El punto G de la desfachatez, por Andreína Muñoz-Tébar - Runrun
El punto G de la desfachatez, por Andreína Muñoz-Tébar

CON LA ROBOLUCIÓN DEL SIGLO XXI cualquier historia que una pueda montarse, por más inverosímil que sea, es válida. Desde un muerto decretado mucho antes de enterrarlo, hasta ritos de brujería con los huesos del Libertador. Nos contarán los nietos, en sus rezos a las alturas, cuáles de nuestras hipótesis, elucubraciones y especulaciones resultaron ciertas.

Chavez y Maduro se convirtieron en el Socialismo de los Cuentos, comenzando por el mismísimo socialismo que venden, con una población cada día más hambreada y una élite gobernante cada día más multimillonaria en dólares, el billete que tanto denigran.

Pero en lo que nunca pensaré, y creo que la mayoría del pueblo, es en Maduro y Cilia en su habitación presidencial. En lo más íntimo. No sé si por la grotesca figura que hoy luce Maduro, o por la imagen en la intimidad de Cilia. Y eso, la intimidad de una pareja, se respeta. Aclaro esto por el sexy-título de mi artículo. 

El punto G, bien estimulado, puede desencadenar un orgasmo. El éxtasis. La Locura. El placer de los placeres, sexualmente hablando tanto en ella como en él. Pero Nicolás Maduro, como suele suceder, llegó al punto de prometer no uno, ni dos, ni tres, ni cuatro… sino cinco puntos G… ¡Relax! Sólo a nivel de tecnología.

Y aquí viene la explicación de lo que podríamos bautizar como el “orgasmo de la desfachatez”

Quien tenga una línea Movilnet (la empresa expropiada por el régimen) y cambie de equipo móvil que no admita la misma tarjeta SIM, que se olvide de conseguirla. ¡No Hay! Y todo por mantener una línea de un teléfono con la peor cobertura a nivel nacional.

El servicio ABA de conexión a la internet, y que presta CANTV a otras operadoras, nos surte de modem que parecen juguetes, de mínima calidad. Y el servicio de conexión es nefasto. Invito a cualquiera que lea este artículo a realizar una encuesta personal.

Pero Nicolás promete el 5G. Aclara que a nivel de prueba. Pero vaya que no cinco, millones de Guisos ya se han ejecutado, probados, e identificados sus beneficiarios finales.

Comencemos con una G dantesca: El Guiso de los Clap. Y es dantesca porque ha permitido lucrar a personas a cuenta de hambre, mucha hambre en el venezolano. Unos se vuelven multimillonarios y otros aceptan comer granos de arroz con bichos y leche que no es leche, y qué leche que no se enfermen consumiéndola. Trabajos muy profesionales del tema abundan en este portal y en portales periodísticos hermanos como armandoinfo.com. La corrupción detrás de este esclavismo alimentario está más que documentada por periodistas venezolanos, e incluso replicada, y complementadas las pruebas, por gobiernos de otros países.

Sigue la G del Guiso cambiario, guiso en el cual entran todas las instituciones inventadas por el gobierno para propiciar el ilícito: Cadivi, SICAD, DICOM , etc, etc. Esta G es anterior a la del CLAP. De hecho, resulta fuente de negocio de la anterior, pero enumero primero los alimentos por resaltar la desfachatez humanitaria que puede quintuplicarse si hablamos de medicamentos. ¿Qué pasó con la ministro Sader? Robos identificados desde el 2010, imputada en el 2014, pero sin recibir uniforme de Iris hasta el momento. 

Rotondaro, antiguo capo del IVSS, se le volteó al régimen y huye a Colombia haciendo públicas algunas seleccionadas denuncias (habría que investigar por un tribunal serio las denuncias de corrupción en su contra) ¿Se va y denuncia quizás porque el puesto ya estaba prácticamente designado a otro, y él saldría con las tablas en la cabeza?  Pero, ¿quién responde, mientras millones van y millones vienen, por los dolores de cabeza de un paciente que sufre de tensión alta? ¿Por el paciente diabético, los niños del J.M de los Ríos, el adulto trasplantado, el paciente cancerígeno o VIH +?

Y mencionemos la tercera G: Guisos Petroleros. Con lo poco que producimos, desde hace ya varios años, siempre guisan. Y en este punto Rafael Ramírez no puede pasar liso. ¿Saben cuánto dejó de entrar a Venezuela a cuenta de convenios chimbos, comisiones, etc.? ¿Podría Rafael Ramírez hacer pública una auditoría a sus cuentas, incluyendo testaferros, algunos identificados y otros ocultos? ¿Qué porcentaje de su inmensa fortuna podrán representar los 1.420 millones de Dólares a pagar por perder la Demanda por Chantaje en los Estados Unidos? Y, ¿quién me lee cree que este personaje, Eulogio del Pino, y ahora Manuel Quevedo, actúan o actuaron sin pasar por Go y dejar los 200.000.000,oo$ al manda más, como si de un monopolio estuviésemos hablando? Solo que en el monopolio los verdes se dejan en el estado por pagar cárcel.  En el juego de la corrupción socialista cambia el receptor.

Y llegamos a la cuarta, la G de los Guisos Mineros. Y esta es digna de serie en Netflix porque involucra desde lingotes de oro saliendo de una institución oficial, hasta militares y civiles embarrados en un negocio que no es de ellos (es de todos los venezolanos), pasando por el ecocidio evidente de todo un territorio nacional. Un guiso apetecible para militares y, por las noticias que lamentablemente vienen del norte y no de una fiscalía independiente venezolana, para civiles jojotos muy cercanos a la cabeza del régimen.

Como quinta G dejamos la peor. Guisos Humanos. ¡Sí! A este régimen la vida humana le vale igual que un cargamento de comida sobrefacturada y podrida en Puerto Cabello. Las historias que se harán públicas en una Venezuela Libre serán narradas en series de Netflix, jamás comparables a Narcos, El Chapo, etc. Etc. Definitivamente serán mucho más crudas. Son guisos porque compran con vida humana permanencia en el poder y en las 5 G… por mencionar 5 de muchos guisos. Fernando Albán, nuestros jóvenes manifestantes, Óscar Pérez, el Capitán de Corbeta Rafael Acosta Arévalo. Seres humanos, valiosos, venezolanos todos, metidos en una olla para mantener un guiso. ¡Sí! Así de dantesca es la imagen que este párrafo invita a formarte. Es real. Es criminal.

La única G que pueda adjudicarse el régimen es una G de Grotesco (y eso porque la palabra Griminal no existe).

La Venezuela que lucha y merece algo mejor no tiene sueldos multiplicados por 5G. 

La productividad de nuestra industria (Agrícola, Textil, etc.) está muy lejos de ser potenciada por 5G.

Los insumos y el estado de nuestros hospitales siguen con una calificación 5G, por la Gravedad de la situación.

Los derechos humanos, la vida del venezolano que piensa distinto y quiere un país próspero y democrático le valen a Maduro y su séquito 5G. G de GoodBye. G de Gone (murió). G de Genocidio.

Señor Maduro, ¿Qué significa 5G para usted? Por ahora, en base su dominio de la ortografía, Ge, Ge, Ge, Ge, Ge, Ge

Traducción:

Je, Je. Je, Je, Je, Je. Una Burla más a todos los venezolanos.

 

@dremunoztebar