A pesar de las agresiones, Osorio no piensa renunciar al periodismo. “Mas que un oficio, lo defiendo como una forma de ser y ver la vida. Los que hacemos periodismo estamos comprometidos con una causa humana más allá de lo profesional. Eso sí, después de lo vivido, he tenido que superar el miedo a salir a la calle, encontrarme con un funcionario, que para mí es igual que toparme con un delincuente armado”.
Osorio sigue esperando la llamada de la Fiscalía, donde puso la denuncia, para identificar a los Guardias Nacionales que lo agredieron. Que haya justicia.