Christian Méndez no se salvó de la ola de detenciones arbitrarias desencadenadas antes y después de la toma de posesión de Nicolás Maduro. El 13 de enero, en horas de la tarde, funcionarios del Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (Sebin) en Tucupita, estado Delta Amacuro, llegaron al lugar donde entrenaba Méndez y, sin mediar palabras, se lo llevaron detenido.
Según detalla María Méndez, madre de Christian, el 9 de enero opositores en Delta Amacuro protestaron en rechazo a la toma de posesión de Nicolás Maduro para un nuevo período presidencial. Aunque el entrenador no estaba protestando, testigos afirman que pasó por el lugar y se detuvo a grabar con su teléfono celular todas las incidencias de la marcha.
“Tucupita es un pueblo muy pequeño y las calles son literalmente pequeñas. Cuando se formó el problema, él quedó en medio de la concentración, del bullicio, de los que estaban tirando piedras y de los colectivos que lanzaban tiros al aire. Hay videos donde se evidencia que Christian sí estuvo grabando, pero él no estuvo incitando al odio ni, faltándole el respeto a nadie”, detalló María Méndez.
Cuatro días después de esa protesta, Christian Méndez, de 34 años, se encontraba en el Malecón de Manamo con un grupo de aproximadamente 70 personas, quienes hacían sus entrenamientos funcionales como todas las tardes.
“A mi hijo lo agarraron prácticamente solo porque cuando llegaron los funcionarios del Sebin, él había mandado a sus alumnos a correr y que volvieran en 10 minutos”, relató Méndez.
Detenido y sin defensa
El deportista ya está próximo a cumplir cuatro meses detenido. Desde entonces ha permanecido en una comandancia policial en el estado Delta Amacuro sin derecho a defensa privada. Este es un patrón común que se aplica a los presos políticos en Venezuela: se les obstaculiza designar a sus abogados de confianza y se les imponen defensores públicos. De hecho, a finales de marzo, un grupo de familiares de presos políticos consignó ante la Oficina del Coordinador Residente de la ONU, en Caracas, un documento en el que denunciaron esta situación.
La última vez que su madre pudo verlo fue el 3 de abril durante su presentación. Asegura que no lo han golpeado, pero que “nadie puede estar bien si está preso”.
Al entrenador personal y fundador y líder del movimiento deportivo “Rompe tus límites” se le acusa de incitación al odio, lesiones personales graves, terrorismo y agavillamiento, según el escrito acusatorio de la Fiscalía 99 de Delta Amacuro.
Christian es oriundo del estado Guárico, pero prefirió echar sus raíces en Delta Amacuro. Después de volver de Perú en 2021, se dedicó a entrenar de manera profesional y cada día, más y más personas se han sumado a su movimiento deportivo, el cual ya cuenta con más de 200 personas que entrenan a diario y miles de seguidores en su cuenta de Instagram.
Según su mamá, Christian ha participado en varios torneos de entrenamientos funcionales en distintos estados del país y ha sido ganador de varias medallas.
“Mi hijo no fuma, no bebe, no tiene antecedentes penales, es cristiano, es una persona de casa que solo se ha dedicado a la salud y el bienestar de todos”, sumó.
Un familiar de Méndez, que prefirió no ser identificado por temor a represalias, aseguró que los funcionarios policiales cumplieron las órdenes de sus superiores y encarcelaron a los primeros que vieron en la calle sin tomar en cuenta que eran personas inocentes: “Lo metieron preso por meterlo preso, porque fue el primero que vieron”.
Procesados por una misma causa sin conocerse
Ese mismo día, pero horas más tarde, también detuvieron a José Ángel Lepage, de 45 años, conocido por todos en Delta Amacuro por vender café y guarapo en las calles.
Lepage y Méndez no se conocían, y ese día ni siquiera estaban cerca el uno del otro. Ahora, los dos se conocen porque están acusados por los mismos delitos y comparten la misma causa.
María Méndez comentó que tres días después de que los detuvieron dieron un lapso de 45 días para cumplir con los tiempos establecidos en el sistema penal. Indicó que el 25 de marzo les fijaron la audiencia de presentación, pero por el cambio de horario en los entes gubernamentales debido al “ahorro energético”, tuvieron que suspender el proceso.
“El pasado 2 de abril fueron pasados a juicio porque supuestamente ellos tienen pruebas contundentes de que ambos son culpables de la trifulca que se armó en Delta Amacuro”, expresó.
La detención de Christian y José Ángel fue denunciada por Orlando Moreno, coordinador del partido Vente Venezuela y defensor de Derechos Humanos en Delta Amacuro, a través de su cuenta en X.
Aunque ese día hubo varias detenciones, se desconoce lo que ocurrió en Delta Amacuro el pasado 9 de enero y la cantidad exacta de detenidos y heridos. Pero las prisiones en Venezuela siguen albergando a personas inocentes en el contexto de la represión poselectoral que tuvo un pico en enero de 2024. Sus familias han denunciado reiteradamente que fueron detenidas en procedimiento irregulares y algunas incluso permanecen sin poder recibir visitas. De acuerdo con el último balance del Foro Penal Venezolano, actualmente en Venezuela hay 903 detenidos por motivos políticos y cuatro de ellos son adolescentes.
Familiares de Christian Méndez rechazan que una persona tan querida y conocida por su labor en todo Delta Amacuro esté detenido. Exigen su liberación porque “no cometió ningún delito”.
