Lo que Washington conoce de la embajada venezolana y del ex embajador Álvarez
Por las buenas fuentes de un colega periodista, con muchos años de trabajo en la capital del Imperio, pude conocer algunos detalles del llamado “Dossier EmbaVenez” que el Departamento de Estado ha venido estructurando sobre la embajada venezolana en la capital estadounidense y muy especialmente sobre el ex embajador Bernardo Álvarez.
¿Quién es Bernardo Álvarez?
Un destacado funcionario público venezolano, ex diputado y ex viceministro, quien es de los pocos empleados gubernamentales con amplio respeto dentro de los sectores adversos al gobierno de Hugo Chávez, es un larense amable y un gran conversador, al que el sectarismo rojo rojito no ha podido ganárselo.
Álvarez Herrera, hombre ligado al área petrolera, fue viceministro de Minas e Hidrocarburos (2000-2003); antes director de Hidrocarburos (1999-2000) y de 1994 a 1999 fue diputado ante el Congreso Nacional. Nombrado por Chávez embajador de Venezuela en Washington entre los años 2003 y 2010, con una interrupción entre septiembre de 2008 a junio de 2009 motivada por la decisión de Chávez de declarar ‘persona non grata’ al representante de Washington en Caracas, Patrick Duddy, en solidaridad con Bolivia, que denunciaba que Estados Unidos organizaba con la oposición protestas contra el Gobierno de Evo Morales. En reciprocidad, Washington expulsó a Álvarez Herrera, que regresaría en junio de 2009 a su puesto después de que los dos países decidieran restablecer sus relaciones diplomáticas. En septiembre de 2010, Estados Unidos revocó el visado a Álvarez Herrera después de que Chávez rechazara acreditar al candidato propuesto por Washington como embajador en Caracas, Larry Palmer, por unas declaraciones sobre la presunta presencia en Venezuela de guerrilleros de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).
La Asamblea Nacional anunció la semana pasada que el Dr. Bernardo Álvarez sería el nuevo embajador de Venezuela ante el Reino de España.
DATOS DEL DOSSIER B.A-H.
“Desde el pasado mes de Diciembre de 2010, el Embajador Bernardo Álvarez H. se encuentra en Venezuela. Sin embargo en ningún momento ha dejado de percibir su salario en dólares, ni de hacer uso, goce y disfrute de las instalaciones y partidas económicas correspondientes a la Embajada y la Residencia Oficial, por parte de su familia, amigos y allegados hasta la presente fecha. Con la autorización del Departamento de Estado se han hecho compras de licores bajo el esquema de Duty Free para diplomáticos, es decir libres de impuestos durante el mes de Marzo y el pasado24 de Mayo con motivo de celebrar una graduación en la residencia oficial, bajo el nombre del embajador.
La hija mayor del ex embajador, Marian, lleva seis meses viviendo en la residencia diplomática, maneja vehículos con placa diplomática y trabaja, con visa de turista, en el Smithsonian Institute. (Excelente organismo cultural del “imperio” que es modelo para el mundo). La mencionada señorita sigue haciendo uso de la tarjeta de exención de impuestos para diplomáticos (Tax Exemption Card) que debería haber regresado la embajada al Departamento de Estado al cesar el embajador Álvarez en sus funciones oficiales. La secretaria del ex embajador sigue manejando asuntos delicados en el área administrativa de la delegación venezolana.
Tras el retiro de Álvarez, y quizás en represalia, la embajada tiene retenidos 70 pasaportes de funcionarios “gringos” a la espera de sus visas para viajar a Venezuela.
Conversaciones recientes entre los dos gobiernos “soltaron” al menos 15 de ellas.
Mas adelante publicaré otros detalles que involucran los viajes a Washington del canciller Nicolás Maduro.