Argenis Chávez ya comprometió su palabra. En diciembre se acaban los apagones. Entonces, el viceministro puede ir pensando en ser ministro, sustituir a Alí Rodríguez, y darle un giro a la imagen de los hermanos Chávez, de los hermanos del Presidente. Para ocupar el cargo de viceministro ha invocado, en su activo, haber sido secretario de su padre gobernador y ser ingeniero electricista. Uno de sus amigos en Barinas señaló: Es tenaz y trabajador. Va a intentarlo hacerlo bien. Por muy mal que lo haga, siempre será mejor que “el pobre Alí”. Su éxito, de alcanzarlo, se va a convertir en una bofetada para Adán, quien lo quería fuera de Barinas. En efecto, lo sacaron de la tierra natal con una patada hacia arriba. Le seguía haciendo sombra a Adán, que llegó a la gobernación a mejorar el clima del nepotismo y de los escándalos en torno a Argenis. Y Adán lo logró. Al menos paró la seguidilla de denuncias en contra de la familia. Metió a Argenis en el congelador. Sin embargo, no lo anuló. No podía parar que se le convirtiera en presencia imbatible. Se le coló en las internas del PSUV. Y pudo haber llegado a la Asamblea Nacional de no ser por el muro familiar. Ahora asume un cargo de alta responsabilidad. Por la crisis y por Chávez. Si fracasa, los Chávez fracasan al cuadrado. Esto es delicado. Todos los ojos están puestos allí. Nadie lo entiende. Argenis torpedeado en Barinas, y de pronto Chávez se pone en sus manos. Es elevado el riesgo que corre Hugo Chávez al dejar en su hermano la solución de este problema. O en todo caso, Argenis sería un hombre con suerte. Dentro de los Chávez es el único con algún nivel técnico. Lo necesitan. A las primeras, hay que mirar que Argenis Chávez se ha manejado con tacto. Explico: 1-Buscó como asesores a un par de técnicos de la antigua Elecar. 2-Negó de plano la militarización de las instalaciones eléctricas. 3-La hipótesis del saboteo la observa de otra manera; por el lado de la negligencia, de los individuos que teniendo los informes y los transformadores a mano no cambiaron los equipos a tiempo, y en los retrasos de los pagos a los contratistas y proveedores. 4-Prefiere investigar antes que acusar, como lo hicieron A lí Rodríguez, Elías Jaua y hasta el mismo Chávez. Cuidado con Argenis.
Argenis Chávez ya comprometió su palabra. En diciembre se acaban los apagones. Entonces, el viceministro puede ir pensando en ser ministro, sustituir a Alí Rodríguez, y darle un giro a la imagen de los hermanos Chávez, de los hermanos del Presidente. Para ocupar el cargo de viceministro ha invocado, en su activo, haber sido secretario de su padre gobernador y ser ingeniero electricista. Uno de sus amigos en Barinas señaló: Es tenaz y trabajador. Va a intentarlo hacerlo bien. Por muy mal que lo haga, siempre será mejor que “el pobre Alí”. Su éxito, de alcanzarlo, se va a convertir en una bofetada para Adán, quien lo quería fuera de Barinas. En efecto, lo sacaron de la tierra natal con una patada hacia arriba. Le seguía haciendo sombra a Adán, que llegó a la gobernación a mejorar el clima del nepotismo y de los escándalos en torno a Argenis. Y Adán lo logró. Al menos paró la seguidilla de denuncias en contra de la familia. Metió a Argenis en el congelador. Sin embargo, no lo anuló. No podía parar que se le convirtiera en presencia imbatible. Se le coló en las internas del PSUV. Y pudo haber llegado a la Asamblea Nacional de no ser por el muro familiar. Ahora asume un cargo de alta responsabilidad. Por la crisis y por Chávez. Si fracasa, los Chávez fracasan al cuadrado. Esto es delicado. Todos los ojos están puestos allí. Nadie lo entiende. Argenis torpedeado en Barinas, y de pronto Chávez se pone en sus manos. Es elevado el riesgo que corre Hugo Chávez al dejar en su hermano la solución de este problema. O en todo caso, Argenis sería un hombre con suerte. Dentro de los Chávez es el único con algún nivel técnico. Lo necesitan. A las primeras, hay que mirar que Argenis Chávez se ha manejado con tacto. Explico: 1-Buscó como asesores a un par de técnicos de la antigua Elecar. 2-Negó de plano la militarización de las instalaciones eléctricas. 3-La hipótesis del saboteo la observa de otra manera; por el lado de la negligencia, de los individuos que teniendo los informes y los transformadores a mano no cambiaron los equipos a tiempo, y en los retrasos de los pagos a los contratistas y proveedores. 4-Prefiere investigar antes que acusar, como lo hicieron A lí Rodríguez, Elías Jaua y hasta el mismo Chávez. Cuidado con Argenis.