Escasez de materiales de construcción afecta programa de vivienda del Gobierno de Miranda
“Para nadie es un secreto que Venezuela enfrenta actualmente una crisis política y económica, situación que afecta especialmente a los venezolanos de menos recursos, quienes han tenido que adquirir los productos que escasean con un sobreprecio de hasta el 100%”, así lo explicó Rebeca Velasco, presidenta de Vivienda Miranda, quien aseguró que esta realidad también ha afectado la industria cementera del país, cuyas principales empresas han disminuido entre 13 y 47% su producción nacional, luego que fueran nacionalizadas por el Gobierno central.
“La escasez y el sobreprecio en los materiales de construcción han afectado a todos los venezolanos, especialmente a quienes son atendidos por los programas sociales en materia habitacional. Recordemos que el Gobierno de Miranda entrega a las personas de escasos recursos Certificados de Materiales de Construcción Sin Deuda en sus diferentes modalidades, para la construcción de una Vivienda Semilla o reparaciones puntuales como el techo o el baño. Sin embargo, por la escasez de los materiales en las ferreterías, los beneficiarios de nuestro programa se han visto afectados”.
Velasco lamentó que los venezolanos tengan que recurrir al mercado negro para adquirir los materiales hasta con un sobreprecio del 200%. Dio como referencia el costo de los bloques de 12 y 15 centímetros, que están regulados en 0,38 y 0,44 bolívares, respectivamente, los cuales se pueden conseguir entre 10 y 13 bolívares. “En el caso de la arena que está regulada en 44,20 bolívares el metro cúbico, los venezolanos terminan pagando más de 300 bolívares por cada metro cúbico. Por ejemplo, para construir la estructura de una vivienda de 36 metros cuadrados, el comprador debe pagar 9 veces más el precio regulado de los materiales, y en el caso del cerramiento hasta 16 veces más”.
Ante esta situación de inflación, escasez y mercado negro, el Gobierno de Miranda antes podía atender a 10 mil familias, sin embargo, hoy día solo puede beneficiar a 4 mil familias. “No es justo. Con esto no están afectando al Gobierno de Miranda, nosotros somos una instancia que brinda apoyo a los que realmente tienen una necesidad”.
Señaló que según datos del Banco Central de Venezuela (BCV), la producción cementera en el último trimestre de 2013, cayó 13,1%; lo que ha agudizado la escasez y en consecuencia el sobreprecio de los materiales de construcción.
“Cuando yo tengo algo y tú lo necesitas, tú me lo pagas al precio que yo le pongo, porque de lo contrario te quedas sin el producto. Sin embargo, para una familia de escasos recursos se le hace cuesta arriba pagar por un material con sobreprecio. Por ejemplo, para construir una casa de tan solo 36 metros cuadrados, dos habitaciones, cocina y un baño se necesitan aproximadamente mil 200 bloques, por lo que el salario de un solo integrante de la familia se le hace imposible cubrir el 100% de la construcción”.
En tal sentido, la Presidenta de Vivienda Miranda instó al Gobierno central a ocuparse del problema. Dijo que una de las soluciones es el trabajo mancomunado, del esfuerzo público y privado, así como la reactivación de las Empresas Básicas que producen acero y otros materiales, aunado a la recuperación de las empresas nacionalizadas, como las cementeras.
Recursos en mora
Velasco además afirmó que la no transferencia por parte del Gobierno central de los recursos provenientes del Fondo de Compensación Interterritorial (FCI) al Ejecutivo regional, repercute negativamente en todos los programas, especialmente en los que a obras se refiere. “Nosotros como funcionarios tenemos que cumplir de forma eficiente, eficaz y oportuna al pueblo, y sin estos recursos no podemos darle respuesta al pueblo, que es quien más lo necesita”.
Sin embargo, aseguró que pese a cualquier traba, esto les da más fuerza para seguir trabajando. “Con poco tenemos que tratar de hacer mucho, pero eso no puede ir jamás en detrimento de la calidad. Al bajar la cantidad no puedes bajar la calidad, hay que mantener unos estándares, porque lo que está en juego es la seguridad de todas las personas”.