Memoria y Cuenta 2019: Maduro de 30 afirmaciones solo pegó una - Runrun

Muchas mentiras, datos imprecisos y una sola verdad surgieron durante el discurso de tres horas que dio Nicolás Maduro ante la impuesta Asamblea Constituyente (ANC) para presentar su Memoria y Cuenta 2019 y luego dar algunos lineamientos generales del Plan de la Patria 2019-2025.

Los equipos de TalCual y EsPaja.com chequearon con datos, estadísticas e indicadores, 30 afirmaciones hechas por el gobernante venezolano, entre ellas sobre su asistencia ante la ANC cuando dijo la primera mentira: «Yo vengo a cumplir con las previsiones constitucionales de presentar la Memoria y Cuenta ante la Asamblea Nacional Constituyente».

La Constitución establece en su artículo 237 que el Presidente o Presidenta de la República deberá comparecer ante la Asamblea Nacional para presentar la Memoria y Cuenta. Desde 2017, Maduro no comparece ante la AN, de mayoría opositora, para presentar este documento bajo el argumento de que el poder Legislativo se encuentra en «desacato». 

En el inicio de su discurso también dijo que su gobierno se sustenta en la unión cívico- militar y «en 3 millones 700 mil compatriotas que han decidido forma parte de la milicia». Esto último es dudoso pues aunque en diciembre de 2019 Maduro aseguró que se había logrado la meta de milicianos que proyectó, en abril del año pasado, no hay ningún registro oficial que confirme la cifra.

También se refirió al supuesto «sabotaje eléctrico» que ocurrió en 2019. Otra mentira de Maduro. Para los expertos, la crisis del sistema eléctrico no responde a actos de sabotaje, sino a la falta de mantenimiento y de inversión, la corrupción y la fuga de talentos, principalmente.

Además, trabajadores de la represa de Guri afirmaron a TalCual que la falla del día jueves 7 de marzo de 2019 no se produjo en generación sino en transmisión debido al nulo mantenimiento, pues debido a la falta de desmalezamiento entre la subestación eléctrica Malena y el Guri, se produjo un incendio que afectó las líneas de transmisión de 765 KV y devolvió la energía a las máquinas de la represa.

Hasta un gazapo histórico se le escapó a Maduro durante su Memoria y Cuenta de 2019 cuando dijo que «en 1820, España reconoció de hecho la existencia de la República de Colombia (…) con la firma en Trujillo de los Tratados de Armisticio y de Regularización de la Guerra (…) tratados propuestos por Bolívar».

Aunque España no reconoció jurídicamente a Colombia, si es cierto que ambos Tratados se iniciaban con la expresión: «Deseando los Gobiernos de España y de Colombia…». En el texto se mencionaba a Bolívar con el título de «presidente de Colombia», pero es falso que el Libertador haya propuesto ambos tratados. Solo el de Regularización de la Guerra, que surgió con las negociaciones en marcha, fue iniciativa suya.

Bajo escrutinio

El gobernante se refirió a la oposición venezolana varias veces. Además de acusarlos de estar al servicio de los intereses de Estados Unidos, dijo que «ellos solo reconocen una elección si la ganan, si la pierden mienten». Esto es falso debido a que en octubre de 2012, Henrique Capriles, candidato opositor en las elecciones presidenciales, reconoció su derrota ante Hugo Chávez en los comicios del 6 de octubre.

 

También habló sobre la Asamblea Nacional y su reconocimiento a Luis Parra como supuesto presidente de la AN, de quien dijo fue escogido por «un sector de la misma oposición». Maduro también se equivocó en esto, pues como el mismo diputado ha reconocido, la mayoría de votos que obtuvo eran provenientes del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV).

Del parlamento venezolano también afirmó que podría ser anulado por el nuevo conflicto de la oposición y que continuaba el llamado «desacato». La Asamblea Nacional no está en desacato porque las instituciones no pueden entrar bajo esta figura legal, sino las personas. Además, los diputados de la AN fueron electos por mandato popular en diciembre de 2015.

Recordemos que el llamado «desacato» de la AN es una medida judicial dictada por la Sala Electoral del TSJ en 2015 y que desconoce todas las decisiones del Legislativo al considerarlas nulas hasta tanto no se desincorporara a los parlamentarios de Amazonas.
 

Pero este año, hasta a la ANC también se olvidó de las sentencias del TSJ sobre el «desacato» de la Asamblea Nacional y reconocen a Luis Parra como el nuevo presidente del poder Legislativo venezolano para el periodo 2020-2021.

La única verdad entre las afirmaciones de Maduro fue que en 2020 debe haber elecciones para elegir a los nuevos representantes de la Asamblea Nacional. El artículo 192 de la Constitución dice que «Los diputados a la AN durarán 5 años en funciones, pudiendo ser reelegidos por dos periodos». La actual legislatura se instaló el 5 de enero de 2016. 

Sin embargo, ni la Constitución ni la Ley Orgánica de Procesos Electorales autorizan a una Asamblea Constituyente a convocar elecciones; solo facultan para ello a un Poder Electoral legítimo y que garantice imparcialidad y transparencia.

Economía de mentiras

Sobre el tema económico, el gobernante venezolano hizo varias afirmaciones y hasta un decreto durante la presentación de su Memoria y Cuenta ante la constituyente. Lo primero que dijo fue que «protegió a las víctimas de la guerra económica con el fortalecimiento de herramientas que hemos venido impulsando como los CLAP y el aseguramiento de la alimentación para las grandes mayorías».

Primera mentira económica. Según la ONG Ciudadanía en Acción, a finales de 2019 la caja pesaba casi la mitad que en enero: pasó de 16 a 9 kilos en promedio. En 2016, cuando Maduro anunció el nacimiento del CLAP, las cajas pesaban 19 kilos y contenían 15 artículos.

Entre enero y noviembre de 2019 la cobertura del CLAP cayó 36% al bajar el número de familias receptoras de 3,36 millones a 2,15 millones. La ONG también reportó que en noviembre, la caja no llegó en más de la mitad de los 6 millones de hogares que Maduro dice “proteger” pues 3,99 millones de familias no la recibieron.

De la caja CLAP dijo además que costaba 30 dólares. Otra de sus mentiras. En agosto pasado, la Fundación para el Desarrollo Endógeno Comunal Agroalimentario, ente del Gobierno del Distrito Capital que distribuye las cajas Clap en el municipio Libertador, informó que el costo de la caja Clap era de 235.000 bolívares, lo que equivalía a 13,7 dólares al cambio del momento (17.000 Bs./$).

Nicolás Maduro también hizo una afirmación preguntando a su audiencia: «¿Es o no verdad que la inversión social haya aumentado un 76% este año 2019?». No estuvo cerca. En el año 2019 no se difundió el desagregado del presupuesto nacional y desde el año 2017 se desconocen las premisas macroeconómicas (inflación, PIB, tasa de cambio, precio promedio del petróleo) y los montos de ingresos y gastos de cada uno de los ministerios.

Además dijo que «protegieron al pueblo» con varios aumentos de salario y cestaticket. Otra falsedad. El 1 de enero de 2019 el salario mínimo (Bs 4.500) equivalía a 6 dólares. Pese a que el gobierno ajustó el sueldo tres veces en 2019 (a Bs 18.000 en enero, a Bs 40.000 en abril y y a Bs 150.000 en octubre), a finales de año equivalía apenas 2,7 dólares.

Las cifras de empleo estuvieron en las afirmaciones del gobernante, pues señaló que «en el año 2019 mantuvimos el récord de 6%». Falso para Maduro. La deplorable situación económica (2019 fue el sexto año consecutivo en recesión) ha llevado a trabajadores a retirarse de sus empleos e irse del país sin ni siquiera presentar formalmente la renuncia.

Maduro además dijo que «el año 2019 mantuvimos el trabajo formal en un 60%». Otra vez falso. La data publicada por el INE refleja un incremento del trabajo informal en el país para finales de 2018. Un poco más de 6 millones 196 mil venezolanos son trabajadores informales, lo que representa 41,6% de la fuerza laboral total.

El índice de escasez bajó más de 15 puntos» en 2019, una afirmación dudosa de Maduro. No hay cifras oficiales por parte del Banco Central de Venezuela (BCV) y del Instituto Nacional de Estadística (INE) sobre el índice de escasez y el nivel de diversidad de productos en 2019. Estos indicadores dejaron de publicarse desde el año 2013.

Maduro también dijo que «La distribución global de la misión alimentación ha sido de más de 2.5 millones de toneladas métricas, beneficiando a más de 7 millones de familias». Esto es falso pues según la ONG Ciudadanía en Acción, que monitorea la distribución de CLAP, la cobertura en enero fue de 3,3 millones de familias, y para agosto había caído a 2.577.000 familias.

Para el gobernante esto será poco probable. Sus aliados no reconocen esta supuesta criptomoneda como un método de pago confiable a las importaciones que hace Venezuela desde 2018, por lo que el petro parece que se quedará para pagar bonos.

Maduro también se refirió a la inflación y dijo que fue «1.000 veces menor a la proyectada desde Washington». Esto es una verdad a medias, pues aunque falta por conocer resultados del último trimestre, el alza de precios no alcanzará ni siquiera el 200.000% calculado a finales de 2019. El dato disponible hasta ahora es el de la AN que, para el cierre de 2019, reportó un aumento de 7.374,4%.

Es dudoso además lo que destacó en su Memoria y Cuenta sobre la recuperación de la producción petrolera, «lo que se evidencia desde el cierre de septiembre de 2017 hasta nuestros días de más de 230 mil barriles adicionales». De acuerdo a los reportes de la OPEP el aumento entre septiembre y noviembre de 2019 de la producción venezolana fue de 163.000 barriles diarios, según cifras dada por Pdvsa. Mientras que las fuentes secundarias reportan un alza de 53.000 bd.

Las sanciones no fueron dejadas de lado por el mandatario en su informe, que mencionó que «se acercan a 40.000 millones de dólares los activos, bienes y efectivo de Venezuela en el extranjero que nos robaron los centros de poder imperial y sus cipayos».

Las cifras sobre los recursos retenidos en el exterior como consecuencia de las sanciones de Estados Unidos se desconocen. La administración de Maduro no ha informado oficialmente cuánto es el monto en efectivo congelado, ni el de sus activos.

Memoria y Cuenta de los golpes

Durante su alocución por la Memoria y Cuenta, Nicolás Maduro señaló que «El 15 de diciembre pasado intentaban preparar aventuras de asalto a cuarteles militares del Estado Táchira, Mérida, Barinas, Aragua y Sucre». Esto no del todo verdad.

El gobernante sí denunció el 15 de diciembre de 2019 un plan de conspiración que consistía en atacar dos cuarteles en Sucre, y que supuestamente debían conectarse con acciones similares en los estados de Zulia, Táchira, Barinas, Aragua y Caracas. Dijo que los autores de esos ataques eran los dirigentes opositores Leopoldo López y Juan Guaidó.

Esto último fue desestimado por la oposición, que afirmó que las acusaciones eran falsas y señalaron que se trataba de una nueva persecución por la proximidad del 5 de enero, fecha de instalación de la Asamblea Nacional para un nuevo período.

Otras de las afirmaciones de Maduro sobre materia militar fue que «el pasado #22Dic un grupo de terroristas, amparados por Bolsonaro e Iván Duque asaltaron un cuartel en Bolívar. Robaron misiles, lanza cohetes. Nuestra FAN respondió con prontitud y logró recuperar el 95%». 

Tampoco esto es como lo afirma el gobernante. Ese día un grupo de pemones, liderados por un Guardia Nacional, tomaron por asalto el Batallón Mariano Montilla en el municipio Gran Sabana, y sustrajeron 112 fusiles y municiones para las armas robadas para luego huir en dos camionetas.

Posteriormente asaltaron el puesto de la policía del estado Bolívar en San Francisco de Yuruaní, de donde se llevaron nueve pistolas 9 mm y 5 escopetas. El 29 de diciembre se difundió un vídeo en el que Josué Hidalgo, Franklin Caldera y Ruso Cárdenas, aseguraron que las armas “serán utilizadas para proteger al pueblo”, informando que los hechos forman parte de la Operación Aurora.

Sobre intentonas golpistas, el gobernante también se refirió en su Memoria y Cuenta a los sucesos del 30 de abril de 2019. «Aquella intentona golpista fue totalmente chapucera. Aquella trama golpista del 30 de abril se desarrolló en el vacío. Fue un gran fracaso de la extrema derecha», dijo Maduro ante la ANC.

Nuevamente una afirmación a medias. El madrugonazo militar con el que el presidente de la Asamblea Nacional, Juan Guaidó, sorprendió al gobernante Nicolás Maduro el 30 de abril no fue propiamente un golpe de Estado, pero develó fisuras en la lealtad castrense.

Derechos humanos: cero verdad

Según Nicolás Maduro, «Venezuela es vanguardia internacional en la agenda 2030 de las Naciones Unidas». Otra afirmación falsa a su larga lista del 14 de enero.

De acuerdo al ultimo informe de la FAO, Venezuela es uno de los países donde prevalece la subalimentación, aumentando en un 21,2% entre 2016 y 2018. Esto quiere decir que 6,8 millones de venezolanos no pueden alimentarse.

El 30 de noviembre fueron presentados los resultados preliminares de la Encovi 2019, en los que señala que en el país «hay un 48% de hogares que tienen privación en torno a un bienestar». Las instituciones públicas tampoco son organismos sólidos. Maduro es acusado de usurpar el poder, tras resultar electo en un proceso dudoso y desconocido por la comunidad internacional.

También dijo en la Memoria y Cuenta que «Hemos logrado un 6% de expansión de la matrícula escolar». Esto es dudoso pues desde el 2015 el despacho del Ministerio de Educación no hace entrega de su memoria y cuenta, por tanto, no se puede confirmar esta cifra.

«En el año 2019 realizamos en la Misión Barrio Adentro y en el sistema público de salud casi 93 millones de consultas médicas gratuitas». Esta afirmación de Maduro es poco comprobable. Según declaraciones del ministro de Salud Carlos Alvarado, el 2019 fue «positivo» en materia de salud, porque se lograron realizar 93 millones de consultas en Barrio Adentro, que sumado a la red hospitalaria llega a 113 millones de consultas.

Otra afirmación dudosa de Maduro es sobre la entrega de «más de 8.1 billones de bolívares a más de 17 millones de personas protegidas por el carnet de la patria». De acuerdo con la página web de la Vicepresidencia, para diciembre del 2019, hay más de 18 millones 900 mil personas inscritas en el Carnet de la Patria, documento de identidad implementado por Maduro en el año 2017.

Además, la página oficial del PSUV publicó el 26 de diciembre del 2019 que el promedio de personas beneficiadas directamente a través del Sistema Patria es de 20 millones. Dichas cifras contradicen y superan los «más de 17 millones de personas protegidas por el carnet de la patria» que mencionó Maduro.