Liga de campeones

MUNICH (AP) — En una auténtica exhibición de poderío, el Bayern Múnich superó totalmente el martes al Porto con un lapidario 6-1, clasificándose a su cuarta semifinal consecutiva en la Liga de Campeones.

Robert Lewandowski marcó dos de los goles con los que el cinco veces campeón de Europa remontó una desventaja de 3-1 tras el partido de ida y sentencio un triunfo por global de 7-4.

Pese a no contar con algunas de sus estrellas, como Arjen Robben y Franck Ribery, el Bayern salió como tromba desde que sonó el silbatazo inicial y para los 27 minutos había volteado el déficit.

El equipo de Pep Guardiola no tuvo pieda con los desmoralizados jugadores del Porto, que iniciaron el partido defendiéndose y no ensayaron un solo tiro al arco defendido por Manuel Neuer en los primeros 45 minutos.

Thiago Alcántara, Jerome Boateng, Thomas Mueller y Xabi Alonso también anotaron por el equipo de casa.

El delantero colombiano Jackson Martínez anotó el gol del descuento para Porto, que acabó con 10 hombres tras la expulsión de Ivano Marcano a los 87.

«Ahora es fácil querer a mis jugadores», dijo Guardiola. «Soy el entrenador de un grupo de jugadores extraordinarios. No me esperaba semejante primer tiempo».

«Aún podemos mejorar. Por ahí perdíamos el balón y eso es algo que debemos corregir. Tuvimos unos apuros en el segundo tiempo y ellos generaron ocasiones, pero en la Champions no te puedes relajar nunca».

Bayern sigue perfecto de local en la Champions, con cinco victorias, 19 goles anotados y uno en contra.

En el otro partido de la noche, Barcelona también selló su clasificación al vencer 2-0 al París Saint-Germain para imponerse 5-1 en el global.

Porto, que sorprendió a Bayern para consagrarse monarca de Europa en 1987, vio fulminado su invicto en la actual edición.

«El Bayern es uno de los mejores equipos del mundo y es el favorito para salir campeón», dijo el entrenador español del Porto, Julen Lopetegui.

«Cedimos la posesión. Sabíamos que nos atacarían por las bandas y tratamos de prevenir sus ataques, pero hemos fallado», añadió. «Tenemos que aceptarlo y sentirnos orgullosos de lo que pudimos mostrar en la Champions».

Bayern dio el primer timbrazo a los diez minutos, cundo el portero Fabiano repelió un remate de Mueller. Lewandowski tomó el rebote, pero el disparo fue despedido por el poste.

Cuatro minutos después, la catarata de goles del Bayern comenzó. El español Juan Bernat desbordó a Ricardo Quaresma por la banda izquierda, le ganó las espaldas a los defensas y puso el centro que un Thiago en soledad cabeceó para abrir el marcador.

La zaga del Porto también se quedó dormida tras un tiro de esquina a los 22. Holger Badstuber mandó el balón al segundo palo, donde Boateng esperó para el segundo gol.

Cinco minutos después, Bayern cumplió el deber de voltear el tanteador global. Philipp Lahm sirvió un centro desde la derecha, Mueller dominó el balón y habilitó para el cabezazo de Lewandowski al fondo de las redes.

Mermado por las bajas de sus defensores brasileños Danilo y Alex Sandro, el Porto capituló y Bayern se fue arriba 4-0 a los 36 con una maniobra individual de Mueller, quien tomó la pelota en el balcón del área y definió con un remate rasante que se desvió en Bruno Martins, sorprendiendo a Fabiano.

Pero la demolición del Porto en el primer tiempo no estaba completa. Lewandowski puso el 5-0 a los 40 con un disparo bajo a la mano izquierda del arquero.

Aunque su equipo dominaba a placer, Guardiola no paró de gritar instrucciones en la zona de técnico y abrió la costura de la pierna izquierda de su pantalón del partido número 100 al frente del Bayern. El entrenador catalán acumula 79 victorias.

Su inquietud tuvo algo de justificación con el descuento del Porto a los 73, concretado con un cabezazo de Martínez a un centro de Evandro. Fue el primer remate a puerta del equipo luso en todo el partido.

Y Martínez lo tuvo para el segundo, con un disparo rasante que salió apenas desviado.

Para poner cifras definitivas, Alonso clavó un tiro libre a los 88 tras la expulsión de Marcano por doble amonestación.

BARCELONA (AP) — En una noche plácida para Lionel Messi y de reivindicación personal para Andrés Iniesta, Neymar marcó los dos goles con los que el Barcelona despachó el martes 2-0 al París Saint Germain para acceder a las semifinales de la Liga de Campeones por séptima vez en los últimos ocho años.

Tras la victoria 3-1 en el partido de ida en París, el cuadro azulgrana selló el boleto por global de 5-1 y dejó a los franceses nuevamente fuera de los cuatro mejores de Europa, algo que no han conseguido desde la temporada 1994-1995, cuando dejaron atrás, precisamente, al conjunto catalán.

El Barça, ganador de cuatro títulos continentales, volverá a disputar unas semifinales tras caer eliminado el año pasado en la ronda de cuartos a manos del Atlético de Madrid, eventual subcampeón. Previamente, los azulgranas habían logrado el pase en las seis ediciones previas.

Como en el choque de ida hace una semana, cuando Neymar abrió el marcador y el uruguayo Luis Suárez acompañó con otro doblete, Messi descansó de sus habituales tareas goleadoras. El encargado fue el brasileño y lo hizo por partida doble, celebrando dianas a los 14 y 34 minutos para fulminar las mínimas esperanzas de remontada que albergaba el PSG.

Fue un triunfo rotundo y convincente: los goles se originaron en la vieja guardia que encarnan Iniesta y Dani Alves, y los remató el chispeante Neymar, estandarte del relevo generacional.

Primero, el brasileño definió con gran clase su mano a mano con Salvatore Sirigu, al que desarmó con un regate hacia afuera y empuje con la diestra; pero mayor mérito tuvo la asistencia de Iniesta, rejuvenecido en la cabalgada que inició desde cancha propia y en la que descontó hasta tres rivales antes de medir con precisión de cirujano el pase definitivo entre los centrales Marquinhos y David Luiz.

La eléctrica jugada dejó retratado al PSG, mero espectador de cuanto acontecía en el Camp Nou, con Zlatan Ibrahimovic desconectado en posición avanzada, incapaz de asociarse con el uruguayo Edinson Cavani o el argentino Javier Pastore, más preocupados en perseguir sombras azulgranas que en adueñarse de la pelota.

El segundo tanto se coció a fuego lento y lo sirvió Alves con una comba de lujo para la cabeza de Neymar, quien amplió su repertorio con un testarazo picado e imposible para Sirigu, nuevamente victimizado por el mal cierre de sus zagueros.

La dupla brasileña había avisado antes con una volea del lateral y remate aéreo del atacante, ambos repelidos por el arquero, el mejor de un PSG desarmado, que apenas sentía las pulsaciones del voluntarioso Blaise Matuidi y echaba de menos los fogonazos de Marco Verratti en el mediocampo.

El Barsa, en tanto, gozaba del dinamismo de Neymar, la inspiración de Iniesta y el tesón de Suárez, capaz de bajar un centro de Alves para la zurda de Messi, quien empalmó por encima del travesaño en su única aparición antes del descanso.

En la retaguardia local, Gerard Piqué y el argentino Javier Mascherano siguieron sin dar tregua a sus pares en la segunda mitad, y finalmente Ibrahimovic se alejó del área para abrir un espacio que Verratti no supo aprovechar, disparando mordido desde el balcón del área.

Con el choque y la eliminatoria sentenciados, el tramo final tan sólo dirimió un intercambio de disparos entre Messi e Ibrahimovic, ex compañeros en el Barsa, peleados por una noche con el gol.

La Juventus buscará demostrar en Mónaco que el fútbol italiano no está en su lecho de muerte.

La primera década de este siglo fue gloriosa para el fútbol italiano. El Milan y el Inter ganaron tres títulos de la Liga de campeones. En el periodo 2002-03 la principal competencia de clubes fue de participación casi exclusivamente italiana ya que tres semifinalistas (Juventus, Inter y Milan) eran de ese país y la final enfrentó a Milan contra la Juve.

Pero tras la abundancia llegó la sequía.

Desde que el Inter se coronara en 2010, ningún equipo italiano ha llegado semifinales. La liga italiana pasó del tercer al cuarto sitio en los rankings europeos, rebasada por la Bundesliga, que tiene mayor asistencia de público.

De modo que el fútbol italiano necesitaba un estímulo y la Juventus está lista para dárselo el miércoles. Tras ganar el partido de ida 1-0 con un gol del chileno Arturo Vidal, la «Vecchia Signora» visita al Mónaco en busca de sellar su boleto a semifinales.

Aquí algunos asuntos a seguir:

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VIDAL RECUPERADO: Vidal no participó en el entrenamiento del lunes debido a una amigdalitis, pero pudo practicar el martes y viajó con el equipo a Mónaco. El técnico Massimiliano Allegri dijo que está en buenas condiciones para jugar. Su ausencia habría debilitado al mediocampo de la Juventus ya que Paul Pogba sigue recuperándose de un desgarre, pero el atacante argentino Carlos Tevez está en plena forma tras volver a marcar el fin de semana para aumentar su ventaja como líder de goleo en la Serie A con 18 tantos, 26 en todas las competencias.

«Tenemos una gran oportunidad y no podemos dejar que se escape», dijo Tevez, quien ganó la Champions con el Manchester United en 2008. «Como dije cuando pasamos a cuartos de final, ahora todo puede pasar».

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LA JUVE CERCA: La Juve podría ser un adversario formidable en las semifinales de mayo porque, a diferencia de otros equipos, para entonces ya se habrá coronado en el torneo local. Eso permitirá a Allegri dar descanso a sus jugadores para las semifinales y concentrarse en acabar con la sequía de 19 años de competencias continentales. Pogba podría estar de vuelta para entonces, quizás para el segundo partido, lo que permitiría ver en acción a uno de los mejores mediocampistas jóvenes de Europa.

Juventus tiene una ventaja de 15 puntos en el campeonato italiano, y la única duda es cuándo logrará su cuarto título en fila de la Serie A. La coronación podría ser este fin de semana, si vence a Torino y Lazio y Roma pierden sus respectivos partidos.

«Tenemos que seguir presionando hasta que aseguremos matemáticamente el título», dijo el defensor de la Juventus, Leonardo Bonucci, quien anotó un gol en el triunfo del sábado por 2-0 sobre la Lazio.

PARIS (AP) — Luis Suárez firmó dos golazos, Neymar agregó otro tanto y el Barcelona superó el miércoles 3-1 al Paris Saint-Germain para colocar un pie en las semifinales de la Liga de Campeones.

Neymar abrió el marcador a los 18 minutos en el estadio Parc des Princes del PSG, donde el Barsa perdió 3-2 en un enfrentamiento por la fase de grupos. Suárez aumentó a los 67 y 79, en ambas ocasiones con túneles al zaguero brasileño del club francés, David Luiz.

PSG descontó a los 82 con un autogol de Jeremy Mathieu.

«Fuimos inteligentes, entramos concentrados desde el primer minuto», comentó Suárez. «El que a ellos le faltan jugadores importantes también se notó».

David Luiz estuvo en duda hasta el último momento por lesión, pero entró a los 21 minutos en reemplazo de su compatriota Thiago Silva, quien salió por problemas físicos. El central brasileño lució fuera de ritmo, y Suárez lo hizo lucir mal en los dos goles.

Una serie de bajas por suspensiones y lesiones menguaron al PSG para un exigente envite continental.

En el ataque, las imprecisiones del uruguayo Edinson Cavani resaltaron la ausencia del suspendido artillero Zlatan Ibrahimovic.

La primera derrota del PSG en un compromiso europeo en 34 partidos le deja con una misión casi que imposible al visitar al Barcelona el próximo martes en el estadio Camp Nou de Barcelona.

Los azulgranas naufragaron en esta etapa la pasada temporada, pero ahora parecen encaminados a las semifinales tras un despliegue que dejó en evidencia una sideral diferencia entre los dos clubes.

Pero el técnico Luis Enrique afirmó que su Barcelona no se da por clasificado y que el PSG tampoco debe ser descartado.

«Para la vuelta recuperan a jugadores sancionados y volverá a ser un partido complicado. Es una eliminatoria que todavía no está decidida», declaró el entrenador del Barcelona. «En fútbol hemos visto cosas de todos los colores y no vamos a cometer el error de pensar que está sentenciada, no lo está».

Con Marco Verratti suspendido y Thiago Motta lesionado, el PSG debió improvisar un mediocampo conformado por Blaise Matuidi, Yohan Cabaye y Adrien Rabiot, un inédito tridente en esta Champions.

Y la inexperiencia de Rabiot les pasó factura. Sergio Busquets, en su partido número 63 en el torneo, le robó el balón al juvenil de 20 años que apenas disputaba su segundo partido en la competición.

Busquets filtró el balón a Messi y el astro argentino aceleró ante el desconcierto de la zaga parisina, cediendo un magistral pase para que Neymar abriese el marcador con un remate con la pierna derecha.

El PSG desperdició varias ocasiones para igualar, con Cavani fallando una inmejorable a los 28.

Tras un pase desde la izquierda del extremo argentino Ezequiel Lavezzi a la entrada del área, Cavani se complicó para dominar el balón y el argentino Javier Mascherano, el volante de marca del Barcelona, apareció para sacárselo.

MADRID (AP) — Atlético de Madrid y Real Madrid firmaron el martes un empate 0-0, que deja el desenlace de los cuartos de final de la Liga de Campeones para el partido de vuelta en el Santiago Bernabéu la próxima semana.

Jan Oblak se convirtió en la figura inesperada del Atlético. El arquero esloveno, que casi no contaba para Diego Simeone hace un mes, mantuvo con vida a los rojiblancos con varias intervenciones decisivas en la primera mitad, dominada por el conjunto merengue. El Atlético mostró otra imagen en la segunda parte, pero lejos de su mejor versión.

El Madrid disparó ocho veces entre los tres palos por solo dos del Atlético.

«Es el resultado mejor de los peores», dijo el técnico del Madrid Carlo Ancelotti. «Creo que sobre todo la primera parte hemos merecido más que un 0-0. La segunda parte ha sido más igualada».

Lo mejor para el Atlético fue mantener su portería a cero. El Madrid sigue sin ganar al Atlético desde la final de la Copa de Europa el año pasado en Lisboa, pero se mostró superior en juego y ocasiones y corrigió los desajustes que le han llevado a perder cuatro de los últimos siete derbis.

«La eliminatoria está abierta», señaló el técnico argentino Diego Simeone. «El primer tiempo el rival jugó mejor, fue más intenso, tuvo situaciones y un gran Oblak pudo responder».

El Vicente Calderón rugió para recibir a sus jugadores en una noche de emociones fuertes y el pesado recuerdo de Lisboa, donde un gol de Sergio Ramos sobre la hora inclinó la balanza en favor del Madrid. Pero como si fuera una continuación de aquella final, el Madrid pudo adelantarse nada más comenzar el partido.

Diego Godín se hizo un lío en la salida de balón, Gareth Bale le robó la cartera al zaguero uruguayo y, libre de marca, se plantó solo ante Oblak. El arquero tapó el mano a mano cuando la afición madridista cantaba el gol.

El susto inicial paralizó al Atlético. El Madrid tomó el mando y empezó a encerrar a los de Simeone en su área. Pero faltó precisión en el remate. Las cabalgadas de Dani Carvajal y Marcelo hasta la línea de fondo no encontraban ni a Cristiano Ronaldo ni Karim Benzema. Y el Atlético, más cómodo en el repliegue, esperaba oportunidad para salir a la contra.

Pero esa ocasión tampoco llegó.

Ancelotti plantó el 4-3-3 con tridente ofensivo y contrarrestó la inferioridad numérica en el medio campo con el trabajo de James Rodríguez y Toni Kroos. El colombiano se multiplicó en defensa para tapar al turco Arda Turan, mientras que Kroos no dejó respirar a Koke. Sin sus futbolistas más creativos, el Atlético de desinfló.

Un potente zurdazo de Bale chocó contra el inspirado Oblak. Poco después, James enganchó un rechace fuera del área con el exterior de su pierna izquierda y de nuevo Oblak acertó a despejar el balón que entraba raso por su palo izquierda.

Acto seguido, Mario Suárez habilitó a Antoine Griezmann tras un mal despeje de Ramos. Pero el francés disparó blando desde el balcón del área y no puso en demasiadas dificultades a Iker Casillas.

«Oblak ha hecho un gran trabajo», admitió Ancelotti. «Pero tenemos confianza por el partido jugado, lo que ha mostrado el equipo y tenemos confianza para vuelta».

La acción del partido se concentró en la primera parte. Atlético salió con otro talante tras el descanso. Una clara ocasión de Benzema, que quiso dejar de tacón a Bale cuando tenía el disparo franco fue la última gran oportunidad merengue.

Las faltas comenzaron a sucederse y el ritmo de juego bajó notablemente. Ancelotti retiró a Benzema por Isco y Simeone respondió al ajedrez con Raúl García en lugar de Griezmann. La salida de Fernando Torres por Koke dio alas al Atlético, que empujó al Madrid al límite en los últimos 10 minutos.

Torres y Mandzukic incrementaron la presión, mientras sus rivales mostraban síntomas de cansancio. Los rojiblancos estuvieron a punto de encontrar el premio del gol en un par de jugadas embarulladas dentro del área. Pero Casillas y la defensa conjuraron el peligro y el empate sin goles dejó las espadas en alto para la vuelta del Bernabéu.

Marcelo y Suárez, que vieron cartulina amarilla, se perderán el encuentro por acumulación de amonestaciones.

«Lo mejor del partido fue la reacción», señaló Simeone. «Un equipo cualquiera lastimado como el nuestro en la primera mitad cede. Pero el equipo nuestro reaccionó, cambió la intensidad y el juego».

«En la vuelta tenemos que estar con una intensidad mayor de la que tuvimos», agregó.

Para Iker Casillas, el capitán y arquero del Madrid, «la eliminatoria está bonita y atractiva y cualquier equipo tendrá sus opciones en la vuelta».

MADRID (AP) — La daga que clavó Sergio Ramos todavía hiere el corazón del Atlético de Madrid. El cabezazo de Ramos a los 93 minutos forzó la prórroga y llevó en volandas al Real Madrid a su ansiada décima Copa de Europa.

Desde entonces, menos de un año después de la final de Lisboa, el Atlético no ha perdido con el Madrid en seis partidos. El derbi madrileño, históricamente poco frecuente en Europa, escribe el martes un nuevo capítulo en la Liga de Campeones.

Es apenas la tercera vez en la historia que Atlético y Real Madrid se miden en Europa. Las dos anteriores se saldaron victoria merengue: la final del año pasado y la semifinal de 1959

Los de Diego Simeone buscan la revancha. El Madrid, romper la mala racha de resultados contra los atléticos. Los dos quieren la victoria y el pase a semifinales.

«No tenemos obsesión con el Atlético, tenemos ganas de jugar los cuartos y de pasar a las semifinales, que están muy cerca de la final», dijo el técnico del Madrid Carlo Ancelotti. «Nuestro objetivo es soñar con la ‘undécima»’.

El Madrid llega con todo al primero de los derbis por los cuartos de final de la Liga de Campeones en el estadio Vicente Calderón. El colombiano James Rodríguez está repuesto de su lesión y Gareth Bale también está apto. Cristiano Ronaldo ha recuperado el instinto goleador. Y el Madrid pondrá en juego toda su artillería ofensiva.

«Llegamos bien», admitió Ancelotti. «Ahora estamos todos recuperados, el equipo fresco y podemos usar un ritmo alto y jugar con intensidad».

Desde Lisboa, el Madrid se ha atragantado con el Atlético. Los de Simeone ganaron la Supercopa de España, eliminaron a sus vecinos en octavos de la Copa del Rey y le ganaron los dos enfrentamientos ligueros. El último de ellos por 4-0 en el Calderón.

El Atlético ha tomado la medida al famoso 4-3-3 de Ancelotti. Cuando Bale, Cristiano y Karim Benzema juegan juntos, Simeone suele desbordar al Madrid con cuatro centrocampistas.

«El margen de error es mínimo», dijo Ramos. «Me espero algo similar a lo que nos hemos enfrentado esta campaña y los dos últimos años. Un equipo muy competitivo y trabajador que sabe sufrir».

El técnico argentino recupera a Mario Mandzukic. El artillero croata, lesionado en las últimas semanas, estará acompañado en punta por el francés Antoine Griezmann, probablemente el jugador más en forma del Atlético. La pareja ofensiva suma 41 goles esta temporada. Y en caso de duda, Fernando Torres, especialista en hacer goles a equipos importantes, aguarda en el banquillo.

BARCELONA,España (AP) — Sin tiempo apenas para el respiro en un cargado mes de abril, la liga española resume su actividad el martes con el el duelo entre el vigente campeón Atlético de Madrid y la Real Sociedad al arranque de la 30ma fecha, mientras que los dos actuales aspirantes al título, Barcelona y Real Madrid, jugarán el miércoles contra el Almería y el Rayo Vallecano, respectivamente.

Aupados por el ilimitado potencial de sus astros, Lionel Messi y Cristiano Ronaldo, quienes se han repartido los últimos cinco tronos goleadores, los dos grandes candidatos a levantar la liga volverán así a la carga en jornada intersemanal, que se presenta teóricamente asequible en comparación con la agenda venidera.

Cuando restan nueve fechas para la conclusión del campeonato, apenas cuatro puntos de diferencia separan la cima que defiende el Barsa con 71 unidades del segundo puesto que ocupa el Madrid con 67. Intensificada la lucha con las recientes victorias de ambos el fin de semana, se aprieta también el calendario con la 31ra fecha a disputarse al fin de semana siguiente, en que los azulgranas deberán visitar al quinto clasificado Sevilla y los madridistas recibirán a un apurado Eibar.

Y luego acechan los cuartos de final de la Liga de Campeones con dos cruces de altura en el Paris Saint Germain-Barsa y el duelo ciudadano entre Madrid y Atlético, reedición de la última final continental ganada por los blancos.

Tras perder el clásico contra el Barsa antes del parón de selecciones, el Madrid regresó con fuerza al torneo doméstico y goleó el domingo por 9-1 al Granada con una exhibición de Cristiano, autor de cinco goles y nuevo máximo cañonero de la competición con 36 dianas por las 32 que suma Messi.

La reincorporación del colombiano James Rodríguez tras dos meses de lesión sin duda benefició a Cristiano y fue altamente celebrada por la hinchada, que se aferra a la posibilidad de que su equipo sume todos los puntos en disputa restantes para destronar al Barsa, aprovechando posibles reveses de los «culés». Las 22 victorias seguidas en todas las competiciones en 2014, con James en rol destacado, sirven de aliciente para otra hipotética gesta «merengue», aunque el inminente duelo vecinal con el Rayo, actual noveno clasificado, no se antoja precisamente un camino de rosas.

El equipo de Paco Jémez ha permitido 51 goles en la actual campaña, la cuarta cifra más elevada de la liga, pero ha ganado también sus tres últimos partidos y Alberto Bueno está en vena goleadora con 16 dianas totales y ocho en las últimas siete fechas. «El Madrid sabe que le tenemos toneladas de respeto, pero ni un gramo de miedo. Es un partido para demostrar qué tipo de equipo somos», avisó el lunes Jémez

El técnico madridista Carlo Ancelotti reservó ante el Granada al lateral Dani Carvajal y, aunque sigue de baja el zaguero Pepe, sí recuperará para la cita al creativo Isco Alarcón, sancionado la fecha anterior. Queda por ver como resuelve el estratega el rompecabezas táctico: si sacrificando a un centrocampista o moviendo ficha arriba, entre Karin Benzema o un Gareth Bale que no acaba de entusiasmar en sus últimas apariciones.

Al Barsa le bastó un gol de cabeza del central Jeremy Mathieu a balón parado para tumbar 1-0 al Celta de Vigo el domingo y mantener la ventaja sobre sus perseguidores. El Almería, actual penúltimo, no transmite a priori grandes dosis de peligro, pero cuenta cinco victorias a domicilio y viene de relevar a su entrenador, Juan Ignacio Martínez, por el ex lateral barcelonista Sergi Barjuán, en medida desesperada para buscar la reacción.

Los azulgranas, que han ganado 19 de sus últimos 20 choques en todas las competiciones, podrán contar de nuevo con Javier Mascherano para los próximos compromisos, una vez cumplido el ciclo de tarjetas amarillas. El argentino se erige así oportuno relevo de Sergio Busquets, quien precisamente forzó su sanción para la cita intrasemanal.

Alejado en nueve puntos de la cima, el Atlético se reconfortó el sábado al ganar 2-0 al Córdoba y recuperar el tercer lugar que le había quitado transitoriamente el Valencia. El conjunto dirigido por el argentino Diego Simeone, que contará de nuevo con el central Joao Miranda y posiblemente también el arquero Miguel Moyá, espera seguir alimentando sus mínimas opciones de revalidar el título el martes, buscando otra victoria sobre la Real que también ayude a asegurar el boleto para la próxima Champions.

La jornada se completará con los cruces Eibar-Málaga y Levante-Sevilla, mientras que el miércoles también se disputarán los cotejos Deportivo La Coruña-Córdoba y Granada-Celta.

El cuarto Valencia jugará en cancha del Athletic de Bilbao el jueves, mismo día en que el Espanyol visitará al Villarreal y el Elche reciba al Getafe.

GINEBRA, Suiza (AP) — Los principales clubes europeos firmaron un nuevo contrato con la UEFA que les otorga más dinero y más poder a la hora de tomar decisiones en el fútbol del continente.

La Asociación de Clubes Europeos dijo el martes que renovó su pacto con la UEFA hasta mayo de 2022. El nuevo contrato garantiza a los equipos al menos 200 millones de euros (214 millones de dólares) de los ingresos de la Eurocopa de 2020, comparado con el acuerdo actual que asegura una cuota fija de 150 millones de euros (161 millones de dólares) por la Euro de 2016.

El nuevo acuerdo supera el pago de 209 millones que la FIFA pactó hace dos semanas con la asociación para compartir entre los clubes de todo el mundo para cada uno de los mundiales de 2018 y 2022.

Al tomar en cuenta otros factores, la UEFA probablemente terminará pagando más de 214 millones en 2020.

«Los clubes recibirán el 8% de los ingresos de las transmisiones, (derechos) comerciales y boletería y paquetes (de la Euro 2020)», dijeron la asociación y la UEFA en un comunicado.

La UEFA también otorgará a la asociación, que cuenta con 214 miembros, dos puestos en su comité ejecutivo.

«Estos logros son un éxito extraordinario», dijo el director de la asociación, Karl-Heinz Rummenigge, quien probablemente ocupe uno de los puestos en el comité ejecutivo.

Rummenigge, dirigente de Bayern Munich, señaló que el nuevo acuerdo «fortalecerá la solidaridad entre los clubes, y nuestro sentido de responsabilidad hacia el fútbol».

Michel Platini, presidente de la UEFA, indicó que «ha sido un placer trabajar con» Rummenigge.

La asociación también ofreció detalles sobre su acuerdo con la FIFA, que establece un «consentimiento explícito» de parte de los clubes al momento de decidir las fechas que los futbolistas tienen que ser liberados para jugar con sus selecciones.

La FIFA creará un Departamento de Fútbol Profesional para que delegados de los clubes y del sindicato de jugadores asesoren al organismo rector del fútbol mundial.

«La Asociación ahora tiene su más sólido mandato para gestionar los intereses de los clubes a nivel de la FIFA, y para desarrollar una relación de trabajo de mayor colaboración», señaló el grupo.

El acuerdo con la UEFA, anunciado en la asamblea de los clubes en Estocolmo, también confirmó un aumento en los ingresos de 2.240 millones de euros (2.400 millones de dólares) por la Liga de Campeones y la Liga Europa, combinadas, por las tres próximas temporadas.

Los 32 clubes que participen en la fase de grupos de la Liga de Campeones se repartirán 1.200 millones de euros (1.290 millones de dólares) cada temporada, un aumento de los 957 millones de euros que se repartieron esta campaña.