Virginia Zamora, autor en Runrun

El valor de la conciencia en tiempos de dictadura, por Virginia Zamora

dictadura

 

Vivir en Venezuela se ha convertido en un reto constante a la cordura. El sistema se ha encargado de criminalizar todo aquello contrario a él mismo mientras defiende sin pudor a quienes están en sus filas. Vivimos en un país en el que cada vez son más los delincuentes en las calles y los inocentes en las cárceles.

El pasado sábado 18 de febrero, se realizó una concentración en la autopista Francisco Fajardo por cumplirse ese día tres años de injusta prisión de Leopoldo López. Todo comenzó, se desarrolló y terminó en paz hasta que dos jóvenes que hacían cobertura audiovisual de la manifestación fueron interceptados y detenidos por el Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (SEBIN) y llevados al Helicoide.

Esa misma tarde y sin haber liberado a los dos jóvenes, el SEBIN detiene a otra persona de la productora para la que hacían las tomas y la llevan también a la sede de ese cuerpo policial, lugar en el que permanecieron los tres detenidos hasta la tarde del lunes 20 de febrero cuando fueron finalmente trasladados al Palacio de Justicia para presentarlos ante el tribunal 39 de Control.

La juez Karla Moreno, titular de ese Tribunal, decidió que no había elementos para mantener privados de libertad a los tres jóvenes lo que generó el inmediato rechazo de los funcionarios del SEBIN quienes presuntamente pretendieron persuadir a la juez a cambiar su decisión.

Luego de varias horas de tensión por la presión de los funcionarios policiales, la titular del 39 de control decidió – negada a cambiar su decisión – renunciar públicamente al tribunal y preparar su renuncia formal al Poder Judicial, información que muy rápido se difundió e inundó las redes sociales. La justa decisión de la juez, acompañada de su valiente accionar fue como escuchar un tenue zumbido de justicia en medio de tanto silencio cómplice.

Pero lo cierto es que los tres jóvenes seguían detenidos y el caso en el limbo pues ante la renuncia, no había decisión. No tardó en rumorearse que el caso sería redistribuido y asignado a otro juez y ese fue el momento en el que tomó valor el importantísimo acto de conciencia e irreverencia de Karla Moreno,  Ahí fue cuando ese zumbido dejó de ser tenue y comenzó a tomar volumen en decenas de alguaciles y compañeros que amenazaron con parar el tribunal en caso de que se mantuviera la privativa de libertad para los tres jóvenes pues uno de los detenidos era también alguacil.

Mahatma Gandhi decía que “lo más atroz de las cosas malas de la gente mala es el silencio de la gente buena” y es que cuando se lucha a diario en contra de un sistema opresor,  son los momentos de profunda conciencia los que hacen la diferencia. El acto de justicia de la Juez Karla Moreno no fue lo extraordinario, eso fue simplemente justicia, lo realmente ejemplarizante es que se haya atrevido a confrontar a todo un sistema que trabaja diariamente por callar a la disidencia, es haber sido capaz de levantar su voz y decir ¡YA BASTA!, he ahí la esencia de la lucha no-violenta.

El valor de lo que hizo no fue el acto en sí mismo sino el espaldarazo que eso significa para tantas voces que hoy aun están dormidas pero que –en la medida que sientan nuestro respaldo- irán despertando y sumándose a la recuperación de la conciencia y la libertad.

 

@VirginiaZamora

Guerra contra el hampa vs. Guerra contra el imperio, por Virginia Zamora

ViolenciaenVenezuela

 

 

“El asesinato de un niño de 14 años es la demostración desgarradora de nuestra Venezuela descompuesta y el llamado URGENTE a cambiarla. QEPD”. Esto fue lo que logré escribir en mi Twitter esta mañana luego de enterarme del trágico hallazgo del cuerpo sin vida de Dereck Manaure, un pequeño de apenas 15 años, hijo del basquetbolista venezolano Juan Manaure y quien habría sido secuestrado el pasado 28 de diciembre.

Dereck no es la única víctima de esta Venezuela sin valores del siglo XXI; esta misma semana, el lunes 13 de febrero, leíamos en las redes sociales –posiblemente el único medio por el que nos enteramos de estas noticias- sobre el homicidio de otros dos niños, esta vez de 13 y 16 años, hijos de una funcionaria de la policía del municipio Zamora.

Según el Observatorio Venezolano de Violencia, 2016 cerró con la trágica cifra de 28.000 muertes violentas, 9.967 de las víctimas fueron menores de 21 años y de esos, 854 fueron menores de 15 años, lo que significa que dos niños fueron asesinados cada día durante el año pasado en Venezuela.

Es humanamente imposible no sentir terror al conocer y manejar estos datos, son vidas, son hermanos, hijos, nietos. Nos han arrebatado nuestro presente e insisten en no hacer nada por evitar el exterminio del futuro.

Muchos entendemos la impostergable necesidad de una declaración real de guerra al hampa pero quienes deben hacerlo insisten en apuntar sus tanques hacia fuera de nuestras fronteras y seguir escondiendo su fracaso en la ficción de la cada vez más agotada guerra contra el Imperio.

Definitivamente para quienes se hacen llamar pueblo, las prioridades son otras; leo y releo buscando un pronunciamiento de los órganos de seguridad del Estado, voy directo a la fuente, reviso páginas web, redes sociales, declaraciones y no encuentro nada en las últimas 48 horas sobre la masacre que hoy vivimos en nuestro país.

El silencio sobre este tema aturde pero nos bombardean con sus gritos anti-imperialistas porque el Departamento del Tesoro de los Estados Unidos ayer se pronunció contra Tareck El Aissami, quien fue acusado de narcotráfico (noticia que por cierto tampoco hemos visto reflejada en muchos medios).

Nestor Reverol, Ministro de Interior Justicia y Paz, decide volcarse contra la oposición y hablar del avance hacia la paz sin mencionar si quiera los casos que nos enlutan esta semana.

 

 

El Ministerio para las Relaciones Interiores, Justicia y Paz opta por publicar un comunicado en el que “Venezuela condena acciones del Gobierno de EEUU contra el VP” antes que condenar públicamente las muertes de estos tres menores y tantos venezolanos.

 

Tres niños han perdido la vida esta semana en Venezuela pero para el régimen es más importante la solidaridad con el hijo de la revolución que la solidaridad con los hijos de la patria.

Mientras ellos dicen #VenezuelaConTareck los venezolanos nos preguntamos ¿QUIÉN CON VENEZUELA?.

 

@VirginiaZamora

Dic 16, 2014 | Actualizado hace 9 años
#YoEstoySancionada por Virginia Zamora

ONU

 

A propósito de las recientes sanciones aprobadas por unanimidad en el Congreso de los Estados Unidos y que esperan aun por la firma de Barack Obama, se han levantado cualquier tipo de especulaciones que rayan algunas hasta en lo ridículo al intentar dar a entender que las mismas serían contra Venezuela y no en contra de los enchufados y corruptos que hoy destruyen nuestro país mientras llenan sus cuentas en dólares y euros.

Recientemente también, el pasado mes de octubre, Venezuela entró al Consejo de Seguridad de la Organización de Naciones Unidas (ONU) con lo que se sobrentiende, acata cada una de sus leyes, acuerdos, cartas y demás instrumentos discutidos y aprobados en el seno de esa organización.

No tan reciente pero si muy vigente, el 10 de diciembre de 1948 en la Asamblea General de la ONU, es adoptada la Declaración Universal de los Derechos Humanos (DUDH) con 30 artículos que recogen derechos considerados básicos para la vida del hombre.

Entonces, formamos parte de la ONU, entramos en su Consejo de Seguridad, estamos obligados a acatar lo que en ella se apruebe pero ¿realmente vivimos en un sistema garante de los Derechos Humanos (DDHH)?

Artículo 1: “Todos los seres humanos nacen libres e iguales en dignidad y derechos…” pero en Venezuela el 27,3% de los hogares viven en situación de pobreza y el indicador de pobreza extrema es de 9,8%.

Artículo 2: “Toda persona tiene todos los derechos y libertades proclamados en esta Declaración, sin distinción alguna de raza, color, sexo, idioma, religión, opinión política o de cualquier otra índole…” pero en Venezuela, el presidente de la Asamblea Nacional emplaza a los opositores al régimen a irse del país.

Artículo 3: “Todo individuo tiene derecho a la vida, a la libertad y a la seguridad de su persona.” Pero en Venezuela se registra una muerte violenta cada 20 minutos.

Artículo 4: “Nadie estará sometido a esclavitud ni a servidumbre, la esclavitud y la trata de esclavos están prohibidas en todas sus formas.” Pero en Venezuela una persona que percibe sueldo mínimo gana el equivalente en bolívares a $0,61 la hora –calculado a Sicad II– que no alcanza para más que sobrevivir tal como cualquier esclavo que trabaja por comida y abrigo.

Artículo 5: Nadie será sometido a torturas ni a penas o tratos crueles, inhumanos o degradantes.” Pero en Venezuela hay estudiantes presos políticos a los que se les viola con fusil y se le queman los genitales.

Artículo 6: “Todo ser humano tiene derecho, en todas partes, al reconocimiento de su personalidad jurídica.” Pero en Venezuela si no estás inscrito en el partido de gobierno no tienes acceso a una vivienda popular.

Artículo 7: “Todos son iguales ante la ley y tienen, sin distinción, derecho a igual protección de la ley…” pero en Venezuela el Tribunal Supremo de Justicia ha dictado 45.474 sentencias en los últimos nueve años y ninguna ha sido en contra del régimen.

Artículo 8: “Toda persona tiene derecho a un recurso efectivo ante los tribunales nacionales competentes, que la ampare contra actos que violen sus derechos fundamentales…” pero en Venezuela el 70% de los reclusos sufren por retardo procesal.

Artículo 9: “Nadie podrá ser arbitrariamente detenido, preso ni desterrado.” Pero en Venezuela Leopoldo López sigue preso a pesar de que el grupo de trabajo sobre detenciones arbitrarias de la ONU emplazó al régimen a liberarlo de forma inmediata.

Artículo 10: “Toda persona tiene derecho, en condiciones de plena igualdad, a ser oída públicamente y con justicia por un tribunal independiente e imparcial…” Pero en Venezuela la Jueza María Lourdes Afiuni, detenida por orden directa de Hugo Chávez, se le niega su derecho a rendir declaración y constantemente se le difieren sus audiencias.

Artículo 11: “Toda persona acusada de delito tiene derecho a que se presuma su inocencia mientras no se pruebe su culpabilidad…” pero en Venezuela es el presidente quien acusa en cadena nacional de radio y televisión, los organismos de seguridad detienen a las personas y luego es que los tribunales hacen aparecer las órdenes de captura

Artículo 12: “Nadie será objeto de injerencias arbitrarias en su vida privada, su familia, su domicilio o su correspondencia, ni de ataques a su honra o a su reputación…” pero en Venezuela se transmiten programas por el canal del Estado en el que constantemente se difama no sólo a opositores sino a sus familias.

Artículo 13: “Toda persona tiene derecho a circular libremente…” pero en Venezuela las carreteras no funcionan, los pasajes no se consiguen y si sales o viajas de noche corres el riesgo de no regresar más nunca.

Artículo 14: “En caso de persecución, toda persona tiene derecho a buscar asilo, y a disfrutar de él, en cualquier país…” en Venezuela es la madre de Génesis Carmona quien luego de perder a su hija a manos de los brazos armados del régimen, siente la persecución y decide pedir asilo en otro país.

Artículo 15: “Toda persona tiene derecho a una nacionalidad…” pero en Venezuela tramitan revocar la nacionalidad a María Conchita Alonso por sus posiciones en contra del régimen.

Artículo 16: “Los hombres y las mujeres, a partir de la edad núbil, tienen derecho, sin restricción alguna por motivos de raza, nacionalidad o religión, a casarse y fundar una familia…” pero en Venezuela, a pesar de que aparentemente no hay restricciones para formar familia, la situación económica no permite la independencia de la misma.

Artículo 17: “Toda persona tiene derecho a la propiedad, individual y colectivamente….” Pero en Venezuela se persigue la propiedad privada y se realizan expropiaciones a quienes son incómodos al régimen sin el pago de una compensación justa.

Artículo 18: “Toda persona tiene derecho a la libertad de pensamiento, de conciencia y de religión…” pero en Venezuela los niños son ideologizados en las escuelas.

Artículo 19: “Todo individuo tiene derecho a la libertad de opinión y de expresión…” pero en Venezuela pensar distinto al régimen se ha convertido en un delito que lleva más de 3.400 detenciones sólo en 2014.

Artículo 20: “Toda persona tiene derecho a la libertad de reunión y de asociación pacíficas…” pero en Venezuela la protesta pacífica es reprimida con gas lacrimógeno, perdigones y toda la fuerza de seguridad del Estado.

Artículo 21: “…La voluntad del pueblo es la base de la autoridad del poder público…” pero en Venezuela hay alcaldes legítimamente electos que hoy están presos por el simple hecho de oponerse el régimen.

Artículo 22: “Toda persona, como miembro de la sociedad, tiene derecho a la seguridad social…” pero en Venezuela los hospitales no tienen insumos para atender a la población y las personas mueren en las salas de emergencia esperando medicamentos básicos.

Artículo 23: “Toda persona tiene derecho al trabajo, a la libre elección de su trabajo, a condiciones equitativas y satisfactorias de trabajo y a la protección contra el desempleo…” pero Venezuela es el segundo país de América con más desempleo, según cifras tomadas del propio INE y la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL).

Artículo 24: “Toda persona tiene derecho al descanso, al disfrute del tiempo libre, a una limitación razonable de la duración del trabajo y a vacaciones periódicas pagadas.” Pero en Venezuela los ciudadanos hemos tenido que utilizar las vacaciones para redondear nuestros ingresos con trabajos temporales.

Artículo 25: “Toda persona tiene derecho a un nivel de vida adecuado que le asegure, así como a su familia, la salud y el bienestar, y en especial la alimentación, el vestido, la vivienda, la asistencia médica y los servicios sociales necesarios…” pero en Venezuela los ciudadanos perdemos en promedio cuatro horas diarias haciendo colas para conseguir artículos de primera necesidad.

Artículo 26: “…Los padres tendrán derecho preferente a escoger el tipo de educación que habrá de darse a sus hijos.” Pero en Venezuela el currículo escolar contempla bibliografía que incluso cambia la historia que todos hemos conocido e incluye, entre otras cosas, a Hugo Chávez como el “nuevo libertador”.

Artículo 27: “Toda persona tiene derecho a tomar parte libremente en la vida cultural de la comunidad, a gozar de las artes y a participar en el progreso científico y en los beneficios que de él resulten…” pero en Venezuela se censuran grupos musicales por sus opiniones políticas, se saca del aire programación incómoda para el régimen o se declara persona non grata a artistas internacionales que se atrevan a hablar de Paz, Libertad o Democracia en Venezuela.

Artículo 28: “Toda persona tiene derecho a que se establezca un orden social e internacional en el que los derechos y libertades proclamados en esta Declaración se hagan plenamente efectivos.” Pero en Venezuela se persigue a quienes acuden a los organismos internacionales y se les tilda de “traidores a la Patria”.

Artículo 29: “Toda persona tiene deberes respecto a la comunidad, puesto que sólo en ella puede desarrollar libre y plenamente su personalidad…” por lo que es nuestro deber defender a Venezuela y exigir se respeten los DDHH que son universales.

Artículo 30: “Nada en esta Declaración podrá interpretarse en el sentido de que confiere derecho alguno al Estado, a un grupo o a una persona, para emprender y desarrollar actividades o realizar actos tendientes a la supresión de cualquiera de los derechos y libertades proclamados en esta Declaración.” Tus derechos terminan donde comienzan los míos.

 

La lista de sancionados por los EEUU no ha sido publicada pero sea cual sea la cantidad de funcionarios en ella, es ínfima en comparación a los 30.206.307 venezolanos que vivimos las sanciones de un sistema que fracasó y que a diario nos atropella y viola nuestros DDHH.

Posiblemente al final, todo quede en una sanción moral puesto que todos sabemos que quien roba no pone nada a su nombre pero definitivamente es un grito más de rechazo que acompaña al de millones que imploramos juntos una Venezuela LIBRE.

 

#VirginiaSancionada

@VirginiaZamora

El riesgo de apostar ÚNICAMENTE a las parlamentarias por Virginia Zamora

AsambleaNacional1

 

Algunos factores, sobre todo los cercanos al régimen que hoy acaba con Venezuela, han tratado de confrontar las diferentes propuestas que desde la oposición se han planteado como mecanismos para generar un cambio en Venezuela.

Hay quienes creen en concentrar esfuerzos para ganar la mayoría de curules en una eventual elección a la Asamblea Nacional en 2015 y desde allí impulsar los cambios que se requieran –digo eventual porque a la fecha aun no se conoce con precisión el día en que se celebrarían estas parlamentarias–. Otros se mantienen desde hace algunos meses organizando Congresos Ciudadanos en todo el territorio nacional, discutiendo los principales problemas del país y consensuando posibles soluciones. Y existe un tercer esfuerzo que contempla recolectar el 15% del Registro Electoral para convocar así una Asamblea Nacional Constituyente y a través de ella generar cambios para derrotar a todo un sistema que hoy acorrala a Venezuela.

Ninguna se contradice, al contrario, son propuestas que se complementan entre si. La Asamblea Nacional es una fecha ineludible en nuestro calendario electoral, no acudir a esta elección sería un absurdo desde cualquier punto de vista crítico al régimen. Sin duda hay que participar y ganar. En ninguna cabeza cabe la posibilidad de regalar un espacio más a quienes hoy dominan prácticamente toda la esfera de poder en Venezuela.

Los Congresos Ciudadanos son fundamentales. Un país que tiene 16 años confrontado, necesita imperativamente un lugar de encuentro, necesita espacios donde las diferentes voces puedan ir sonando poco a poco a un mismo ritmo. Cuando defendemos por encima de cualquier cosa un concepto tan importante como la democracia, es imperdonable que no la practiquemos junto a los ciudadanos que al final del cuento lo somos todos, no todos los ciudadanos son políticos pero si todos los políticos somos ciudadanos.

La Asamblea Nacional Constituyente es otra alternativa constitucional, democrática y participativa que permite generar los cambios profundos y urgentes que amerita un país en el que el 74,7 por ciento de los consultados –según la última encuesta publicada por el IVAD– señalan que en Venezuela la Constitución y las leyes son violadas por el propio gobierno.

Planteadas las tres alternativas que hoy dominan la coyuntura política, me permito compartir con ustedes también dos datos importantes que me generan la suspicacia suficiente para atreverme a escribir este artículo:

Desde el año 2005, el oficialismo tiene el control absoluto del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ). En un trabajo plasmado en el libro “El TSJ al servicio de la Revolución” un destacado grupo de abogados plantea una serie de conclusiones sobre el análisis de 45.474 sentencias dictadas en los últimos nueve años en las salas Constitucional, Político Administrativa y Electoral y ninguna de ellas ha sido contra el gobierno además de que en 55 de estos fallos se encontró un patrón de subordinación en el que el TSJ brinda piso jurídico a las medidas que va anunciando el régimen.

El artículo 236 de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela establece en el cardinal 21, la facultad que tiene el Presidente para “disolver la Asamblea Nacional en el supuesto establecido en esta Constitución”.

Cualquier abogado constitucionalista puede analizar este último dato que les compartí y decirnos que ese supuesto que establece la Constitución aplica únicamente en caso de que ocurra “la remoción del Vicepresidente Ejecutivo o Vicepresidenta Ejecutiva en tres oportunidades dentro de un mismo período constitucional, como consecuencia de la aprobación de mociones de censura por parte de la Asamblea Nacional” y que dicha facultad estaría supeditada a una actuación primaria y reiterada por parte de los parlamentarios.

Si, tendrían toda la razón salvo que también tomemos en consideración el primer dato que compartí en el que vemos como la Constitución y las leyes son interpretadas bajo un patrón de subordinación al Poder Ejecutivo y cada vez que ha sido necesario, el TSJ ha brindado el piso jurídico para las medidas que se anuncian desde Miraflores. No sería descabellado entonces entender que ganando la Asamblea Nacional únicamente, seguiríamos vulnerables ante todo un sistema opresor que utilizará cada brazo de poder para eliminar la disidencia.

Sin ánimos de convertirme en una erudita del derecho constitucional pero si tomando en cuenta estos últimos datos, sin duda es importantísimo que trabajemos unidos para granar unas elecciones parlamentarias el año que viene pero es imperativo que con esa misma unidad trabajemos también en una alternativa que frene los abusos del poder desmedido y que nos permita como venezolanos, garantizar que nuestra voluntad popular trascienda cualquier escenario de interpretación y que la democracia en la que creemos y practicamos alcance todos los poderes y no sólo el legislativo.

Si tenemos la fuerza para ganar la Asamblea Nacional, usémosla para generar ese gran Congreso Ciudadano que siente las bases para organizar el poder de la gente, defender las condiciones justas y convocar el Poder Constituyente.

 

@VirginiaZamora

Nov 25, 2014 | Actualizado hace 9 años
28 leyes, 0 medidas ... por Virginia Zamora

VíaHabilitanteMaduro

 

El pasado martes 18 de noviembre, el Presidente Nicolás Maduro anunció, desde el Palacio de Miraflores, la firma de 28 leyes vía habilitante, habilitante que por cierto se le aprobó para atacar la corrupción y que faltando sólo un día para vencerse, se utilizó para presentar en su mayoría, leyes en materia económica y solo alguito en materia anti-corrupción, dejando una vez más de lado algo tan importante como la designación del Contralor.

Es importante para mi aclarar que no soy economista, soy comunicadora social pero por encima de eso soy una venezolana preocupada que en los últimos 16 años ha hecho un posgrado presencial en materia de Derecho, Economía y Sociología gracias a las malas políticas de Hugo Chávez, Nicolás Maduro y los ministros que han rotado pero nunca han cambiado.

Comenzó la alocución y Maduro afirmó que se trataba de “habilitantes para diversificar la economía, para garantizar su crecimiento y para ganar la estabilidad frente a la Guerra Económica”. Vale acotar que no fueron leyes habilitantes si no ¡VÍA habilitante Nicolás!, aunque luego de tantos “errores y erroras”, no vale la pena frenarse en uno más…

… siguió: “Todo lo que hemos hecho en el 2014 y en parte de 2013 será el punto de partida de una estrategia productiva integral…” y yo me pregunto con total preocupación si es que lo que hemos vivido este año en Venezuela puede interpretarse de alguna forma como productivo o como punto de partida para algo positivo cuando la inflación, el desabastecimiento y la paralización del aparato productivo han sido los elementos predominantes de 2014.

Veamos entonces, como venezolanos que padecemos día a día las penurias de un sistema fracasado, algunas de las Leyes que el Presidente anunció y hagamos el ejercicio de tan solo imaginar cómo podrían significar algo positivo.

Reforma a la Ley Orgánica del Turismo: El Ministro Andrés Izarra afirmó que con ella “se establecerían lugares prioritarios para el turismo…”. Creo que es mejor establecer como prioridad, resolver ciertos problemas como la inseguridad para luego poder ofrecer a Venezuela entera como destino turístico y no sólo algunos lugares.

Ley de Regionalización para el Desarrollo Socio-productivo de la Patria: Maduro mencionó tres niveles de desarrollo de los cuales uno es la especialización petroquímica. No perdamos de vista que, 1) El Presidente dijo que los esfuerzos realizados este año serían el punto de partida para la estrategia productiva del año que viene y 2) que precisamente este año, Venezuela por primera vez en la historia, se ha visto en la necesidad de importar petróleo.

Ley Antimonopolio: Servirá “para regular las posiciones de dominio que tanto daño hacen por parte de quienes ejercen control sobre sectores de la economía”, explicó Maduro, mientras muchos como yo recordábamos las miles de expropiaciones que se han realizado en Venezuela y que hoy están abandonadas y aniquiladas por quienes prometieron expandir sus beneficios para todos los venezolanos.

Reforma de Ley de Precios Justos: Más allá de lo que pueda haber dicho el Presidente, no hay que ser economista para entender que no es posible establecer “precios justos” cuando el 70% de los productos que se consumen en Venezuela son importados y que la escasez de divisas oficiales conlleva a que muchos de esos productos sean adquiridos a un dólar que supera casi 20 veces a la tasa oficial.

Reforma de Ley del Impuesto Sobre la Renta: Para que, según Maduro, se establezca un sistema “donde paguen más lo que más ganan”. Imagino que esto es para que paguen más quienes hoy gobiernan y quedemos prácticamente exonerados quienes sobrevivimos con sueldos que no nos permiten comprar ni la quinta parte de la canasta básica.

Reforma sobre el Impuesto al lujo: Como esta ley apunta a aquellos que tengan carros, cuyo costo pase los 30.000 dólares, yates, aviones u otros bienes de lujo, debemos entender que se aplicará igual que la reforma a la Ley del Impuesto Sobre la Renta: para aquellos en el gobierno y los enchufados.

Con el resto de las leyes y reformas mencionadas el 18 de noviembre y publicadas ya algunas en Gaceta Nacional, el resultado no es distinto, simples anuncios que no generan ningún cambio y que mucho menos proyectan esperanza alguna para el 2015.

Igual pasa con los 4mil millones de dólares provenientes del Fondo Chino que, según anuncio de Maduro, serán enviados al Fondo Estratégico de Reservas y contabilizados como parte de la reserva internacional, sacan de un sitio, pasan a otro pero el problema sigue, igual hay que reponer esos 4mil millones de dólares, sólo que ahora se lo debemos a un fondo que además se creó para la construcción y no para fungir como “caja chica”.

El Presidente anunció 28 Leyes pero en definitiva, cero (0) medidas. Ninguna representa en sí una solución para frenar realmente la crisis económica que hoy vivimos los venezolanos, crisis económica que por cierto no es fortuita ni es producto de ninguna guerra sino que es la consecuencia irrefutable de 16 años de malas políticas, malas leyes y malas reformas, es el inequívoco resultado de un sistema que fracasó.

 

@VirginiaZamora