Constructoras de paz | Ellas luchan contra el hambre en un Sucre azotado por la desnutrición - Runrun
Constructoras de paz | Ellas luchan contra el hambre en un Sucre azotado por la desnutrición
La fundación que actualmente atiende a cien niños, en dos comedores, depende de donaciones y de la buena voluntad de personas

 

El estado Sucre, situado al oriente del país, es uno de los tres estados con mayor índice de desnutrición infantil en Venezuela. En medio de la falta de alimentos y la pobreza, emergen planes de ayuda para los niños más vulnerables y son las mujeres quienes están al frente.

Tal es el caso de Nohemí Mata, coordinadora de un comedor de la Fundación Cumaná Mía, la cual surgió hace tres años en medio de una severa crisis humanitaria por falta de alimentos que azotó al país entero, pero en especial a la capital del estado Sucre.

Miranda Ponce, periodista, activista y madre de tres hijos; junto a su esposo y Nohemí concibieron la idea y decidieron que era el momento de hacer algo, desde sus posibilidades, para luchar contra los estragos del hambre.

Así nació la fundación que actualmente atiende a cien niños en dos comedores, situados en dos iglesias católicas en las parroquias más grandes de Cumaná. La tarea de conseguir alimentos no fue sencilla al inicio, ni lo es ahora. Dependen de donaciones y de la buena voluntad de personas que quieran colaborar.

Cifras alarmantes

Cuando Miranda inició Cumaná Mía, en 2019, el escenario de desnutrición infantil en el estado Sucre era alarmante. Según la fundación Cáritas de Venezuela, la entidad estaba entre los tres primeros estados con mayor índice de desnutrición en el país, junto con Portuguesa y Lara. 

En ese año, la situación era de emergencia total y las cifras daban cuenta de ellos, de mil 300 niños evaluados, el 50% padecía desnutrición en Sucre. 

Según Jorge Rojas, coordinador regional de Cáritas, alrededor de 120 niños al mes son diagnosticados con desnutrición en Cumaná y zonas periféricas. 

Para Miranda Ponce, la meta es que los comedores dejen de existir. “Abrimos el comedor con mucha esperanza de aportar y seguiremos haciéndolo. Pero ahora mi mayor esperanza es que dejen de existir y que las madres tenga la oportunidad de alimentar a sus hijos por sus propios medios, sin depender de este tipo de iniciativas para poder salvar a sus hijos del hambre”, concluyó.

Este trabajo fue publicado en el microsite  de Mujeres Constructoras de Paz que estrenó IPYSve el pasado 18 de julio.

Esta red de periodistas recoge noticias, entrevistas e informes sobre la situación en la que se encuentran las mujeres en un país como Venezuela, caracterizado por una crisis humanitaria compleja.