@loremelendez

HASTA LAS 5:00PM, el Centro de Especialidades Médicas Ureña había atendido a 50 pacientes lesionados en medio de las protestas que protagonizaron este sábado, 23 de febrero, los habitantes del pueblo fronterizo para exigir el ingreso de la ayuda humanitaria a territorio venezolano, acción anunciada por el presidente encargado Juan Guaidó.

Las manifestaciones, que comenzaron antes de las 8:00 am, se extendieron hasta las últimas horas de la tarde. Todavía a las 6:00 pm, había personas que protestaban en las principales calles de la localidad del estado Táchira, sobre todo en las que conducen al puente Francisco de Paula Santander que comunica a Ureña con la ciudad colombiana de Cúcuta.

Dos de estos lesionados sufrieron heridas graves que debieron ser remitidas a especialistas, de acuerdo con William Sayago, cirujano general del centro de salud mencionado. Uno de ellos fue Jackson Salazar, de 32 años, el primer afectado por la represión, quién recibió el impacto de un perdigón en un ojo.

El otro herido fue Albidio Reyes, de 52 años, a quien los perdigonazos que le dispararon en la espalda le perforaron la caja torácica y le lesionaron un pulmón que comenzó a sangrar.

La mayor cantidad de afectados fue recibida entre las 11:00 y 1:00 pm, cuando la represión recrudeció y los militares avanzaron a bordo de vehículos acorazados por las calles de Ureña. Tres personas fueron atendidas por el efecto de los gases, mientras que el resto fueron golpeados con bombas lacrimógenas y perdigones.

La mayoría de los lesionados recibieron impactos en tórax y abdomen, aunque hubo otros heridos en el cráneo, rostro y extremidades. Dentro del centro asistencial no se atendió a menores de edad.