La pelea por la presidencia del Parlamento sacude a UNT y deja a Rosales como el gran elector
La pelea por la presidencia del Parlamento sacude a UNT y deja a Rosales como el gran elector

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La “campaña” por el liderazgo del Poder Legislativo no ha estado exenta de rumores y golpes bajos. A la espera de lo que decida el fundador de Un Nuevo Tiempo, los nombres de al menos seis diputados del partido han surgido en medio del debate para escoger al sucesor de Julio Borges

Por Pedro Pablo Peñaloza @pppenaloza

En Acción Democrática (AD) el cargo tenía nombre y apellido. Vale lo mismo para Primero Justicia (PJ), que por fin pudo ver a su máximo líder asumiendo un rol protagónico. Pero con Un Nuevo Tiempo (UNT) el panorama no está claro. Por eso, a dos semanas de que la Asamblea Nacional inicie su tercer año en funciones, el debate crece alrededor de una pregunta: ¿quién será el próximo presidente de la Cámara?

De los 19 diputados principales de UNT, al menos seis han sonado como candidatos a tomar las riendas del hostigado Poder Legislativo: Delsa Solórzano, Enrique Márquez, Omar Barboza, Timoteo Zambrano, Luis Emilio Rondón y Stalin González. Sin embargo, la escogencia no depende de los miembros de esta fracción. El gran elector es el fundador del partido, Manuel Rosales, quien tendrá la última palabra en esta disputa.

La opción de Zambrano ha levantado una ola de críticas en las redes. ¿Y de dónde salió ese “rumor”? Algunos lo atribuyen a sus rivales internos, que buscarían sacarlo de carrera. Otros afirman que el comentario surgió del entorno de Rosales en una de sus visitas a Venevisión para una entrevista y que de allí se esparció por todos los rincones. Y una última versión acusa a los “enemigos” dentro de la Unidad, que apelarían a este espantajo para “no cumplir con los acuerdos” de rotación de la directiva.

Voluntad Popular (VP) ha advertido que no votará por Zambrano y PJ tampoco lo ve con buenos ojos. “Dinamitaría la Unidad”, advierten. Para Rosales no es fácil aceptar que sus aliados le impongan una especie de veto al secretario de Política Internacional de su partido y hombre de confianza. En medio de la polémica, el señalado publicó una carta en la que afirma que “nadie me ha planteado” ser el nuevo jefe de la AN.

Cabeza a cabeza

“Solórzano y Márquez están jugando duro por el cargo. Cada uno por su lado está haciéndose publicidad, adjudicándose la presidencia como un hecho consumado”, comenta un legislador de UNT. El jueves 14 de diciembre el diario Panorama de Maracaibo tituló “Enrique Márquez va a la presidencia de la AN”, nota que disgustó a algunos de sus compañeros, mientras en Twitter quienes respaldan a la diputada pusieron a circular la etiqueta #AhoraLeTocaADelsa.

Desde la periferia, PJ ha tratado de intervenir arrimando el hombro a Solórzano, levantando las banderas del feminismo con sus parlamentarias. El responsable de esta operación ha sido Jorge Millán (PJ-Caracas). A Primero Justicia le corresponde la segunda vicepresidencia de la directiva y podría cederle ese puesto a Adriana D’ Elía (Miranda), antigua colaboradora del exgobernador Henrique Capriles Radonski.

Al margen de campañas más o menos veladas, aquí lo importante es qué tan cerca se está de Rosales. Los detractores de Solórzano y Márquez sostienen que hoy no forman parte del primer anillo del líder de UNT, que planea reformar la estructura del partido. Dicen que Márquez –primer vicepresidente de la Cámara en 2016- intentó sin suerte conseguir el apoyo de Rosales para competir por la Alcaldía de Maracaibo. No obstante, hasta que se oficialicen los cambios, Márquez es el presidente ejecutivo y Solórzano la vicepresidenta de esta organización.

Clamor zuliano

Para Stalin González subir a la presidencia de la AN sería un paso lógico tras ser el jefe de la bancada de la Unidad en 2017. Julio Borges recorrió ese camino en 2016. En la actualidad, González encabeza una especie de “comisión de enlace” que se entiende con el equipo de Borges para finiquitar los aspectos administrativos y políticos de la “transición” en el Poder Legislativo. Su opción estaría siendo analizada seriamente por Rosales.

A un sector de los diputados zulianos no les convence González. “Estamos cansados de los caraqueños que no nos solucionan. Nos cuentan que a los colegas de PJ y VP les pagan hasta los pasajes y la estadía, mientras nosotros tenemos que brincar y saltar para venir a sesión”, cuestionan un parlamentario del otro lado del puente. Para ese grupo, la mejor carta es Omar Barboza. ¿Pero él quiere? “Estamos en eso, tú sabes cómo es”, responden quienes apuestan por el experimentado dirigente.

Rosales ha tenido algunas diferencias con Barboza por el tema de la negociación con el gobierno chavista. En el pasado reciente, el fundador de UNT consideró la idea de proponer a Barboza para el cargo de secretario ejecutivo de la Mesa de la Unidad Democrática (MUD), pero la iniciativa no prosperó.

La decisión no es sencilla. Aprovechando la pausa navideña, Rosales medita. Pero no hay mucho tiempo. Hasta el cuerpo diplomático acreditado en el país sigue con atención y preocupación todo este proceso. El futuro jefe de la AN no solo tendrá que mantener el perfil internacional de la Cámara, sino relanzar la agenda local y prepararse para impulsar la gran batalla que asoma en el horizonte: las elecciones presidenciales de 2018.