La subsecretaria de Estado de EE UU para Latinoamérica, Roberta Jacobson, confesó hoy estar “decepcionada” por la reacción de los paÃses latinoamericanos a las sanciones adoptadas por su nación contra funcionarios venezolanos, algo que consideró como una falta de defensa de la democracia.
Jacobson, que participó hoy en una conferencia en el centro de estudios Brookings para abordar la próxima Cumbre de las Américas que se celebrará en Panamá la semana que viene, calificó el respaldo de los paÃses latinoamericanos a Venezuela como un ejercicio de solidaridad basada en la retórica.
“Las palabras son importantes, y el tono con que se dicen esas palabras. El tono que están usando ahora los lÃderes (latinoamericanos) demoniza a Estados Unidos como si fuera la fuente de los problemas de Venezuela, cuando no lo somos, y esto nos dificulta avanzar de una manera pragmática”, agregó.
“Me decepcionó que no hubiera más paÃses que defendieran que (las sanciones) no eran para dañar a los venezolanos o al Gobierno venezolano en su conjunto”, explicó la diplomática, que insistió en que su Gobierno se alejó de cualquier tipo de injerencia en la crisis del paÃs caribeño durante mucho tiempo.
Sin posibilidad de diálogo
La subsecretaria de Estado estadounidense reiteró que las sanciones contra ciertos funcionarios venezolanos han sido muy especÃficas y que la Administración Obama rehusó tomar cualquier medida mientras hubo una esperanza de diálogo entre el Gobierno de Nicolás Maduro y la oposición.  “Pero llegó un momento en el que ya no podÃamos argumentar que habÃa algún tipo de diálogo. (…) Era difÃcil ver que hubiera un proceso externo o interno para lograr las soluciones dirigiéndose en la dirección correcta, al haber además aún más detenciones y ninguna liberación importante”, aseveró.
No obstante, Jacobson insistió en que Estados Unidos no pretende hacer de la Cumbre de las Américas un espacio en el que la situación de Venezuela sea el tema protagonista, y subrayó la importancia de que se aborden asuntos de carácter regional e interés común en el continente. El aumento de las tensiones entre los dos paÃses a raÃz de la imposición de sanciones contra dichos individuos por parte de Estados Unidos será inevitablemente uno de los asuntos que sobrevuelen la Cumbre, que contará con la presencia del presidente Barack Obama.
Los paÃses latinoamericanos han mostrado en diversos foros, como la Unión de Estados Suramericanos (Unasur) y la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac) su oposición a la acción ejecutiva de Obama contra Venezuela, en la que además calificó al paÃs caribeño como una “amenaza nacional” para Estados Unidos.
El pasado 9 de marzo el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, firmó un decreto que ordena congelar las cuentas a siete funcionarios del gobierno de Nicolás Maduro y les prohÃbe la entrada ese paÃs de Norteamérica. Las sanciones son por violación de Derechos Humanos y corrupción, y además contiene una declaración de emergencia por considerar a Venezuela como una amenaza para el sistema estadounidense.