Redacción Runrunes
Cuando un venezolano viaja al exterior ya no trae los tradicionales souvenirs de otros tiempos: un adorno, un gran recuerdo, arena de la playa en el tradicional llavero o los clásicos zapatos de correr. Qué va. Estos tiempos obligan a que los viajes -y si es posible con dinero que permite el Cencoex- se utilicen para cubrir la escasez de variedad de productos de los supermercados y tiendas de cosméticos. La maleta de un venezolano viene con champú y enjuague, la crema de dientes de niños con fluor y hasta el paliativo para el dengue o chikungunya: el preciado acetaminofen. Quienes no pueden viajar, esperan a que algún pariente o conocido vaya y venga, con su maleta cargadita para ofrecer los ansiados productos, por lo general a cálculo de dólar libre. Echa un vistazo a esta mercancÃa que alguien acaba de traer y ofrece para surtir estos dÃas navideños. ¡Cosa ma´grande!