Caracas cumple 450 años: 6 hitos arquitectónicos que hicieron de la capital venezolana una de las ciudades más modernas de América Latina
Caracas cumple 450 años: 6 hitos arquitectónicos que hicieron de la capital venezolana una de las ciudades más modernas de América Latina

ParqueCentralCCS

 DANIEL FERNÁNDEZ-SHAW

En los 70 Venezuela y Caracas viven una gran pujanza económica por el boom petrolero y eso se reflejó en la arquitectura

 

Hubo un tiempo en el que América Latina miraba con envidia a Caracas.

Muchos soñaban con tener el rascacielos más alto, símbolo de estatus y modernidad. Con contar con un metro no sólo funcional, sino artístico, estético. Con esas autopistas y distribuidores que vertebraban ciudades ya cargadas de autos. Pero sólo era realidad en Caracas, que este martes cumple 450 años.

Entre los años 60 y 70 y gracias al auge de la industria petrolera, Caracas se convirtió posiblemente en la ciudad más moderna de América Latina gracias a audaces visiones arquitectónicas e infraestructuras.

«El boom petrolero imprimió gran velocidad al proceso de modernización urbana en Venezuela», explica a BBC Mundo Ana María Carrano, gerente ejecutiva del IAM (Institutional Assets and Monuments of Venezuela), que busca preservar y destacar la riqueza patrimonial del país.

«En Caracas, por una parte, se hicieron monumentos nacionalistas (…) y otras obras muy arriesgadas e innovadoras que inscribieron a Caracas en la modernidad y la hicieron protagonista de progreso urbano», añade.

Teatro Teresa Carreño LUIS CHACÍN/ARCHIVO IAM VENEZUELA
El teatro Teresa Carreño llegó a ser el mejor de América Latina cuando fue inaugurado en 1983.

Pero ahora, la capital de Venezuela está lejos de ser la moderna urbe que fue en algún momento del siglo XX.

Desde aquellos años, los expertos consultados por BBC Mundo apenas recuerdan otras obras relevantes más allá del nuevo Mausoleo al Libertador, cuyo proceso de licitación y sobrecosto fueron polémicos.

Con motivo del aniversario número 450 de Caracas, BBC Mundo hace una selección de seis proyectos que cambiaron y modernizaron Caracas y que hoy en día, pese a las crisis y la falta de recursos para mantenerlos, siguen siendo referentes arquitectónicos, aunque hayan perdido parte de su esplendor.

1. Torres del Centro Simón Bolívar o Torres del Silencio

Las torres del Centro Simón Bolívar
LUIS CHACÍN / ARCHIVO: IAM VENEZUELA
Las torres de 32 pisos fueron los primeros rascacielos de Caracas a mitad de los años 50.

En este complejo en el centro de Caracas destacan dos torres gemelas de 32 pisos que superan los 100 metros de altura. Fueron a mitad de los años 50 los primeros rascacielos de la ciudad y sirvieron para marcar la transición de un país rural a uno urbano y moderno, industrial y petrolero.

«Cambiaron Caracas. Sus 32 pisos de altura le otorgaron el mérito de ser el primer rascacielos de Caracas y hasta ese momento el único del país construido en acero», afirma el arquitecto Ricardo Castillo, que a través de una cuenta en Instagram, entre otras cosas, se esfuerza por destacar la riqueza arquitectónica de todo el país.

Las torres del Centro Simón Bolívar
ARCHIVO FOTOFRÁFICO URBANO
Las torres del Centro Simón Bolívar son conocidas como torres del Silencio por estar cerca de la zona de El Silencio. En 1955 se terminó su construcción.
Foto antigua aérea del Centro Simón Bolívar en 1954.
ARCHIVO FOTOGRAFÍA URBANA
En 1954 las torres supusieron un hito arquitectónico para la ciudad.

Las torres del Centro Simón Bolívar rompieron con el perfil aldeano y empezaron a dejar atrás un pasado colonial apenas perceptible ya en Caracas.

Los edificios hoy muestran el deterioro visible en otros hitos de la ciudad, pero el Centro Simón Bolívar y la plaza Caracas que contiene siguen siendo un foco de la vida política y administrativa.

Las torres fueron y aún son el marco de las grandes marchas del chavismo en la amplia Avenida Bolívar.

Estatua de Bolívar al otro lado del Centro
LUIS CHACÍN / ARCHIVO: IAM VENEZUELA
Una estatua de Simón Bolívar de civil sirve de bienvenida al Centro desde el este de Caracas.

2. El Helicoide

Al Centro Simón Bolívar le siguió a fines de los años 50 el Helicoide, quizás el mayor exponente de la utopía de Caracas y Venezuela por lo que suponía el proyecto, por el hecho de que nunca pudo ser completado y porque ahora esa astucia arquitectónica inacabada es la sede del Sebin, el Servicio Bolivariano de Inteligencia, en cuya cárcel muchos presos denuncian torturas.

Maqueta del HelicoideARCHIVO FOTOGRAFÍA URBANA
El helicoide iba a ser un gran centro comercial por el que los visitantes se moverían en auto por sus rampas.

Su construcción empezó a comienzos de los años 60. La idea era un edificio que sería el primer gran centro comercial de Caracas al que se accedería y por el que se transitaría en vehículo a través de las rampas que se prolongan por 4 kilómetros. Iba a tener un hotel, un teatro…

«Era una ciudad dentro de la ciudad. Un proyecto faraónico», afirma el arquitecto Ricardo Castillo.

Vista aérea del Helicoide
NELSON GARRIDO/PROYECTO HELICOIDE
El Helicoide fue un proyecto abandonado y ahora es al sede del Servicio de Inteligencia.
El Helicoide a la derecha
PIETRO PAOLINI/PROYECTO HELICOIDE
El Helicoide, a la derecha, se confunde con las viviendas informales que han surgido junto a él.

«Es ésta una de las creaciones más exquisitas brotadas de la mente de un arquitecto», comentó el poeta chileno Pablo Neruda cuando visitó El Helicoide en el año 1959.

Lo más significativo era su forma en doble espiral sobre una colina y coronado por una cúpula. Una obra de vanguardia que, sin embargo, fue paralizada por los problemas financieros.

Nunca se completó y el peculiar edificio fue difuminándose por las viviendas informales que junto a él se fueron levantando en el cerro contiguo, reflejo de la explosión demográfica de la ciudad y las carencias habitacionales.