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3×3 | Quedar en fuego cruzado: la tragedia de vivir entre bandas criminales
¿Qué pasó en «la masacre de La Vega? Runrun.es consultó a tres especialistas sobre lo ocurrido en el sector caraqueño, en el que los vecinos y familiares de los fallecidos identificaron a los efectivos de las FAES como los autores de las muertes

@ValeriaPedicini

Al menos 24 personas murieron durante la incursión policial en La Vega, según información extraoficial. “La masacre de La Vega”, como fue denominado el hecho, es considerado la mayor masacre en operativo policial ocurrida en Venezuela. 

De acuerdo al Monitor de Víctimas, a algunas personas las mataron mientras caminaban y a otras dentro de sus propias casas. Los disparos resonaron en las calles Zulia, El Carmen, Independencia y Las Margaritas cuando el reloj todavía no marcaba las 12 del mediodía. Días antes de la incursión policial, vecinos de La Vega denunciaron en redes sociales la presencia de colectivos (civiles armados) en la zona, aparentemente vinculados a la banda de la Cota 905. 

Vecinos de La Vega y familiares de los fallecidos identificaron a los funcionarios de las Fuerzas de Acciones Especiales (FAES) de la Policía Nacional Bolivariana (PNB) como los autores de las muertes ocurridas. “Es que no hubo una balacera. Fueron ellos los que se metieron a matar en las casas”, contó uno de los familiares de las víctimas

Llamadas también “escuadrón de la muerte” y calificadas como “grupo de exterminio”, el cuerpo de seguridad adscrito a la PNB fue creado a mediados de 2017 por Nicolás Maduro para que se sumaran “al combate por la seguridad, contra el crimen y contra el terrorismo”. Son la fuerza policial de mayor letalidad. Desde su creación, hasta mediados de 2019, habían acumulado más de 7.000 denuncias de ejecuciones policiales en todo el territorio, según el informe 2019 de Monitor de Víctimas

Defensores y activistas de derechos humanos rechazaron lo sucedido en La Vega. Por su parte, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) pidió al Gobierno de Nicolás Maduro disolver las Fuerzas de Acciones Especiales (FAES). “La CIDH ha advertido sobre un contexto de ejecuciones extrajudiciales en operativos de seguridad ciudadana, que se caracteriza, entre otras cosas, por la calificación pública de las víctimas como personas de alta peligrosidad que presentan resistencia a la autoridad”. 

En 2019, la Alta Comisionada de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, ya había pedido la disolución de las FAES. Pero el gobierno de Nicolás Maduro no ha evidenciado ninguna voluntad de atender la petición. 

Runrun.es consultó a tres especialistas sobre lo ocurrido en La Vega: Al ingeniero Electrónico, miembro de la Asociación Venezolana de Ejecutivos de Seguridad (AVES) y consultor en estrategias para gestión de riesgos de seguridad, Alberto Ray; doctora en Sociología, profesora y fundadora de la Red de Activismo e Investigación por la Convivencia (Reacin), Verónica Zubillaga; y el abogado especialista en Ciencias Penales y Derecho Procesal Constitucional, Luis Izquiel.

¿Qué pasó en La Vega? ¿Qué hay detrás de lo ocurrido que dejó 24 fallecidos?

 

Alberto Ray 

Lo que ocurrió es la corroboración de un proceso mucho más profundo de fraccionamiento del país, de la pérdida del Estado. ¿Por qué te lo digo así? Al final el Estado venezolano ha perdido la capacidad de ejercer soberanía sobre el territorio. Cuando eso empieza a ocurrir en los países, los países empiezan a disolverse.

Comienza así un proceso de perder el control del territorio de la población y de sus leyes y de su propio estado de derecho. Y como en la naturaleza, esos espacios vacíos los llenan las nuevas formas de poder. Y lamentablemente las formas de poder que lo sustituyen tienden a ser violentas o tienden a ser puestas por la fuerza.

Lo que pasó en La Vega es un nuevo proceso de expansión de estas nuevas formas de poder que a través de la violencia, de la coacción, coerción y del miedo se adueñan de territorios. 

Cuando las bandas criminales tienen un territorio sobre el cual operar, un territorio más o menos estable en el que no se sienten amenazados y que les genera riqueza y recursos suficientes para que ellos se autosustenten, entonces se dan estos procesos que, a falta del Estado, los llena un poco la ley del más fuerte. ¿Por qué los llena? Porque tiene facilidad de tomar el territorio porque tiene dinero, recursos y porque consigue gente que lo acompaña. 

Este fulano “Coqui” lo que ha hecho es extender su dominio hacia allá porque es un poco la ley del más fuerte. Ahora eso le da más fortaleza, más prestigio dentro de este mudo del crimen. Le garantiza más negocios, territorio y espacio para reclutar gente, ocultarlos, para distribuir droga, secuestrar gente, todo lo que hay detrás de estas actividades criminales. Y no hay nadie que los detenga.

Los muertos son producto de este proceso de expansión. Yo no estoy claro de quién mató a quién, pero muy probablemente haya algunos elementos que tratan de resistirse a esa expansión, a lo mejor bandas pequeñas que reaccionan y se hacen enfrentamientos entre ellas y ahí salen muertos. Y otras que vienen del propio policía y las FAES. 

Verónica Zubillaga

Tenemos un hecho objetivo: resultaron 24 hombres muertos en el barrio popular La Vega en el marco de un operativo en el cual intervinieron las fuerzas de seguridad pública. Ese hecho es el evento que exige nuestra atención. 

Luis Izquiel 

En la Vega ocurrieron dos hechos relevantes el pasado viernes 8 de enero, ambos de gravedad. El primero es el intento de expansión hacia el barrio de La Vega por parte de integrantes de la banda del “Coqui”, la cual, como sabemos, tiene años controlando la Cota 905. Si esta expansión se llega a concretar (seguramente lo van a seguir intentando), esta banda criminal se vería fortalecida y los caraqueños podríamos sufrir de un accionar aún mayor de esta banda delictiva. 

El segundo aspecto de gravedad tiene que ver con la respuesta de los cuerpos de seguridad, que no conllevó a la captura de los líderes de la banda del Coqui, pero que sí dejó una estela de denuncias de ejecuciones extrajudiciales y de otras violaciones a los DDHH. Se habla de presuntos enfrentamientos, pero de un lado quedaron 24 víctimas y del otro ninguna. Si acá hubiera institucionalidad se pudiera conocer la verdad de lo ocurrido, pero eso luce imposible en un país en el que existe cerca de 99% de impunidad en los casos de violación a los derechos humanos. 

¿Se puede considerar que las FAES son un grupo pensado para el control o la “limpieza social”? 

 

Alberto Ray 

Realmente, no. Ese no es el rol de las FAES, aunque eso es lo que hacen. Las FAES es una de las organizaciones policiales o de represión del Estado que queda que ejerce ese papel, pero el rol de las FAES no es exterminar a la banda criminal. La función de las FAES es negociar con las bandas criminales y hacerlas aliadas a la organización criminal del Estado. 

Hay bandas amigas y bandas enemigas. La banda del “Coqui” es la banda enemiga del régimen y por eso es que actúa las FAES, que es una expresión del régimen para controlar a aquellos que son sus enemigos. Si la banda del “Coqui” fuese amiga del régimen, eso no ocurriría, más bien le facilitaría el proceso de expansión. Pero como el “Coqui” se peleó con el régimen, ha impuesto su propia ley. 

Entonces ocurre que las FAES sirve como mecanismo de contención de esa banda, pero esa contención es muy limitada porque no es posible exclusivamente desde lo policial. Para contener un proceso de estos requieres 1000 o 2000 funcionarios policiales y eso no lo tiene las FAES para meterlos ahí. Después, eso requiere un trabajo de inteligencia inmenso para saber quién es de la banda, dónde se esconden, por dónde transitan. Nada de eso pasó ahí.

Simplemente las FAES lo que intenta es evitar que se le haga fácil al “Coqui” tomar La Vega y por eso es que lo enfrentan. Y lo enfrentan en condiciones reducidas porque no tienen recursos para contener eso. Y tú lo ves en los videos como los tipos andan asustados como a pesar de que son unos cuantos, no tienen un mecanismo para tomar el cerro y exterminar el proceso de expansión. 

Lo único que pueden hacer es aquellos que consideren que son de las bandas, entonces matarlos, ni siquiera los detienen. Hay gente que dice que hay muertos que no eran de la banda, gente que quedó en medio del fuego cruzado. Pero en el fondo uno nunca sabrá la verdad, no hay manera de saberlo.

Al final, las FAES no están ahí para hacer un proceso de devolver el territorio al ciudadano y de restablecer la ley. Está en todo caso para contener algo que ellos no pueden en realidad contener, que es el avance de un grupo criminal que es enemigo de ellos y que se está fortaleciendo.

Verónica Zubillaga

Las FAES aparecen después de operativos muy letales y muy caóticos. El Operativo de Liberación del Pueblo, se anunció en julio de 2015, en La Cota 905, dejando sólo el primer día 14 muertos. Luego de denuncias sin cesar, pasa a llamarse Operativo de Liberación Humanista del Pueblo, manteniendo este patrón de actuación de abuso sistemático de la fuerza y matanzas. Estos operativos, además fueron ampliamente denunciados y criticados por los excesos cometidos en los sectores populares, por la importante cantidad de jóvenes y hombres en barrios muertos, por la cantidad de atropellos en términos de robos en las casas de la gente, y matanza en las propias viviendas. 

Dos años después, en julio de 2017, se anuncian las FAES como una fuerza policial de acción especial para enfrentar y cito a la “bandas criminales y terroristas”. Las FAES han continuado el patrón de actuación letal, de manera más específica y si se quiere más dirigida. Se advierte pues, cómo el Estado, en tiempos de mucha inestabilidad social, económica y política, se ha constituido un actor fundamental de violencia ilegítima y de matanza sistemática sobre todo en los sectores populares. 

Las víctimas de las FAES, como en la masacre de La Vega, siguen siendo hombres, de barrios, la mayoría jóvenes.  En pocas palabras: La revolución bolivariana, y sobre todo en su período post Chávez, no logró incluir a los varones jóvenes, expulsados a las redes de economías ilícitas, terminan sus vidas encarcelados o muertos en las manos de maquinarias de muerte, como lo son las FAES precisamente.

Luis Izquiel

La FAES, en teoría, es un grupo que nace en 2016 como un cuerpo élite para perseguir a los líderes y demás integrantes de las bandas de delincuencia organizada en Venezuela, pero con el transcurrir de los años, ha devenido en el cuerpo de seguridad con mayor cantidad de denuncias por ejecuciones extrajudiciales y atropellos a los derechos fundamentales en la historia del país. Esto está recogido de esta forma en informes de la Alta Comisionada de DDHH de la ONU y en documentos de otras instituciones de defensa de los derechos humanos. 

Estos informes también señalan que las principales víctimas de las FAES son pobres, jóvenes y varones. Así que si realmente es un grupo de exterminio, afecta fundamentalmente a los sectores más desposeídos de Venezuela, lo que se convierte en una gran contradicción, sobre todo para un régimen que se vende como socialista y humanista. 

¿Por qué a pesar de las denuncias y la solicitud de disolución de las FAES, el gobierno de Nicolás Maduro ha hecho caso omiso y este cuerpo policial continúa operando?

 

Alberto Ray 

Porque ese es su sistema de control. Las FAES es la organización que le permite al régimen contener a sus enemigos, a la criminalidad enemiga del régimen porque el régimen son criminales también 

La banda del “Coqui” es en contra del régimen, y eso no quiere decir que esté a favor nuestro, pero de alguna manera las FAES es la forma del régimen de contener a aquellos que no son leales y que son sus enemigos

Y aquí la población civil, el ciudadano común, no tiene nada que ver. Las FAES mata a ciudadanos comunes, y a bandas criminales y a quien sea, como el “Coqui” también. La tragedia de esto es que el ciudadano queda en medio del fuego cruzado, eso es lo grave de esto que está pasando aquí. 

¿Qué pasa si el “Coqui” no logra la expansión de La Vega y el FAES logra contenerlos? La Vega no queda en manos de los ciudadanos ni del Estado de derecho, sino de una banda criminal asociada al régimen. Porque cuando no tenemos estado de derecho, quienes gobiernan son los criminales. 

Luis Izquiel 

Ciertamente, la Alta Comisionada de la ONU para los DDHH, así como la Comisión Interamericana de DDHH, han solicitado la disolución de la FAES, sin embargo esto no ha ocurrido. Quizás esto responde a que la FAES se ha convertido en un órgano de control social, aprovechando el miedo que genera en la población. Este organismo también es utilizado para amedrentar y detener a líderes políticos y a cualquier persona que sea considerada como disidente al régimen actual. Quizás estas sean parte de las razones para que este cuerpo policial no sea eliminado, sobre todo en un régimen que tiene a la represión como su principal bastión para sostenerse en el poder.