “Estamos frente a un asunto de dos visiones generacionales: la de nuestra generación, que confió -e inexplicablemente sigue confiando- en el Estado; y la de los jóvenes, que frente a los hechos, a la evidencia, razonadamente desconfía de lo gubernamental”. La gran mayoría de los integrantes de UeD ronda los veinticinco años, acotó. 

En doce años de funcionamiento -agregó su director- la ONG ha acometido investigaciones sobre expropiaciones, parcialización del Tribunal Supremo de Justicia, manipulación del lenguaje oficial, fraude electoral, y actualmente, en alianza con la Universidad de Buckingham (Inglaterra), investiga la realidad del derecho a la educación el país. “Llevamos poco más de un año en una pesquisa nacional y hemos encontrado que frente a la prácticamente inexistente educación pública, las personas están resolviendo por sí mismas”.  Canova refirió el hallazgo de escuelas privadas de bajo costo, como el colegio Cuyagua, en Petare; así como la multiplicación de casas de tareas dirigidas y otras formas de emprendimiento de enseñanza que están brotando, sobre todo entre los más pobres, y que por ser espontáneos, informales, tienden a ser ignorados, “o peor aún, desacreditados”, por los especialistas.  

Proyecto Bello Árbol Venezuela

 El esfuerzo investigativo de UeD se llama Bello Árbol Venezuela, puesto que se inspira en “El Bello Árbol”, el libro en el que James Tooley, vicerrector de la Universidad de Buckingham, documenta los hallazgos de más de dos décadas de estudio del fenómeno de las escuelas privadas para pobres en India, China y varios países de África. “Escuelas de menos de cinco dólares al mes, que los padres más pobres, de los países más pobres del planeta, prefieren antes que a las ´gratuitas´, por una razón demoledoramente sencilla: porque allí sus hijos sí aprenden y, además, no son adoctrinados”, enfatizó Canova.

De la experiencia registrada por J. Tooley en el mundo y de las coincidencias halladas por UeD en Venezuela, surgió el compromiso de la ONG con la propuesta de libertad educativa. “Libertad real, porque hoy no existe, para emprender en el rubro educativo, y en consecuencia, libertad también para que los padres, las familias, sean quienes decidan, entre varias opciones, especialmente las de bajo costo, la mejor para sus hijos”, planteó el docente.

En relación con el panel específico al que fue invitado, Canova planteó una serie de preguntas: “¿A qué financiamiento nos referimos? ¿A más presupuesto para la ineficiencia burocrática? ¿O a palanca económica para los colegios particulares? ¿De qué hablamos cuando hablamos del rol del sector privado? ¿De empresario de la educación? ¿De empresarios de cualquier otra área? ¿De asociaciones empresariales de un sector determinado? ¿De todo el conglomerado gremial como institución? ¿Qué se entiende por masificación? ¿Formar a todos los niños de manera uniforme? ¿O formarlos de acuerdo con su potencial individual? Inferimos que más bien se refieren a la accesibilidad, a que no quede ni un solo niño sin estudios, y en eso coincidimos absolutamente. ¿Qué se asume como estándar de calidad? En UeD sugerimos responder esa interrogante desde tres perspectivas: qué se enseña, quién decide lo que se enseña y qué aprenden, efectivamente, los estudiantes”.

Canova indicó que el equipo de investigación de la ONG, conformado por dieciocho personas, ha avanzado con profundidad en gran parte de las respuestas a esas inquietudes y por ello propicia una conversación mucho más amplia y detallada.

En cuanto a la idea de recuperación, el director de UeD también criticó duramente que lo pretendido sea rescatar el sistema educativo actual, monopolizado por el Estado y exageradamente restrictivo para la participación no estatal. “Al hablar de un ´sistema educativo´ se alude a una planificación estatal centralizada, que en el mejor de los casos garantice un cupo a todos los alumnos. Esta es la vía, obligatoria, a la masificación mal entendida. Es lo opuesto a una educación libre que ponga el énfasis en el florecimiento de las capacidades particulares del niño. De esta forma se continúa imponiendo un criterio único, el de los políticos de turno, a los padres. Se les impide decidir”.

“Estamos abiertos al debate. No proponemos soluciones abruptas. Estamos a favor de una transición no traumática. Impulsamos la implementación de un subsidio directo a las familias, para que sean los padres quienes decidan, con ese dinero, a qué colegio privado mandar a sus hijos. Así se garantiza la gratuidad en Suecia desde hace unos veinte años. Allí empezaron con 15 mil váuchers o cheques escolares y ya van por alrededor de 600 mil”, concluyó Canova.