Brasil, Chile y Nicaragua despuntan en América Latina en energías limpias
Brasil lidera por segundo año consecutivo el Climatescope (escala climática) de América Latina y el Caribe, un listado que puntúa a los países en relación a sus inversiones en energías limpias y en la reducción de los gases de efecto invernadero. En una escala, del 2 al 5, su puntuación es de 2,47, según los datos que se han dado a conocer en el Climate Investment Funds Forum 2014 que este año se celebra en Montengo Bay (Jamaica).
La clasificación, elaborada por Inter American Development Fund y Bloomberg New Energy Finance, orienta a los inversores sobre los mercados más atractivos para invertir en energías no contaminantes, con bajas emisiones de carbono. Y todas las miradas apuntan a Brasil, donde en el periodo que va del 2006 al 2012 la apuesta por energías limpias superó los 82.000 millones de dólares.
El toque de atención es que en el 2013, el último año valorado, experimentó un descenso del 36%, pese a que sigue manteniendo una apuesta sólida por las políticas de energías renovables.
El puesto segundo del Climatoscopees para Chile, con una puntuación del 2,41 y unas perspectivas buenas para los inversores dados sus muchos recursos naturales, empresas sensibles con el medio ambiente y el crecimiento del poder adquisitivo de la sociedad.
En el tercer lugar se sitúa Nicaragua, con un 2,26, y un gran salto adelante del 40%, mediante una inversión de 292 millones de dólares en la apuesta por las renovables. El país está comprometido con las energías limpias, según se desprende de los datos de los analistas financieros.
El cuarto y quinto lugar son para Perú y México respectivamente. En ambos casos su punto fuerte es que han atraído más inversiones en renovables. Especialmente significativas son las cifras de México, que pasó de una inversión de 500 millones de dólares en el 2011 a 2.900 en el 2012.
A la cola de los países de Latinoamérica está Venezuela, con una poderosa industria petrolera, lo cual, según los analistas, explica su negligencia a la hora de apostar por las energías no contaminantes.
Paraguay y Bolivia detentan también las posiciones bajas delClimatescope, seguidos de toda la región del Caribe, a excepción de Jamaica, que no sobrepasa los 0,80 puntos, lo que significa que tendrán que hacer un gran esfuerzo a la hora de subirse al carro de las energías no contaminantes.
Bloomberg e Inter American Development Fund animan a los inversores a apostar por las energías limpias en ambas regiones, dado el crecimiento económico que han experimentado en los últimos años y su compromiso con el medio ambiente. No obstante, señalan que el principal temor de los inversores es cómo moverse en economías regionales difíciles de entender. Un intercambio de información y un marco político adecuado parecen ser las claves.
En el foro de Jamaica se ha puesto de manifiesto el potencial de América Latina y el Caribe para expandir su mercado de energías limpias. En los distintos paneles de discusión se ha incidido en la necesidad de hacer crecer y transformar la economía a través de iniciativas respetuosas con el medio ambiente y comprometidas a combatir los gases de efecto invernadero, asociados al cambio climático.
La llave parece estar en la baja emisión de estos gases y en las energías limpias. El reto: “Hacer partícipes a las comunidades locales en los proyectos, y coordinar los esfuerzos que se programan en instancias internacionales alejadas de las realidades locales concretas”, en palabras de Andrea Rodríguez, asesora legal del Climate Change Program.