¿Se aproxima Venezuela a la dolarización? La pregunta incluso causa gracia al observar los férreos controles bajo los que se rige la economía, pero lo cierto es que el país ya experimenta una dolarización informal, algo similar a lo que vivió Ecuador 15 años atrás, producto de la pérdida de la confianza en la moneda nacional.
Los pasajes aéreos, los automóviles o los apartamentos ya se negocian en dólares en Venezuela, explicó José Luis Cordeiro, asesor de la dolarización en Ecuador y autor del libro “La Segunda Muerte del Bolívar”, síntomas de que el país necesita un cambio.
Dora de Ampuero, presidenta del Instituto Ecuatoriano de Economía Política, sostuvo que lo más fácil del mundo es adoptar una moneda extranjera cuando un país está en una crisis derivada de la pérdida de confianza en la moneda nacional. “El proceso es simple y espontáneo”.
“En Ecuador todos pensaban en dólar. Cogían el sucre y lo vendían. Eso fue automático. Nadie dijo que se empezaría a usar el dólar, sino que cuando se decretó se hizo realidad lo que la gente deseaba”, manifestó Ampuero.
De hecho, Miguel Dávila, exgerente General del Banco Central del Ecuador, relató que solía cambiar a dólares el 90% de su sueldo. Sin embargo, en un punto se dio cuenta que las personas con menos recursos no tenían cobertura, pues solo vivían con sucres. “Ese deterioro se ve ahora en Venezuela y sufren los agentes económicos menos informados”.
Después de la dolarización
Cuando la medida se implementa es que empiezan a surgir algunos inconvenientes derivados de su aplicación. Ampuero contó que las personas en el campo estaban totalmente desinformadas sobre el proceso, de modo que las empresas privadas que visitaban pueblos lejanos empezaron a llevar dólares y explicar los detalles.
Lo siguiente que surgió fue las complicaciones para calcular el tipo de cambio al que debía comprarse o venderse un producto. “Sin embargo, en poco tiempo alguien se imaginó una tabla, que fue reproducida por la prensa y se vendía en la calle. Fue un proceso espontáneo”.
Si bien los asesores de Ecuador coincidieron en que el primer año de ajuste la inflación se elevó a más de 100%, para el segundo la economía estaba en mejor posición que cuando inició la crisis. Sin embargo, manifestaron que el gran enemigo de la dolarización ha sido el populismo, pues una medida de esta naturaleza no permite imprimir dinero o devaluar la moneda.
De este modo, con la llegada de Rafael Correa al poder en el año 2007 se han colocado aranceles, como un pretexto para salvaguardar la dolarización, y se han engavetado tareas pendientes como la apertura hacia los mercados internacionales.
