La semana pasada, en La Habana, Cuba, tuvo oportunidad el XIII Festival del Habano. Este evento es organizado todos los febreros desde hace trece años, y es el foro por excelencia de una de las aficiones sibaritas más exquisitas como lo es el consumo de puros.
Para que un tabaco pueda colocar la Denominación de Origen Controlada “habano”, debe proceder en primer lugar su hoja de Cuba, y concretamente de Vuelta Abajo, que son las zonas donde se cultivan las mejores “vegas”, conformada por las regiones de Pinar del Río, San Luis y San Juan y Martínez. Además, por supuesto, debe ser manufacturado con la artesanía propia de ese país, considerado desde hace muchos años el mejor sitio de producción de tabacos del planeta.
Hoy en día todas las marcas de habanos son comercializadas a nivel mundial por una empresa mixta del gobierno cubano con la trasnacional inglesa Impirial Tobacco Group: Habanos S.A. Es de hacer notar que, a pesar que el mayor consumidor de tabacos del mundo es Estados Unidos, el embargo aplicado a los productos cubanos prohíbe importar habanos a ese país.
En el marco de su visita a este XIII Festival del Habano, quisimos saber la opinión del mayor conoseur de habanos de Venezuela, como lo es Carlos Lander, director de las tiendas especializadas Epicur y la franquicia La Casa del Habano, que abrió hace un par de años atrás en Caracas. Lander, adicionalmente es el distribuidor exclusivo de Havana Cigar, grupo que importa todas las vitolas de habanos que llegan por las vías legales a nuestro mercado.
Carlos Lander es abogado y comenzó muy joven en el negocio, con literalmente “una empresa de maletín” donde iba a las casas y oficinas de sus clientes a ofrecer la mercancía. En el medio del boom que explotó en los años noventa en Estados Unidos, inició un negocio más formal mediante un catálogo que promocionaba en los comienzos de internet y se traía “maleteados” los bultos de cigarros desde Cuba. El negocio virtual fracasó ya que los compradores venezolanos iban directamente hasta las oficinas donde tenían el depósito, un gran humidor donde guardaban los habanos. Tales oficinas se convirtieron en el sitio de fuma de los aficionados y por ello tuvo que mutar a un local mejor equipado para atender al público.
Es así como nació la tienda Epicur en la Torre Sudamérica de El Rosal, en el año 1996, y consiguió la representación exclusiva para Venezuela de Habanos S.A.
Más recientemente, en el año 2008, adquirieron la franquicia La Casa del Habano, que posee más de 136 tiendas en todo el mundo y que instalaron en Las Mercedes. La respuesta de los fumadores ha sido fabulosa. Esta tienda sólo vende habanos, no puede ofrecer tabacos nacionales ni de orígenes distintos.
Nos dijo el experto que “la tendencia a fumar puros en el mercado venezolano es creciente, así como la gastronomía y los vinos, la gente cada vez se interesa por profundizar más sus gustos sibaritas”. No obstante, afirma Carlos, que hay tres factores que en los últimos tiempos han atentado contra el negocio local, como son el éxodo del país de la clase media-alta, clientes naturales; la crisis económica, que le pega en los bolsillos a todos y; en tercer lugar, la piratería, que en la medida que hay más demanda y menos control, se extiende.
Es por esto que se recomienda comprar habanos en los sitios certificados, que no sólo se reducen a sus dos tiendas, sino que ellos mismos le distribuyen a puntos de venta especializados, hoteles, restaurantes y bares. “Ningún producto de lujo legítimo se consigue en gangas, si un tabaco se vende como original a precios ínfimos, de seguro es falsificado. Así como se copian carteras, perfumes y relojes, que a simple vista es difícil observar diferencias estéticas, más rápido lo hacen con los cigarros”.
Respecto al último Festival del Habano, Carlos Lander nos dio la primicia para Venezuela de las últimas novedades de Habanos S.A. Se hicieron dos grandes lanzamientos, el H.Upmann “Half Corona”, en formato pequeño; la Reserva Especial Montecristo, un vintage del año 2005; y la línea de Partagas Serie E, de formato tipo “robusto”, los cuales pronto podremos adquirir en sus tiendas.
Según Lander, la “cultura del tabaco” crece y se expande en Venezuela, siendo la marca más fumada Romeo y Julieta, a diferencia del Montecristo N°4, que es la vitola más vendida en el mundo. Afirma el conocedor que en nuestro país es donde, después de Cuba, se consiguen los habanos a mejor precio, pero nada tiene que ver con la amistad entre los gobiernos, sentencia.
Videos del XIII Festival del Habano:
Texto: Juan Pablo Sucre/ Gourmet Lounge
Fotografías de Andrés Neher/ E5TUDIO.COM



















